Me temo que hay que (empezar a) preocuparse

La elección del Papa León XIV fue una gran alegría para muchos, que estábamos cansados del tormentoso pontificado anterior. Parecía inaugurarse una nueva etapa en la que se acabarían los constantes sobresaltos, las arbitrariedades, el desprecio de la moral y la doctrina de la Iglesia y la proliferación en altos cargos de personajes que, en otras épocas, no habrían pasado de porteros de convento o sacristanes. El Pontífice recién elegido, tan amable, educado y cuidadoso en las formas, era un símbolo de que, de nuevo, la Iglesia se dedicaría a lo suyo, a ser Iglesia y a enseñar la fe católica y la salvación en el Señor Jesucristo, en lugar de a intentar superar al mundo en mundanidad. ¿Cómo no alegrarse?
La discreción de León XIV, que habló poco durante los primeros cien días de pontificado, permitió mantener estas esperanzas de cambio y renovación. Esa situación idílica duró lo que duró, pero en algún momento tenía que acabar. Por desgracia, tras el verano, cuando ha empezado a hablar y actuar más, el idilio se ha enfriado y, a una velocidad inquietante, han comenzado a surgir significativas razones para preocuparse.
Ya al principio mismo del pontificado señalamos alguna disonancia, como la afirmación de que el “verdadero milagro” de la multiplicación de los panes y los peces del evangelio era el compartir. Dentro de su gravedad objetiva, aún podían atribuirse, sin embargo, a una forma desafortunada de expresarse, comprensible quizá en alguien que no estaba acostumbrado aún a su nuevo cargo. El problema con esta interpretación reside en que, a medida que el pontífice se ha ido acostumbrando a ser Papa, esas afirmaciones desafortunadas o directamente erróneas han ido aumentando en lugar de disminuir.
No hace mucho, León XIV habló en un discurso de la “fe de Jesús”, algo que es contrario a la doctrina de la Iglesia, porque nunca en la Escritura se habla de esa fe y porque el hecho de que Cristo, como Dios verdadero, tuviera la visión beatífica ya en la tierra excluye la posibilidad de la fe. Después, en relación con la guerra de Ucrania, afirmó: “creo firmemente que no podemos perder la esperanza, nunca. Tengo grandes esperanzas en la naturaleza humana”. No hace falta saber mucha teología para darse cuenta de que esto es una afirmación netamente pelagiana. La esperanza del cristiano no está puesta en la naturaleza humana, ni en las buenas intenciones ni en nada parecido, sino en Dios. Resulta, además, muy llamativo caer en ese error de poner la esperanza en la naturaleza humana precisamente en la época en que la gente es más abiertamente anticristiana e inmoral.
En cuanto a la fascinación por temas que distraen fundamental de la tarea de la Iglesia, León XIV ha mostrado ya su militante ecologismo, criticando duramente a los que “han elegido mofarse de los indicios cada vez más evidentes del cambio climático, ridiculizar a los que hablan del calentamiento global e incluso culpar a los pobres precisamente de aquello que más les afecta”. Después, de forma enigmática (y, si somos sinceros y con todo el respeto, bastante ridícula), ha bendecido un trozo de hielo o le ha impuesto las manos o no se sabe muy bien qué ni para qué ni por qué.
Es muy difícil no asombrarse de que un pontífice no se dé cuenta de que su misión no es defender el cambio climático, que es una cuestión científica y no teológica. Especialmente cuando, como suele suceder a los eclesiásticos, no se ha enterado de que el “calentamiento global” ya está pasado de moda (después de décadas y décadas en que no se han cumplido nunca las predicciones catastrofistas al respecto) y ahora solo hay que hablar de “cambio climático", que es algo más vago y vale igual para un roto que para un descosido. En fin, al menos Schwarzenegger le ha llamado por ello un “héroe de acción”.
No podía faltar el irenismo religioso al que ya estamos, por desgracia, acostumbrados. En sus intenciones de oración, León XIV ha puesto una vez más al mismo nivel a las “distintas tradiciones religiosas […] más allá de las diferencias” (como si la misión de la Iglesia no fuera, precisamente, anunciar la diferencia esencial entre el catolicismo y las religiones que no pueden salvar) y hablando de la hermandad entre las religiones (como si la verdadera fraternidad no fuera la fraternidad en Cristo). Afirmó, además que las religiones deben ser “vividas como puentes y profecía”, olvidando que Cristo es el único puente entre Dios y los hombres y que las religiones no cristianas son errores mezclados con algunas verdades, pero en ningún caso profecías (es decir, palabras dadas en nombre de Dios).
Una de las cosas más graves ha sido su reafirmación de Fiducia supplicans, el documento del Papa Francisco que permitía bendecir a las parejas del mismo sexo, como si no fuera un despropósito bendecir lo que es moralmente malo. En la misma entrevista afirmó, entre otras cosas bastante cuestionables, que “me parece muy poco probable, al menos en un futuro próximo, que la doctrina de la Iglesia respecto a lo que enseña sobre la sexualidad y sobre el matrimonio” vaya a cambiar. Esto es gravísimo, porque si el propio Papa admite que es posible que la Iglesia cambie su doctrina sobre la sexualidad y el matrimonio, eso significa que no considera que sea verdad, porque la verdad no cambia. A eso se une que a una heterodoxa organizacion pro-LGBT el Vaticano le ha permitido participar oficialmente en el jubileo, con banderas del arcoiris, lemas anticatólicos, una cruz también arcoirisada y una Misa solemne en el Gesù, celebrada por el vicepresidente de la Conferencia Episcopal Italiana, en la que se intentó normalizar las relaciones del mismo sexo.
La gota que ha colmado el vaso para muchos, sin embargo, ha sido su asombroso apoyo a que se otorgase el premio a “los logros de toda una vida” a un senador norteamericano abortista y favorable al “matrimonio” del mismo sexo. Por si eso fuera poco, el pontífice ha pretendido fundamentar ese apoyo en que “alguien que dice que está en contra del aborto, pero está a favor de la pena de muerte, no es realmente provida”. De nuevo, no hace falta ser un teólogo para saber que el aborto es provocar la muerte a un inocente y, por lo tanto, es intrínsecamente inmoral y siempre malo. En cambio, la pena de muerte es un castigo lícito a alguien culpable de graves delitos y, por lo tanto, se puede aplicar o no en algunas ocasiones, de modo que un católico puede perfectamente estar a favor de la pena de muerte. No hay comparación posible entre ambas cosas y un Papa debería saberlo.
El sentido común nos dice que una o dos de estas cosas podrían achacarse a formas desafortunadas de expresarse, pero, en conjunto, resultan muy preocupantes. Algunos católicos, escamados por el pontificado anterior, ya se preocupaban desde el principio de este pontificado, temiendo que el nuevo Papa fuera a continuar los errores del anterior. Otros prefirieron aguardar a ver qué hacía y decía León XIV, dándole no solo el beneficio de la duda, sino el cariño y respeto que todo católico debe al Papa. Lo que ha ido sucediendo después parece decantar la balanza en dirección a la preocupación.
Es indudable que León XIV aventaja humanamente hablando a su predecesor y que le son ajenos los malos modos, los insultos, la imprudencia constante, la arbitrariedad, la dureza extrema con los enemigos y el desprecio por el derecho canónico. También es indudable que tiene en su haber muchas cosas buenas, como el enfoque más cristocéntrico de sus homilías, su amor por San Agustín, la conciencia de la importancia de la solemnidad y las buenas formas en la Iglesia o el sincero deseo de preservar la unidad eclesial. Asimismo, parece estar dispuesto a remediar algunas injusticias del pontificado anterior, por ejemplo, relajando las restricciones contra los amantes de la liturgia antigua.
