(205) CONVOCATORIA contra el ABORTO en Argentina - No se puede mirar para otro lado

La lucha es entre la Iglesia y la anti-Iglesia.; entre la Iglesia de Dios y el anti-dios; entre la Iglesia de Cristo y el Anticristo. El ataque moderno no nos tolerará. Es el enemigo, totalmente equipado y apasionado contra la Verdad por la cual viven los seres humanos. El duelo es a muerte.  Hillaire Belloc

Cuando se quiere aparentar un número considerable de gente, se logra simplemente con focalizar una cámara ante un grupo pequeño, sin mostrar los límites, y esto es lo que sistemáticamente están haciendo los medios de des-información que pretenden hacer creer que ‘Argentina es abortista’, lo cual es una infame mentira. Baste sólo como botón de muestra, la Proclama que hace pocos días hicieron pública los médicos de la Provincia de Tucumán, ‘No cuenten conmigo’. Pese a la prédica incansable de medios y de des-educación durante décadas, nuestra patria tiene la gracia de tener todavía reservas fieles en buena escala para defender la vida a toda costa.

Abajo, una toma de la manifestación del domingo pasado, sólo en la provincia de Córdoba:

Sabemos sin embargo que en última instancia por detrás de la sangre de los inocentes, está la presencia oscura pero segura de Moloch, que sediento de víctimas, seduce a los poderes de esta tierra a cambio de bienes aparentes y efímeros. El aborto es sólo la punta del iceberg, desde el cual se derramará un sinfin de pestes inimaginables.

Unos post atrás decíamos que nada es casual, ni para nosotros ni para el enemigo.

Que se haya fijado para la votación de esta ley inicua justamente un día 13 no le es indiferente a Ntra. Sra. de Fátima, ni será indiferente a los Sagrados Corazones que todo esto se produzca en el mes de Junio. A nosotros tampoco nos es indiferente, y sabiendo cuál es el blanco definitivo -el Corazón de Cristo- al que se dirigen los odios derechohumanoides.

Gracias a Dios, este combate ha unido las almas de las más diversas ‘líneas’ del catolicismo argentino, a pesar de los pastores que bregan por el diálogo a toda costa. En los últimos días, hemos visto incluso a personajes mediáticos, manifiestamente liberales, dar testimonio contundente y decidido a favor de la vida, como podemos ver en este video.

Pero esto es sin duda fruto de la oración, que ha sido intensísima en muchas comunidades, y sabemos que más allá de lo que suceda el miércoles, ni una sola Ave María habrá caído en saco roto. Tenemos esta certeza.

Pero mientras tanto, es importante dar testimonio, hasta el último momento. Desmentir en la cara a quienes quieren hacer creer que los espantajos ‘verdes’ representan a la opinión pública de los argentinos.

Por esto convocamos vehementemente a hacernos presentes frente al Congreso DESDE EL MARTES 12, a las 17 hs. y frente a las legislaturas de todo el país.

Tanto en la Vigilia del martes por la noche, como durante el día miércoles 13 es nuestro deber ‘estar’ -como María Santísima-, en oración ferviente e incesante, representando a quienes no tienen voz, ni documento de identidad para los que cacarean sobre los derechos humanos…

Y algo fundamental: asistir en gracia, no dejar de confesarse y comulgar en estos días por estas intenciones, sin descuidar el inmenso poder de los sacramentales: agua bendita y sal exorcizada, por favor, porque no estamos luchando contra hombres.

A los sacerdotes de todo el país, y a los de los países americanos, rogamos ofrezcan el Santo Sacrificio del Altar para que no se consume esta abominación en nuestro país, que la Providencia ha querido que quizá sea vaso de elección, y en su corrupción, piedra de tropiezo para tantos.

Misas, sobre todo Misas, suplicamos Misas.

Para que los responsables de definir ese día no se amedrenten ante las amenazas prepotentes de la izquierda que no han vacilado ni en arrastrar a los adolescentes secundarios en esta embestida que no conoce límites. 

Pidamos al Señor que no se dejen sobornar por el Poder Internacional del Dinero, aprobando una ley que permite el asesinato de un niño hasta el 9º mes de embarazo, y propone penas de hasta 5 años de cárcel para los médicos objetores, dando comienzo a una auténtica persecución contra la vida más inocente y quienes aboguen por su defensa.

Supliquemos a San Miguel arcángel, príncipe de la milicia celestial, que los asista junto a sus ángeles custodios, iluminando inteligencias y fortaleciendo voluntades. Tal como pedimos en la oración por la Patria:

Señor nuestro Jesucristo, Rey de las Naciones y de los corazones, Dios que todo lo creaste, lo redimiste, y has hecho a nuestro pueblo cristiano; mira con ojos benévolos a ésta nuestra querida Patria consagrada a Tu Santísima Madre y escucha a tus hijos que quieren volver a Ti.

¡Oh Rey! Cristianos hemos nacido, y cristianos queremos ser. Nuestra Patria es su historia católica, y su destino de grandeza es llevar Tu nombre como Bandera.
Atiéndenos, Señor, en esta jornada aciaga, y, si está en Tu Santísima Voluntad, aparta de nosotros este cáliz de amargura dándonos la gracia de reconquistarte la Argentina. Que tu Madre, Reina nuestra, Conductora y Vencedora en la Lucha Final, aplaste la cabeza del enemigo que avanza extendiendo su Poder Internacional….

Pero no se haga nuestra voluntad, sino la Tuya; y si prefieres para nosotros la noche oscura de una pasión nacional, te pedimos, Rey de Reyes, no permitas que tu pueblo sea traidor.   
Antes prepáranos y danos el triunfar en el martirio, para la Gloria de Tu Divina Majestad, en reparación por tanta historia laica, y para que, bajo el Manto de la Virgen Soberana, te adoremos en la Patria Eterna, con los que lucharon por Ti. Amén.

No podemos dejar de dar testimonio en esta hora, aunque sepamos que el número de necios es infinito, pues cuando no se quiere ver la Verdad, toda excusa les valdrá a quienes siguen el ejemplo de Herodes o Pilatos. Pero démosles la oportunidad de que por lo menos, si hay muchos asesinos, no digan que la Argentina es filicida, pues mal que les pese a muchos, sí: la Argentina es católica y mariana, o no es ella misma. 

Con la bandera de siempre, la que nos legó la Providencia y que es el manto de Nuestra Señora y Reina: bajo el manto de María, la fe, la Patria, la Vida!

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