¿Una tercera república católica en España?

El otro día, me llamó la atención algo escrito en Twitter por D. Jaime Mercant Simó, un benemérito sacerdote al que probablemente conozcan los lectores porque ha publicado varios artículos de opinión en InfoCatólica y escribe mucho en las redes sociales. Don Jaime estaba (como es lógico) muy desilusionado porque el rey Felipe VI y la reina Leticia habían aceptado la Presidencia de Honor del “Top Líderes LGBTI+” de no sé qué revista.
Comprendo muy bien la desilusión de D. Jaime, que se une a una larga serie de desilusiones con la dinastía actual, como la firma por el rey anterior de las leyes del aborto (¡con la bendición de la Conferencia Episcopal!). Lo que me extrañó más fue que el sacerdote se desahogara con un “¡Abajo el Borbón! ¡Viva la Tercera República! ¡Viva Cristo Rey!”.
Como es lógico, se pueden hacer muchas reflexiones sobre estos temas y caben opiniones prudenciales muy distintas. Es cierto, además, que, desde el punto de vista católico (es decir, el punto de vista de la Verdad con mayúsculas), las cosas están muy mal en nuestra sociedad, que podría definirse como la sociedad de la apostasía, la amoralidad, la irracionalidad y el suicidio cultural y demográfico. En ese sentido, es comprensible el deseo de hacer tabula rasa y empezar de nuevo. De hecho, D. Jaime se refiere con lo de la “tercera república” a una hipotética república presidencialista católica.
No obstante, creo que conviene ser realistas y tener en cuenta al menos tres cosas. En primer lugar, que, si bien es cierto que estamos muy mal, no es menos cierto que las cosas pueden empeorar mucho. Antes de sugerir la abolición de la monarquía o el sistema político actual hay que analizar si lo que los sustituiría podría ser mucho peor aún. No sea que salgamos de Málaga y acabemos en Malagón. O en el paredón.
Asimismo, la probabilidad de que ahora mismo se instaure un régimen más o menos católico en España es prácticamente nula. A fin de cuentas, la población hace bastante tiempo que ya no es católica en ningún sentido significativo de la palabra. Antes de que algo así fuera posible o incluso imaginable, sería necesaria una gran evangelización del país, que debería hacerse persona a persona. Mientras eso no se haga, esperar a corto o medio plazo un ordenamiento político verdaderamente acorde con la ley natural y la doctrina católica será, en el mejor de los casos, construir castillos en el aire. Con el peligro, además, de que nos distraiga de lo que verdaderamente está en nuestra mano, que es precisamente esa evangelización.
Finalmente, no debemos olvidar la desastrosa, sangrienta y destructiva historia de las repúblicas españolas. Durante la primera, España se desmembró por completo, se convirtió en el hazmerreir del mundo y faltó muy poco para que las grandes potencias europeas se la repartieran en protectorados. En la segunda, el país quedó en manos de tres variantes (anarquismo, socialismo y comunismo) de una de las ideologías revolucionarias más destructivas de la historia, se desató una persecución religiosa que dejó chicas a las de la antigua Roma e hizo falta una terrible guerra civil para ponerle fin. Teniendo en cuenta este historial, yo diría que desear una tercera república es tentar al destino y, en el caso particular de los católicos, una temeridad mayúscula.
100 comentarios
Bruno, tu sinceridad es absoluta, y te lo agradezco. Te equivocas.
Abajo la cobardía, ¡Visca Dom Jaume Mercant i Simó!
Porque si hay algo indiscutible que queda probado en la historia de España es que el régimen republicano (que no es malo en sí mismo) por lo que sea aquí no funciona. No sólo eso, es que es además gravemente nocivo.
La monarquía a lo largo de la historia nos ha dado tanta unión y gloria como mediocridad y desidia; hemos tenido reyes santos (Fernando III, Isabel la Católica...), hemos soportado reyes grotescos (muchísimos a elegir)... Pero al menos -hasta ahora- no se ha descompuesto el país ni se le ha puesto en situación de guerra civil.
Nunca más la república.
“Jesús, algunos dicen que ya es hora de quitar al rey y montar una república católica en España.”
Jesús (desde la cruz, con una sonrisa tranquila):
“Ah... ¿Una república católica... en España? Camilo, cuando los hombres intentan arreglar la historia sin consultarme, suelen conseguir algo peor. ¿Por qué no me dejan a mí el guion?.”
A mí me ha dado bastante grima ver a la reina en la misa de inauguración de pontificado vestida de blanco como las "soberanas católicas" cuando ni tan siquiera se santigua en las celebraciones litúrgicas.
Para instaurar en España un estado confesional católico, en forma de república o monarquía, tendría que producirse un golpe de estado que lo impusiera por la fuerza o bien, por vía constitucional, debería haber dos tercios de diputados afines a HazteOír u organizaciones similares para llevar a cabo una reforma de la Constitución que estableciera el catolicismo como religión oficial y un referéndum que ratificara la nueva Carta Magna.
Digo, si estamos en esta situación en la que desde la silla de Pedro se legitima la acción política de estos grupos anticristianos como si fuera algo bueno y normal propio de la sociedad plural y bla, bla, bla.... Entonces, es imposible aspirar a tener un régimen cristiano, ni monárquico (y tengamos claro que la monarquía real no existe, tenemos una república adornada con corona para salvar las formas) ni republicano.
Mientras la Iglesia priorice la defensa de la pluralidad política (entiéndase nuestros sistemas actuales de división del pueblo y descristianización) sobre su misión sagrada de enseñar el Evangelio, no hay salida, ni con corona ni sin corona.
