Continúan las profanaciones satánicas de los cementerios españoles
En su sección titulada “Crónica Negra” en el diario español La Razón, el periodista especializado en sucesos Francisco Pérez Abellán ha publicado el pasado 24 de diciembre un artículo titulado “La crisis oculta a las sectas", que reproducimos a continuación.
Aprovechamos para recordar que la información mas actual sobre el satanismo en España puede consultarse en el informe que elaboró en 2010 Vicente Jara Vera, miembro de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES).
La crisis oculta a las sectas
La Iglesia católica tiene unos sacerdotes que se ocupan de estudiar las sectas satánicas. En estos tiempos esos investigadores tienen mucho trabajo, pero apenas se sabe nada de ellos. La última vez que uno de estos sacerdotes-detective saltó a la palestra fue cuando lo apuñaló un miembro de uno de los grupos que estaba estudiando en el Levante español. Ahora, con la crisis, han empezado a robar toda clase de cosas peregrinas: tapas de alcantarilla, aspersores de riego, carritos de supermercado, señales de tráfico que van a la chatarra… Y entre todas esas actividades, se han apreciado robos en cementerios: lápidas, cruces, placas, jarrones, marcos de fotos…

“Una ex compañera de clase decía que estaba enamorada de Satán, llenaba las paredes con su nombre y algunas veces puedo aseguraros que parecía poseída. Una vez, en clase de religión, mordiendo un pilot de color azul se tiñó toda la lengua y daba voces gritando: ¡Satán me ama, me ha dado un morreo!, fue expulsada de clase”. Lo leemos en un artículo de Mar Velasco publicado en Religión en Libertad, que reproducimos aquí.
Según informa Noticia al Día, nuevas revelaciones surgieron sobre las razones que llevaron al joven venezolano Ahzby Mercado Rangel (de 22 años), a asesinar a su madre, en Maracaibo, capital del Estado de Zulia. El muchacho se había sumergido en el mundo de las drogas y comenzó a rodearse de amigos con atracciones hacía el oscuro mundo del satanismo. Sus nuevas amistades lo habrían inducido a practicar extraños ritos bajo estridentes sonidos de rock, dijo un pariente del homicida.
El diario La Razón ha publicado un breve artículo, titulado “De Satán a la vida consagrada", en el que cuenta cómo una secta encargó a una joven italiana, Michela, matar a la fundadora de «Nuovi Orizzonti», un movimiento eclesial. Reproducimos la información, firmada por J. Cadarso.
Debe de haber sido casualidad. Hace unos días fui al cine a ver la película El rito, dirigida por Mikael Håfström, y que constituye la última novedad en la cartelera sobre el ya conocido subgénero cinematográfico de los exorcismos (con la también sabida denominación de origen que supone colocarle la etiqueta de “basada en hechos reales”, aunque en verdad se trate de hechos interpretados por una novela intermedia). En ella, el veterano actor Anthony Hopkins interpreta a un también veterano sacerdote exorcista italiano, el padre Lucas, que aparece como mentor del joven diácono norteamericano Michael Kovak (encarnado por Colin O’Donoghue). El clérigo más joven se encuentra, cómo no, viviendo una crisis vocacional y de fe, y sus superiores no encuentran ninguna solución mejor que enviarlo a un curso para exorcistas que se imparte en Roma. Algunos espectadores del filme ya saben –porque el tema ha salido en los medios de comunicación de unos años para acá– que este curso existe, y que lo organiza el Ateneo Pontificio “Regina Apostolorum” en la ciudad eterna. Claro que aquí lo importante no es si existe o no el curso, sino la cuestión del ministerio del exorcista en la Iglesia y, en el fondo, si el demonio existe o no. Algo puesto en duda no sólo fuera del pueblo cristiano, sino también dentro, y muy dentro.