4.10.13

Eppur si muove - ¿Por qué se beatifica a los mártires?

Beatificación 13.10.13

Independientemente de lo que algunos puedan decir acerca de lo que sucederá muy pronto en el orbe católico (lo es porque es universal nuestra fe y todo lo que sucede en su seno pasa para todos los creyentes que en el mundo somos) lo bien cierto es que para nosotros, católicos, es un momento de gran gozo: muerte y fe en un mismo momento unidas; cruz y vida eterna que se dan la mano.

Y es que quedan muy pocos días para que se produzca la beatificación de más de 500 mártires. Proceden tales casos de la persecución habida en España durante el siglo XX. No es, sin embargo, la primera vez que tiene que producirse una ceremonia como la que se llevará a cabo el próximo 13 de octubre. Y no lo es porque no puede negarse que ni Diocleciano fue capaz de hacer lo que hicieron algunos seres humanos con los discípulos de Cristo en tiempos muy recientes.

Leer más... »

3.10.13

Con un par… y ¡Cómo es la dictadura gay!

Barilla

Este hombre tiene dos dedos de frente aunque, hoy día, no sea muy común entre según qué personas…

A esta altura de la película todo el mundo bien avisado sabe lo que ha pasado con unas declaraciones de Guido Barilla, a la sazón presidente del grupo que lleva su apellido y que es más que conocido por cualquiera que lleve a su estómago la pasta italiana.

Según están las cosas, este hombre no podía ignorar que le iba a pasar lo que le ha pasado y, seguramente, lo que le seguirá pasando. Y, sin embargo, dijo lo que dijo porque, a lo mejor, ¡se lo cree y lo dice!

¡Qué valor hay que tener, en este mundo políticamente correcto, para decir ciertas cosas!

Era de esperar que las personas que pertenecen, no ya al grupo de homosexuales sino, más en concreto, al grupo de presión que hace lo posible e imposible para que sus ideas contranatura se impongan a una sociedad muy mayoritariamente heterosexual, se iban a poner como unas fieras en cuanto leyeran lo que había dicho don Guido. Otra cosa no se puede esperar de según qué personas.

Le han dicho de todo lo que se puede decir desde la posición de alguien que se siente fuerte porque es apoyado por la gran mayoría de poderes públicos de occidente que ven en la homosexualidad una forma de tergiversar el devenir lógico y esperado de una sociedad heterosexual que de no actuar como la naturaleza dicta que se actúa haría muchos siglos que hubiera dejado de sociedad por falta de individuos que la constituyesen.

Pero esto no es lo peor. Aún hay algo que es tan grave que requiere la reacción de un gran número de personas.

Leer más... »

2.10.13

Vean, vean, con qué bueyes tenemos que arar

Hay cosas, hechos y circunstancias que no dejan de sorprenderle a uno. El mundo está lleno de individuos que creen que pueden hacer o proponer todo lo que se les venga en gana porque creen que nadie les va a afear la conducta o a decirles “¡menos lobos, Caperucita!

El pasado 24 de septiembre, festividad de Madre de Dios de la Merced se celebró en Barcelona (España) la tradicional Santa Misa para celebrar, precisamente, tal día pues sabido es que tal advocación es la que corresponde a tal ciudad española.

Pues bien, allí estuvieron (parece que no hay más remedio) personas de todo pelaje político. Por decoro o por consecuencia nunca deberían aparecer por ahí según qué tipo de personas que apoyan ideologías francamente mejorables y que atentan, siempre que pueden y de las más diversas formas, contra la vida humana (socialistas, comunistas, de derechas falsas, etc.)

Es bien cierto que, en muchos casos dice que lo hacen por “respeto institucional” pero, por respeto a la fe católica, a las puertas de iglesias y catedrales debería estar colgado un cartel de “Reservado el derecho de admisión” pues, si bien es cierto que Dios admite en su Reino a cualquiera, no es menos cierto que tal cualquiera debe convertirse y, luego, creer en Dios (eso lo dijo Jesucristo antes que el que esto escribe). Por eso sería llevar una conducta sana para con la fe católica que determinadas personas se quedaran (como hacen muchas personas en bodas, bautizos y comuniones) en el exterior del templo para que no sea contaminado el mismo con según qué humores u olores políticos. Ya sabemos que, en materia de sanidad espiritual, toda precaución es poca.

Pero bueno… después de este consejo dado por un don nadie, vamos a lo que vamos.