Cuando desde la Iglesia y desde los púlpitos se ha permitido y aplaudido que la gente se hiciera "socialista", desde ese momento (retrocedamos al CVII y a Tarancón) nos hemos puesto la soga al cuello.
Cita de Tarancón: " España necesita un buen baño de socialismo".
Si como sociedad cristiana nos hemos tragado el camello (Derechos del Hombre masónicos por encima de los Mandamientos de Dios), ¿Cómo es que ahora pretendemos colar el mosquito?
Sería hora ya, desde mi punto de vista, de ir advirtiendo del peligro de excomunión a algún que otro rey de estos que se dicen católicos pero están con el enemigo.
En resumen, creo que la Iglesia necesita dar un giro de 180 grados en su actitud hacia el "mundo moderno" si queremos mejorar algo.
Mossèn Mercant Simó es un raro especimen no contaminado por la progresía como estamos, en cierto modo, todos los demás. Su temperamento es sanguíneo y, por lo tanto, no está llamado a componendas ni a hablar bajito, cosa que a mí me encanta.
Se le puede seguir a pies juntillas en cuanto a lo doctrinal y está más que preparado por sus estudios, de manera que, cuando lo veo, le encuentro cierto parecido con Santo Tomás de Aquino.
Dicho esto, y llevado por el mundo sin salida histórica dónde vivimos, dice lo de la república porque las monarquías son del pasado y ese es el problema de los carlistas, que con su lema: "DIos, Patria, Rey", ya no van a ninguna parte porque ese rey es utópico.
También la república de Mossèn Mercant lo es. De manera que nos quedamos sin propuestas.
Solo a Mariner se le puede ocurrir que eso lleve a algún lado.
Las dos repúblicas españolas fueron un auténtico desastre, pero también lo es la Madre de todas las Repúblicas, es decir, la francesa.
Ya sé que a Cortés le ayudó mucho la República de Tlaxcala, que es como la llamaban los españoles, pero es que entonces se llamaba así a toda sociedad gobernada por un consejo y no por un rey. Ese tipo de repúblicas anteriores a la Revolución Francesa ya no son posibles.
El conservadurismo económico de la derecha y el sectarismo de la izquierda ha hecho que España trague carros y carretas, y las que tragará...
Lo que queda de la monarquía es cierta añoranza y esperanza de futuro, pero el presente es tan negro y dañino como la partidocracia
Uno. La diferencia entre lo hipotético especulativo, o el deseo, y la realidad. Y sospecho que F. Lassalle no estaba pensando en la sana metafísica realista del ente.
Dos. Lo material como lucha de poderes o clases. Realidad no desdeñable, pero que en ningún caso agota la realidad
Tres. Me apuesto quinto de cerveza y pincho de tortilla a que quien escuche esto hoy en día lo interpretará como que esa constitución material surge espontáneamente fruto de la libertad del hombre moderno, jeje.
Por otro lado, me ha recordado a Jovellanos cuanto enfrentaba a la Constitución como artefacto diseñado con la Constitución histórica.
Se fumaba en el cine, en el teatro, en el autobús, en los bares y restaurantes y en las Cortes, y cuatro iluminados han eliminado el tabaco de los espacios públicos cerrados y semiabiertos; los borrachos campaban a sus anchas por las carreteras, hoy se les persigue penalmente; las mujeres tienen igual protección legal (o más) que los niños; hay un límite de retirada de dinero del Banco so pena de inspecciones; está prohibida la caza, excepto con permisos y sin vedas; está prohibido hacer barbacoas y fuegos para quema de rastrojos en el campo, excepto con permisos profesionales expresos; está prohibido generar tu propia electricidad sin rendir cuentas a nadie; está prohibido sacar agua de pozos, talar árboles o roturar en tu finca sin autorización....
Todas estas cosas, tanto en lo general universal como en lo particular hispánico, se ven más claramente a la luz de nuestra Tradición política, la Tradición de las Españas.
Saludos
Porque el recorte de libertades que apunta Mariner se da en 2025 en cualquier sociedad, desde la China, por una razón, hasta la norteamericana por otra.
Tomemos el índice de natalidad y veremos que ha bajado en todas partes. Los chinos lo hicieron por ley, la famosa "Ley del hijo único", que luego fue a dos, luego a tres y ahora ya les encantaría la familia numerosa; en Occidente no recurrieron a la ley sino a la presión por las políticas feministas, las supuestas libertades y "mi cuerpo es mío" y siguen obsesionados por el malthusiano y que vengan los emigrantes a cubrir huecos. Pero el caso de la caída de la natalidad es terrible en todos los países menos en los más pobres, los africanos, a los que nadie puede ofrecer una esperanza de vida muy larga ni ninguna ventaja por el hecho de tener solo un hijo.
La esperanza de vida alrededor de los ochenta y pico años y la libertad que conlleva no tener hijos son las trampas de todos los países desarrollados, independientemente de si son democráticos o no.
La frase completa sería: "Pretender que una sociedad y los hombres que la integran pueden cambiar y transformarse sobrenaturalmente en función del marco político o por la acción del poder político es una forma de pelagianismo"
Saludos.
El "castrado político" e inane funcionario de la Zarzuela, Felipe de Borbón, y Leticia, la funcionaria adjunta, no se cansan de seguir torpemente las agendas globalistas y woke; les interesa más esto que España. Sin embargo, siguen siendo legión los obtusos patrioteros zarzueleros y los católicos liberales que están empecinados en no quererlo ver.
