Territorio comanche: la Evolución
Una de las lectoras de este blog, Yolanda (RNA), que es profesora, va a participar la semana que viene en un debate en su colegio sobre la Teoría de la Evolución. En el debate participarán chicos con una edad en torno a los 18 años.
Al hablar de ello, el otro día, Yolanda nos pedía ayuda sobre cómo tratar el tema desde un punto de vista católico. Sin duda, tenía razón al hablar de que va a adentrarse en “territorio comanche”, porque, debido a la pobreza general de la formación católica, la sociedad (y muchos católicos) tienen una idea distorsionada de la postura católica sobre este tema, así que predigo para Yolanda un ambiente poco acogedor. Precisamente por ello, muchos católicos se muestran acomplejados y tienen miedo de tocar este tema. A ello se une el desconocimiento que también existe, entre católicos y no católicos, sobre lo que dice (y lo que no dice) la Teoría de la Evolución.
Creo que la mejor forma de colaborar en algo así, de una forma que resulte útil y no excesivamente pesada, es ofrecer ideas concretas de aspectos importantes del tema de la Evolución desde el punto de vista cristiano, con una breve explicación cuando sea oportuno. Si algo interesa especialmente a Yolanda o a otro lector, basta pedir una explicación algo más extensa de ese aspecto. También se pueden sugerir textos importantes para leer, con los vínculos correspondientes en caso de que estén disponibles a través de Internet.

Como todo el mundo sabe, los cardenales están encargados de elegir a un nuevo Papa, cuando fallece el anterior. Esta es su función más conocida y, a veces, oscurece otra misión esencial de los cardenales: aconsejar al Papa sobre cualquier tema de la vida de la Iglesia que este plantee. Cuando el Obispo de Roma convoca un consistorio de cardenales, no se limita a anunciar los nuevos cardenales que ha nombrado, sino que aprovecha para obtener la opinión de estos consejeros de todo el mundo sobre asuntos que le preocupen o que afecten a toda la Iglesia. Al preguntar sobre un tema cualquiera a los cardenales, la pregunta clásica que hace el Papa es ¿Quid vobis videtur? ¿Qué os parece?
He estado releyendo la biografía que Evelyn Waugh escribió sobre Ronald Knox, famoso converso al catolicismo desde el anglicanismo, y me ha parecido que el breve texto que les ofrezco hoy podría ser útil con respecto a las últimas discusiones del blog. Se trata de una introducción a un libro, que Knox dejó inacabado, sobre la explicación de la fe cristiana a los que no la conocen.
 Lucía, una chica de 18 años de mi parroquia, que ya nos ha contado sus 
Perdonen que este artículo no sea ordenado y coherente, como otros. ¿Quién puede ser ordenado y razonable en Viernes Santo? ¿Quién conservará la lógica ante la locura de Dios, que es más sabia que la sabiduría de los hombres? ¿Es que alguien puede mantener la calma al contemplar a Cristo crucificado?
    
            





            
            
            
            
            
            