Leer más... »

1.10.13

Un amigo de Lolo - Dejarse llevar por Dios

Presentación
Manuel Lozano Garrido

Yo soy amigo de Lolo. Manuel Lozano Garrido, Beato de la Iglesia católica y periodista vivió su fe desde un punto de vista gozoso como sólo pueden hacerlo los grandes. Y la vivió en el dolor que le infringían sus muchas dolencias físicas. Sentado en una silla de ruedas desde muy joven y ciego los últimos nueve años de su vida, simboliza, por la forma de enfrentarse a su enfermedad, lo que un cristiano, hijo de Dios que se sabe heredero de un gran Reino, puede llegar a demostrar con un ánimo como el que tuvo Lolo.

Sean, las palabras que puedan quedar aquí escritas, un pequeño y sentido homenaje a cristiano tan cabal y tan franco.

Dejarse llevar por Dios

“¿Qué importa el camino con los ojos vendados, si una mano me lleva y esa palma, Amor, es la tuya? ”
Manuel Lozano Garrido, Lolo
Bien venido, amor (282)

Ciertamente es triste que haya personas que, acogidas a su soberbia, crean que se pueden valer de sí mismas, ser para sí mismas, caminar por sí mismas y, en fin, no necesitar de nadie ni de nada que les eche una mano en el caminar diario de ahora mismo, a medio o a largo plazo. Están más que seguras de su unomismo y les basta su propio ser. Son, por así decirlo, seres humanos que han olvidado a Quien los creó.

Sentirse libre está más que bien pero saberse en la posibilidad de escoger entre una cosa y la otra sin poner en el fiel de la balanza que es Dios quien nos da tal posibilidad es, sencillamente, falsear lo que pasa y lo que nos pasa.

En realidad, todos, cualquiera de nosotros, tomamos decisiones a lo largo de nuestra vida. Lo podemos hacer, básicamente, de dos maneras: contando con Dios y sin contar con el Señor.

Cualquiera dice que las cosas, en la vida y en este peregrinar por la tierra, no son siempre fáciles y que la mayoría de las veces nos encontramos en situaciones que no sabemos cómo encarar pues es más que cierto que la vida nos depara, digamos, demasiadas sorpresas.

¿Qué hacer?

Leer más... »

30.09.13

Serie oraciones - invocaciones - Oración ante el crucifijo de San Damián, de San Francisco de Asís

Orar

No sé cómo me llamo…
Tú lo sabes, Señor.
Tú conoces el nombre
que hay en tu corazón
y es solamente mío;
el nombre que tu amor
me dará para siempre
si respondo a tu voz.
Pronuncia esa palabra
De júbilo o dolor…
¡Llámame por el nombre
que me diste, Señor!

Este poema de Ernestina de Champurcin habla de aquella llamada que hace quien así lo entiende importante para su vida. Se dirige a Dios para que, si es su voluntad, la voz del corazón del Padre se dirija a su corazón. Y lo espera con ansia porque conoce que es el Creador quien llama y, como mucho, quien responde es su criatura.

No obstante, con el Salmo 138 también pide algo que es, en sí mismo, una prueba de amor y de entrega:

“Señor, sondéame y conoce mi corazón,
ponme a prueba y conoce mis sentimientos,
mira si mi camino se desvía,
guíame por el camino eterno”

Porque el camino que le lleva al definitivo Reino de Dios es, sin duda alguna, el que garantiza eternidad y el que, por eso mismo, es anhelado y soñado por todo hijo de Dios.

Sin embargo, además de ser las personas que quieren seguir una vocación cierta y segura, la de Dios, la del Hijo y la del Espíritu Santo y quieren manifestar tal voluntad perteneciendo al elegido pueblo de Dios que así lo manifiesta, también, el resto de creyentes en Dios estamos en disposición de hacer algo que puede resultar decisivo para que el Padre envíe viñadores: orar.

Orar es, por eso mismo, quizá decir esto:

-Estoy, Señor, aquí, porque no te olvido.

-Estoy, Señor, aquí, porque quiero tenerte presente.

-Estoy, Señor, aquí, porque quiero vivir el Evangelio en su plenitud.

-Estoy, Señor, aquí, porque necesito tu impulso para compartir.

-Estoy, Señor, aquí, porque no puedo dejar de tener un corazón generoso.

-Estoy, Señor, aquí, porque no quiero olvidar Quién es mi Creador.

-Estoy, Señor, aquí, porque tu tienda espera para hospedarme en ella.