Nada de eso importará, sin embargo, si falla en lo propio de un papa, que es confirmar en la fe a los católicos y proclamar esa fe a los que no la conocen. La ortodoxia doctrinal no es una simple ventaja en un Papa, sino que es esencial. Los católicos no deseamos otra cosa que obedecer al Papa, tenerle cariño y aprender de su doctrina, pero para ello tiene que ser fiel a su misión. Santo Tomás enseñaba que “toda verdad, la diga quien la diga, viene del Espíritu Santo”, pero eso supone que todo error, lo diga quien lo diga, no viene del Espíritu Santo.
Es más, en el caso de León XIV los errores doctrinales y morales serían mucho más dañinos, al presentarlos con una cara amable y educada, lo que los haría menos evidentes y, por lo tanto, más difíciles de combatir. Como decía Chesterton, “a menudo, conservador solo significa alguien que conserva revoluciones”. Si el Papa León XIV pretendiera conservar o continuar, a su modo más educado y simpático, la revolución doctrinal y moral fomentada por el Papa Francisco, los católicos, sintiéndolo mucho, tendríamos que resistirnos a ese intento, porque nadie tiene autoridad alguna contra la fe y la moral de la Iglesia, ni siquiera el Papa.
Recemos mucho por León XIV, para que el Espíritu Santo le ilumine y pueda cumplir con gozo su misión de confirmarnos en la fe.
123 comentarios
Que las críticas arrecien en Religión Digital mientras en medios serios son simples preocupaciones, también indica que la cosa no va mal. Aunque coincido con Bruno en todo lo expuesto, hay otros tantos motivos para la calma. En todo caso, debemos esperar, al menos dejarle un año para poder evaluar hacia dónde va el papado. Estos son los motivos para la calma.
El Papa León está haciendo reformas de manera que con ellas no se destruyan las estructuras del edificio carcomidas por el bergoglianismo. Sin ir más lejos, autorizará la misa en latín sin restricción alguna; ha dicho a los sinodales alemanes que las bendiciones fiducianas que están llevando a cabo son abiertamente ilegales, lo que en la práctica supone desautorizar la Fiducia; viste como se espera de un Papa y ha rechazado la bandera elegetebé cuando se la han presentado; y lo que es más importante, ha sentenciado a Tucho Cardenal, al que busa sustituto (único motivo por el que permanece en el cargo).
Que León Papa haya participado en festivales ecológicos sinodales en el Vaticano no se debe sino a una herencia envenenada del bergoglianismo; nada puede hacer porque esos eventos estaban planeados desde hace años. También en descargo de León Papa hay que señalar que la precisión de su lenguaje en charlas informales es mucho mayor que la de Bergoglio, no da ruedas de prensa en el avión como su predecesor. Tampoco se le puede pedir a un Papa que sea como Benedicto, solo un poco más riguroso que Bergoglio. Con eso, basta.
"ha dicho a los sinodales alemanes que las bendiciones fiducianas que están llevando a cabo son abiertamente ilegales, lo que en la práctica supone desautorizar la Fiducia"
No, eso no es correcto. León XIV ha dicho exactamernte lo mismo que dice Fiducia, a saber, que no se pueden hacer bendiciones "rituales" de las parejas del mismo sexo, pero sí bendiciones "espontáneas" o "pastorales" (como si lo malo fuera la ritualización y no el intento de bendecir lo imbendecible). Se ha limitado a repetir lo mismo que ya decía Fiducia supplicans. Los alemanes querían ir más allá y les ha dicho que no, que tenían que ajustarse a Fiducia. Y, por si quedaba alguna duda, en la misma ocasión señaló que iba a tener el mismo enfoque sobre los temas LGBT que el Papa Francisco.
"Tampoco se le puede pedir a un Papa que sea como Benedicto, solo un poco más riguroso que Bergoglio. Con eso, basta."
No, no basta. Lo que se le puede y se le debe pedir a un Papa es que, cuando habla, no se aparte de la fe y la moral católicas. No hay justificación alguna para que lo haga y, si lo hace, está incumpliendo gravemente su misión. No basta con que sea "un poco más riguroso" que Francisco, igual que no basta con que un marido adultere un poco menos que su vecino.
Pesa que la fe de los más débiles se resienta y sea más difícil para ellos.
Paciencia y trabajar.
"evidencias de que a lo peor el difunto papa sudamericano lo ha dejado todo atado y bien atado para mal"
Bueno, el hombre propone y Dios dispone. Como dicen, la mejor forma de hacer reír a Dios es contarle tus planes. Así que no hay nada atado si Dios no quiere que lo esté.
"Ojalá que no sea así y como tú dices, el Espíritu Santo vuelva a inspirar al sucesor de Pedro"
Dios lo quiera.
Esto parece indicar que los escamados por el pontificado anterior no le daban el cariño y respeto que todo catolico le debe al papa.
Lo del cariño no sé de dónde viene, es un sentimiento. Estar escamado con un hijo no está reñido con el cariño. Es mas, lo normal era estar muy precavido con el nuevo papa despues del desastre anterior. Para mi eso es dar la maxima consideracion y respeto al cargo de Vicario de Cristo.
Yo ya le adverti a algun bloguero de aqui que incluso me parecian imprudentes estas alegrias iniciales. Es mas, como está el percal no podia haber paz ni unidad sin la espada porque estamos enfangados en la mentira. Cada uno sabrá por que persiste en seguir en su nube. Quizá comodidad, la verdad es dura.
"St Michael the archangel defend us in battle..."
...be our protection against the wickedness of the devil and snares of the devil...
I lived for a few years in the United States and was happy to see that the prayer to St Michael was routinely said at the end of the Mass in many parishes. I got used to it and still pray it in English often.
De entrada ya estoy viendo cómo va a ir menguando otra vez la asistencia a la plaza De San Pedro. Curioso. Conforme suben visitas al resto de santuarios italianos, la visita a San Pedro baja. Tengo hijos que han ido más veces a San Giovanni Rotondo y a la tumba de Carlo acutis que a Roma. ¿Por qué será?
Gracias por el artículo.
"Bien, es lo que toca, sufrir y amar, esto no es un parque de atracciones"
Así es. La vida cristiana es un combate, aunque algunas veces podamos olvidarlo.
Y como he dicho mil veces: ¿Qué se podía esperar de un Papa elegido por un Cónclave armado por Francisco?
Me encantaría ver la Restauración de la Santa Iglesia Católica, Apostólica y Romana. Pero si no me toca, espero sea mi granito de mortificación necesaria.
Sin embargo, tengo gran esperanza que el resurgir de la Iglesia tendrá lugar, tarde o temprano, y cuando Dios disponga. Y si yo no lo veo: ¡Gloria para Dios!¡Sólo eso! Lo demás no importa, no cuenta y es intrascendente.
Se va viendo que este Pontífice va a tenerlo muy difícil y va a estar muy solo, ya que a la hostilidad que van a ir mostrando los progresistas y heterodoxos a medida que no confirme los desvaríos de la anterior pontificado (como al poco hizo al recordar que la unión natural es entre mi mujer y algunas otras declaraciones), hay que añadir la hostilidad que poco a poco se va mostrando en grupos más, digamos, conservadores o presuntamente tradicionales.
