La Policía española investiga el uso ritual de sustancias alucinógenas
La documentación con la que trabaja la Policía Nacional sobre las llamadas «drogas emergentes» incluye copiosos capítulos sobre las «sustancias de abuso de origen vegetal». La clasificación oficial establece diez plantas de distintas procedencias, a lo largo y ancho de todo el globo, pero que en mayor o menor medida tienen su presencia en el mercado ilegal de Madrid, algunas de ellas, como la burundanga, asociada a fines criminales. Lo cuenta Carlos Hidalgo en ABC.
«Algunas llegaron a nuestro conocimiento a través de crónicas de los navegantes y conquistadores que se encontraban con los grupos de creyentes. Otras pasaron inadvertidas y se han redescubierto en fechas recientes», según un entendido. Efectivamente, ritos ancestrales, creencias tribales y hasta el culto a la muerte se asocian al uso, aún hoy día, de estas drogas, muy peligrosas y susceptibles de provocar la muerte.
Orgías a 30 euros en Las Rozas
Una de las más conocidas y cuya presencia en una secta de Las Rozas causó la alarma hace unos años es la ayahuasca o el yajé. Conocido también como «vid» o «cuerda de muertos» se produce de lianas de la cuenca amazónica. Suele ser un chamán el encargado de preparar la pócima, para tomarla en grupo y propiciar «viajes» extracorporales o astrales, como ocurrió en la finca roceña investigada por la Guardia Civil. Cobraba 30 euros por persona para orgías en un chalé. Realmente, tiene efectos sedantes, alucinatorios visuales y auditivos y en Europa, a diferencia de Estados Unidos, es ilegal.

Hace poco escribí
Reproducimos a continuación dos noticias publicadas recientemente en torno a las celebraciones de la Pachamama en los primeros días de agosto en diversos lugares de Argentina. La primera de las noticias es relativa a Córdoba, y la segunda a Lozano. En ambas puede verse que tras el carácter popular de estos ritos de ofrenda está el neoindigenismo o recuperación de los rituales precristianos.
El cuerpo sin vida del chofer Genaro Fernández Cachi, de 27 años, desaparecido el pasado 29 de mayo, fue encontrado el pasado 9 de junio en medio de un aparente ritual satánico (conocido como cucho), en el cerro del sector Quilca Patacollo, parte del Apu Khapía, ubicado en los distritos de Yunguyo y Pomata (departamento de Puno, Perú), según informa el diario Los Andes.
El 22 de abril se celebraba el Día de la Tierra. Entre otras muchísimas jornadas mundiales de celebración de lo más diverso, parece que este día tenía toda su importancia, desde que fuera iniciado en 1970 en los Estados Unidos de América y asumido enseguida por otros países occidentales, como un momento especial de llamada de atención sobre el cuidado al planeta en el que habitamos, aquejado ya entonces de una intensa contaminación y deterioro provocados por el hombre. Y digo que “se celebraba” porque acabo de enterarme de que ya no se llama así. Ha habido un cambio de nombre supuestamente sutil que ha derivado en lo que ahora es el “Día Internacional de la Madre Tierra”. ¿Qué ha pasado? Que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) decretó –o proclamó, como dicen ellos– que el 22 de abril sería llamado así.