No adulteremos... el lenguaje

Una de las cosas que más me han gustado de la Exhortación Amoris Laetitia del Papa Francisco es un pequeño detalle que quizá a otros les parezca nimio: su llamada a utilizar un lenguaje adecuado al hablar de los temas de la familia y de los problemas y pecados relacionados con ella.

Confieso que, durante los últimos años, no pocos documentos de la Iglesia me han escandalizado ligeramente por el tipo de lenguaje, algo irrespetuoso, que utilizan para tratar estos asuntos. El lenguaje que usamos es importante, porque revela lo que pensamos y, sobre todo, lo que cree la Iglesia. De lo que rebosa el corazón, habla la boca, dijo el Señor (Lc 6,45). Por otro lado, además, nuestra forma de hablar debe manifestar la caridad salvadora de Cristo, que se ofrece a todos los hombres.

Dice la Exhortación (citando la Relatio del Sínodo sobre la Familia), en su número 243.

“Estas situaciones [de las personas divorciadas en una nueva unión] «exigen un atento discernimiento y un acompañamiento con gran respeto, evitando todo lenguaje y actitud que las haga sentir discriminadas […]»”

A mi juicio, claramente hay un problema con el lenguaje eclesial más común al hablar de estos temas, que tiende a revelar una cierta discriminación injusta para con las personas que se encuentran en esas situaciones mencionadas en la Exhortación. Por ello, como dice el Papa, hay que realizar un atento discernimiento para evitar ese lenguaje discriminatorio.

El problema principal, a mi entender, está en pensar erróneamente que estas personas en particular son incapaces de escuchar las verdades desagradables, como si fueran niños, lo que supone una clara discriminación con respecto al resto de los cristianos, a los que generalmente se les supone “adultos”.  En efecto, a los primeros se les habla con puros eufemismos como “nuevas uniones”, “situaciones irregulares”, “vueltos a casar”, en lugar de hablarles con claridad y sencillez de cuál es su pecado: el adulterio. Esta forma de actuar resulta bastante poco respetuosa con los interesados, además de mostrar una cierta condescendencia hacia ellos.

No podemos olvidar que Cristo vino al mundo como médico de las almas y un médico lo primero que hace, antes de curar, es diagnosticar. Sin diagnóstico claro y acertado, no hay curación posible. ¿Qué pensaríamos de un médico que, cuando el enfermo tiene peritonitis, le dice que “tendría que ir pensando en tratarse esos dolores de estómago un año de estos”? Merecería que lo expulsaran de su profesión y terminar en la cárcel por negligencia criminal.

El mismo Papa ha hablado de la Iglesia como de un hospital de campaña, un precioso símil. Conviene saber que, en los hospitales de campaña, lo más importante es lo que los médicos llaman triaje, es decir, la separación de los enfermos en grupos según la gravedad de su estado. Si el estado del herido es grave, resulta esencial que los médicos determinen inmediatamente esa gravedad, para que pueda recibir atención inmediata, mientras que si sus heridas son superficiales, se le asigna a un grupo distinto, que puede esperar a que haya médicos disponibles.

En ese sentido, los eufemismos empleados al hablar del adulterio dificultan enormemente que los interesados sean conscientes de la verdadera gravedad de su situación. No olvidemos que el adulterio es, por su propia naturaleza, un pecado mortal, que destruye la vida de la gracia, aparta de Dios al que lo comete y lleva al infierno. Si el discurso de la Iglesia no advierte con total claridad del daño terrible que produce este pecado, será como ese médico del que hablábamos antes y que merecía ser expulsado de la profesión y dar con sus huesos en la cárcel. O, en palabras de Cristo, será sal que se ha vuelto sosa y que sólo sirve para tirarla fuera y que la pisoteen los hombres (cf. Mt 5,13).

Asimismo, se puede detectar ese tono discriminatorio contra el que advierte la Amoris Laetitia en la obsesión por tratar juntos los casos habituales y las excepciones excepcionalísimas, como un todo englobado en las “uniones irregulares”. Esta actitud es completamente injusta, porque las excepciones generalmente consisten en atenuantes que afectan a la responsabilidad moral, como la ignorancia, locura, inmadurez o el miedo invencible. Ciertamente, no es justo meter a los adúlteros en ese grupo, como si fuera lícito suponer que habitualmente son inmaduros, necios o irresponsables. Pecadores sí, pero responsables de sus actos.

Esta forma de hablar arrebata a sus destinatarios lo que podríamos llamar la verdadera dignidad del pecador, que consiste en que Dios se tomó en serio sus pecados. Tan en serio se los tomó que envió a su Hijo único para que muriera en la Cruz y nos salvara de esos pecados y de sus consecuencias. En cambio, poniendo en primer plano las excepciones y la falta de responsabilidad, lo que hacemos es no tomarnos en serio esos pecados y negar al pecador su libertad básica fundamental, una libertad que Dios valora tanto que incluso la respeta cuando está completamente equivocada.

Nunca haríamos eso en relación con otros pecados. ¿Es que en vez de hablar de pereza nos dedicaremos a discursear sobre “actitudes extra-ordinariamente pasivas”, que incluyan desde los exploradores picados por una mosca tse-tse o los paralíticos hasta los vagos que no se levantarían del sofá ni para echar un vaso de agua a una madre ardiendo? No se le ocurriría a nadie y, si se hiciera, la consecuencia previsible sería la confusión más absoluta. ¿Acaso podemos imaginar un documento eclesial sobre “transferencias irregulares de la propiedad” que tratase de manera conjunta a lo largo de todo el texto tanto la estafa y el robo con violencia como al niño que se pone por error la chaqueta de un compañero del colegio? Es inimaginable.

En los demás ámbitos somos conscientes de que las excepciones deben tratarse como tales, en su nota a pie de página, en lugar de meterlo todo dentro del mismo saco, fomentando la confusión y el indiferentismo. Así pues, no tiene sentido que discriminemos a los adúlteros tratándolos de diferente forma y englobándolos por sistema en las “uniones irregulares”.