De estos meses de pontificado se pueden sacar tanto buenas señales como negativas, tanto guiños a la tradición (como el uso del latín) como torpezas o errores, y, por qué no decirlo, también cierta complacencia con los heterodoxos que tanto dominan hoy la Iglesia.
No hay que ser muy sabio para ver que este Papa tiene como objetivo mantener la unidad de la Iglesia y evitar un cisma salvaje sin precedentes, más posible que nunca después del pontificado de Bergoglio. Ahora bien, con todos los desvaríos que hemos visto, voluntarios e voluntarios, en los últimos Papas desde Pablo VI, ¿por qué ahora los presuntamente conservadores o tradicionales arremeten a las primeras de cambio contra León XIV?
Hemos visto incluso Benedicto XVI rezar en una mezquita, hemos visto misas rockeras horribles de Juan Pablo II, de Pablo VI para qué hablar y a todos se les justificaba de una o de otra manera porque se entendía que su objetivo era mantener la unidad ante la inminente ruptura.
Empieza a ser muy inquietante que en ciertos sectores se esté empezando a aprovechar cualquier error o complacencia del vigente Pontífice para crear sospecha y alarma.
Aunque no estoy seguro de que, si eso sirve para amortiguar las herejías, no sea peor. Vaselina.
Solo??? Si tiene a su lado a todas las conferencias episcopales y a todo el mundo, incluido Arnold Terminator. Por no nombrar a herejes tipo la monja abortista Caram y el prosodomita James Martín. Está muy acompañado en su trabajo.
Solo??? Si tiene a su lado a todas las conferencias episcopales y a todo el mundo, incluido Arnold Terminator. Por no nombrar a herejes tipo la monja abortista Caram y el prosodomita James Martín. Está muy acompañado en su trabajo
José Manuel Guerrero.
También ha recibido en audiencia privada al Cardenal Burke.
No sé está sólo cuando no te acompaña nadie, sino cuando tus compañías están deseando jugártela. A León XIV, por razones obvias, se la jugarán en cuanto puedan los heterodoxos, pero por lo que parece, los conservadores ya han empezado.
"Aunque no estoy seguro de que, si eso sirve para amortiguar las herejías, no sea peor"
Es un gran peligro, en el que, claramente, ya ha caído mucha gente.
"Bruno, parece que tu novela seguirá siendo profética"
Es una pena, pero no hay mal que por bien no venga, los lectores tendrán que seguir leyendo Yo fui secretario de León XIV, je, je.
"Habrá que seguir esperando en Dios..."
La buena noticia es que siempre hay que hacer eso. Maldito quien confían en un hombre, dice la Escritura. De hecho, a veces es más fácil tener la esperanza sobrenatural cuando no hay esperanzas humanas con las que engañarse.
"una tercera o cuarta vez, no"
Así es. Los norteamericanos tienen un dicho muy expresivo: fool me once, shame on you; fool me twice, shame on me. Que, a grandes rasgos, significa: si me engañas una vez, deberías avergonzarte; si me engañas dos veces, el que debería avergonzarse soy yo.
Saludos, Bruno.
Benedicto XVI dijo: Jesús se «entrega» al Padre en un acto de total abandono. Estas palabras son una oración de «abandono», llena de confianza en el amor de Dios. La oración de Jesús ante la muerte es dramática como lo es para todo hombre, pero, al mismo tiempo, está impregnada de esa calma profunda que nace de la confianza en el Padre y de la voluntad de entregarse totalmente a él.
https://www.vatican.va/content/benedict-xvi/es/audiences/2012/documents/hf_ben-xvi_aud_20120215.html
Juan Pablo II
En la India el camino del diálogo y la tolerancia ha sido seguido por los grandes emperadores Ashoka, Akbar y Chatrapati Shivaji; por hombres sabios como Ramakrishna Paramahamsa y Swami Vivekananda; y por figuras luminosas como el Mahatma Gandhi, Gurudeva Tagore y Sarvepalli Radhakrishnan, que comprendieron profundamente que servir a la paz y a la armonía es una tarea santa. Esas personas, en la India y en otros lugares, han contribuido notablemente a hacer que aumente la conciencia de nuestra fraternidad universal, y nos orientan hacia un futuro en el que se hará realidad nuestro profundo deseo de cruzar la puerta de la libertad, porque la cruzaremos juntos. Elegir la tolerancia, el diálogo y la colaboración como camino para el futuro es conservar lo que hay de más valioso en el gran patrimonio religioso de la humanidad. Es también asegurar que en el curso de los próximos siglos el mundo no quede privado de la esperanza, que es como la sangre para el corazón humano
https://www.vatican.va/content/john-paul-ii/es/travels/1999/documents/hf_jp-ii_spe_07111999_new-delhi_meeting-other-religions.html
Benedicto XVI:
deseo ofrecer también mi apoyo a los líderes de los gobiernos y de los organismos internacionales que pronto se reunirán en las Naciones Unidas para debatir la urgente cuestión del cambio climático. (...) Animo a los participantes en la cumbre de las Naciones Unidas a abordar sus debates de forma constructiva, con valentía y generosidad. De hecho, todos estamos llamados a cuidar con responsabilidad la creación, a usar los recursos de modo que todas las personas y comunidades puedan vivir dignamente y desarrollar "la alianza entre ser humano y medio ambiente que ha de ser reflejo del amor creador de Dios"
https://www.vatican.va/content/benedict-xvi/es/audiences/2009/documents/hf_ben-xvi_aud_20090826.html
Felipe VI y Juan Carlos I pertenecen públicamente a la Orden de Malta y ha firmado leyes del aborto. Pero eso no era un problema, el problema es un premio random en EEUU sin repercusión alguna prácticamente.
Al menos, no parece que León XIV vaya a empeorar más las cosas, por lo que podemos ganar tiempo hasta que las generaciones más modernistas de obispos y cardenales vayan desapareciendo por imperativo de la biología.
Lo que dijo el Papa sobre el senador Durbin puede deberse al deseo de no desautorizar en publico al Cardenal Cupich, en aras de la institucionalidad y de la unidad de la Iglesia, pero al final resultó peor el remedio que la enfermedad.
"Exagerado lo de la esperanza, porque se puede entender en un sentido humano y no como referido a la virtud teologal, como cuando uno dice que espera que otro se mejore de un achaque o que espera que haya buen tiempo o que espera que no le vayan a robar unos fulanos que ve por ahí, en cuyo caso tendría cierta "esperanza" en alguna bondad natural de esos fulanos"
Por supuesto que se puede hablar en sentido amplio de esperar. Menos de esperanza, pero también. Sin embargo, cuando habla el Papa públicamente de algo que tiene una definición teológica clarísima, no puede usar ese término en sentido popular sin causar confusión, lo que ya es muy malo. Y, sobre todo, el Papa no puede poner su esperanza en la naturaleza humana, ni siquiera en sentido amplio, porque sabe, o debería saber, que esa naturaleza humana está caída y dañada por el pecado. Los que esperan que la buena voluntad acabe con las guerras están condenados a una decepción continua. Los que dicen esas cosas son los del mundo, porque no tienen otra cosa en la que esperar, pero él tiene a Jesucristo. Lo que debería decir el Papa es que reza a Cristo por la paz y espera en él, no que espera en la naturaleza humana. Es de cajón.
Es muy probable que este ejemplo en particular tenga mucho de forma desafortunada de expresarse, pero en un papa según qué formas de expresarse mal (a saber, las que van en la dirección de los errores del mundo) resultan muy preocupantes.
