¡Feliz Nochebuena!
Un pequeño Niño-Dios
nace como siempre ha nacido,
arropado por el amor
de José y de María
y de todos los que lo sabemos
bienvenido.
Niño que naces ahora
y en nuestros corazones siempre
gracias por darnos la vida
y por vencer a la muerte.
En un tiempo como el que nos ha tocado vivir, tantas veces en tinieblas y tantas veces, nosotros mismos, tan cerca del abismo, recordar que nace un Niño que es Dios y que, por tanto, nos trae la salvación y nuestra vida eterna la hace posible ha de ser, seguramente, el mejor deseo para lo que ha de venir en nuestra vida y en la existencia de la misma humanidad.
Aquí les pongo un poema de Mari Carmen Hurtado Chamorro de título “María del Silencio” que es, verdaderamente, apropiado para la ocasión.