Conviene tener cuidado, sin embargo, no sea que caigamos en el error contrario, olvidando la caridad en nuestro afán de proteger la verdad y la claridad. ¿No será poco caritativo hablar de “adulterio”? ¿No será por eso por lo que no se usa la palabra en tantos documentos eclesiales y se sustituye por eufemismos? Los cristianos estamos llamados a unir la verdad y la caridad, así que conviene considerar seriamente esta objeción.

Para determinar si se trata de una práctica poco caritativa o no, lo mejor, a mi juicio, es acudir a los ejemplos más perfectos de caridad que podamos encontrar. Por ejemplo, San Pablo, el apóstol que escribió el himno a la Caridad, escribió también, en la misma carta, que los adúlteros […] no heredarán el Reino de Dios (cf. 1Co 6,9-10). También hablaron del adulterio Oseas, el profeta del amor de Dios por su pueblo, y Jeremías. Asimismo, podríamos citar a innumerables santos, incluido San Francisco de Sales, el santo de la dulzura, que advierte a los fieles que deben explicar en el confesionario si un acto contra el sexto mandamiento fue también adulterio, por su gravedad añadida (Advertencias a los confesores, cap. IV). El mismo ejemplo nos dan el catecismo de Trento y el actual Catecismo de la Iglesia Católica (cf. CEC 2380-2381) o San Juan Pablo II en su Teología del cuerpo, donde se menciona decenas de veces el adulterio.

Pero vayamos al mejor ejemplo que podemos encontrar: Jesús, que es la Verdad y también es pura Caridad, no tenía ningún problema en hablar de “adulterio”, sin sentimentalismos ni falsos escrúpulos. Así le dijo al joven rico, citando el Antiguo Testamento: No cometerás adulterio (cf. Mc 10,19). De hecho, hablando precisamente de este tema de las “uniones irregulares”, Cristo explicó con total claridad que cualquiera que se divorcie de su mujer y se case con otra, comete adulterio contra ella y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio (Mc 10,11).  Es más, no sólo habló de adulterio físico, sino también de adulterio de pensamiento, señalando que el que mira a una mujer deseándola, ya cometió adulterio con ella en su corazón (Mt 5,28).

Así pues, considerando el ejemplo de Cristo y de los santos, no parece que haya nada de malo en usar el término adulterio. Al contrario. Por supuesto, ninguno de ellos utilizaba la palabra como arma arrojadiza contra los arrepentidos. Eso no se debe a que, por una mal entendida caridad, prefiriesen ser confusos en algunas ocasiones, sino a que los arrepentidos no necesitan mayor claridad en el lenguaje, porque son perfectamente conscientes de que han pecado, comprenden la gravedad de ese pecado mejor que nadie y se han propuesto no volver a caer en él.

Nada tiene que ver eso, sin embargo, con el hecho de explicarse con la mayor claridad posible y llamando a las cosas por su nombre cuando se está hablando en general, tal como hicieron Cristo y los santos, según hemos visto en los párrafos anteriores. La caridad no está ni puede estar reñida con la verdad. Es más, una y otra se requieren mutuamente para ser auténticas.

Por último, quizá alguien podría objetar que la propia Exhortación Amoris Laetitia no utiliza en ningún momento en su larguísimo texto la palabra “adulterio”. A eso únicamente puedo responder que sólo Dios es perfecto. Los demás, desde el Papa hasta el último bautizado, dejamos a menudo que desear en la práctica. Por eso todos, desde el Papa hasta el último bautizado, debemos esforzarnos por parecernos cada día más a Jesucristo, recibiendo su gracia y siguiendo su ejemplo en todo.

157 comentarios

  
Millán
Pues el Evangelio así lo llama adulterio. Las cosas por su nombre moleste a quién moleste pues la verdad es la verdad la diga Agamenón o su porquero.
13/04/16 2:09 AM
  
antonio
Excelente, muy claro, y mucho más sereno, he leido lo del Cardenal Burke, que también habla con profunda serenidad y respeto por el Sumo Pontifice., y habla del documento con claridad.Por supuesto la Verdad debe ir con la Caridad.


Muchas Gracias, como siempre estimado Bruno.
13/04/16 2:09 AM
  
antonio
Que Dios te bendiga y lo haga con la Iglesia.
13/04/16 2:10 AM
  
Gentilicio
Es obvio que la Exhortación del Papa busca generar ambigüedad deliberadamente en los puntos más conflictivos, de modo que quienes buscan introducir nuevas prácticas puedan escudarse en una relectura del texto original, de suyo abierto a múltiples y contradictorias interpretaciones.

Ocurre que la 'pereza' no es fenómeno que esté trabado con cuestiones identitarias, ni posea un fuerte peso ideológico en la sociedad actual. El adulterio sí. Por más que algunos sigan queriendo queriendo remedar al Papa en los mejores términos -o estén obligados a ello, tal y como parece que es la línea editorial de Infocatólica-, que cada escrito del Papa tenga que ser apuntalado y parafraseado para descargarlos de matices rupturistas es ya suficientemente revelador ¿Cuántas veces tuvieron que glosar a BXVI en este sentido? Se lo digo yo, cero. Hay que aceptar el problema de frente, porque ya está aquí instalado en el seno de la iglesia.
13/04/16 2:39 AM
  
cos
Siguiendo con la chorrada del neolenguaje, yo suelo "discriminar positivamente" a mucha gente.por ejemplo ancianos. Me parece que de desaparecer la discrimacion el mundo se convertiria en un lugar bastante surrealista. Para mi una de dos: o se ha perdido la sencilla costumbre de consultar el diccionario, o se sigue en el empeño de volverse ininteligibles por mor de hacer que el mundo le entienda a uno.
Cualquier otra posibilidad la excluyo, por supuesto.
13/04/16 2:39 AM
  
luis
El eufemismo es el refugio de los neuróticos que no aceptan la realidad, lo que en definitiva implica no aceptar a Su Autor, Dios. Todo eufemismo esconde cierta teofobia.
13/04/16 3:09 AM
  
Pablo
¿Qué puedo pensar de un texto que una vez leído hay que interpretar, discutir, reinterpretar, rediscutir...y donde unos leen blanco, otros leen negro?.
Yo tengo claro que si fuese un contrato no lo firmaba ni loco.
¿Eso es ir con la verdad por delante?.
13/04/16 7:36 AM
  
Luis Fernando
Eso de pretender ser más misericordiosos que Cristo, que no tenía el menor problema en llamar a las cosas por su nombre, es directamente blasfemo. O quizás idólatra. Elijan el calificativo.
13/04/16 8:07 AM
  
DJ L
Oiga usted, ¿de qué excepciones excepcionalísimas habla también usted? Concrete, hombre. A ver si nos ponemos a concretar todos: el Papa, usted, yo, el butanero...

