Unas frases demoledoras

En este blog, hablábamos ayer de tres dominicos que, con la aprobación de su superior, se apartaban de la doctrina católica en puntos esenciales y animaban a las parroquias holandesas a avanzar por el camino del cisma y de la desobediencia a sus obispos. Parece ser que, ante esta situación, fueron los propios fieles los que se quejaron en un número significativo a los obispos, hasta que estos acudieron a la Congregación para la Doctrina de la Fe.

Por desgracia, si bien se trata de un caso de especial gravedad, no es algo aislado. En este blog, hemos comentado múltiples casos similares: sacerdotes que consideran que el cristianismo y otras religiones son equivalentes, supuestos expertos en moral que defienden las mayores inmoralidades, párrocos que sustituyen la fe de la Iglesia por sus propias ideas confusas y políticamente correctas o catequistas que reducen el cristianismo al compromiso social o a la moral. Muchas veces son los propios laicos los que se rebelan contra estas situaciones y presentan sus quejas a sacerdotes y obispos.

En este contexto, me llamaron mucho la atención unas frases que leí ayer en el libro Christian Reflections, de C. S. Lewis, el famoso converso inglés al cristianismo, autor de las Crónicas de Narnia y de multitud de libros sobre temas cristianos. Como ya he dicho alguna vez, creo que los conversos pueden aportar a los “cristianos viejos” una visión nueva y más fresca sobre algunos temas que, a fuer de conocidos, terminamos por olvidar. En particular, muchas veces denuncian situaciones abusivas a las que los demás cristianos, tristemente, nos hemos acostumbrado.

Tratando el tema de algunas corrientes modernas, que han hecho que muchos teólogos y los sacerdotes formados por ellos sustituyan la fe cristiana por ideología, Lewis afirmaba, en una charla a un grupo de seminaristas (mi traducción):

Antiguamente, el laico intentaba esconder el hecho de que creía mucho menos que el Párroco. En la actualidad, tiende a esconder que cree mucho más que él.

Ser misionero para con los sacerdotes de la propia iglesia resulta algo embarazoso. Sin embargo, tengo el horrible presentimiento de que, si dicha misión no se emprende pronto, la historia futura de la Iglesia de Inglaterra será, probablemente, muy corta.

Estas terribles frases de C. S. Lewis fueron escritas hace cuarenta años y se referían a la Confesión Anglicana. Resulta curioso que, precisamente este año, se ha anunciado que, en la propia Inglaterra, el número de católicos practicantes ha superado al de anglicanos practicantes, así que parece que la predicción de este autor no iba muy desencaminada.

No quiero quedarme, sin embargo, en una reflexión sobre el Anglicanismo, que, a fin de cuentas, nos resulta bastante lejano. Más bien yo me preguntaría: ¿estas frases son aplicables a la situación actual de la Iglesia en España? Y si es así, ¿qué podría hacerse para evitar que se cumpla en nosotros esta funesta predicción? ¿Están los laicos llamados a hacer frente en nuestra época a los abusos de algunos sacerdotes contra la fe, la liturgia o la moral de la Iglesia? ¿Es ésa la tan citada “mayoría de edad” del laicado?

21 comentarios

  
Aquinate
Hace tiempo que llevo pensando en una idea: los curas que más hablan de "comunidad", de "democracia", de ser "uno más", son los que se arrogan el derecho de hacer la liturgia a su voluntad, cambiándola hasta el extremo de hacerla irreconocible, como si les perteneciera a ellos en exclusiva, y no a toda la comunidad, que es la que celebra (aunque esto lo repetirán hasta el aburrimiento). Creo que este ejemplo es sintomático de la actitud de muchos sacerdotes progres, que sienten un profundo rechazo por los movimientos, por ejemplo, que generalmente están conformados por laicos comprometidos (verdaderamente laicos, no "curas falsos" ni adictas a la sacristía).
30/01/08 3:41 PM
  
Ana_MS
Bruno:
No sabría que decirte; desde luego yo no voy a denunciar a nadie, siempre y cuando no sea del tipo pederastia o así. Tampoco creo ser quién para juzgar la fe de los demás.
Lo siento, pero yo me niego a participar en ninguna "caza de brujas" y tampoco me parece bien que se haga pues suele comenzar con algún caso y terminar siendo todos sospechosos.
Un cordial saludo.
30/01/08 4:05 PM
  
Malak
Conviene también dejar claro que siguen habiendo multitud de sacerdotes que no caen en lo descrito en este post.