Yo, como don Blas Piñar, prefiero una república presidencialista, pero católica y con unidad de poder, que una monarquía inauténtica, como esta pestilente caricatura liberaloide que padecemos.
¡Abajo el Borbón!
¡Viva la Tercera República!
¡Viva Cristo Rey!
De hecho, sostengo la teoría de que, pese a los aspavientos republicanistas que, como concesión a su propio público, protagonizan de tanto en tanto las fuerzas herederas del Frente Popular, éstas en el fondo están tan contentas como el propio PP con el rendimiento que le sacan al Rey (gran "normalizador" simbólico al medio y largo plazo de toda fechoría perpetrada por las fuerzas sistémicas que dominan el pútrido régimen del 78). No creo que deseen bajo ningún concepto destronar al Rey, y creo que serían más tontos que malos si lo desearan.
Y parto para fundar tal opinión de una referencia habitual en los escritos del padre Iraburu (aunque referida, en su caso, al asunto mucho más grande y trascendente que contiene a todos los demás, este incluido: la Apostasía de la antaño ferviente Cristiandad europea y occidental): Corruptio optimi pessima.
¿Qué es peor y hace más daño?
a) Una República con una Presidente bisexual retatuada de arriba abajo que se "case" por lo civil con su amante inmigrada ilegal transexual y alquile un vientre del Tercer Mundo para tener una niña fabricada en laboratorio con sus cualidades preseleccionadas. Todo ello tras una vida de promiscuidad plena en relaciones poliamorosas sucesivas (a veces incluso simultáneas) de ambos sexos, la cual deje un reguero de abortos detrás. Bueno, y que desdeñe de manera ostentosa y hasta hostil los símbolos y festividades cristianas, no acuda ni a los funerales de Estado católicos, felicite el año nuevo chino y el Ramadán pero no la Navidad o la Pascua, y lleve a todas partes el pin de la Agenda 2030 o sucesor.
b) Una Monarquía con un Rey o Reina que haga más o menos lo mismo que he descrito antes (haciendo Grande de España a Greta Thunberg). Pero con el añadido de que al hacerlo mancilla no solo su bautismo (si es que lo recibió, que igual es mucho suponer), sino la memoria de todos los Reyes cuya sangre portara tal monarca (empezando por Pelayo, San Fernando III, los Reyes Católicos o Felipe el Prudente).
Evidentemente, no hemos llegado a ese escenario, pero nos vamos acercando pasito a pasito. Estoy convencido de que, en su loca competición por "actualizarse", en algún momento las casas reales (no solo la española) se esforzarán por normalizar escenarios tan y más atroces y extremos que el descrito.
Una tradición vuelta del revés contra sí misma es peor incluso que la ruptura abrupta y hostil con tal tradición; y puede ser más útil a los enemigos jurados de la misma. A veces renta más al Maligno disfrazarse de Anticristo que mostrarse a las claras como Dragón o Bestia.
Por otra parte, y sin reducir todo a causas materiales, el atraso de España en su desarrollo socioeconómico tuvo algo que ver con nuestras contiendas civiles. Y ese atraso está volviendo, en el contexto de la actual depauperación y retroceso del nivel de vida de las clases medias, sin que parezca haber motivos para creer que una Jefatura del Estado formal monárquica o republicana marque ninguna diferencia al respecto. Ya somos una Monarquía bananera, y si llegamos a sufrir otro enfrentamiento fratricida, bien podría suceder tal cosa bajo un Rey. Que, por cierto, ¿a qué bando creen que apoyaría desde el principio el actual, y previsiblemente su hija y Princesa de Asturias? IHS
Pero no, para muchos parece que es mejor vivir en El país de las Maravillas, en los Mundos de Yupi, en una realidad inexistente, esperando que algo mágico ocurra y nos haga de nuevo ser de verdad un país católico.
Estoy básicamente de acuerdo con su artículo, PERO el argumento de las desastrosas repúblicas I y II , no es válido. Porque todos los Borbones, salvo parcialmente Carlos III, fueron nefastos y suman más años que las dos repúblicas.
Que asuma un rey católico.
Seamos serios, si Noruega, Suecia, Dinamarca, el Reino Unido, Bélgica, los Paises Bajos u Holanda, que ya no sé cómo se llama, y España se volvieran repúblicas de la noche a la mañana, ¿en qué cambiarian? Pues en "Pompa y circunstancia", como bien vio Elgar, y nada más. Se acabarían las pomposas bodas reales, los actos presididos por los reyes y los chismes reales, que nutren a cierto periodismo amarillista, pero poco más. La presencia de reyes no contiene las leyes laicistas, ni el aborto, ni la eutanasia, ni el anticristianismo rampante.
Si alguien ve alguna diferencia entre Largo Caballero, en la II República y Pedro Sánchez en la Monarquía Borbónica, que me explique en qué son diferentes.
Los vandeanos y los carlistas decimonónicos son una cosa, el caso de los cristeros fue distinto. Los tres fueron movimientos reaccionarios, pero los cristeros no combatieron en nombre de más Rey que Jesucristo porque ni siquiera proponían ningún candidato determinado para ser presidente en contra de Plutarco Díaz Calles. Combatieron por la abolición de una constitución y, sobre todo, de una ley penal tan hostiles al catolicismo que, practicamente, lo impedían.