No vaya a resultar ahora que los 10 mandamientos de la Ley de Dios sean simplemente 10 reglas con sus excepciones que confirman toda regla.

- No matarás es no matarás, aunque el inocente gestado sea fruto de una violación o esté enfermo.
- "Cualquiera que repudia a su mujer, y se casa con otra, adultera: y el que se casa con la repudiada del marido, adultera"

El Evangelio es simple, como Dios. La literatura humana ya es otra cosa, un chuletón que hay que digerir en trocitos y separar del hueso.
13/04/16 8:17 AM
  
Tito Livio
Todo este asunto es que no hay por donde cogerlo. Todo este lenguaje. Todo esto es no solo un gran sofisma, una gran impostura, incluso una blasfemia. Es que además, todo esto de no decir al pecador su estado y de reconvenirle para que cambie y se salve lleva a la condenación de todos lis que hablan con medias palabras, tintas agudas encubiertas de falsa misericordia falsa y de falsa caridad. Y lo mas grave, que hace esto son lis redactores de este documento. Y que. Lo firma se convierte en cómplice directo. Lo siento, pero es así. Se puede encubrir esta verdad pero no pirxelli deja de existir. Luis Fernando deja el asunto bien claro en su post de hoy.
13/04/16 8:36 AM
  
JUAN NADIE
Javier Ejías

¿Acaso es falso algo de lo que escribe Bruno?
¿Acaso es falso que no se emplea en el texto papal la palabra adulterio?
Por favor déjate de generalidades y vacuedades y cita algo concreto que sea falso o simplemente mal entendido por parte del Blogger.

Se suele decir que el primer muerto de las guerras es la verdad, y la mejor manera de matar la verdad no es la mentira directa, sino unos buenos eufemismos.

Por cierto Bruno en los hospitales de campaña de las guerras convencionales (no las asimétricas de ahora) tipo II GM, la clasificación que se hace es para atender no a los mas graves, sino a los que creen que van a poder curar, es decir se separa a los incurables, para no perder tiempo. Es duro, pero nadie dijo nunca, salvo algún loco, que la guerra fuera algo agradable.
13/04/16 10:05 AM
  
rastri
Por eso todos, desde el Papa hasta el último bautizado, debemos esforzarnos por parecernos cada día más a Jesucristo, recibiendo su gracia y siguiendo su ejemplo en todo.
____________

¿Y respecto al modo y manera a seguir de los casados: ¿Qué dice Jesucristo.

-Que hay que discernir; O que que, en el peor de los caso que es el adulterio, hay que seguir siendo fiel al compromiso matrimonial?

Cristo vino y se casó con el mundo sí, seguro, a sabiendas de que no solo no iba a ser bien recibido sino que iba a ser despreciado. Como así fue. Y aún vino.
Y aún siendo despreciado y mal tratado no se divorció del mudo.





13/04/16 10:44 AM
  
Martin Ellingham
La categoría “situaciones matrimoniales irregulares” es jurídica, referida al fuero externo, y no implica primariamente un juicio moral. Me parece una mejor denominación para un conjunto de situaciones morales diversas que la de “pecadores públicos”. Que incluye a esta, pero que no se identifica necesariamente, pues puede comprender los casos límite sobre los cuales debatimos en el pasado.
La manipulación consiste en trasladar una categoría externa al plano moral para justificar el adulterio a impulsos de una pastoral buenista.
Saludos.
13/04/16 11:05 AM
  
Bruno
DJL:

Serénese un poco.

En todo pecado puede haber atenuantes e incluso eximentes de responsabilidad. Un asesino puede no tener responsabilidad por lo que ha hecho, si actuó en estado de locura, por ejemplo. Un ladrón si pensaba sinceramente que robar a una empresa no era verdaderamente robar. EN estos casos, hay pecado objetivo pero no subjetivo.

Además de eso, hay situaciones en las que el pecado sólo es aparente.Por ejemplo, a un señor le encuentran en casa de otro, llevándose las joyas y le meten en la cárcel por ladrón. Sin embargo, resulta que, en realidad, lo que hacía era recuperar sus propias joyas que el otro le había robado primero. En este caso, hay apariencia de pecado o incluso condena jurídica, pero no hay pecado objetivo ni subjetivo.

¿Anulan esos casos los mandamientos contra el robo o el asesinato? Ciertamente no. No son excepciones al mandamiento, sino excepciones en el sentido de casos excepcionales, en los que parece que hay robo o asesinato pero no lo hay o en los que hay pecado pero la culpa está atenuada o eliminada por las circunstancias especiales.

Lo mismo sucede con el adulterio. Nada de raro hay en eso. Siempre ha sido así. Por eso hay tribunales de nulidad, por ejemplo.

E incluso esos casos excepcionales no pueden comulgar, como enseña la Iglesia.

