Las sectas y la Biblia (1)
Esta misma mañana ha comenzado en Madrid el Congreso “La Sagrada Escritura en la Iglesia", con motivo de la presentación de la versión oficial de la Biblia de la Conferencia Episcopal Española. Nos unimos a esta celebración reproduciendo el primer extracto de un artículo académico que acabamos de publicar en el boletín electrónico Info-RIES.
Recordamos que la exhortación Verbum Domini, dedicada a la Palabra de Dios en la vida y en la misión de la Iglesia, y que es un documento fundamental para entender este Congreso, también contiene referencias al fenómeno de las sectas, tal como informamos en este mismo blog, en el siguiente artículo: “Benedicto XVI vuelve a hablar sobre las sectas”.
El experto en sectas Manuel Guerra, sacerdote español y miembro de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), ha publicado recientemente un artículo de investigación en la revista académica Burgense, editada por la Facultad de Teología del Norte de España (en su sede de Burgos). En el número 51 del año 2010 (páginas 111-149) se puede encontrar el estudio, titulado “La ‘Palabra de Dios’ en algunas tradiciones heterodoxas”. Extractamos algunas de sus conclusiones de más interés, en sus primeras partes. En boletines posteriores seguiremos con este artículo.
Para el autor del Diccionario enciclopédico de las sectas, “el estudio de la Constitución sobre la revelación divina del concilio Vaticano II, Dei Verbum, quedaría incompleto sin su visión, al menos panorámica, desde la heterodoxia e incluso desde las religiones no cristianas y de sus sectas”, ya que “no hay cuadro de pintura sin el contraste de luces y sombras”. El experto comienza su artículo abordando el concepto de revelación en las religiones y el doble cauce de esta comunicación divina según la fe cristiana.
Subjetivismo total de la gnosis
Manuel Guerra pasa después a desglosar los principales cauces heterodoxos en la transmisión de la revelación, “tradiciones contaminadas generalmente por el entorno sociocultural”. El primer cauce es la tradición gnóstica, en cuya Biblia se incluyen con más autoridad los escritos apócrifos, que “no suelen referir la vida de Jesucristo desde su concepción y nacimiento hasta su muerte, resurrección y ascensión, sino especialmente dichos y hechos imaginados como acaecidos entre la resurrección y la ascensión”. Para el autor, “el subjetivismo y el irracionalismo religioso han activado la imaginación de los gnósticos. Sus textos, más que históricos, parecen de ciencia-ficción”.

Los servicios de inteligencia e información de los cuerpos policiales siempre han querido mantener cierta cautela cuando se enfrentan a cultos que se salen de lo habitual. Los integrantes de sectas, pero sobre todo sus líderes, son vigilados de cerca, con el fin de determinar sus actividades y que éstas no vulneren la ley ni la libertad individual. Algunos de estos grupos llegaron a poner en alerta a las autoridades, sobre todo los de corte satánico. A pesar de ello, en estos momentos, según fuentes policiales, la actividad de todos estos colectivos no es preocupante, al menos en Tenerife. Así informaba estos días el diario ABC, en un artículo firmado por Héctor Fajardo que reproducimos aquí por su interés.
Quizás forme ya parte de la cultura popular, porque los misioneros mormones (los élder y las hermanas) han repartido por todas nuestras ciudades ejemplares del Libro de Mormón. La cuestión es que Jesús, entre su resurrección y su ascensión al cielo, se habría acercado por Norteamérica, porque quedaban “otras ovejas que no son de este redil”. Ahora resulta que, según leíamos hace unos días en el Diario de Yucatán, los arqueólogos mormones apoyan con sus investigaciones esta curiosa teoría extra-bíblica. Reproducimos a continuación el artículo, firmado por Hernán Casares Cámara, redactor del periódico.
Después de los posts anteriores, en los que informábamos de la insistencia de los testigos de Jehová, al menos a nivel español, en la negativa a la sangre (ver 