La Constitución Mexicana de 1917 era infumable y ahora está tan alterada que, sin haber sido abolida, parece otra. Yo, hace muchos años conseguí la original, está en mi casa y, como estoy ausente, no puedo poner de memoria la cantidad de artículos anticatólicos que contenía, pero volvía una y otra vez sobre lo mismo y no hay ninguna otra constitución en el mundo que mencione la religión, a los curas y los recortes a los católicos en tantísimos artículos, de modo y manera que parece una constitución cuya única finalidad es acabar con el Catolicismo. Tan es así que la Constitución de la II República Española, que se inspiró en la mexicana, no se atrevió a llegar tan lejos porque aquello suponía declar la guerra a los católicos abiertamente. Así que los cristeros se levantaron contra eso, no contra ninguna república ni pensaban en ningún rey.
Los vandeanos y los carlistas fueron, además de católicos, realistas, pero los cristeros no, pero a personas que se levantaron al grito de ¡Cristo Rey! no se les puede decir que fueran menos católicos que los otros dos por no ser realistas.
Estamos entrando de lleno en la Gran Tribulación del Juicio de las Naciones. La guerra arrasará parte de Europa y otras naciones pero el Aviso (Garabandal) detendrá todo.
Dios intervendrá y es mi opinión que en España tendremos un gobierno que trabaje para restaurar todas las cosas en Cristo, lema de San Pio X.
Tras el Aviso, la imposibilidad técnica que mencionas, Bruno, puede desaparecer en cuestion de semanas. Y veremos que hace el rey en ese contexto con un posible nuevo gobierno restauracionista, o simplemente católico.
De todas formas, yo me imagino más un reino como el de teimpos de Franco sin rey...porque como dices, la república en España es cosa horrorosa
Le saludo con todo afecto y le pido su bendición.
Felipe II prefería no ser rey a reinar sobre herejes, pero era Felipe II.
Pero por qué tenemos que tener en España una monarquía católica, usted en su casa tenga una alfombra de oso polar siberiano si le apetece, pero en su país confórmese con un trozo de césped sintético.
Masivo, Gran Bretaña es un Estado confesional anglicano. Los católicos aguantamos allí lo que no está escrito.
Señores, a la Tercera (República) va la vencida. No habrá Franco y Ejército que les restaure (primero, saneando la sociedad para que el sucesor a título de rey tuviera un plácido mandato y, luego, pactando con el Diablo para que le fuera placidisimo).
Son constantes la falta de caridad de algunos y el narcicismo que en muchos curas se da, incapaces de recibir ningún tipo de crítica incluso presentando evidencia.
Todo esto potenciado por una lógica ideológica en muchos tuiteros que lleva al apoyo absolutamente incondicional de ciertos perfiles, sin importat que lo que digan pueda estar errado. Pienso en varios casos, muchas veces implicando a sacerdotes.
Los borbones no fueron mas ni menos desastrosos que los austrias o cualquier otra dinastía. Esa idea es simplemente infantil o interesada.
Como decía el gran Jorge Ferro, para que haya Cristiandad debe haber cristianos
----
LF:
Elemental, querido Watson. Y eso es lo que no les acaba de entrar en la cabeza a los que quieren que regresa una Cristiandad sin cristianos que la sustenten. Ni cristianos ni Iglesia, que se ha desmarcado de aquella época histórica.
Masivo: Ya sabemos que la heroicidad no es lo suyo y nunca se le podrá coger en renuncio, cosa que podría pasarnos a los demás, pobres mortales. Apuntarse al anglicanismo en Inglaterra porque el rey sea anglicano es de risa, Mª Luisa, porque eso ya carece de importancia teniendo en cuenta que hasta hubo un primer ministro hasta hace poco que es hindú. En cambio desde la primera Acta de Supremacia de 1534 hasta el Acta de Alivio Católico de 1829 (si sabes contar, cuenta) ser católico en Inglaterra significaba ser un paria porque al ínclito Enrique VIII le dio por cambiar la fe de todo un país de la noche a la mañana. El Reino Unido de la Gran Bretaña ha pasado, sin que el rey cambie de religión desde 1534, de ser exclusivamente anglicano a ser un tutti frutti.
Un estado nunca es meramente cristiano, todas las monarquías dicen ser de una confesión cristiana determinada, lo que antes suponía persecución para los cristianos de otras confesiones y ahora ya no supone nada, ni siquiera para la supuesta confesión del rey.
La Monarquía Hispánica es una creación de Isabel y Fernando y luego de los Austrias, los Borbones fueron absolutistas hasta que la Revolución Francesa les volvió liberales a la trágala.
Todo lo bueno que tienen los Borbones en América es cuando no se metieron a reformar lo que los Austria habían hecho, todo lo malo son sus reformas.
Si estudias a los franciscanos de México del S. XVI y a los de California del S. XVIII verás que los primeros no fueron molestados por ningún gobierno civil, mientras que los segundos se tuvieron que poner de perfil con los gobernadores ilustrados.
"yo aconsejo a todos los ciudadanos que se adhieran públicamente..."
El cinismo es como una enfermedad de la piel particularmente repugnante. No tiene sentido exhibirla y menos aún presumir de ella. Lo conveniente es buscar tratamiento discretamente.
Ánimo, que tiene cura.
"¿Monarquía catolica?"
No creo que nadie piense que lo que tenemos es una monarquía católica, más que en el sentido nostálgico del término. Es decir, lo que fue y ya no es.
"no me parece mal en el plano teórico, la discusión sobre que es mejor si una monarquía atea o una república cristiana o viceversa"
Las discusiones interesantes siempre están bien. Este blog se creó para eso.