Dicho eso, cuando uno observa la Iglesia Católica en la actualidad, no puedes por menos que pensar en la descripción que hacía Newman del anglicanismo de su tiempo.
30/01/08 4:14 PM
  
Aquinate
No se trata de juzgar la fe de nadie, sino la enseñanza de aquellos a los que la Iglesia ha encomendado la transmisión de su doctrina. Un sacerdote es un "ministro", es decir, un "servidor", y el pueblo espera de él que les transmita la fe de la Iglesia, no sus ideas propias. Un sacerdote que enseña una doctrina distinta de la fe de la Iglesia traiciona su ministerio y engaña a los fieles.
30/01/08 4:16 PM
  
Bruno
Aquinate:

Mi experiencia, con algunas honrosas excepciones, es la misma que la tuya.

Ana MS:

Creo que señalas un punto importante: no se trata de que nos erijamos en guardianes de la fe de los demás, sean sacerdotes, laicos o quienes sean. No tenemos derecho a meternos dentro de la conciencia de los demás.

En cambio, hay cosas que, por así decirlo, son "de todos". Por ejemplo, la liturgia: ningún sacerdote tiene derecho a inventarse la liturgia (como afirma explícitamente el C. Vaticano II), porque no le pertenece. Si lo hace, nos priva a los fieles de la liturgia y la tradición de la Iglesia y las sustituye por sus propias invenciones.

Otro ejemplo, la catequesis: si en una parroquia se imparte una enseñanza que no es la de la Iglesia, los fieles tienen la obligación (no sólo el derecho) de protestar para que eso cambie.

En esos ejemplos y en algunos otros (como la enseñanza de la moral católica o las clases de religión), se puede hablar propiamente de abusos y creo que es apropiado y necesario que los laicos, actuando con caridad, hagan valer sus derechos como cristianos a que no se deformen la fe, la liturgia o la moral de la Iglesia (por supuesto, en lo importante, tampoco hay que ser tiquismiquis).

¿No te parece?

Malak:

Me alegro de que hayas hecho esa puntualización. Gracias a Dios, conozco multitud de sacerdotes magníficos, que transmiten con entusiasmo la fe.

De hecho, tampoco quiero juzgar a los sacerdotes que cometen abusos en la enseñanza de la fe y la moral o en la liturgia. Seguro que, en general, tienen buena intención y actúan por ignorancia.
30/01/08 4:45 PM
  
nachet
No hay que tener miedo a la corrección fraterna, tal y como fue establecida por el mismo Jesucristo. Siempre con caridad, pero sin olvidar que la comunidad cristiana somos todos, y que los laicos no somos simples espectadores de los presbíteros. La doctrina que, como bien afirma san Pablo, hemos recibido (y no inventado) es nuestra más valiosa posesión, porque viene directamente de Cristo, y tenemos derecho a recibirla íntegra.
30/01/08 5:49 PM
  
Ana_MS
Bruno:
Me parece; pero también es importante tener en cuenta otras cosas, como por ejemplo la edad del que se inventa la misa. Yo no voy a amargar la vida a un anciano que le quedan "cuatro misas" (por ejemplo, el del funeral de mi abuela). Mira, lo que hago es marcharme (si puedo) a otra parroquia y santas pascuas; y los demás, que tampoco son tontos, pues seguro que hacen lo mismo. Te vas a otro sitio y se acabó.

Y en cuanto a la catequesis y las clases de religión, aquí normalmente las imparten los laicos (y además jovenes). Eso es distinto, pero siempre será mejor decir las cosas a la cara y sin organizar follón; y que la denuncia es el último recurso. Muy fuerte tiene que ser para llegar a ese extremo. Antes, pienso que es mejor intentar solucionarlo de otras maneras, agotando todas las posibilidades.
Ocurre también otra cosa, que algo que para ti es secundario, para otro (los tiquismiquis) puede ser vital. Y ya está organizada.
Un cordial saludo.
30/01/08 5:52 PM
  
Ana_MS
Nachet:
De acuerdo, pero tal y como fué establecida. No saltándose pasos y resaltando siempre la caridad, sin dejarse llevar por el odio, la ira o la soberbia.
Yo, personalmente, que quedo en decirselo a la cara y ya está; me voy a otro lugar y se acabó. Y como mucho, a algún sacerdote con quién tenga confianza.
Un cordial saludo.
30/01/08 5:59 PM
  
Bruno
Ana:

Creo que, de nuevo, añades dos puntos importantes:

1) La forma, que es esencial. Ayer recordaba Juan Antonio que Cristo dio unas normas muy claras para la corrección fraterna: primero a solas, luego con dos o tres hermanos, luego la comunidad (la Iglesia). Por supuesto, debe realizarse siempre con caridad, porque si no será contraproducente ("La ira del hombre no produce la justicia que Dios quiere").

