Buscan al líder sectario chileno al que veían como un dios y que quemó a un bebé
Después de hacerse público que la policía chilena detuvo a varios integrantes de una secta que quemó a un bebé en aquel país, tal como comunicamos a través de Info-RIES, los medios de todo el mundo han puesto su atención en este suceso y las novedades que se van produciendo. Resumimos lo más importante a continuación.
Búsqueda del líder: podría estar en Ecuador
Efe informa de que la policía chilena ha pedido a la Interpol que busque en Ecuador al líder de la secta que el pasado noviembre quemó vivo en Chile a un recién nacido, y que en febrero de este año huyó a Perú. Según dice el diario La Tercera, la Policía de Investigaciones de Chile (PDI) recibió el aviso de dos ciudadanos chilenos residentes en Ecuador, quienes señalaron que el prófugo podría encontrarse en alguna localidad ecuatoriana en la frontera con Perú, una zona en la que el sospechoso ya ha estado antes.
El líder de la secta es Ramón Castillo Gaete, músico de 35 años, que se creía la reencarnación de Dios y se hacía llamar “Antares de la Luz”. Hasta el momento, cinco miembros del grupo han sido detenidos por el macabro caso, que se conoció el pasado 24 de abril. La policía sigue buscando al líder de la secta y otras dos personas.
Un chileno que vive en Quito avisó a la PDI de que Castillo conoce bien la frontera de Perú y Ecuador ya que, según su versión, en 2008 estuvo en las localidades ecuatorianas de Vilcabamba y Malacatos ofreciendo seminarios de sanación. Otra persona que reside en Vilcabamba desde hace años confirmó esta versión e indicó a la policía que el sospechoso decía que podía curar con las manos, lo que le granjeó varios clientes en esa zona.
Un dios que “no podía procrear”
Según la PDI, los miembros de la secta acostumbraban a consumir un alucinógeno conocido como ayahuasca, en reuniones en las que Castillo tenía relaciones sexuales con todas sus seguidoras, a las que decía que él, por ser Dios, no podía procrear y que si alguna vez eso pasaba el bebé sería el anticristo y debía morir.

En materia espiritual, dos datos se acentúan con el paso de los años en Occidente: descienden los fieles practicantes en la Iglesia católica y, al mismo tiempo, crece exponencialmente el interés por lo que muchos expertos han denominado “espiritualidad sin Dios”. A la hora de buscar respuestas que expliquen esto, lo mejor es tratar de situar su origen.
Después de tres meses de investigación, detectives de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE) de la PDI (Policía de Invesigación) de Chile detuvieron a cuatro integrantes de una secta, acusados de quemar a un bebé durante un ritual de sanación realizado en noviembre de 2012. Lo cuenta Francisco Águila Vega en El Mercurio.
El 22 de abril se celebraba el Día de la Tierra. Entre otras muchísimas jornadas mundiales de celebración de lo más diverso, parece que este día tenía toda su importancia, desde que fuera iniciado en 1970 en los Estados Unidos de América y asumido enseguida por otros países occidentales, como un momento especial de llamada de atención sobre el cuidado al planeta en el que habitamos, aquejado ya entonces de una intensa contaminación y deterioro provocados por el hombre. Y digo que “se celebraba” porque acabo de enterarme de que ya no se llama así. Ha habido un cambio de nombre supuestamente sutil que ha derivado en lo que ahora es el “Día Internacional de la Madre Tierra”. ¿Qué ha pasado? Que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) decretó –o proclamó, como dicen ellos– que el 22 de abril sería llamado así.