En cualquier caso, en principio siempre es mejor una república cristiana que una monarquía atea. La crítica no va por ahí, sino más bien sobre si es algo posible o incluso imaginable una república cristiana en España actualmente y sobre si es prudente destruir sin tener nada mejor y posible con lo que sustituir lo que se destruye.
No entiendo tu razonamiento ni solución.
La monarquía actual ha sido nefasta, pero traer la república volvería a desatar todavía más a los rojos a hacer males. Está bastante claro. Hay que tener cuidado de no hacer el botarate que hizo Ortega trayendo la república para luego arrepentirse y reconocer la salud indecente de la sociedad franquista.
Lo del latifundista conservador monárquico es otro de los tópicos típicos del católico rojete. Fueron los liberales desamortizadores los que robaron al pueblo para hacer latifundistas. Los rojetes y nacionalistas son los que más roban, los hechos cantan, el pp también es rojete.
Hoy casi todo el mundo hemos perdido la aguja de marear y somos el carajo de la vela, en el peor sentido que se le pueda dar, nos vamos a los arrecifes o a los bajíos manque sople sotavento.
"Saludos a todos"
Me alegro de verle por aquí.
"Quiero subrayar que lo que yo defiendo es una república monárquica; esto es lo que quiere decir "unidad de poder""
Entonces hizo un poco de trampa, porque habló de una "Tercera República" y eso solo puede significar un régimen análogo al de la Primera República y la Segunda República.
Si solo hablaba de "república" en el viejo sentido de res publica, que puede referirse igualmente a una monarquía que a una democracia o una aristocracia, no tenía sentido lo de "Tercera", porque no ha habido solo dos anteriormente en España.
Un cordial saludo y gracias por comentar.
En México el masonazo de Calles estaba gobernando contra el catolicismo en un país dónde el 100% eran católicos. Y fueron sucediéndose masón tras masón a través del PRI, por lo que el país y sus jefes eran opuestos. Dada la época y el tipo de país la insurrección estaba servida y es posible que hubieran ganado si la Iglesia no se mete por medio con la cuestión de los famosos Arreglos. De manera que con un compromiso de nada, porque la Ley Calles siguió vigente hasta 1990, solucionaron el conflicto, es verdad que la tal ley era impracticable, pero la dejaron colgando como Espada de Damocles.
Yo leí cartas de diputados del PAM que solicitaron a Salinas de Gortari la abolición de esa ley porque estaba vulnerando los DDHH de la mismísima ONU, la cual, ¡oooooyyy!, hasta entonces no se había fijado en ese pequeño detalle.
Los clérigos no podían votar, tenían que ser "mexicanos de nación", tampoco podían recibir herencias más que de familiares directos, no podían reunirse ni para hablar de la Santísima Trinidad, tampoco podían editar nada, ni tener hospitales, ni siquiera Cáritas, por su origen, era aceptable. Nunca me he enterado cuándo pudieron las órdenes religiosas volver a México-si es que han vuelto-ni como fueron soltando poco a poco la cuerda sin cambiar la ley penal de "delitos religiosos". Esa ley tuvo la misma vigencia, año arriba o abajo, que la misma URSS. Este dato es practicamente desconocido por casi todos, incluso por la mayoría de los mexicanos.
Mira, la IA me ha echado una mano, resulta que Cáritas Mexicana fue fundada ¡el 15 de julio de 1973! que debió ser el momento en que al PRI le pareció bien saltarse la Ley Penal que prohibía tal cosa.
Si no recuerdo mal, cuando el Papa Juan Pablo II fue a México en 1979, le pusieron una multa por ir con sotana, atuendo que estaba prohibido por la ley. Solo era un acto simbólico, claro, porque le había invitado el gobierno mexicano, pero el caso es que le pusieron la multa para que quedara claro que la ley seguía en vigor.
Y es exactamente igual al folleto editado en Holanda por aquel sacerdote, por lo que es fiable al 100%.
El Reino Unido emitíó muchísimas leyes contra católicos y por eso se ve que las muertes fueron durante los reinados de Enrique VIII, Isabel I y Jacobo Estuardo y luego cesaron porque aparecieron sucesivas leyes de "alivio" que fueron cambiando la pena de muerte por otro tipo de penas hasta acabar con las últimas en 1829, siempre mediante juicio previo.
En cambio en México nunca hubo ninguna ley que llevara al patíbulo, poquísimos juicios (siempre en capitales) y las muertes fueron durante el periodo Calles por el sistema de aquí te pillo, aquí te mato. Y, consecuentemente, tampoco hubo leyes de "alivio" posteriores sino concesiones que no puedes rastrear en ninguna parte. Un trabajo muy sucio, pero que muy sucio, que permitió a México gallear durante el franquismo en la mismísima ONU que, por lo visto, no se enteraba de la fiesta hasta que los diputados del PAM amenazaron a Salinas de Gortari con dar a conocer la Ley Penal vigente que vulneraba los DD.HH.
Y otras tantas q eran buenas, monarquia, aristocracia y republica.
No recuerdo bien
Una republica con un gobierno de derechas tal vez...
Las "trampas" las ha hecho usted conmigo, aunque con formas muy finas y "amables". Su intención parece que no era otra que la de desprestigiarme y confundir al personal. No me esperaba esto de usted y de InfoCatólica.
Por cierto, yo no estoy "desilusionado" con el Funcionario de la Zarzuela, básicamente porque nunca he estado ilusionado con él.
In Christo.
Depuesto el rey, se acabó la ignominia. Dios proveerá.