Pero orar es querer manifestar a Dios que creemos en nuestra filiación divina y que la tenemos como muy importante para nosotros.

Dice, a tal respecto, san Josemaría (Forja, 439) que “La oración es el arma más poderosa del cristiano. La oración nos hace eficaces. La oración nos hace felices. La oración nos da toda la fuerza necesaria, para cumplir los mandatos de Dios. —¡Sí!, toda tu vida puede y debe ser oración”.

Por tanto, el santo de lo ordinario nos dice que es muy conveniente para nosotros, hijos de Dios que sabemos que lo somos, orar: nos hace eficaces en el mundo en el que nos movemos y existimos pero, sobre todo, nos hace felices. Y nos hace felices porque nos hace conscientes de quiénes somos y qué somos de cara al Padre. Es más, por eso nos dice san Josemaría que nuestra vida, nuestra existencia, nuestro devenir no sólo “puede” sino que “debe” ser oración.

Por otra parte, decía santa Teresita del Niño Jesús (ms autob. C 25r) que, para ella la oración “es un impulso del corazón, una sencilla mirada lanzada hacia el cielo, un grito de reconocimiento y de amor tanto desde dentro de la prueba como desde dentro de la alegría”.

Pero, como ejemplos de cómo ha de ser la oración, con qué perseverancia debemos llevarla a cabo, el evangelista san Lucas nos transmite tres parábolas que bien podemos considerarlas relacionadas directamente con la oración. Son a saber:

La del “amigo importuno” (cf Lc 11, 5-13) y la de la “mujer importuna” (cf. Lc 18, 1-8), donde se nos invita a una oración insistente en la confianza de a Quién se pide.

La del “fariseo y el publicano” (cf Lc 18, 9-14), que nos muestra que en la oración debemos ser humildes porque, en realidad, lo somos, recordando aquello sobre la compasión que pide el publicano a Dios cuando, encontrándose al final del templo se sabe pecador frente al fariseo que, en los primeros lugares del mismo, se alaba a sí mismo frente a Dios y no recuerda, eso parece, que es pecador.

Así, orar es, para nosotros, una manera de sentirnos cercanos a Dios porque, si bien es cierto que no siempre nos dirigimos a Dios sino a su propio Hijo, a su Madre o a los muchos santos y beatos que en el Cielo son y están, no es menos cierto que orando somos, sin duda alguna, mejores hijos pues manifestamos, de tal forma, una confianza sin límite en la bondad y misericordia del Todopoderoso.

Esta serie se dedica, por lo tanto, al orar o, mejor, a algunas de las oraciones de las que nos podemos valer en nuestra especial situación personal y pecadora.

Serie Oraciones – invocacioneas - Oración ante el crucifijo de San Damián, de San Francisco de Asís

Leer más... »

29.09.13

La Palabra del Domingo - 29 de septiembre de 2013

Biblia

Lc 16, 19-31

“19 Era un hombre rico que vestía de púrpura y lino, y celebraba todos los días espléndidas fiestas. 20 Y uno pobre, llamado Lázaro, que, echado junto a su portal, cubierto de llagas, 21 deseaba hartarse de lo que caía de la mesa del rico… pero hasta los perros venían y le lamían las llagas. 22 Sucedió, pues, que murió el pobre y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham. Murió también el rico y fue sepultado. 23 ‘Estando en el Hades entre tormentos, levantó los ojos y vio a lo lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno. 24 Y, gritando, dijo: ‘Padre Abraham, ten compasión de mí y envía a Lázaro a que moje en agua la punta de su dedo y refresque mi lengua, porque estoy atormentado en esta llama.’ 25 Pero Abraham le dijo: ‘Hijo, recuerda que recibiste tus bienes durante tu vida y Lázaro, al contrario, sus males; ahora, pues, él es aquí consolado y tú atormentado. 26 Y además, entre nosotros y vosotros se interpone un gran abismo, de modo que los que quieran pasar de aquí a vosotros, no puedan; ni de ahí puedan pasar donde nosotros.’ 27 ‘Replicó: ‘Con todo, te ruego, padre, que le envíes a la casa de mi padre, 28 porque tengo cinco hermanos, para que les dé testimonio, y no vengan también ellos a este lugar de tormento.” 29 Díjole Abraham: ‘Tienen a Moisés y a los profetas; que les oigan.’ 30 El dijo: ‘No, padre Abraham; sino que si alguno de entre los muertos va donde ellos, se convertirán.’ 31 Le contestó: ‘Si no oyen a Moisés y a los profetas, tampoco se convencerán, aunque un muerto resucite.’”