Saludos.
13/04/16 12:12 PM
  
Bruno
Antonio:

Gracias.
13/04/16 12:13 PM
  
Pedro
Bruno
De cualquier manera, a las excepciones excepcionalisimas tambien se les llama adulterio, es así?
13/04/16 1:06 PM
  
Palas Atenea
Bruno: El problema de la claridad de llamar a las cosas por su nombre va junto al realismo que la Iglesia siempre ha defendido. La realidad tiene un nombre, ya sea un objeto, una virtud, un vicio o un pecado. La manipulación del lenguaje es necesaria para enmascarar la realidad y hacerla subjetiva, la ideología de género es paradigmática en ese sentido. Hace mucho tiempo que a todo se le cambia de nombre e incluso se insiste, no hay persona que al oírme decir que soy vieja no salte como un muelle y me rectifique con un sucedáneo como "tercera edad", "persona mayor" o lo que sea, añadiendo la coletilla: "viejas son las cosas no las personas"; lo cierto es que en el idioma español sólo hay otra palabra sinónima todavía más terrible: anciana. No hay primera edad ni segunda por lo que difícilmente habrá una tercera y en cuanto a persona mayor puede aplicársele a alguien de 40 años.
La gente no se da cuenta que yo he aceptado la vejez y el calificativo no me daña, como a mi padre cuando le cortaron la pierna tampoco le importaba que le llamaran cojo-muchas veces él se lo llamaba a sí mismo-porque ambos sabíamos que teníamos una dignidad a la que la vejez o la cojera no podía afectar.
Ahora bien, si te molestan las arrugas, si no puedes mirarte en el espejo y no aceptas la realidad entonces necesitarás el eufemismo como agua de mayo. La vejez es una etapa de la vida independiente del deterioro o no de la persona, de que ésta sea poderosa o cobre una ínfima pensión. Vargas Llosa es un viejo triunfador; Robert Spaemann es un viejo filósofo sumamente clarividente y otras personas son viejos con Alhzeimer. Nada de situación altera el adjetivo que se refiere sólo a la edad y no a otra cosa, Estamos de acuerdo en que la frontera de la vejez no está clara, pero yo voy a cumplir 72 años y eso va más allá de la madurez o eufemismos similares.
El hecho de que hasta ahora Dios haya sido sumamente misericordioso conmigo no ha impedido que envejeciera, como tiene que ser.
13/04/16 1:29 PM
  
Juan Andrés
El eufemismo es el signo de los tiempos y algunos en la Iglesia se han subido a ese tren; el fin en su uso es eludir la verdad, como así también la tergiversación del significado de los conceptos, que alude al ser de las cosas. En este campo discriminar no es malo en si mismo, es discernir lo bueno de lo malo, el error de la verdad, lo feo de lo bello, etc. Todo el tiempo estamos discriminando, nos demos o no cuenta de ello. Las ideologías imperantes se han robado el lenguaje y en la Iglesia, no toda ella por cierto, se ha permitido ese robo.
13/04/16 1:30 PM
  
Gloria Irene (Flavia)
Bruno, como además de gran lector eres escritor, aporto algo sobre el tema. No es cuestión de dar una clase, que ya estoy jubilada, pero recordemos que se han escrito buenas novelas sobre la manipulación del lenguaje y lo que con ello se pretende: una nueva mentalidad, una nueva sociedad, un cambio, por ejemplo, "1984". El lenguaje es el andamiaje del pensamiento. Las horas didácticas dedicadas a estos temas eran muy bien seguidas por los alumnos de 18 años, que siempre planteaban preguntas del mayor interés.

Voy a citar otra de esas novelas: "El poder cambia de manos", de Czeslaw Milosz. La comentaba en clase de Literatura Universal para que los alumnos comprobasen el poder del lenguaje, por ejemplo, cuando un personaje le dice a otro que necesitan un nuevo lenguaje para la sociedad que van a crear y los cambios que ello supone. Así de claro.

El lenguaje no es inocente, como bien explica T. Andersen.

13/04/16 1:53 PM
  
Pedro
Bruno:
Cuando dices que "quizá alguien podría objetar que la propia Exhortación Amoris Laetitia no utiliza en ningún momento en su larguísimo texto la palabra “adulterio”", o lo estás diciendo con ironía o tienes una consideración muy pobre de tus lectores y del resto de los católicos. No creo que el común de las gentes considere normal llamar un adulterio como situación irregular. Todo tu artículo consiste en objetar contra los eufemismos y las graduaciones forzadas. Y haces bien porque son asquerosos.
De acuerdo en que sólo Dios es perfecto, pero cabría esperar que su vicario y los padres sinodales no nos viniesen con lo que me parecen sofisterías. San Pablo no fue papa, los que te leemos no somos el Papa y ni locos hablaríamos de situaciones irregulares y pretenden que nuestras neuronas, pobrecicas, lo acepten. Te podría incluso decir que ni aun torturado, porque ese cambiar de nombre al pecado para como esconderlo me parece algo diabólico. Si el rey está desnudo, está desnudo. Perdóname, pero creo que has perdido bravura en el último párrafo y que has estado soso. Lo que más temes.
13/04/16 2:06 PM
  
Bruno
Pedro:

"De cualquier manera, a las excepciones excepcionalisimas tambien se les llama adulterio, es así?"

Como le decía a DJL, hay dos tipos básicos de excepciones:

1) Casos de pecado objetivo pero sin pecado subjetivo o con pecado subjetivo de menor gravedad. Son los casos de responsabilidad atenuada, por ejemplo por locura, ignorancia, inmadurez, etc. Estos casos ciertamente son adulterio, aunque la culpa del interesado pueda variar.

2) Casos de pecado aparente. Son casos en los que parece que hay adulterio pero en realidad no lo hay. Por ejemplo, casos en los que el matrimonio inicial fue nulo, pero aún no lo ha declarado la Iglesia. En estos casos no hay adulterio (porque para que haya adulterio tiene que haber matrimonio). Puede haber otros pecados, pero no el de adulterio.

Esto no es nada raro. Casos excepcionales los hay en todos los órdenes. Como le decía a DJL, es fácil verlo en los casos de robo o asesinato. No son excepciones al mandamiento (porque adulterar, matar a un inocente, etc. siempre están mal), sino casos excepcionales en los que o bien hay menos culpa o bien nos hemos equivocado al juzgarlos.

Lo malo es elevar esos casos excepcionales a la categoría de regla, porque entonces se da la impresión de que el mandamiento no siempre es cierto.
13/04/16 2:15 PM
  
Bruno
Pedro:

"Perdóname, pero creo que has perdido bravura en el último párrafo y que has estado soso. Lo que más temes."