La economía política del imperio español en América en el siglo XVIII. Regina Grafe
youtube.com/watch?v=aFEvHiVK9xY
En absoluto absolutismo (valga la redundancia, jeje), gran autonomía, impuestos proporcionados, cuentas saneadas ...
Eso sí, a quienes no les gustaban las reformas era a los corruptos, a las oligarquías, a quienes gustaba hacer y deshacer a su antojo. Como los mantuanos nuevagranadinos, que rechazaban visceralmente el Código Negro de Carlos IV (hasta Carlos IV podía hacer a veces cosas medio bien, jeje) y que acabaron propiciando una guerra separatista en la que nadie pensaba. Ejemplo de ello es el propio padre de Bolivar, violador y explotador consumado, a quien nadie fue capaz de meter mano, incluso ciertas autoridades eclesiásticas.
youtube.com/watch?v=BrK4Et0-M00
Tu análisis histórico refleja una preocupación legítima por los riesgos de los cambios políticos profundos. Sin embargo, creo que identificar "república" con caos, persecución y guerra civil es, cuanto menos, una generalización excesiva que no se sostiene si ampliamos el enfoque.
Primero, no toda forma de república lleva al desgobierno o a la anarquía. Las experiencias de la Primera y Segunda República en España estuvieron condicionadas por múltiples factores: inestabilidad económica, tensiones sociales ya acumuladas, una Europa convulsa, y unas élites políticas poco cohesionadas. No fue el “modelo republicano” en sí el causante del desastre, sino el contexto y la incapacidad de las instituciones para gestionarlo.
Hoy, más de 90 países del mundo son repúblicas parlamentarias estables —Alemania, Italia, Irlanda, Finlandia, por citar solo algunas de tradición cristiana y raíces europeas—, y en ninguna de ellas hay ni persecuciones religiosas ni guerras civiles. De hecho, los valores republicanos modernos (separación de poderes, legalidad, participación democrática, respeto a los derechos fundamentales) no son anticatólicos por definición. Dependerá siempre del marco constitucional y del espíritu del pueblo que los habita.
Segundo, la monarquía española, con todo el respeto que merece como institución, no ha estado exenta de crisis o escándalos que también han dañado la imagen del país. Y sin embargo, nadie sensato propondría abolirla por completo solo por errores históricos. Lo mismo debería valer para cualquier régimen político: ni demonizar, ni idealizar.
Y finalmente, como católicos, nuestra fe no está atada a una forma concreta de gobierno. Lo importante es que el orden político favorezca el bien común, proteja la libertad religiosa y la dignidad de la persona. Si un día España adoptase una república constitucional seria, ordenada y respetuosa con los derechos fundamentales (incluidos los de los creyentes), no tendría por qué repetirse ninguna tragedia.
Tentar al destino, como dices, sería más bien repetir los errores del pasado sin aprender de ellos… pero avanzar con madurez, justicia y sensatez no es temeridad, sino responsabilidad.
Un saludo
"la serpiente del Génesis ha comido mucho y se ha convertido un enorme dragón rojo de tanta sangre de tanta sangre de mártires que ha ingerido. Ya no es esa serpiente pequeñita del Génesis subida en un árbol, esa era la serpiente del Génesis"
Me ha llamado mucho la atención esa imagen. Nunca se me había ocurrido pensar algo así.
Quiero pedirle disculpas porque veo que mi escrito le ha causado ofensa. No había nada más lejos de mi intención ni entiendo bien cómo ha podido ocurrir, pero así ha sido y, por lo tanto, toca que me disculpe. Supongo que alguna expresión desafortunada por mi parte habrá dado la impresión de un ataque personal contra usted que era completamente ajeno a mi intención. Lo siento mucho.
Mi único deseo con el artículo era mencionar un tema interesante que usted había planteado y proponer algunas matizaciones. Las matizaciones eran, me parece a mí, de sentido común (la advertencia chestertoniana contra el destruir una valla o una farola si uno no tiene con qué sustituirlas, la triste constatación de que la situación actual no ofrece muchas esperanzas de que se cree un régimen católico y el recordatorio de que las repúblicas que ha habido en España han sido evidentemente desastrosas, en especial para los católicos), así que supuse que usted las compartiría en buena parte. Igual, por otro lado, que yo no puedo por menos de estar de acuerdo con que una república católica es preferible en principio a una monarquía no católica (otra cosa es la probabilidad de conseguir lo primero en estos tiempos). En fin, sería muy triste que el ambiente enrarecido de internet impidiera que dos católicos puedan discutir amablemente y sin acritud sobre cuestiones que son en gran medida prudenciales.
No creo haberme hecho acreedor a las comillas que ponen en duda la sinceridad de mi amabilidad y mi buena fe o a la indicación de que, en realidad, deseo desprestigiarle, la verdad. He rebuscado en mi conciencia y no encuentro ni rastro de ninguna de las dos cosas. Pero, de nuevo, puesto que claramente le he causado ofensa, aunque haya sido sin querer, le ruego que me disculpe.
Aprovecho para pedirle su bendición,
"Se trata de que haya algo distinto de lo que hay ahora. No nos pongamos con precisiones de diccionario"
No son, creo yo, precisiones de diccionario. Nunca se trata simplemente de que haya "algo distinto" de lo que hay, por la sencilla razón de que ese algo distinto puede ser aún peor. Hay que ser prudentes siempre.
"Depuesto el rey, se acabó la ignominia"
Se acabó... o puede que vengan más y peores ignominias. No seamos ingenuos.
