InfoCatólica / Espada de doble filo / Categoría: Pensamiento

28.08.10

Campos de la batalla moral

Un amable lector me ha enviado una conferencia de Eduardo J. Olazabal, pronunciada en el Congreso de Filosofía del Derecho celebrado el año pasado en San Juan, Argentina. La conferencia trata sobre la imposibilidad de que el Estado sea neutral en temas morales.

¿Por qué es importante este tema? Para entender el sofisma que hay detras de una acusación que se hace a menudo contra los cristianos: que tratamos de imponer nuestra moral. En realidad, todo el mundo defiende e intenta imponer su propia concepción moral. Y todo Estado impone una moral determinada. No existe ni puede existir una sociedad en la que no se impongan valores morales, porque la vida en sociedad está cimentada sobre una serie de principios morales fundamentales. Por ejemplo, en lo referente al matrimonio homosexual, se dice que los cristianos intentamos imponer nuestra concepción del matrimonio, a saber, que matrimonio es necesariamente la unión entre un hombre y una mujer, como algo inscrito en la propia naturaleza humana. En cambio, los partidarios del matrimonio homosexual se presentan como los tolerantes que no imponen nada a nadie. En realidad, con pensar un poco se ve que están intentando imponer su propia idea del matrimonio: que el matrimonio no es algo determinado por el propio ser del hombre, sino algo que inventamos y modificamos a voluntad. Se puede discutir qué concepción moral del matrimonio es mejor, pero lo que resulta indudable es que se trata de dos concepciones morales diferentes, contradictorias entre sí y cuyos partidarios hacen lo posible por imponerse socialmente, influyendo en la gente, en los legisladores y partidos, buscando la aprobación de leyes favorables, apelando a unos u otros valores, etc.

Lo que más interesante me ha parecido de la conferencia es la enumeración de una serie de campos en los que es imposible que el Estado sea éticamente neutral. Es decir, una serie de “campos de batalla” éticos en los que se enfrentan diversas concepciones de la moral. En unas épocas puede ganar una moral y en otras épocas otra moral distinta, con periodos de transición entre ambas, pero no existe la neutralidad. Curiosamente, al leerlos se recuerdan inmediatamente casos de discusiones y polémicas recientes en cada uno de ellos. Seguro que los lectores podrán dar ejemplos de luchas recientes para cada ámbito.

Leer más... »

17.08.10

Una frase estupenda

A veces no hace falta un artículo entero. Una buena frase es como el oro que, en el crisol, se separa de escorias e impurezas y puede dar materia para pensar o disfrutar durante un buen rato. Por eso (y porque estamos en verano, que todo hay que decirlo) traduzco hoy para el blog una frase estupenda de Hilaire Belloc, amigo de Chesterton y uno de los grandes escritores católicos del siglo XX. Forma parte de una carta que escribió con ocasión de la publicación de la encíclica Pascendi, de san Pío X, que condenaba el Modernismo:

Leer más... »

3.08.10

La Iglesia Oficial

Hay palabras y expresiones que hacen que, al oírlas, se le pongan a uno los pelos de punta y suenen inmediatamente todas las alarmas. Algunas de esas expresiones, para mí, son las de “Iglesia oficial”, “Iglesia institucional” y “doctrina oficial”. En mi experiencia, el uso de estas expresiones indica la presencia de unos prejuicios profundamente arraigados que desnaturalizan totalmente la esencia misma de la Iglesia y de su enseñanza. En general, suelen transmitir la idea de que se puede ser católico sin pensar, actuar ni sentir como católico, porque esas cosas pertenecen a la Iglesia o a la doctrina “oficiales". Es decir, la idea de que se puede ser católico sin molestarse en serlo.

En cuanto escucho a alguien hablar de “Iglesia oficial”, de la “Iglesia institucional” o de la “doctrina oficial”, me resigno a tener que discutir y tomo el resto de lo que se dice con desconfianza. Es más, ya ni espero a que diga la palabra entera. En cuanto escucho “of…”, suenan las alarmas. Lo siento por quien esté hablando de ofrendas, ofertas u Ofelias, pero, como aquella monja del convento de Santa Teresita, el alérgico termina por aborrecer hasta las flores de plástico.

Leer más... »

29.07.10

Pero Don José Fernando, no es ésa la verdad católica

Quaestio Quodlibetalis XXV.D. José Fernando Rey Ballesteros escribió ayer un artículo muy interesante sobre los Pastores y los fieles, titulado “No toquéis a mis ungidos”. Sensatamente, D. José Fernando está preocupado por la desobediencia generalizada hacia el magisterio y quiere remediarla. Su tesis fundamental es que no se debe criticar nunca públicamente a sacerdotes ni obispos: “Aún en el caso de que un pastor hubiese pecado gravemente o hubiese errado en materia fundamental, sólo su superior, en uso de su autoridad, puede juzgarlo y reprenderlo pública o privadamente, edificando así al resto del rebaño”.

Es, ciertamente, una tesis bienintencionada y, como decía, intenta responder a una situación actual en la que la autoridad eclesial está muy debilitada. Sin embargo, no es eso lo que enseñan ni la Escritura, ni el Magisterio, ni la Tradición ni el sentido común. Vamos a ir examinando poco a poco la cuestión y las razones que da D. José Fernando.

Leer más... »

26.07.10

Un ginecólogo abortista sin pelos en la lengua

Incluyo unos párrafos, comentados en rojo por mí, de una entrevista a un ginecólogo abortista que ha aparecido en El Mercantil Valenciano y me ha parecido extraordinariaemente interesante. Este ginecólogo, Pere Enguix, es militantemente abortista y, como tal, dice las grandes barbaridades que se podrían esperar, confundiendo liberación de la mujer con el aborto y la conciencia moral con hacer lo que a cada uno le dé la gana.

Parece, sin embargo, que es también un hombre sin pelos en la lengua y, por ello, reconoce muchas de las cosas que oculta el pensamiento políticamente correcto. Como me parecen muy significativas, las señalo en negrita. Ojalá todos los antiabortistas se atrevieran a ser tan claros como este hombre.

…………………………………………………………………………………………

Leer más... »