"Quizá sea como dice Wanderer: tenemos que mentalizarnos de que tenemos un olmo, no un peral, pero era lo mejor que podía salir de un cónclave en el que la mayoría de los cardenales habían sido creados por Francisco"
No tenemos que mentalizarnos de nada. Los católicos tenemos el derecho, y a veces el deber, de exigir al Papa que cumpla su misión de confirmarnos en la fe. Eso de mentalizarnos no es otra cosa que desesperanza, me temo.
"Al menos, no parece que León XIV vaya a empeorar más las cosas, por lo que podemos ganar tiempo hasta que las generaciones más modernistas de obispos y cardenales vayan desapareciendo por imperativo de la biología"
Mantener errores contra la fe en la Iglesia al más alto nivel es empeorar las cosas. Es, como decía en el artículo, consolidar la revolución y arraigar el concepto de que la fe y la moral católicas son una opinión más entre muchas posibles. No es algo neutro, ni mucho menos "ganar tiempo", sino deslizarnos aún más por el camino hacia el abismo.
"Lo que dijo el Papa sobre el senador Durbin puede deberse al deseo de no desautorizar en publico al Cardenal Cupich, en aras de la institucionalidad y de la unidad de la Iglesia, pero al final resultó peor el remedio que la enfermedad"
No sé cuántas veces lo he tenido que recordar en este blog: un principio fundamental de la moral es que el fin no justifica los medios. Que el Papa quisiera no desautorizar al cardenal es irrelevante, si para ello deforma públicamente la moral con sus afirmaciones erróneas y apoya una actitud gravísimamente escandalosa para los fieles. Eso no se puede hacer nunca.
Eso es indiscutible, aunque ya sabemos que ese dislate lo renovó en nuestra época un antecesor de León XIV, quien afirmó que en nuestra tiempo los hombres "aun por sí solos" (sic) están dispuestos a corregir sus errores".
De aquellos vientos...
Soy partidario de catacumbas y, si nos echan a las fieras, siempre mandaré un gentil saludo a las damas allí presentes.
Bastante me marearon en mi adolescencia con chorradas progres para ahora tener dudas.
Eucaristía bien celebrada, Confesión, Adoración, Biblia, Rosario...el resto son filfas de un vendedor de crecepelos.
"De aquellos vientos..."
Sin duda. Nadie es perfecto y los hombres metemos la pata. En la última década y algo, sin embargo, hemos llegado ya a un punto distinto, en el que no son meteduras de pata, sino algo mucho más grave.
"cuando muchos testigos y muchos indicios distintos apuntan en la misma dirección, aunque cada uno por separado no sea incontestable, su suma y acumulación generan una convicción lícita"
Si no recuerdo mal, es lo que él llamaba "probabilidad convergente", aunque lo aplicaba a cosas infinitamente más importantes y dichosas.
En el caso del premio cupícheo, en estricta lógica no dijo nada, aunque sonó como que lo apoyaba. Porque dijo que hay que mirar la totalidad de la carrera de alguien, y también que no se es pro-vida si se opone uno al aborto pero apoya la pena de muerte (lo cual en sí ya es un mal argumento, porque la pena de muerte no es intrínsecamente mala), de donde habría que concluir lógicamente que tampoco es uno pro-vida si apoya a los inmigrantes pero es abortista.
La "túnica inconsútil", gran engaño del demonio para nuestros tiempos, tiene dos caras (contradictorias entre si): una que dice que hay que mirar la totalidad, y por tanto, si hay algo bueno, bien, y otra que dice que hay que mirar la totalidad, y por tanto, si hay algo malo, mal.
En su referencia a quién no es pro-vida, el Papa parece haber usado la segunda. ¿Usará la primera para el galardón cupícheo?
Saludos cordiales.
"Bastante me marearon en mi adolescencia con chorradas progres para ahora tener dudas.
Eucaristía bien celebrada, Confesión, Adoración, Biblia, Rosario...el resto son filfas de un vendedor de crecepelos".
Al final creo que voy a llegar a la misma conclusión.
Saludos.
"Espíritu soberano a quién pertenece mi guarda, por la voluntad divina, que en este piadoso cuidado distribuye las jerarquías de los Ángeles para la tutela de los hombres: tú, parte esclarecida de su eterna milicia por la gracia con que permaneciste, sin perder la silla que tantos ángeles perdieron, te ruego me guíes y defiendas de la maldad de mis apetitos, de la debilidad de mi naturaleza, de las insolencias de mi voluntad, de la malicia de los pecadores, del ejemplo de los malos, del poder de los tiranos, de la venganza de mis enemigos, de la envidia de los espíritus amotinados que no perseveraron como tú, y pretenden que yo caiga como ellos.
Ángel santo, yo no sé tu nombre para llamarte por él; mas sé tu oficio para valerme de él. Atiéndeme de suerte que mi alma logre tu cuidado, y mi vida tu inspiración, para que por ti en la gloria restaure tu encomendado el lugar que perdió tu compañero, y tú goces el fruto de tus advertimientos, y yo el de la obediencia; porque contigo, y por tu inspiración merezca el reino de la paz y de la gloria.
Así lo conceda el que te crió con su poder, y me redimió con su sangre. Amén.
Francisco de Quevedo y Villegas.
Juraría, visto lo visto y oído lo oído que Prevost Martínez no tiene ninguna intención de lidiar con ningún toro, y menos con un toro desbocado. ¿Dilapidar???. No veo por ningún lado tal dilapidación. Lo que si observo es gente que está ya muy cansada de tragar con este juego perverso que se traen. . ¿Usted en qué planeta vive para no ver las barbaridades heréticas que dice cada dos por tres?. ¿A usted no le duele las cosas que dice? ¿Usted cree que es de buen cristiano dejar pasar el error provenga éste de donde provenga?. Ahora que nombra a Juan XXIII, por cierto, yo ni había nacido, usted parece que sí, le pregunto: ¿Actuó usted como actúa con León XIV, callar sus errores, o salió a la plaza pública a denunciar los -supuestos- errores de Juan XXIII? Última pregunta: quitando a Bergoglio y a León XIV, ¿puede usted señalar alguna herejía o error grave de los últimos cinco papas? Yo de Bergoglio y de Prevots Martínez le puedo llenar para empezar varias páginas.
Tenemos el evangelio, el.catecismo, y tantas obras de espiritualidad estupendas. Tendrá que llegar un Papa que se gane mi afecto, que haga algo que me vuelva a ganar. Mientras tanto la herencia de Francisco continúa con León.
Y por supuesto tenemos a la Trinidad, la Virgen, los Santos, y tantos y tantos testigos fieles de la.buena doctrina que, por suerte, hacen innecesarios a estos pontífices. Cuando haya uno bueno genial, y miéntras tanto a vivir del.depósito de la.Fe.
"El Papa León XIV tiene un Ángel de la Guarda, como todos nosotros, como hoy es su día encomendémosle a él"
Buena idea.
"Hay cosas que dan -y vaya si la dan- vergüenza ajena"
Qué bajo hemos caído.
Entiendo, porque no hay que ser ingenuo, que en el pasado cónclave había diferentes grupos con distintas preferencias en cuanto a candidatos, y quienes se vieron decepcionados están a la defensiva (o a la ofensiva). El problema de León XIV es que no le perdonan su papel en la disolución del Sodalicio de Vida cristiana.