2) Hay que sopesar si merece la pena en un caso concreto (es decir, si las posibles ventajas que se puedan conseguir compensan los problemas y dificultades que también se producirán) y si es misión de uno hacerlo o no (lo cual dependerá del caso, de la formación que uno tenga, de su vinculación con esa parroquia, etc).

En cuanto a lo de las diferencias de opinión sobre lo que es esencial, esas diferencias existen siempre en cualquier cuestión humana (desde las comunidades de vecinos a los tratados internacionales), pero eso no puede impedirnos actuar, porque entonces no actuaríamos nunca. Sí que conviene que sean cosas concretas que constituyan abusos verificables y no simples diferencias sobre el "estilo".

También hay que tener en cuenta, creo yo, que el "pasotismo" ante estas situaciones puede ser una falta de omisión, porque aunque uno se vaya a otra parroquia, los que se queden seguirán soportándolas. También tenemos un deber para con los demás, especialmente los que no tienen formación, los niños, los débiles, que no pueden defenderse ante estos problemas. Y tampoco olvidemos que también tenemos un deber para con la persona que comete los abusos, que necesita que le digan la verdad con caridad.

Un saludo.
30/01/08 6:31 PM
  
Ana_MS
Bruno:
Es cierto, tienes razón. No es justo marcharse y que los demás hagan lo que puedan, si es que pueden.
Bueno, ya comprendo que suena a excusa, pero cuando lo de mi abuela yo no era creyente. Si eso ocurriera hoy en día, algo tendría que decirle al cura.
Muchas gracias, Bruno.
Un cordial saludo.
30/01/08 7:12 PM
  
Carmen Bellver
Bruno:
Creo que olvidas un detalle. La escasa formación que en la actualidad se recibe respecto a nuestra religión y a la liturgia en concreto.

Me parece, no lo puedo asegurar, pero lo sospecho; que estos temas ni se tratan. Se sabe en líneas generales lo que es la lectura, las preces, el ofertorio, la consagración. Pero no exactamente porqué se dice una u otra oración. Porqué cambian los colores de la estola, etc.

En este sentido sólo conozco un sacerdote que sabe explicar a sus propios feligreses aquello que se está realizando. Creo que se dan demasiadas cosas por sabidas que no lo están. Y eso cada vez será más evidente.
30/01/08 7:24 PM
  
juvenal
Bruno, es terrible, porque coincide con el mensaje de la Virgen de la Salette, y la de Garabandal.

Por cierto, ¿en qué ensayo está ese pasaje de Lewis, en mero cristianismo?
30/01/08 8:53 PM
  
Bruno
Carmen:

Completamente de acuerdo. Es una pena que los propios católicos conozcamos tan poco la fe y la liturgia de la Iglesia.

Juvenal:

Es una conferencia corta que pronunció en un seminario anglicano. No la tengo en español, sólo en inglés. Se titula "Fern-seed and elephants" o "Modern Theology and Biblical Criticism", según las ediciones, y yo la tengo dentro de un volumen que se llama "Christian Reflections".

Estoy leyendo ahora mismo otro que se llama "Reflexiones sobre los Salmos", que me está resultando muy interesante.
30/01/08 9:05 PM
  
vayapues
Yo entendia que la mayoria de edad de los laicos tenia que ver con el hecho de ser testimonios de la vida nueva de Jesucristo entre la gente,y no en onvertirse en "sanedrín" de sus propias parroquias y de su propio párroco.
Pero si la energia hay que usarla para esos menesteres, pues que evangelice Zapatero y Cerolo.
31/01/08 12:48 AM
  
Bruno
Vayapues:

Sin duda, estoy de acuerdo en que la evangelización es una misión esencial de los laicos. Sin embargo, si se fija, el propio C.S. Lewis hablaba de "hacer de misionero con los sacerdotes". Es decir, si en algunas cosas un sacerdote no conoce la fe de la Iglesia o la ha abandonado, también los laicos tendrán la misión de recordársela, porque no son "cristianos de segunda".