No creo que sea cuestión de bravura, sino de discernimiento. Hay que tener en cuenta tres cosas:

- Ser sal que se ha vuelto sosa, en este contexto, consiste en no proclamar el Evangelio, sino deformarlo u oscurecerlo para agradar al mundo. Creo que, hasta donde llega mi capacidad, he explicado con claridad cuál era la forma de actuar de Cristo y, por lo tanto, cuál debe ser la nuestra como católicos. No hay sosería, pues.

- Dicho eso, no me corresponde a mí juzgar al mundo entero y determinar quiénes cumplen eso y quiénes no. Además, los casos concretos personales, sean quienes sean, son incomparablemente menos importantes que entender bien el ejemplo de Cristo. Como es lógico, comprender el principio permite que cada uno discierna esos casos concretos en la medida en que lo necesite.

- Es obligación de todo cristiano tratar con respeto y caridad especiales a las autoridades que Dios ha puesto sobre él. De forma particular a su padre, a su párroco, a su obispo y al Papa. Uno no hablaría de su padre como hablaría de Perico de los Palotes. Lo mismo debe suceder con su párroco, su obispo y el Papa. Por eso, cuando en este post particular hablo del Papa y en el último párrafo señalo con claridad algo que a mi juicio no ha hecho bien, lo hago con respeto, como corresponde a cualquier Santo Padre. Creo que he dejado muy claro que el hecho de que no se hable de adulterio en toda la exhortación "deja que desear" y no se ajusta al "ejemplo de Cristo".

Entiendo perfectamente que a uno le exasperen estos temas. A mí me exasperan con frecuencia. Pero no por eso debemos faltar a la caridad.

PS: Por supuesto que hay una cierta ironía en todo el artículo.
13/04/16 2:31 PM
  
Blackfriar
En este último comentario a Pedro parece que ha visto la luz. Efectivamente, puede haber casos de pecado aparente. Piense.
13/04/16 2:33 PM
  
Bruno
Blackfriar:

No contesté a su último comentario en el post anterior, así que voy a hacerlo aquí.

Decía usted: "Bruno. Quizás la diferencia entre Vds y yo es que yo no me siento mejor que "pederastas, ladrones, asesinos, mafiosos, políticos corruptos, explotadores, esclavistas, estafadores, profanadores, proxenetas, traficantes de drogas y un larguísimo etcétera." Me alegro por todos los que se creen mejor que ellos. Les deseo un feliz día."

Entre todos los tipos de soberbia, no hay ninguno peor que el que se disfraza de humildad. Pero si hubiera alguno peor sería el que se disfraza torpemente de humildad, pretendiendo hacer gala de esa humildad con la frase "gracias Señor, porque no soy como estos de Infocatólica, que se creen mejores que los demás".

Hay que ser torpe además de troll para decir algo así.

La torpeza la admitimos en el blog, el trollear no.
13/04/16 2:41 PM
  
Blackfriar
No le comprendo. Es verdad lo que escribi. Vd. fue el que me puso esa lista de personas, no yo. Pero en todo caso, muy bueno el punto del pecado aparente.
13/04/16 2:43 PM
  
Blackfriar
Por cierto, no sé que es trollear.
13/04/16 2:44 PM
  
Pedro

Bruno:
Para mí todo el artículo es sal salada, menos el último párrafo. Yo lo hubiera sustituido por cualquiera de los tres comentarios consecutivos de luis, Pablo y Luis Fernando o con los tres a la vez.
El eufemismo es el refugio de los neuróticos que no aceptan la realidad, lo que en definitiva implica no aceptar a Su Autor, Dios. Todo eufemismo esconde cierta teofobia.

¿Qué puedo pensar de un texto que una vez leído hay que interpretar, discutir, reinterpretar, rediscutir...y donde unos leen blanco, otros leen negro?.
Yo tengo claro que si fuese un contrato no lo firmaba ni loco.
¿Eso es ir con la verdad por delante?.

Eso de pretender ser más misericordiosos que Cristo, que no tenía el menor problema en llamar a las cosas por su nombre, es directamente blasfemo. O quizás idólatra. Elijan el calificativo.
13/04/16 2:48 PM
  
Palas Atenea
Blackfriar: No se puede pensar en pecados aparentes porque si sólo son aparentes eso no altera la sustancia: que no es pecado. En un confesonario nadie se acusa de la apariencia sino de la realidad.
Estamos siempre en lo mismo, lo que es real y lo que no lo es, las apariencias-como su propio nombre indican-solapan la realidad.
13/04/16 2:48 PM
  
Bruno
Juan Andrés:

"El eufemismo es el signo de los tiempos y algunos en la Iglesia se han subido a ese tren; el fin en su uso es eludir la verdad, como así también la tergiversación del significado de los conceptos, que alude al ser de las cosas"

Yo matizaría que el eufemismo es malo cuando el fin de su uso es eludir la verdad.

Otros usos del eufemismo son buenos y parte de la cortesía humana común. El mismo Cristo usó alguno.

"En este campo discriminar no es malo en si mismo, es discernir lo bueno de lo malo, el error de la verdad, lo feo de lo bello, etc."

En efecto, la mala prensa de la palabra discriminar viene de que, en origen, se hablaba de "discriminaciones odiosas" o "discriminaciones injustas", que era algo con sentido. De ahí, en un clima de relativismo imperante, se ha pasado a considerar mala cualquier discriminación, lo que en realidad equivale a pedir al hombre que deje de pensar, porque, como decían los escolásticos, pensar es distinguir.
13/04/16 2:49 PM
  
Pedro
Te pasas el artículo aduciendo porque se debe utilizar la palabra adulterio, para al final decir "quizá alguien podría objetar que la propia Exhortación Amoris Laetitia no utiliza en ningún momento en su larguísimo texto la palabra “adulterio”. A eso únicamente puedo responder que sólo Dios es perfecto".
Luego te vas a sabias generalizaciones: "Los demás, desde el Papa hasta el último bautizado, dejamos a menudo que desear en la práctica. Por eso todos, desde el Papa hasta el último bautizado, debemos esforzarnos por parecernos cada día más a Jesucristo, recibiendo su gracia y siguiendo su ejemplo en todo".
Pero tú analizas y criticas sin demasiado respeto a cuanto sacerdote, obispo o cardenal estimas oportuno.
No es juzgar al mundo entero, es generalizar con apoyo en lo razonable. ¿No sabes que el adulterio todo el mundo lo llama así? Y Jesús generaliza cuando dice que somos malos aunque tratemos bien a nuestros hijos.
13/04/16 3:03 PM
  
Bruno
Pedro:

"Pero tú analizas y criticas sin demasiado respeto a cuanto sacerdote, obispo o cardenal estimas oportuno."