COMENTARIO

¿Lázaros o Epulones?

Este texto del evangelio de san Lucas nos pone ante una situación terrible, si bien lo pensamos. Dios nos ha a escoger, otra vez, entre lo que nos conviene y lo que no nos conviene.

Nosotros sabemos que no somos nada ante Dios. En realidad, lo sabemos pero no siempre lo tenemos en cuenta en nuestra vida ordinaria y en nuestra relación con nuestro prójimo.

Como eso sabemos bien podemos plantearnos qué podemos hacer en esta vida para actuar y ser de acuerdo a la voluntad del Creador pues no es y no puede ser lo mismo, en lo referido a las consecuencias para nuestra vida eterna, que hagamos una cosa o hagamos otra.

Lázaro pedía porque lo necesitaba. Nosotros también podemos pedir a Dios porque lo necesitamos nosotros o porque lo necesitan otras personas. Se trata de un dirigirse al Todopoderoso en Quien confiamos y en Quien tenemos plena fe.

Somos, así, como aquel hombre que estaba necesitado de comida, materia indispensable para nuestra existencia. Pedía por eso y era uno de los bienaventurados de los Jesús habla en el Sermón del Monte.

Pero también podemos ser como aquel hombre que era rico. No es que debamos tener más dinero del que está permitido para llevar una vida holgada sino que, por decirlo así, estamos en disposición de dar. Nada más. Y de dar a quien necesita recibir.

Leer más... »

28.09.13

Oración a una mano ensangrentada

Ensangrentada fe

Con aquella fuerza que supone ser fiel a Dios
y con aquel instante preciso en el que decimos hágase.

Padre Todopoderoso, clama la sangre de tus hijos
como aquella de Abel que desde el suelo
te llamaba porque quería tu paraíso y tu cielo.

Con un símbolo que es vida aunque engendre muerte
en las sinrazones que niegan la existencia
y olvidan la luz eterna de tu santa Providencia.

Misericordioso Creador, cúmplase tu voluntad
acerca de los que por el nombre de tu Hijo
dejan cubrir de sangre su vivencia y su edad.
Con el gozo de quien sostiene una razón para vivir
aún sabiendo que lo que le espera es un adelantado final.

Juez justo que con tu Ley diriges el devenir del universo
y con tu bieldo consideras lo malo y lo bueno
da paz eterna a los que en el nombre del Emmanuel
dejan de peregrinar por el mundo y al Tuyo van a ser.

Amén.

Eleuterio Fernández Guzmán

InfoCatólica necesita vuestra ayuda.

Escucha a tu corazón de hijo de Dios y piedra viva de la Santa Madre Iglesia y pincha aquí abajo:


Y da el siguiente paso. Recuerda que “Dios ama al que da con alegría” (2Cor 9,7), y haz click aquí.

Serie Fundación GRATIS DATE – Tratado del Purgatorio, de Santa Catalina de Génova

GRATIS DATE

Escribir de la Fundación GRATIS DATE es algo, además de muy personal muy relacionado con lo bueno que supone reconocer que hay hermanos en la fe que tienen de la misma un sentido que ya quisiéramos otros muchos.

No soy nada original si digo qué es GRATIS DATE porque cualquiera puede verlo en su página web (www.gratisdate.org). Sin embargo no siempre lo obvio puede ser dejado de lado por obvio sino que, por su bondad, hay que hacer explícito y generalizar su conocimiento.

Seguramente, todas las personas que lean estas cuatro letras que estoy juntando ya saben a qué me refiero pero como considero de especial importancia poner las cosas en su sitio y los puntos sobre todas las letras “i” que deben llevarlos, pues me permito decir lo que sigue.

Sin duda alguna GRATIS DATE es un regalo que Dios ha hecho al mundo católico y que, sirviéndose de algunas personas (tienen nombres y apellidos cada una de ellas) han hecho, hacen y, Dios mediante, harán posible que los creyentes en el Todopoderoso que nos consideramos miembros de la Iglesia católica podamos llevarnos a nuestros corazones muchas palabras sin las cuales no seríamos los mismos.

No quiero, tampoco, que se crean muy especiales las citadas personas porque, en su humildad y modestia a lo mejor no les gusta la coba excesiva o el poner el mérito que tienen sobre la mesa. Pero, ¡qué diantre!, un día es un día y ¡a cada uno lo suyo!