"creo que identificar "república" con caos, persecución y guerra civil es, cuanto menos, una generalización excesiva que no se sostiene"
Por supuesto que no se sostiene, por eso no lo he hecho. La Iglesia siempre ha considerado que cualquiera de las tres formas clásicas de gobierno (monarquía, aristocracia o república/democracia) y sus formas mixtas son, en principio válidas y es una cuestión prudencial cuál resulta más apropiada en cada ocasión.
No creo que una república en sí misma sea algo malo. ¿Cómo podría? Ha habido excelentes repúblicas. Ojalá tuviéramos un presidente como Gabriel García Moreno.
"Si un día España adoptase una república constitucional seria, ordenada y respetuosa con los derechos fundamentales (incluidos los de los creyentes), no tendría por qué repetirse ninguna tragedia"
Es que eso es una petitio principii. Lo que se discute es la probabilidad de que se adopte algo así, que, a mi entender y ahora mismo, es prácticamente nula. La historia, por supuesto, no nos determina, pero sí nos condiciona. Por eso prescindir de esa historia puede ser temerario. En España, por nuestra historia, se asocia república a anticlerical, laicista y antitradicional. Por lo tanto, si se eligiera ese tipo de organización política, lo más probable es que se hiciera con una motivación anticlerical, laicista y antitradicional.
¿Es absolutamente necesario que así sea? Claro que no. Pero tampoco es absolutamente necesario quemarse si uno juega con fuego y eso no lo hace menos imprudente como norma general.
"último reducto nominal de contención, la monarquía"
En efecto, se trata de un reducto nominal, pero, cuando las cosas están muy mal, incluso un reducto nominal puede ser mejor que nada.
Por otra parte, confío en que no sea el "único". Hay muchas sanas tradiciones en España que siguen sosteniéndola, aunque estén debilidad. En sentido estricto, además, ningún reducto humano podría ser el único, porque, al final, el verdadero reducto o baluarte siempre es Cristo, Señor de la Historia, que cuida de su Iglesia y no nos desamparará.
"El malminorismo borbonico de siempre, conservadurismo derechista burgués. Miedo a perder el estatus y el patrimonio de la clase media"
Je, je. Diría que no has estado muy acertado. Ni malminorista (Deus avertat), ni borbónico (aunque haya algunos borbones mejores que otros, a menudo llamados Carlos), ni conservador (ni mucho menos liberal), ni derechista (ni izquierdista, claro, ni tampoco centrista). Patrimonio escaso. Quizá algo aburguesado sí, para mi vergüenza.
"Te equivocas"
A menudo.
"¡Visca Dom Jaume Mercant i Simó!"
En la llengua dels meus avantpassats: ¡Visca, visca!
Por sus palabras, ahora veo claro que su intención no era mala; me lo pareció en su momento. Entonces, no tiene por qué disculparse.
Mi pensamiento político es más amplio y complejo; en un simple post, no puedo reflejarlo y se presta a caricaturas, como es natural.
Gracias por escribirme y por sus disculpas. Discúlpeme también usted a mí si le he juzgado mal.
In Christo.
"La Iglesia siempre ha considerado que cualquiera de las tres formas clásicas de gobierno (monarquía, aristocracia o república/democracia) y sus formas mixtas son, en principio válidas y es una cuestión prudencial cuál resulta más apropiada en cada ocasión."
Entiendo que la Iglesia siempre prefirió la monarquía hasta que cambió de postura con el Ralliement
"Entiendo que la Iglesia siempre prefirió la monarquía hasta que cambió de postura con el Ralliement"
Yo diría que está confundiendo "siempre" con los siglos XVIII y XIX, en los que, en gran medida debido a la Revolución Francesa, se identificó república con república anticatólica, masónica y antitradicional (porque, de hecho, gran parte de las repúblicas posteriores a 1789 así lo fueron). Pero tradicionalmente no era así. Lo que he dicho sobre las tres formas de gobierno tradicionales y lícitas es pura enseñanza de Santo Tomás.
Todo eso a grandes rasgos, claro. Hubo algunos ejemplos de repúblicas más o menos desastrosas antes (por ejemplo, en el siglo XVII, con Cromwell; en el siglo XV en Florencia), pero también otras buenas, como la de San Marino desde el siglo XIII.
Yo lo que recuerdo haber leido es que precisamente Santo Tomas se pronunciaba por la monarquía como sistema de preferencia. Siempre me refería a siempre hasta el Ralliement, que cambió la doctrina.
Santo Tomás prefería una monarquía moderada o sistema mixto que combinaba los tres clásicos para conseguir un resultado óptimo: por un lado, el gobierno de uno solo logra mejor la unidad en el bien común, dice Santo Tomás, pero "mucho mejor proceden quienes integran el gobierno de ciudad de diversas formas de gobierno, pues cuanto más mixto sea, tanto mejor será, al tomar más ciudadanos parte en el gobierno de la ciudad".
En cualquier caso, una cosa es la preferencia prudencial, que necesariamente tiene que ver con el caso concreto, el tipo de país, región o ciudad, el momento histórico, etc., y otra la licitud, que es lo más importante: para la Iglesia y para Santo Tomás y la Teología católica siempre han sido lícitos los tres tipos de gobierno (en principio y siempre que lo que se busque sea el bien común y condiciones similares, claro).