Como he dicho, trato con un respeto especial a mi padre, mi párroco, mi obispo y al Papa. Creo que es algo que todo católico debe hacer. Aunque, por supuesto, la forma que debe adoptar ese respeto es cuestion prudencial que cada uno debe decidir y que no siempre resulta fácil.

En cuanto a los demás sacerdotes, obispos y cardenales, se les debe un cierto respeto básico en reconocimiento del orden sacerdotal y de su cargo (y creo que yo hablo de ellos con ese respeto), pero es un respeto cualitativamente distinto que el debido a los anteriormente mencionados (porque ellos son los que Dios me ha dado a mí en particular como pastores).

Por otra parte, no son "sabias generalizaciones". Lo que dicen, de forma respetuosa, es que el Papa, como cualquier otro bautizado, en muchas ocasiones no actúa bien. Es difícil ser más concreto.

13/04/16 3:12 PM
  
Bruno
Gloria Irene:

El libro de Orwell, por supuesto, es un clásico en ese sentido.

No he leído el de Milosz. Veo que no se encuentra nuevo o en formato electrónico ni n español ni en inglés. Lo buscaré de segunda mano, pero los libros antiguos suelen darme alergia.
13/04/16 3:17 PM
  
Philip Callaghan
Parece que eres tan ambiguo y sagaz como algunos consideran que es "Amoris laetitia"

En vista de que el Papa indica en el punto 243 de la Exhortación ....evitar todo lenguaje y actitud que las haga sentir discriminadas […]»” y que luego resaltas que no se nombra la palabra "adúltero" en todo el texto me hace pensar que el Santo padre cree que la palabra adúltero hace sentir discriminado al que vive en esa condición y que prefiere que se le llame de otra forma.

Yo aquí estoy con el papa. La palabra adulterio está completamente desfasada en el mundo de hoy.

No se omite ninguna verdad si sustituimos la palabra adulterio por otras como pecado contra el 6º mandamiento, infidelidad, acto impuro, etc

Cuando se quiere mejorar la vida (también la eterna) de alguien se busca la manera más adecuada de hacerle ver la realidad ofendiéndole lo menos posible para que no salga "rebotado".

Si tienes un alumno que para aprobar tiene que estudiar más que el resto le puedes decir que lo tiene que hacer porque es más tonto que los demás pero hay otras formas más delicadas de decirlo sin faltar a la verdad.
13/04/16 3:50 PM
  
Bruno
Martin:

"La categoría “situaciones matrimoniales irregulares” es jurídica, referida al fuero externo, y no implica primariamente un juicio moral. [...] La manipulación consiste en trasladar una categoría externa al plano moral para justificar el adulterio a impulsos de una pastoral buenista".

De acuerdo. Aunque yo diría que se extiende tanto al plano moral como al teológico (en el sentido de teología dogmática). Lo hemos visto en innumerables intentos de acabar con la indisolubilidad del matrimonio a través del uso de eufemismos, conceptos intrínsecamente contradictorios (como la indisolubilidad disoluble), etc.

"Me parece una mejor denominación para un conjunto de situaciones morales diversas que la de “pecadores públicos”. Que incluye a esta, pero que no se identifica necesariamente, pues puede comprender los casos límite sobre los cuales debatimos en el pasado."

Aquí hay que considerar varias cosas.

En las categorías, no tiene mucho sentido hablar de "mejor" o "peor", sino de más o menos adecuada para un fin concreto, ya que son básicamente herramientas de organización.

Ciertamente, toda herramienta puede servir para algo (incluidas las de "actitudes extra-ordinariamente pasivas" y "transferencias irregulares de la propiedad") y sin duda "uniones irregulares" será útil en algunas ocasiones. Pero hay que tener en cuenta que presenta ciertos riesgos:

a) Pone al mismo nivel el caso principal y las excepciones (mientras que el término antiguo habla del caso principal, que, como todos, tiene a su alrededor casos excepcionales). Esto no suele ser aconsejable en ningún ámbito de forma general, porque tiende a oscurecer el caso principal, que es el más importante y el que explica la categoría en sí (si no existiera el adulterio, nadie se preocuparía por las "irregularidades" no adulterinas).

b) No es tradicional y tiene en su contra la práctica bimilenaria de la Iglesia.

c) Como hemos dicho, se ha trasladado al ámbito teológico y moral con consecuencias funestas. Conviene recordar que la fe es más importante (o más "central" para la Iglesia) que el derecho canónico, de modo que, si una categoría es práctica jurídicamente pero implica un peligro de confusión para la fe y la moral, no resulta oportuno utilizarla.

d) Es neutra en cuanto a valoración moral, pero eso necesariamente implica cierto peligro de minusvalorar la gravedad del caso principal (por la tendencia humana a identificar lo habitual y lo normal).

e) No respeta adecuadamente el principio de que un matrimonio goza del favor del derecho y es válido hasta que se demuestre lo contrario, de manera que, en principio, hay que suponer que el casado que convive maritalmente con quien no es su esposa está adulterando (aunque, como todo el mundo, los curas que casan y los jueces que juzgan se puedan equivocar).