Por eso, el que esto escribe agradece mucho a José Rivera (+1991), José María Iraburu, Carmen Bellido y a los matrimonios Jaurrieta-Galdiano y Iraburu-Allegue que decidieran fundar GRATIS DATE como Fundación benéfica, privada, no lucrativa. Lo hicieron el 7 de junio de 1988 y, hasta ahora mismo, julio de 2013 han conseguido publicar una serie de títulos que son muy importantes para la formación del católico.

Como tal fundación, sin ánimo de lucro, difunden las obras de una forma original que consiste, sobre todo, en enviar a Hispanoamérica los ejemplares que, desde aquellas tierras se les piden y hacerlo de forma gratuita. Si, hasta 2011 habían sido 277.698 los ejemplares publicados es fácil pensar que a día de la fecha estén casi cerca de los 300.000. De tales ejemplares, un tanto por ciento muy alto (80% en 2011) eran enviados, como decimos, a Hispanoamérica.

De tal forman hacen efectivo aquel “gratis lo recibisteis, dadlo gratis” (Mt 10,8) y, también, “dad y se os dará” (Lc 6,38) pues, como es de imaginar no son contrarios a las donaciones que se puedan hacer a favor de la Fundación. Además, claro, se venden ejemplares a precios muy, pero que muy, económicos, a quien quiera comprarlos.

Es fácil pensar que la labor evangelizadora de la Fundación GRATIS DATE ha des estar siendo muy grande y que Dios pagará ampliamente la dedicación que desde la misma se hace a favor de tantos hermanos y hermanas en la fe.

Por tanto, esta serie va a estar dedicada a los libros que de la Fundación GD a los que no he hecho referencia en este blog. Esto lo digo porque ya he dedicado dos series a algunos de ellos como son, por ejemplo, al P. José María Iraburu y al P. Julio Alonso Ampuero. Y, como podrán imaginar, no voy a traer aquí el listado completo de los libros porque esto se haría interminable. Es más, es mejor ir descubriéndolos uno a uno, como Dios me dé a entender que debo tratarlos.

Espero, por otra parte, que las personas “afectadas” por mi labor no me guarden gran rencor por lo que sea capaz de hacer…

Tratado del Purgatorio, de Santa Catalina de Génova

Leer más... »

27.09.13

Eppur si muove - Portales de Belén y portales del infierno (Sobre portales internáuticos católicos)

Es cierto eso de que de todo hay en la viña del Señor. Seguramente lo hay porque Dios quiere que lo haya pero no me negarán ustedes que hay cosas que son muy difíciles de entender.

La Iglesia católica, a lo largo de los siglos que lleva peregrinando por el mundo, ha tenido que enfrentarse, con sus medios, a todos aquellos que han querido hacerle daño. Pero no ha sido sólo la, digamos, “jerarquía”, que pastorea a la grey de Dios, la que ha tenido que dar la cara en muchos y determinados momentos sino que el laico, el católico seglar, ha dado el callo cuando ha sido necesario darlo.

Hoy día, bien entrado el siglo XXI las cosas, dado que existen medios de comunicación inexistentes hace siglos, se han puesto muy difíciles pues el arte del disimulo e, incluso, la más descarada actuación contra la Esposa de Cristo, está al orden del día.

En este sentido, los portales religiosos católicos dan una buena muestra de por dónde van las cosas y hacia qué camino se encaminan algunos o quieren encaminar a los que puedan llevarse por delante.

A este respecto, hay un índice, algo que marca lo que cada uno es, que no debería olvidarse nunca: acoger, en las páginas electrónicas a personas, pensamientos, hechos u omisiones contrarios o a favor de la doctrina ortodoxa católica.

Cuando, por una parte, se cumple con lo que la Iglesia católica dice que hay que cumplir y se ampara a quien cumple lo establecido, digamos que se actúa, sin temor a equivocarnos decimos esto, de forma correcta y en aras de la verdad; cuando, al contrario, en sus páginas se da cabida a quien procura sembrar cizaña, promover herejías claras y diáfanas y posicionarse contra la Iglesia católica so pretexto de querer “renovar” ciertas estructuras, lo bien cierto es que tales comportamientos son censurables, deberían serlo y, de hecho, lo son aquí mismo.

Entonces, cualquiera podría preguntarse qué sentido tiene que haya ciertas personas, pastores de las ovejas de Dios, que se empeñen en sembrar donde no va a crecer nada porque la superficie está marchita y bajo la superficie sólo puede haber raíces muertas donde nada puede fructificar.