Por otro lado, una persona "mayor de edad" no sólo tiene obligaciones (en este caso, de evangelizar), sino también derechos (en este caso, de recibir una enseñanza y participar en una liturgia que sean verdaderamente las de la Iglesia y no la invención de un señor en particular) que puede y debe defender.

Un saludo.
31/01/08 10:35 AM
  
juvenal
Bruno, esos ensayos, o parte de ellos están en un librito, que en español lleva por título de El Perdón y otros ensayos cristianos, de la editorial Andrés Bello. Lo digo por si no te quieres dar el trabajo de traducir.
Y me temo que Lewis veía en eso algo fundamental, y que era lugar común en muchos de sus ensayos, en su libro sobre la oración, Si Dios no escuchase, editorial Rialp, llega a decir tratando de la liturgia, que estaba harto de las variaciones, aligeramientos, diversiones, que los ministros anglicanos introducían, que la imensa mayoría sólo quiere "usar la liturgia" para dar culto a Dios, y que los caprichos del ministro hacían que los fieles se fijasen no en el culto sino en el propio ministro. Él decía al respecto que si los pastores se dispersaban por el horizonte, creía que el único remedio era que las ovejas se apiñaran y se pusieran a balar, a ver si así volvían.
Es decir la misma idea de evangelizar a los sacerdotes.
31/01/08 11:03 AM
  
Bruno
Juvenal:

Gracias por la referencia. Muy buena la imagen de las ovejas balando para que vuelvan sus pastores.

En las "Cartas del Diablo a su sobrino" trata también, de forma muy fina, el tema de inventarse la liturgia en cosas fundamentales y elegir lecturas que no son las del leccionario. Al final, todo gira en torno a las tres o cuatro ideas favoritas del inventor y se pierde la riqueza inmensa de la Palabra de Dios y de la liturgia de la Iglesia.
31/01/08 11:13 AM
  
la palabra
Y les dijo: "La mies es mucha, y los obreros pocos. Rogad, pues, al Dueño de la mies que envíe obreros a su mies.
Id; mirad que os envío como corderos en medio de lobos.
No llevéis bolsa, ni alforja, ni sandalias. Y no saludéis a nadie en el camino.
En la casa en que entréis, decid primero: "Paz a esta casa."
Y si hubiere allí un hijo de paz, vuestra paz reposará sobre él; si no, se volverá a vosotros.
Permaneced en la misma casa, comiendo y bebiendo lo que tengan, porque el obrero merece su salario. No vayáis de casa en casa.
En la ciudad en que entréis y os reciban, comed lo que os pongan;
curad los enfermos que haya en ella, y decidles: "El Reino de Dios está cerca de vosotros."
En la ciudad en que entréis y no os reciban, salid a sus plazas y decid:
"Hasta el polvo de vuestra ciudad que se nos ha pegado a los pies, os lo sacudimos. Pero sabed, con todo, que el Reino de Dios está cerca."
Os digo que en aquel Día ha...
31/01/08 11:46 AM
  
la palabra
En Holanda, en Nijmegen, en la iglesia de los frailes agustinos, cada domingo la misa es presidida conjuntamente por un protestante y por un católico, que se turnan entre la liturgia de la Palabra y el sermón, y la liturgia eucarística. El católico es casi siempre un simple laico, y frecuentemente una mujer. Para la plegaria eucarística, en vez de los textos del misal se prefieren los textos compuestos por el ex jesuita Huub Oosterhuis. El pan y el vino lo comparten todos.
¿Consentira esto la iglesia jerarquica? Y la Iglsia en Cristo?

31/01/08 12:20 PM
  
Aquinate
Hombre, por lo que comenta usted, eso de misa no tiene nada. Si celebran ese acto en vez de la misa, están privando a los fieles de algo que por derecho les pertenece: pero ya hemos dicho que imponer sus propias excentricidades a los sufridos fieles es moneda corriente entre los "avanzados". De todos modos, lo que describe se aleja tantísimo de una celebración eucarística, que no creo que engañen a nadie, y los que asistan, que serán cuatro, ya sabrán a lo que van. Que los agustinos se presten a acoger algo así dice muy poco de ellos. Parece que la Iglesia holandesa sigue sin darnos sorpresas.
31/01/08 1:02 PM
  
nachet
"¿Consentira esto la iglesia jerarquica? Y la Iglesia en Cristo?"
Comentario por la palabra 31.01.08 @ 12:20

la Iglesia de Cristo no; la jerárquica, que es la misma, tampoco.
Seguro que la "iglesia de Oosterhuis" sí.
31/01/08 10:36 PM

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