Los mártires de hoy son, también, semillas de cristianos
Recientemente, han saltado, digamos, a la realidad, dos noticias relacionadas con mártires españoles.
Han sido presentado los libros “Los primeros 479 santos y beatos mártires del siglo II en España” y “Don y desafío” (recoge, éste, una serie de estudios sobre los mártires beatificados el 28 de octubre de 2007) que la Conferencia Episcopal Española, a través de la Editorial EDICE nos ofrece para gozo de los cristianos y, también, para aquellas personas que sepan entender el comportamiento de amor de aquellos que supieron dar su vida y llevar su propia cruz.
Por otra parte se ha anunciado que están preparados, digamos, los expedientes para que la elevación a los altares de otros 800 mártires españoles.
Sabemos todos que la palabra mártir quiere decir, en esencia, testigo, el que da testimonio, y que, en concreto, viene referida a aquellas personas que, en la defensa de la fe, dan su vida (no sólo metafóricamente) por Jesucristo y, sobre todo, por todo lo que supone.