¿Descalifica eso por completo la categoría? No, porque, como ya hemos señalado, las categorías son formas más o menos útiles de ordenar cosas diversas y no son ni buenas ni malas en sí. Pero sí implica que es una categoría que hay que usar con precaución. Y, a mi juicio, que no debería sustituir a la categoría tradicional.
13/04/16 3:59 PM
  
Gabriela de Argentina
Dice Bruno "En efecto, a los primeros se les habla con puros eufemismos como “nuevas uniones”, “situaciones irregulares”, “vueltos a casar”, en lugar de hablarles con claridad y sencillez de cuál es su pecado: el adulterio."
Pues asi mismo es como se refiere a ellos el Papa y sus colaboradores. En que quedamos, Bruno? Es increible los esfuerzos que hacen aqui en Infocatolica para defender lo indefendible.
13/04/16 4:16 PM
  
Bruno
Philip:

"me hace pensar que el Santo padre cree que la palabra adúltero hace sentir discriminado al que vive en esa condición y que prefiere que se le llame de otra forma."

El Papa puede preferir lo que quiera. Lo que importa es qué es lo correcto.

Y, por supuesto, lo que importa no es como se sienten los adúlteros, sino su salvación eterna.

De todas formas, me llama muchísimo la atención que usted afirme que el Papa cree que Cristo, infinidad de santos y el Catecismo discriminan (injustamente) a las personas. Yo no me atrevería a decir algo así, pero allá usted.

"La palabra adulterio está completamente desfasada en el mundo de hoy"

Eso no significa nada. Es como decir que encarnación, o redención están desfasadas. Forman parte de la doctrina cristiana y, además, del lenguaje bíblico y teológico. Cuando no se usan no es por razones de modas, sino por causas bastante más profundas.

Una palabra puede resultar inútil cuando ya no se entiende. En ese caso, habrá que explicarla o sustituirla. Pero ciertamente no es el caso. Es más, el problema que encuentran algunos con la palabra es que se entiende demasiado bien.

"No se omite ninguna verdad si sustituimos la palabra adulterio por otras como pecado contra el 6º mandamiento, infidelidad, acto impuro, etc"

Con esto, demuestra usted lo contrario de lo que afirma, porque adulterio no significa lo mismo que esas otras palabras. Hay muchos pecados contra el 6º mandamiento y la mayoría no son adulterio. Todas las infidelidades (matrimoniales) son adulterio, pero no todos los adulterios son infidelidades (matrimoniales). Lo mismo sucede con los actos impuros.

La realidad es que lo que molesta de la palabra adulterio es que dice las cosas como son. Pero como son cosas feas y la gente ya no opina que son feas, el mundo prefiere omitir la palabra.

Y la demostración es sencilla: hemos visto en los últimos dos años a un gran número de cardenales y obispos diciendo que en realidad, estas "situaciones" son aceptables en muchos casos, que la indisolubilidad se puede disolver, que habría que bendecir el segundo matrimonio, que todo depende de si la ruptura fue amistosa o no, etc. La realidad es que ya no creen en el pecado de adulterio. Y por eso no les gusta que se use la palabra.

Si hay confusión y falta de fe, lo principal que debe hacer un documento de la Iglesia sobre el tema es usar las palabras más claras posibles.

"Cuando se quiere mejorar la vida (también la eterna) de alguien se busca la manera más adecuada de hacerle ver la realidad ofendiéndole lo menos posible para que no salga "rebotado". Si tienes un alumno que para aprobar tiene que estudiar más que el resto le puedes decir que lo tiene que hacer porque es más tonto que los demás pero hay otras formas más delicadas de decirlo sin faltar a la verdad."

Parece que no se ha leído usted el artículo con detenimiento. Como ya hemos dicho, la palabra adulterio no es un arma arrojadiza para tirársela a la cabeza a los que están en ese pecado, sino para hablar lo más claramente posible del tema en documentos que lo tratan de forma general. Al hablar en particular con una persona, puede ser apropiada o no, según los casos. No es necesaria, por ejemplo, al hablar con personas que reconocen su pecado y saben que está mal. Pero puede ser apropiada y necesaria con los que se engañan a sí mismos y sólo quieren que les confirmemos en su error (igual que Cristo llamaba nidos de víboras a los fariseos, movido por su caridad para con ellos).

Nada tiene esto que ver con el ejemplo de los "alumnos tontos", porque la falta de inteligencia no es un pecado, sino algo que se sufre. En cambio, cuando se trata de alumnos vagos, habrá que decírselo así con claridad (o no, según los casos concretos).

Saludos.
13/04/16 4:19 PM
  
Bruno
Gabriela:

"En que quedamos, Bruno?"

Pues en lo que he dicho en el post: sólo Dios es perfecto. Los demás, desde el Papa hasta el último bautizado, dejamos a menudo que desear en la práctica. Por eso todos, desde el Papa hasta el último bautizado, debemos esforzarnos por parecernos cada día más a Jesucristo, recibiendo su gracia y siguiendo su ejemplo en todo.

"Es increible los esfuerzos que hacen aqui en Infocatolica para defender lo indefendible."

No veo esos esfuerzos por defender nada indefendible. Lo que veo es, por su parte, una actitud algo descortés en casa ajena. Le ruego que se modere.
13/04/16 4:21 PM
  
Raúl de Argentina
Si uno busca "adulter" en el documento, encuentra tres ocurrencias ... Las TRES refieren a la adúltera del Evangelio que iba a ser apedreada. Parece que esta mujer fue la primera y la última en cometer tan horrible pecado. Luego de ella, sólo hemos visto "situaciones irregulares", pero jamás algo tan terrible como un adulterio. ¡ Suerte que vamos mejorando !
13/04/16 4:33 PM
  
Bruno
Raúl:

Sí. No he incluido esos tres casos porque son el apelativo por el que todo el mundo conoce a la protagonista del pasaje: la mujer adúltera o la mujer sorprendida en adulterio. En ese sentido, son más un nombre propio que otra cosa.
13/04/16 4:36 PM
  
