La secta que recoge ropa usada (4)

Aunque llevamos varios artículos publicados sobre la ONG Humana, no ha quedado muy claro hasta ahora en qué consiste la secta Tvind, su corazón, más allá de los testimonios de víctimas relatados en el artículo anterior. Por ello publicamos otro artículo publicado por la asociación francesa dedicada a las sectas UNADFI, traducida del boletín Bulles, nº 69. En la fotografía de la izquierda puede verse a su fundador y líder, Mogens Amdi Petersen.

¿Qué se sabe de Tvind - Humana?

Cinco testimonios recientes dados a UNADFI por personas entre 20 y 34 años, interceptadas a partir de pequeños anuncios, nos invitan a volver sobre Tvind (cf. Bulles nº 62).

Estas publicaciones en Bulles han sido hechas para abrir los ojos de las personas metidas en este camino desastroso. TVIND, HUMANA, PEOPLE TO PEOPLE, HOPE, PLANET AID (Massachusetts), TRAVELLING FOLK HIGH SCHOOL TVIND, NET UP, etc…, ¿distintas máscaras y un mismo fenómeno?

Los anuncios de este “cártel” danés (la prensa local habla de imperio o de cártel) siguen apareciendo en revistas leídas por jóvenes en Francia, Gran Bretaña, Escandinavia, Países Bálticos, Rusia, etc. Atraen a los espíritus generosos, a quienes se envía a entregar su juventud al “tercer” o “cuarto mundo”. Una vez más los jóvenes son explotados de forma grosera.


Autoridades compañeras de ruta

Hay que subrayar que, a despecho de fuertes reacciones a nivel gubernamental danés, autoridades locales, incluso judiciales, con honorables razones, son cómplices en estas desviaciones, arriesgándose a destrozar vidas. En verano de 2000, un importantísimo municipio en el norte de Copenhague autorizó a Tvind a que instalara en su territorio una de sus “Efterskoler” destinadas a casos problemáticos.

Estas autoridades dan subsidios y convenios de acción social (como en el caso de El Patriarca), porque creen tratar un problema actual, satisfaciendo así al electorado. Como por casualidad se encontró un universitario para escribir ex cátedra en la prensa diaria de forma favorable a Tvind, contradiciendo un testimonio aparecido en un gran diario.

El Ministerio de Enseñanza danés denegó en 1999 las subvenciones del Estado a 11 de las 31 escuelas Tvind establecidas en el país. La lucha entre la secta y la justicia continúa desde 1996 (cf. Bulles nº 63). A finales de diciembre de 1999 este asunto, del que los juristas hacen, parece, sus delicias, se ha convertido en un asunto de Estado. Politiken titulaba el 26 de diciembre de 1999: “El Parlamento danés ante el Tribunal Supremo”.

“La ley específica (llamada ley Tvind) que ha denegado a 32 escuelas Tvind las subvenciones del Estado, se vuelve como un boomerang contra el Parlamento. En efecto, con la unanimidad de los juzgados, el Tribunal de Apelación del Estado estimó que la ley específica era contraria a la Constitución, que establece el principio de la separación de los poderes legislativo, ejecutivo y judicial”.

“Suprimiendo la subvención del Estado, el Parlamento se erige en juez”. “El artículo 13 de la Constitución protege a los ciudadanos por la ley… El Parlamento ha cometido un error en este caso”, porque se ha erigido en jurisdicción de excepción. Este decreto ha sido aprobado por un profesor de Derecho público de Aarhus.

Como revancha, y ante las acusaciones de desviación de fondos del orden de 60.000.000 de Kr (55 millones de francos franceses), según antiguos empleados de Tvind para la TV danesa oficial en agosto de 2000, la policía judicial especializada en la delincuencia económica, dio a conocer un sumario que contenía 6 años de las actividades de Tvind-Fond, gerente de las finanzas de Tvind.

Se trata de establecer si Tvind, que está libre de impuestos en virtud de sus proyectos de beneficencia, ha desviado fondos hacia diversas organizaciones ligadas a su sistema. A todo esto sigue la ausencia de respuestas de Tvind a innumerables órdenes de pago emitidas por los Ministerios de Justicia y del Tesoro, así como de las Aduanas, que siguen muy de cerca este asunto (Frederiksborg AMT avis, 1 sektion, 23/8/2000 p. 6).