Para alguien que creyera sinceramente en la gravedad de los daños provocados por las emisiones de gases de efecto invernadero, llevar un bloque de hielo allí en medio sería algo de pésimo gusto. El equivalente a organizar un acto para discutir sobre el hambre en el mundo, llevar una hogaza de pan de 50 kilos y dejar que se pudra delante de todos.
Castelgandolfo es hotel de 5 estrellas, hay un lugar especial para nuestra madre tierra (será de él la mía se llama María, Reina del cielo), y el restaurant de 5 estrellas está dirigido por dos homosexuales con hijos adoptados, además de su apoyo incondicional a la agenda 2030.
Seguiremos rezando por su conversión urgente, ya que si seguimos en este rumbo, me preocupa mucho el Dies Irae.
De nuevo gracias por lo que hace, sigo rezando por Ud. y su familia, que Nuestra Madre Nuestra Señora del Rosario y Nuestra Señora del Pilar, fiestas entrañables aunque olvidadas, lo bendigan.
Parece que León XIV no quiere identificarse claramente con las tendencias eclesiales conservadora o progresista, y creo que por eso escogió el nombre de León, el último papa del siglo XIX, respetado por todos como el autor de la “Rerum novarum” y el iniciador de la doctrina social de la Iglesia. Prevost descartó el nombre de los papas de los siglos XX y XXI, todos ellos muy connotados para el católico actual. León es más neutro y refleja la personalidad un tanto “huidiza” y esquiva de este papa.
León XIV es un hombre plenamente conciliar, alejado del tradicionalismo, que probablemente no introduzca nuevos cambios en la línea bergogliana, pero que no parece dispuesto a revertir las medidas de Francisco. No es, como su predecesor, un sudamericano populista, política y económicamente antiliberal ni tan anticapitalista ni teólogo del pueblo, que son las señas de identidad que más marcaron el pontificado de Francisco, y no ese supuesto progresismo que algunos le atribuían. El papa Prevost es un católico estadounidense liberal, cristocéntrico, defensor de la familia tradicional, contrario a las políticas de inmigración de la derecha conservadora y preocupado por el cambio climático.
No sé si es.un laico o un.clerigo rebotado.
Discrepo totalmente de su artículo así.como de
muchos de los.comentaristas.
Pero quiénes somos nosotros para censurar, criticar o juzgar al Vicario de Cristo en la Tierra??
Lo harían con JESÚS, como los.fariseos??
Cuánto tiempo dedican al día para hacer oración, ante el Santísimo??
Piden ayuda al Espíritu Santo para que les ilumine para redactar algo así??
Tenemos que dar muchas gracias a.Dios de
tener a León XIV como.Papa y nuestra obligación de católicos es rezar por él.
Creo que no volveré a leer ningún artículo suyo.
Que el Señor les bendiga.
El resultado es sorprendente, no sólo cada uno recibe comida suficiente, sino que sobra en abundancia (cf. Lc 9,17).
El milagro, más allá del prodigio, es un “signo” y nos recuerda que los dones de Dios, incluso los más pequeños, crecen cuanto más se comparten.
Por el bien de tu proceso de vuelta a la Iglesia, por la paz del alma, para tu tranquilidad, serenidad y firmeza en la fe: sacramentos, oración, estudio... y no visitar Infocatólica.
Primera, que visto lo visto caben dos posibilidades. La primera posibilidad es que Prevost sea un "progresista moderado" (no me gusta esa expresión) formado en la cantera de Bernadin y con la teología Rahneriana. El hombre puede tener buena intención pero la formación es deficiente. La segunda opción es que sea puro bonapartismo después de la revolución Bergoglio. Este segundo es el peor de los supuestos. Yo creo que va a dejar hacer. Y eso tiene sus partes buenas, cosa que con Francisco era muy difícil. Por lo menos no habrá persecución. En eso ya hemos mejorado un poco.
Segunda, considero que Prevost tiene un concepto de unidad que no va a cuajar. Es una unidad de hormiguero, no una unidad en la verdad.
Tercera, creo que debido al anterior pontificado, estamos muy alerta. A veces excesivamente. Porque si, Bruno, con anteriores Papas se dijeron y pasaron cosas terribles y la cosa no se puso tan tensa como está ahora, ni de lejos. No podemos esperar a Pío XIII después de Francisco. Eso no es posible.
Cuarta, creo que ya es momento de dejar de mirar al papado para todo, en serio. No es necesario. Hay que acabar con la hipertrofia papal. Y ya si se acabasen las entrevistas y los canutazos a los Papas, monto una fiesta.
Quinta, intuyo que León XIV no le va a llegar a León XIII ni a la suela del zapato.
Sexta, la Iglesia Vaticanosegundona da pena
La gente habla de Rerum Novarum como si se la hubiese leído. Mire, León XIII sobre todo era un Papa antiliberal.
Y la reforma que estamos todos esperando no va a llegar de un Papa. Si mañana llegase Pío X, no tendría nada que hacer. NADA. Porque la enfermedad está muy pero que muy metida. Acuérdense como acabó el Papa Ratzinger.
Yo creo que le reforma viene de abajo. Familias numerosas y liturgia cuidada (creo que la misa tradicional tiene mucho que decir al respecto). Vamos, la santidad de toda la vida. El resto es vanidad...
¿Quiénes quieren estar unidos a la Sede Petrina y a la Iglesia Universal? Los clandestinos.
¿Quiénes se ocupan solo de los chinos y nada más que de los chinos porque ni salen, ni quieren salir de allí? Los patrióticos.
Pero no pensemos demasiado que nos va a dar dolor de cabeza.
Me invade la tristeza por ello, rezaré siempre por el Papa, quienquiera que sea, pero, como se dice aquí, rechazaré y NO DARÉ NUNCA mi adhesión a ninguna enseñanza errónea, "porque nadie tiene autoridad alguna contra la fe y la moral de la Iglesia, ni siquiera el Papa".
Por otro lado, CREO FIRMEMENTE EN LA PROMESA DE CRISTO, sobre la indefectibilidad de la Iglesia y, por tanto, nunca me pasará, por la mente, abandonar la Barca de Pedro: QUE LA ABANDONEN LOS TRAIDORES Y LOS QUE HAN PERDIDO LA FE.
Quiera Dios que el tiempo le quite la razón a Don Bruno, para gozo de todos.
Gracias por el consejo. Creo que es acertado "simplificar" lo máximo posible. Sobre todo teniendo en cuenta toda la pedagogía que aún me falta.
Oración, Sacramentos, lectura de la Biblia, y volver a lo esencial.
Seguiré rezando por la Iglesia y por el bien de todos los cristianos.
Saludos.
A lo largo de prácticamente toda la historia ha habido críticos y defensores de los Papas. Juan XXII y su especial concepción de la Resurreccion es un ejemplo que viene bien a cuento.
Ex-cathedra ninguno erró tanto que al menos no sea posible discutir si realmente erró.
Ni el Papa mismo es la Iglesia, la Iglesia es el Cuerpo Místico de Cristo y soplen los vientos que soplen, saldrá adelante. No soy quien para distribuir culpas, pero me parece que olvidarse de esto, o lo que es lo mismo, perder la Esperanza debe ser materia grave.
AJ
Este comentario es muy acertado.
La situación es agónica. Ya era catastrófica antes de la "renuncia" de Benedicto XVI. Después de Bergoglio la Iglesia está en coma profundo y la solución no pasa por un Papa tradicional y fuerte (ya me gustaría a mí) porque entonces la rebelión y la ruptura serían inmediatas.