Leer más... »

26.09.13

¡Miserables, que sois unos miserables!

“Perverso, abyecto, canalla”.

Hace más de dos años publiqué, en este mismo, blog, allá por el 18 de julio de 2011 este artículo:

“Hace 75 años que empezó la Guerra Civil española. Seguramente muchos de los que lean este artículo pueden pensar que poco les puede interesar. Sin embargo, no deberían perder de vista lo que pasó porque, es muy probable que también les pueda pasar a ellos o que, al menos, se intente que pase algo similar aunque, claro, con los métodos modernos de hoy día, siempre más sofisticados y disimulados.

Es más que conocido que desde que se proclamó, de forma francamente mejorable, la II República española la persecución contra la Iglesia católica estuvo al orden del día. No bastaba con recoger en las normas, digamos, legales, la prohibición de ayudar a la Iglesia católica y a las demás religiones sino que era necesaria una “depuración” social que se puso, enseguida, en marcha. Por eso desde aquel mes de abril de 1931 la barbarie laicista no cejó en el intento de que la Esposa de Cristo desapareciera de España al igual que, años antes, habían intentado, los mismos de la misma ideología, que pasara en México y que dio lugar al movimiento Cristero. Esto se concretó en la quema de templos católicos y en la persecución física, a muerte, de personas pertenecientes a la religión, entonces ya, ampliamente mayoritaria en España.

Pero como el resultado de un principio tan negro como aquel sólo puede ser peor aún pasó lo que tenía que pasar y en el ámbito de la Guerra Civil española fueron muchas las personas que fueron asesinadas, no por acciones de guerra sino en vulgares delitos comunes. Muchas de las mismas tuvieron mucha relación con la Iglesia católica. Valgan, por ejemplo, los siguientes datos:

Obispos: 13 asesinados.
Sacerdotes: 4.184 asesinados.
Religiosos: 2.365 asesinados.
Monjas: 263 asesinadas (cuando no violadas)
Laicos por el hecho de pertenecer a asociaciones confesionales o simplemente católicas: miles de ellos asesinados.
Iglesias destruidas: 20.000 (entre ellas varias catedrales)
Estas son las cifras: nuestras cifras de nuestros miles de mártires de cuya sangre nacieron nuevas semillas de nuevos cristianos (Tertuliano dixit)

Una persona que tenga fe y que sepa lo que eso supone sabe, a la perfección, qué debe hacer ante una situación tan terrible como la que, en los años 30 del siglo pasado, se produjo en España y que nada tiene que envidiar a la persecución, contra los cristianos, de Diocleciano quien no llegó, al respecto de España, a la altura de la suela de los zapatos de aquellos matarifes izquierdosos de los años citados. Esperar que no hubiera reacción alguna era como esperar que siempre se pusiese la otra mejilla pues ya estaban, ambas, bastante rojas de recibir bofetadas y cosas similares. La paciencia siempre, se quiera o no, tiene un límite y entonces estaba más que agotada y muchos aprovecharon el sometimiento a la autoridad establecida por parte de los creyentes católicos (principio perfectamente evangélico) para tomarla por el pito de un sereno y no querer entender lo que eso suponía de respeto de parte de quien cree en Dios y tomar la caridad por tontería y por algo despreciable.

Y por eso pasó lo que pasó, de lo cual son prueba las cifras a las que se ha hecho mención arriba.

Y a quien no le guste lo sucedido a partir de aquel mes séptimo del año 36 del siglo XX, incluidos todos aquellos que se digan católicos pero no lo sean deberían saber que si ellos y ellas hoy mismo pueden decir que son católicos sin ser perseguidos (por ahora) es, precisamente, por aquel otro 18 de julio de 1936 y, claro, por el resultado de lo que fue inevitable.

Y, por cierto, me importa bien poco lo que se pueda pensar y decir de mí. Lo políticamente correcto que lo cultive quien le convenga. Por eso digo que hoy es 18 de julio y que la historia ha dado la razón a quien la tenía. Y por decirlo claramente para que nadie se lleve a engaño: ¡Viva Cristo Rey!

Con todo lo escrito entonces estoy perfectamente de acuerdo ahora mismo.

En realidad este antecedente del artículo de hoy es para que se pueda comprender que lo que ahora viene debería ser objeto de mucha crítica.

Leer más... »