Un tránsfugo enriquecido

El Kritelig Dagblad (Copenhague 27/7/1999) publicó el relato de Steen Thomsen cuyo original ocupa 35 páginas. Miembro del equipo directivo de Tvind hasta 1998, es decir, durante 25 años, Thomsen dice lo siguiente:

“El líder y fundador del grupo, Mogens Amdi Petersen (60 años; maestro destituido de su ministerio) controla a los miembros del “laerergruppen” (equipo de dirección) totalmente: su economía privada, su vida intelectual, social y sexual”. Según Thomsen, la “secta Tvind puede ser considerada semejante en muchos puntos con la secta Moon… Esta semejanza consiste en la estricta jerarquía, en su expansión mundial y en su carácter emprendedor”.

“Durante largos años, he apoyado de todo corazón las actividades de Tvind; he ofrecido mi salario, mi patrimonio, mi vida privada y mi derecho a expresarme y pensar libremente; pero desde que mi apoyo disminuyó, he sufrido presión. El hecho de que haya tardado tanto en dejar el “laerergruppe”, puede ser explicado por el hecho de que durante muchos años consideré a Tvind como una organización para la búsqueda de la libertad, antes de que me pareciera como una secta con todas sus características”.

“Los miembros de Tvind son guiados por un pensador que es extremadamente atrayente, con rasgos de personalidad psicopatológicos, paranoicos y megalomaniacos. La organización está cerrada para el resto de la sociedad. Postula que el mundo exterior a ella está lleno de enemigos. El espionaje y la sospecha recíprocos van a la par con una estructura estrechamente dirigida desde arriba. Los miembros son debilitados, por ejemplo, por medio de la falta de sueño o por la forma diaria de la comida. El terror es moneda corriente, por ejemplo, denunciando a algunas personas ante otros miembros de la secta”.

“De 600 a 700 ex miembros piensan que Tvind es una de las sectas de extensión mundial más poderosas”, escribe Thomsen. “Va desde la explotación forestal en Brasil y Borneo, hasta la empresa comercial de Pekín”. Las tres metas de la organización, según el mismo, son:

1.- Procurarse dinero.
2.- Organizar grupos para Tvind en todo el mundo.
3.- Desarrollar (extender) el poder de M. A. Petersen.

Punto de vista del psicoanalista

Cyril Malka, psicoanalista, especializado en Dinamarca en el tratamiento de personas con traumatismos debidos a grupos totalitarios o a sectas religiosas, ha estado en contacto con algunos tránsfugos de Tvind, pero sin haberles tratado. Ha declarado al Kristelïg Dagblad (ibid.):

“Todo lo que puedo decir después de mi experiencia es que Tvind se parece mucho a la secta Moon y a la Cienciología. No veo diferencia esencial alguna, aunque Tvind se basa en una ideología política y no en una concepción religiosa de la vida. En todo caso, según mi evaluación, tengo que decir que el control de los miembros es más estrecho en Tvind… que en los Testigos de Jehová. Allí al menos los miembros tienen alguna forma de autonomía”.

¿El quid de Mogens Amdi Petersen?

Este genio de la organización, del cuadro negro a la carambola, pasando por la ropa vieja y recordando que fue, después de su revocación de la enseñanza pública en la Dinamarca ultra liberal, el promotor de la energía eólica y de su expansión en el país, no había reaparecido desde hacía 20 años cuando, a principios de 1999, la prensa señaló el 60 aniversario del fundador.

Bruscamente, la primavera del 2000, debió sentir la necesidad de reducir los cargos. Concierta una gran reunión de los cargos de la organización llegados de los cinco continentes a su suntuosa residencia personal en Florida. Es la primera vez que una secta atraviesa el Atlántico Norte. Aún no ha sido reconocida como religión por el fisco federal americano (IRS). ¡Paciencia! ¡Es tan caritativa!

Mientras tanto, es necesario estar alerta en Francia, pero también en la Polinesia francesa (cf. Morgen Avïsen, Jullands Posten, 1/3/1998), porque la dirección contaba con los últimos reclutas franceses para relanzar el asunto entre los recalcitrantes franceses.

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