La madre de un santo
Los jóvenes italianos Pier Giorgo Frassati (Turín 1901-1925) y Carlo Acutis (Londres 1991- Monza 2006) han sido canonizados por el papa León XIV en el Vaticano el 7 de septiembre de 2025. Jesús, decía el pontífice, “nos llama a lanzarnos sin vacilar a la aventura que Él nos propone, con la inteligencia y la fuerza que vienen de su Espíritu y que podemos acoger en la medida en que nos despojamos de nosotros mismos, de las cosas y de las ideas a las que estamos apegados, para ponernos a la escucha de su palabra”.
Despojarse de uno mismo y ponerse a la escucha. El filósofo Jean-Luc Marion (1946) invita a ampliar los horizontes de nuestra razón para poder acoger aquello que nos es donado, permitiendo así que resulten visibles fenómenos que, sin esta apertura, permanecerían inaccesibles: son los llamados “fenómenos saturados”, que desafían lo que el pensamiento moderno llama “condiciones de posibilidad”, que sujetan la posibilidad a la efectividad, impidiendo el abrirse a lo donado.
La santidad, y todo lo que procede de Dios, es un regalo, un don. Para percibirlo así hace falta la mirada pura y sencilla de la fe que se maravilla ante la manifestación de lo divino. Y esta revelación se da en el marco de la simplicidad frente a la artificial complejidad de tantas cosas que nos rodean y nos distraen.