Ni el Papa más fuerte y poderoso podría encauzar esto, sólo cabe alguien que sea lo más gris posible y no soliviante los ánimos tanto como para causar el enfrentamiento directo. Un tiempo muerto que permita a Dios obrar en lo escondido.
A opiniones como su comentario me refiero cuando hablo de "hipertrofia papal". Es que la Iglesia es mucho, pero mucho más que los Papas. En épocas también oscuras, donde la jerarquía parecía que estaba dormida o apostatando, no fueron los Papas los que sacaron las castañas del fuego. Contribuyeron algunos de forma decisiva, sin duda. Pero fue un esfuerzo de todo el cuerpo eclesial: universidades, órdenes religiosas, santos, reyes, laicos... Eso es una realidad histórica, está ahí. Con esto no quiero decir que no se necesite a la jerarquía.
Mi punto actual, y en esto estoy muy de acuerdo con Ratzinger, es que vamos a ser reducidos a solo unos pocos, al menos en occidente. Dios sabe en qué circunstancias. Desde ahí nos tocará construir. Creo que el Vaticano II fue profético en una cosa: el laicado salvará la Iglesia. Lo tengo cada día más claro. Entre el laicado hay gente que no cree. De acuerdo, pero esa gente no durará dos generaciones. Le pongo un ejemplo. La típica persona que está a favor de, yo que sé, la fornicación no es pecado, ni los métodos anticonceptivos, ni el infierno existe... Pues bien, esa gente no va a transmitir la fe, simplemente porque no tiene. Tampoco tiene formación. Es más, lo más probable es que se empareje con una persona sin fe (porque le da igual), y si familia abandone la Iglesia.
Ahora si hay familias que rezan, que tienen hijos de forma generosa, van a una misa cuidada, la fe es el centro de sus vidas... Esos serán los que transmitan la fe. Y de ahí saldrán los obispos. Hablando de obispos, creo que sin un buen colegio episcopal es imposible esa reforma. Porque de ahí viene el cuidado de la liturgia, la enseñanza, la pastoral, la catequesis, el seminario... Y debería de ser un contrapoder al papado. Ni le cuento lo influyente que es el episcopado. Y en occidente no está para tirar cohetes que se diga. Quitar las conferencias episcopales y la jubilación obligatoria, sería un buen paso adelante en ese sentido
AJ, usted dice "creo que le reforma viene de abajo".
Ni de de las pobres ovejas sin pastor ni de los papas liberales, sino de más arriba: la Iglesia ciertamente será restaurada (sabemos que combatirá al Anticristo, pero si el advenimiento de éste se produjera ahora, posiblemente se le recibiría en el Vaticano con alfombras rojas), aunque esa restauración o liberación deberá tener lugar por una intervención extraordinaria del mismo Dios. El Espíritu Santo no fuerza a nadie en el cónclave, de ahí que cardenales liberales han elegido y elegirán siempre papas liberales. Por eso la Iglesia se encuentra en un callejón sin salida humana.
La Iglesia será restaurada. Esto es seguro. Falta saber el cómo y el cuándo. Sobre el momento, es interesante hacer notar que el 2028 se cumplirán 70 años exactos desde la elección de Juan XXIII, primer papa de la serie ininterrumpida de pontífices liberales, y el 2029 estaremos a 70 años exactos del anuncio del concilio Vaticano II. Los israelitas padecieron 70 de cautiverio babilónico, y Rusia tuvo que soportar 70 años de cautiverio comunista. ¿Será que la Iglesia estará sometida también por 70 años al cautiverio liberal y modernista? En tal caso, nuestra liberación está muy cerca.
Dios tenga misericordia de todos.
Seguí preocupándome por el apoyo, en aquel entonces, del Papa Emérito BXVI al Papa Francisco.
Actualmente con el Papa LXIV sigo con la misma pregunta de mi preocupación y que para mí es clave:
¿Qué pasa en el Vaticano?
SJPII siempre ha sido santo de mi devoción y me he encomendado a Él en varios momentos de mi vida.
BXVI siempre ha sido para mí uno de los mas grandes Teólogos de la historia de la humanidad.
F I ha sido un Papa sorprendente y para mí lo ha sido más porque BXVI ha expresado sintonía con Él (no soy un experto y no sé decir si: algo, bastante o mucha).
Por lo tanto la pregunta desarrollada es :
¿Qué pasa en el Vaticano. Qué ocurre con el voto de obediencia, castidad y pobreza...?
Pero es que esperar de un conclave con una mayoría de cardenales creados por Francisco que os trajera otro Pio X, es mucho esperar.
Yo veo a León como el Benedicto XVI de Francisco.A fin de cuentas fue Prevost quien colaboró con Francisco en la selección de obispos y cardenales, estrategia mucho más inteligente que la de Juan Pablo y Ratzinger martilleando y conenando herejes.
Después de los años negros de Juan Pablo, llenos de dolor y oscuridad para muchos católicos (Ya se que para vosotros lo son de luz. Discrepamos), llegó un Benedicto que trató de seguir el mismo camino pero con una voluntad de unión y encuentro que no tenía Juan Pablo.
Benedicto no aguantó y no se si Leon aguantará, porque la polarización entre los extremos de ese barco llamado Iglesia es demasiado grande.
AJ escribió: "...creo que ya es momento de dejar de mirar al papado para todo, en serio. No es necesario. Hay que acabar con la hipertrofia papal. Y ya si se acabasen las entrevistas y los canutazos a los Papas, monto una fiesta."
Es decir, la misma conclusión a la que llegamos muchos, un par de añspués del atentado a Juan Pablo cuando su giro a la derecha era ya muy evidente y Ratzinger en la CDF hacía y deshacía.
Nosotros ya pasamos por esa "Noche oscura de la Iglesia", ahora os toca a vosotros.
Habéis tenido mucha suerte, Francisco duró mucho menos que Juan Pablo.
Y llegado el momento, se hará evidente la confrontación y se producirá un cisma.
Yo no solo lo espero, lo deseo de vardad.
El asunto es ¿Que parte se quedará con Roma, con el Vaticano?
Ese es el asunto, porque le dará una apariencia de legitimidad. Solo apariencia, pero la apariencia importa
Y a todo esto... Dios, seguro que nos mira y mueve la cabeza harto de tanta tontería
En todo caso, dado el momento de la Historia en el que estamos la figura del papado es crucial tanto ante el mundo como en la Iglesia. La prueba está en que como nunca antes los enemigos están empeñados en hacerse con la Sede de Pedro.
Dicho lo cual, tan lejos estoy de la hipertrofia papal que, como ya he dicho, confío moderadamente en lo que puede hacer este Papa precisamente porque es alguien gris y anodino. Quizá lo mejor para que Dios actúe.
El problema es que como buen sofista confunde las cosas. Yo lo que propongo es dejar de mirar cada cosa que hace, dice o predica el Papa o la jerarquía y atenerse a la doctrina de siempre, los Evangelios y rezar... Si, esas cosas anticuadas en las que no cree. Vamos, lo que hicieron todos los católicos hasta la llegada de la radio.
Sigo pensando que los que creen que León es Francisco II se equivocan. Pero tampoco va a ser una adalid de la Tradición. No seamos ingenuos.
Ojo, y en una cosa tiene razón, Hugo. JPII promovió esa hipertrofia papal de la que hablo y no me parece tan bien papado como nos quieren vender. En cuanto a dejar de escuchar todo lo que viene de Roma, diría exactamente lo mismo si fuese el Papa Pío XIII. Porque la verdad es una y no depende de la autoridad.
