Noche esperada (villancico)
La idea de este villancico es recordar que la Navidad cumple las promesas de Dios hechas a los profetas y patriarcas de Israel. En muchos casos, no entendemos el Nuevo Testamento porque no conocemos el Antiguo. Como no conocemos la promesa, no entendemos su cumplimiento.
Verán que es un villancico largo, pausado y meditativo, que va contemplando cómo Dios ha ido anunciando la Encarnación de su Hijo a lo largo de todo el Antiguo Testamento. Las distintas noches de la Historia de la Salvación señalan todas hacia la noche de Navidad. Tras el primer pecado del hombre, Dios ya anunció, inmediatamente, la salvación que vendría por Cristo, hecho hombre como Hijo de Adán, porque donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia.

En su número de ayer, La Razón recogía un comentario informal hecho por nuestro Presidente a los periodistas. Ante las preguntas sobre la nueva pareja del presidente francés, después de su divorcio, el político español comentó: “Sarkozy ha salido ganando con el cambio”.
En los últimos días, hemos discutido bastante en este blog sobre algunos dogmas en particular y sobre la existencia de dogmas en general. En un momento dado de estas discusiones, una comentarista hizo la pregunta clave: ¿qué valor tiene la confesión de un dogma acríticamente aceptado?
Ya he dicho más de una vez que, a mi juicio, los comentarios en Religión Digital son, en ocasiones, mejores que los propios artículos. En cambio, otras veces, a lo que llevan es a que se pueda uno reír con ganas, que también es algo bueno. De este último tipo fueron unos comentarios de hace un par de semanas, relacionados con el autor de la Cigüeña de la Torre que, como él mismo nos ha dicho, actúa de vez en cuando como ministro extraordinario de la comunión en su parroquia de Pozuelo. Aunque algo antiguos, no quiero dejarlos pasar sin añadir mi propia opinión.
Después de un par de artículos polémicos, he pensado que sería bueno dedicar el domingo a algo más tranquilo y alegre y ofrecer un villancico a los lectores. Este villancico lo compuse hace un par de navidades, al darme cuenta de que la mayoría de la gente hace fiesta en esta época del año por costumbre, pero sin celebrar nada. Si les preguntas, la mayoría te dirán que es fiesta porque sí, porque hay que hacer fiesta, pero sin ninguna razón real que afecte a sus vidas. Quizá por eso tanta gente está harta de la Navidad.