"Siempre me refería a siempre hasta el Ralliement, que cambió la doctrina"
Eso es lo más importante de esto: que no cambió la doctrina, que siempre ha sido la de la licitud de las distintas formas de gobierno. Por supuesto, en algunas épocas está más de moda una que otra y eso se nota en los gustos y la retórica que utilizan los mismos cristianos, incluidos los clérigos (por eso ahora casi todos son muy demócratas y en otras épocas casi todos eran muy monárquicos), pero una cosa es la retórica y los gustos y otra la doctrina.
La Santa Sede reconoció la independencia de la república de San Marino en 1291 y a nadie se le ocurrió pensar que fuera ilegítima en ningún sentido por su gobierno republicano.
La preferencia no indica que las otras formas fueran ilegítimas, claro.
Lo de las tres formas de gobierno como funcionamiento del poder y gobierno y su aplicación al bien común y pragmatismo, claro.
Lo que a mi modo de ver es clave es determinar quién ostenta la soberanía. Con el protestantismo se empezó a sustraer la soberanóia a Dios y darsela al principe protestante de turno, con el absolutismo monarquico en mi opinión en la práctica también, los regímenes teocraticos son bastante usurpación de la soberania de Dios aunque digan lo contrario - la confesionalidad catolica del estado es darle la debida soberania a Dios. El sistema democrático liberal, bastante reciente, es la apoteosis de la sobernia del pueblo, para someterlo más fácil. Esto es lo que cambió completamente. Este sistema humanamente solo puede acabar mal, y hacer males, y a los hechos me remito desde las revoluciones americana y francesa. Se puede colaborar con un sistema cuya soberanía está en el pueblo? Me parece a mi que está bien ser antisistema
Este anciano país (Antes llamado España) que tiene el honor de haber tenido una de las primeras Constituciones laicas del mundo (La pepa de 1812) ha decidido por amplia mayoría de los españoles ser un ESTADO ACONFESIONAL y para cambiar eso, hacen falta 3/5 de la Cámara de Diputados, lo cual es imposible sin la aquiescencia de partidos de izquierda que nunca van a aprobar eso.
Lo diga su amigo Jaime o su palafrenero, ese no es más que el sueño húmedo de algún nostálgico, pero no va a pasar.
Saludos
Durante muchos años, desde su fundación en los años 20, la República de Irlanda, con su capital en Dublín, fue una república que reconocía la posición especial de la Iglesia Católica, y que de hecho dejó durante muchos años la educación y la sanidad en sus manos. Tan mal no le fue.
De hecho aún hoy en día un 69% de la población irlandesa se declara Católica. Supongo que en los últimos años con la pérdida de valores la situación no es tan buena, pero creo que supera por mucho a los índices de bautismos y bodas que hay en España.
Por lo que la idea de una república católica no me parece tan descabellada, en España lo que faltan son los católicos que han dado una espantada en los últimos 50 años.
Wishful thinking es también creer que las constituciones liberales pueden ser católicas
Si hubiese un referendum sobre si monarquía o república, en el caso de la opción monárquíca esa fuese ligada forzosamente a la actual dinastía reinante, yo jamás votaría a favor de ella, aunque a favor de la república, por principio, tampoco; me quedaría en casa sin ir a votar.
En cuanto a la peligrosidad de ambas opciones, creo que la monarquía republicana antitea, masónica que sufrimos sería aún peor que la república, ya que crearía una falsa ilusión de seguridad y continuidad histórica inexistente, en muchos españoles; esto es: sería la opción de cocer la rana lentamente, frente a la de cocerla rápido que sería la república. Además, la república tiene una ventaja añadida y es que sin un rey, el ejército no sería tan manso y doméstico ante barbaridades como la amnisrtía o elafinanción, con nuestros impuestos, del desarrollo y lo que es peor, del rearme maroqui. Como dice el refráan: "Del agua mansa líbreme Dios que de la brava me libro yo".
En este anciano país, antes llamado España, existe una Ley Suprema (Que gracias a Dios no es el Astete ni el Ripalda) llamada Constitución de 1978 que en su artículo 1.3 afirma taxativamente: "La forma política del Estado español es la Monarquía parlamentaria" y en el art 16.3: "Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones"
Es decir, una república católica, es doblemente ilegal, por no ser monarquía y por tener una religión con carácter estatal.
Como toda ley, incluso la Magna Ley, puede ser cambiada y hacer que ciertas cosas dejen de ser ilegales, como pasó con el divorcio, el adulterio o el aborto; pero a día de hoy tanto el artículo 1.3 como el 16.3 de la Constitución siguen vigentes por lo que tu sueño lúbrico es ilegal, tan ilegal como declarar la independencia catalana o pegarle un tiro a un gato callejero.
Soy consciente de que soñar es gratis y sueñas con eso cada día; pero no va a ocurrir.
Necesitas 210 escaños en el Congreso y VOX, que es el único que votaría eso, no va a conseguir 210 diputad@s no logra 210 ni con ayuda de tu magia potagia.
Y por cierto, mi nick será hortera, pero al menos no es la nada con sifón.
Decir que "podría haber una República Católica en España" no es ilegal (Es solo el sueño imposible de nostálgicos irredentos) lo que es ilegal es proclamarla.
Decir eso no es ilegal, es solo estúpido.
Hay muchas razones para que España no sea una República. Las que tú dices y alguna más.
Si piensas que voto a los perroflautas de cualquier denominación de origen, estás muy lejos de conocer la verdad, pero no te preocupes; también te pasa en asuntos de religión y sobrevives.
A fin de cuentas, no me lo explico, pero Dios te quiere como eres.
Dejar un comentario