Le dejo con sus sofismas
Tampoco es que Dios necesite a muchos. Con unos pocos le vale. No digo que se pueda hacer sin papado. Creo que el papado es lo menos importante. Lo más importante es que la Iglesia tire en su conjunto. Y eso empieza por el laicado.
No sé si soy o no un sofista, lo más que puedo asegurar es que soy de Cuenca y del Atleti y ambas cosas me dan pocas, pero muy intensas satisfacciones. (Había que meter el 5-2 por algún sitio)
Concluyes en que no te entiendo,,, y sin embargo defienes lo mismo que yo
Tu dijiste
"El problema es que como buen sofista confunde las cosas. Yo lo que propongo es dejar de mirar cada cosa que hace, dice o predica el Papa o la jerarquía y atenerse a la doctrina de siempre, los Evangelios y rezar... "
Exactamente lo que hicimos muchos de los que vosotros llamáis herejes modernistas durante los años oscuros de Juan Pablo.
Simplemente con el levísimo cambio de que en vez de atenernos a la doctrina "de siempre", nos atuvimos a la docrina de Jesucristo, que no es lo mismo.
Pero tú, agárrate al asidero que más confianza te de. Total, las diferencias contigo son tan grandes que dudo much pudiéramos encontrar una zona de entendimiento (Eso en el caso de que tú quisieras llegar a ese entendimiento, cosa que está por ver)
Usted es un sofista. Si, de esos que combatía Sócrates la tira de años antes de Cristo. "Hay quienes, como los antiguos sofistas, retuercen las Escrituras para que digan lo que su mente torcida desea." Usted no hace lo mismo que yo propongo porque no cree en ello. Y para que vea que tiene un cacao mental interesante, dice que defiendo lo mismo que usted para luego afirmar que "tenemos diferencias muy grandes". Pues aclarese.
Ya se lo he dicho muchas veces. Usted no cree en la enseñanza cristiana. Cree en la suya. Pero bueno, es normal: "Es propio del hereje no ceder a la verdad y preferir la gloria de su propio error."
El borrado de todo lo anterior se presta perfectamente a la mala copia porque si nadie sabe griego, ni latín, si nadie conoce a los Padres de la Iglesia, ni nadie sabe Historia, convertida en un relato, cualquier avisado puede copiar desde a los presocráticos a Platón haciendo ver que eso lo ha inventado él.
De hecho el tipo que se inventó la inteligencia emocional ya previó que nadie sabía ya lo que es la Sabiduría y tuvo un éxito estupendo. El que inventó la resiliencia más de lo mismo, y así todo. Los pocos que conocían filosofía antigua fueron los que se preguntaron "pero, ¿qué dicen éstos?".
Es absurdo que llevemos milenios de historia y seamos resilientes ahora, antes no porque el iluminado no había nacido y nadie se había dado cuenta de que existía la resignación y la supervivencia, las cuales preparaban al hombre para resistir en condiciones de víctima, pero si decimos "resiliencia" ¡ah! ¡qué concepto más nuevo y maravilloso!
"Os atuvistéis a la doctrina de Jesucristo que vosotros inventásteis, lo cual está al alcance de cualquiera. Lo que tú propones es que cada cual piense lo que le da la gana y cualquier cosa que piense bien estará siempre y cuando no esté en el pasado remoto ni el próximo pasado. Que sea nueva y rompedora, que haga trizas la Fe que hasta ahora teníamos y que nadie pueda rezar el Credo porque no se lo cree"
Buen resumen de los herejes actuales. Los antiguos al menos tenían la decencia de creer en algo, aunque fuera erróneo. Los actuales no creen en nada más que en sí mismos, dejando así meridianamente claro que van de camino al infierno, si Dios no lo remedia.
La Iglesia Católica englobó una serie de descubrimientos derivados de su filosofía realista que nadie quiere reconocer. Mucho antes de que los psicólogos "descubrieran" con otro nombre la acedia, ésta había sido magnificamente estudiada por Evagrio Póntico, monje del S. IV. Y así hasta el infinito, pero tontitos como estamos muchas cosas nos tragamos.
El primero al que se le fue la pelota, aunque fue algo más congruente que el ínclito Hugo, fue Rousseau, lo que hace decir a Russell que sus argumentos sentimentaloides son vomitivos. ¡Pues anda que ahora!
Los comentarios de María de África me han parecido muy gadamerianos: la tradición no es un museo de piezas muertas, sino un horizonte vivo que nos permite comprendernos. Benedicto XVI, profundamente marcado por Gadamer, nunca canonizó su propia filosofía, sino que la subordinó a la fe. No infló la pastoral con categorías subjetivas, sino que recordó que el cristianismo no es un laboratorio de teorías sobre la persona, sino el encuentro con la Verdad que nos precede y nos sostiene.
Quizá hoy, cuando se repite tanto aquello de "caminar junto al hombre de hoy", convendría recordar que lo decisivo no es acompañar sus "reinvenciones" climáticas, virtuales o afectivas, sino anclarlo en lo eterno: Cristo y sus sacramentos.
Si de hecho solo hace falta ver cómo el sofista Hugo se considera a sí mismo como seguidor de la doctrina depurada de Jesucristo, la real, que enfrenta a la nuestra; tradición y magisterio bimilenarios.
Es así, la herejía no deja lugar a medias tintas.
Llevas razón, Nando. No sé lo que has querido decir porque soy torpe, pero creo que llevas razón.
"Última novedad: el Papa dice que Jesucristo no es Dios".
"Cortés no fue un genocida sino una marioneta de los indios".
"Después de los 70 lo mejor es no vivir con los hijos".
Etc...y todo dicho por supuestos coachings, psicólogos, gurús o, la última novedad, que son los que se dedican a la geopolítica explicando el conflicto de Macedonia a los que no saben dónde está Macedonia.
Disculpa no haber sido más claro.
Lo que quiero decir, es que a veces parece que muchas homilías y gestos están más pensados para un auditorio de católicos culturales o de no creyentes, que para quienes vivimos la fe día a día y luchamos por perseverar. Se insiste mucho en el lenguaje psicológico: "ser acogidos", "sentirse amados", "no tener miedo a la fragilidad"… Todo eso es bonito, pero cuando sustituye al anuncio claro de la gracia, el pecado, la cruz y la vida eterna, el mensaje queda aguado.
Ahí es donde más echo de menos a Benedicto XVI: no envolvía el cristianismo en terapias emocionales.
@María de África:
Aunque no hayas leído a Gadamer, tus comentarios resuenan con él: la convicción de que la tradición no es un museo de piezas muertas, sino un horizonte vivo que nos permite comprendernos hoy. Y creo que en eso coincidías, sin saberlo, con Benedicto XVI: él también entendía la fe como herencia recibida que ilumina el presente, no como un relato que se inventa desde cero.
Soy el típico adolescente rapero que lleva zapatillas que torturan mis pies, pantalón caído que muestran mis calzoncillos. (Calvin Klein, of course) y por ello dotado de unos recursos expresivos arborescentes que tú ignoras e ignorarás.
Digo esto porque tu consejo de evitar entrar en InfoCatólica me da cringe, no mola mazo, lo dice alguien random, o sea, y de una mujer notas muy prieta.
¡Oh yeah! ¡Soy el yogurcito de este portal!
En mi caso, por ser mucho más joven, el 68 me cogió en plena adolescencia y mucho menos formada, así que también hice mis concesiones porque tampoco me consideraba el fiel de ninguna balanza.
Pero ambos habíamos nacido en la tradición, ambos amábamos a nuestra familia y ambos considerábamos a nuestros padres y profesores como referencia.
De manera que tuvimos que recular en algún momento de nuestra vida y eso es lo que nos hace semejantes, salvando la enorme diferencia de edad, diginidad, conocimiento y gobierno. Por eso tengo un inmenso cariño por Benedicto XVI.
La Iglesia no ha cambiado su enseñanza esencial sobre los sacramentos, la divinidad de Cristo, la moral natural, la dignidad humana o el valor de la vida. Lo que ha hecho —y debe hacer— es discernir cómo aplicar esas verdades en diferentes contextos. Eso no es ruptura: es desarrollo. Le voy a poner un ejemplo por si no lo entiende. ¿Está en los Evangelios la Summa Theologica? No. ¿Las conclusiones a las que se llega en la Summa son legítimas según la Revelación cristiana? Si.
Usted confunde una cuestión disciplinar con doctrinal. Eso es el ABC del católico. Antes, se ajusticiaba al hereje. Ahora no. Pero eso no quiere decir que la herejía esté bien. Es más, condenar a muerte al hereje era lo propio pues, para la época era como un terrorista en la nuestra. Estallaba a nivel social (véase Lutero). Ponía en serio riesgo el bien común.
En cuanto a la bula de las corridas de toros, es eso, una bula. reflejaba una preocupación legítima por el carácter violento y a menudo sacrílego de las corridas. Pero no era una definición doctrinal ni infalible, sino una medida disciplinar.
En cuanto a los esclavos, simplemente no es verdad. Hay documentos magisteriales que condenan explícitamente la esclavitud (Sublimis Deus, Pablo III, 1537) aunque no se hayan obedecido universalmente. La Iglesia no siempre ha tenido poder para imponer su voz, especialmente en colonias donde intereses económicos y políticos pesaban más.
La Iglesia no ha sobrevivido dos mil años a pesar de sus principios, sino gracias a ellos. Su historia no es una serie de contradicciones ocultas, sino de desarrollo orgánico, fidelidad al Evangelio y capacidad de discernimiento.
Claro que hay fallos humanos. Pero también hay santos, mártires, sabiduría, caridad, pensamiento profundo y una continuidad moral y doctrinal que muy pocas instituciones en la historia pueden igualar.
Negar todo eso por quedarse con anécdotas o errores es una simplificación injusta. Aunque yo entiendo que hacer un análisis profundo y que no sea anticatólico le cuesta. Pero por lo menos, inténtelo.
Recien termino de publicar en dos oportunidades esta nota en gloria.tv
y fueron borradas sin dar ningún motivo o explicación al respecto.
Transcribo la nota recientemente borrada en gloria.tv:
INFAMES acciones en contra del Sagrado Corazón de Jesús en gloria.tv
En la madrugada de hoy, aproximadamente entre las 3 y las 4 AM, el moderador de gloria.tv borró sin dar ninguna explicación, dos notas con Imágenes del Sagrado Corazón de Jesús relacionadas ambas con el 1er viernes de cada mes dedicado a honrarlo.
Esto se suma a la reiterativa costumbre de borrar comentarios y artículos subidos en gloria.tv por quien escribe la presente nota.
Llamativamente, esta ya habitual actitud del moderador de gloria.tv contrasta notoriamente con una nota publicada recientemente en la que se destaca la libertad de poder publicar en gloria.tv.
Por lo que pido que en el futuro se me indique en forma puntual, a modo de corrección, sobre algún eventual error o inconveniencia en cualquier eventual nota que pudiera publicar en adelante.
Pero lo del día de la fecha, reviste un carácter infinitamente más grave que todo lo anterior.
Y una vez más fue borrada sin dar ninguna explicación.
Pido disculpas si he procedido mal en comentar en este blog, esto que ha ocurrido en gloria.tv, pero no cuento por el momento con otro medio donde dar a conocer este hecho lamentable.
«¡Señor, sálvanos, que perecemos!» Y esperar que otra vez, repita en nuestro siglo el milagro de que fueron testigos los apóstoles.
Dicho esto, es discutible si ese aumento es bueno o malo. De hecho hace un par de meses, comentando bajo un artículo del blog de Daniel Iglesias (*), esbozé un argumento a nivel global de que ese aumento es bueno. Pero la bendición pontificia del trozo de hielo groenlandés me da pie a esbozar un argumento a nivel local, concretamente de Groenlandia.
Groenlandia tiene por lejos la mayor tasa de suicidios por 100.000 habitantes del planeta, duplicando la tasa del país en segundo lugar. Es probable que uno de los factores que favorecen los suicidios sea la dureza del clima, y que habría muchos menos suicidios si el clima se tornase benigno. Si eso es así, pues que se derritan los hielos groenlandeses y se cubra de vegetación ese territorio!
(*) www.infocatolica.com/blog/razones.php/2507261249-ansiedad-climatica-y-locura-v
No haga el ridículo hablando como los adolescentes de hace 15 años.
Y, por favor, puesto que sus calzoncillos me traen completamente sin cuidado, absténgase de hablarme de semejante ordinariez.
El efecto invernadero proviene del vapor de agua no del CO2 que por cierto no es en absoluto un contaminante sino beneficioso y su aumento en la atmósfera es positivo y no dañino, porque es responsable de por ejemplo un aumento en la velocidad de crecimiento de las plantas, la producción agrícola e incluso el tamaño de los árboles, de eso tienes toda la evidencia que quieras.
La evidencia existente del CO2 como causante de calentamiento es igual de solida que la que te enseñaron por la TV para que te vacunaras.
Dejad de consagrar dogmas porque precisamente la ciencia se construye así: dudando.
Así que cada uno tenéis vuestra religión y algunos como tú afirman su dogma de "la verdad absoluta no existe". Pero estás presentando esa frase como una verdad absoluta, y entonces te contradices, si es verdad que no existe la verdad, tu frase tampoco es verdad. Es como si digo "todas las afirmaciones son falsas". Supongo que lo pillas, eres ingeniero no?. Subsistes a base de paradojas semánticas y eso es chungo. La Verdad absoluta existe.
Usa la cabeza, tienes un lío espiritual de narices y eso afecta al cuerpo, no lo dudes. Pídele a Cristo a diario, a cada hora, que te ilumine. Esta vida es un instante comparada con la eternidad.. Si Dios quiere, te ayudará a salir de ese lío y a encontrar la Verdad. El pecado existe y los espíritus impíos también. Que Dios te ayude.
Ahora, después de leer este artículo tuyo, creo que voy a seguir lo mismo porque no parece que haya cambiado mucho la cosa y si la cosa no cambia mucho es seguro que va a peor. Ahora, no vayas a criticar al Papa que siempre hay que hacerle caso... es que si no eres esto o lo otro...
Bueno... pues está bien la cosa...
Gracias, por cierto, por hacer compendiado en este artículo las abundantes barbaridades del nuevo-viejo Pontífice...
Muchas campanas al vuelo hizo repicar la famosa estola bordada. Muchas alharacas el retorno a los apartamentos pontificios. A mí particularmente me repicó una simple palabra de la homilía de la misa de inicio de pontificado: sinodalidad. Con lo cual dije, ya está. Y cada día me confirma más y más cosas. Es natural que algunos veáis que hay que (empezar a) preocuparse. En bastantes aspectos sabíais, y no es de ahora, que no hay vuelta atrás.
Dejar un comentario