Juan Andrés
El llamado al uso adecuado del lenguaje, que deber ser católico, no ha sido respetado en la exhortación en varios pasajes, si en lo que a familia refiere. Tomemos otro ejemplo: “Debemos reconocer la gran variedad de situaciones familiares que pueden brindar cierta estabilidad, pero las uniones de hecho o entre personas del mismo sexo, por ejemplo, no pueden equipararse sin más al matrimonio” El análisis gramatical de este texto lleva a concluir que uniones de hecho o entre personas del mismo sexo entra dentro de "situaciones familiares" que brindan cierta estabilidad. De allí se deriva que uniones de hecho o entre personas del mismo sexo son catalogadas de familia o cualquiera lo puede interpretar así sin mayor esfuerzo. Incluso usa en otro lugar la palabra género para distinguirlo de sexo. Esto no es uso adecuado del lenguaje católico, es asimilar el léxico ideológico generista, con todo lo que ello implica. En fin...
13/04/16 4:42 PM
  
Gabriela de Argentina
Pues yo sí veo una actitud de defender lo indefendible en esta página. Porque intentar rescatar algo positivo de una "exhortacion apostolica" que incluso Burke dice que "no es magisterio" y que tiene pasajes venenosos, es como intentar que nos comamos con alegría un postre delicioso al que le pusimos algo de cianuro. No funciona.
Si no te gusta mi opinión, pues muy bien, siempre puedes censurarla. A mi me resulta mucho mas descortés hacia los lectores el intentar hacer pasar gato por liebre, y convencernos de que lo malo es bueno y que lo bueno es malo. Y encima poniendo en pie de igualdad al Papa ("por eso todos, desde el Papa hasta el último bautizado, debemos esforzarnos por parecernos cada día más a Jesucristo, recibiendo su gracia y siguiendo su ejemplo en todo") cuando se supone, creo yo, me parece, quizas, que deberia estar algunos escaloncitos por encima. Porque me parece, creo yo, tal vez, quizas, que es el Vicario de Cristo y no "cualquier bautizado".
13/04/16 4:46 PM
  
Bruno
Juan Andrés:

Sí, es un tema importantísimo. Algunas cosas que intelectualmente no aceptamos se nos "cuelan" por vía del lenguaje sin que nos demos cuenta. Con esas dos cuestiones, en particular, sucede constantemente y es triste que también pase lo mismo en una exhortación apostólica.

De todas formas, al margen de otras consideraciones, creo que es un despropósito escribir documentos magisteriales de esta longitud, porque casi forzosamente incluirán multitud de imprecisiones, expresiones desafortunadas o con carga secularizada, afirmaciones no propiamente magisteriales, etc.
13/04/16 4:47 PM
  
Martin Ellingham
Bruno:

En general estoy de acuerdo. Sólo señalo ahora que la categoría "situaciones matrimoniales irregulares" tiene la ventaja de englobar diferentes sujetos que no pueden recibir la Comunión, unas veces por razones morales (cuando hay pecado objetivo y son adúlteros públicos) otras veces por razones disciplinares (cuando no hay pecado, o no es claro, por la posible nulidad del matrimonio precedente) llamados casos de buena fe (Ratzinger hablaba de soluciones del "fuero interno") pero todos con un común denominador: por la prohibición de Familiaris consortio, 84.

Saludos.
13/04/16 4:49 PM
  
Bruno
Estimada Gabriela:

Lo que dice no tiene mucho sentido, me temo.

"Porque intentar rescatar algo positivo de una "exhortacion apostolica" que incluso Burke dice que "no es magisterio" y que tiene pasajes venenosos, es como intentar que nos comamos con alegría un postre delicioso al que le pusimos algo de cianuro. No funciona"

No ha entendido usted el post. En el que claramente se critica un aspecto de la Amoris Laetitia, mostrando que no cumple su propia llamada a hablar con un lenguaje adecuado de los temas de familia y que no se ajusta al ejemplo de Cristo.

"Si no te gusta mi opinión, pues muy bien, siempre puedes censurarla"

Lo que no me gusta es la falta de cortesía.

"Y encima poniendo en pie de igualdad al Papa ("por eso todos, desde el Papa hasta el último bautizado, debemos esforzarnos por parecernos cada día más a Jesucristo, recibiendo su gracia y siguiendo su ejemplo en todo") cuando se supone, creo yo, me parece, quizas, que deberia estar algunos escaloncitos por encima. Porque me parece, creo yo, tal vez, quizas, que es el Vicario de Cristo y no "cualquier bautizado""

De nuevo, no ha entendido lo que ha leído. Decir "desde el papa hasta el último bautizado" implica necesariamente que el Papa no es "cualquier bautizado", porque no tendría sentido decir "desde cualquier bautizado hasta el último bautizado".

Por otra parte, en algunas cosas hay (evidentes) diferencias entre el Papa y los demás bautizados y en otras hay similitud o igualdad. Por ejemplo, todos los bautizados (incluido el Papa) han sido redimidos por Cristo, todos tienen que vivir según la ley divina, todos están llamados a ser santos y un larguísimo etcétera. Dentro de ese etcétera está el hecho de que los bautizados (incluido el Papa) no son perfectos y dejan que desear en multitud de ocasiones.

Un saludo.
13/04/16 4:55 PM
  
Bruno
Martin:

De acuerdo. Buena e interesante apreciación.

Como decía, todas las herramientas valen para algo. A mí no me molesta en sí la categoría de "uniones irregulares", pero creo que hay que usarla en un contexto jurídico, siendo consciente de los riesgos y sin sustituir a la categoría tradicional.

Es interesante que una categoría creada precisamente para explicar por qué unas personas no pueden comulgar se termine utilizando para decir que sí pueden hacerlo.
13/04/16 5:04 PM
  
Menka
El hereje Nestorio "se expresaba con una gran cantidad de palabras, mezclando cosas verdaderas con otras que eran difíciles de entender; mezclando a veces una cosa con la otra de tal manera que también era capaz de confesar las cosas que él mismo las negó anteriormente y, al mismo tiempo y por el contrario, poseía una habilidad para negar esas mismas frases que acaba de confesar. "

Papa Pío VI, Constitución Apostólica Auctorem Fidei, (1794)
13/04/16 5:06 PM
  
Karkax
Querido Bruno ha dicho usted antes: "Casos de pecado objetivo pero sin pecado subjetivo o con pecado subjetivo de menor gravedad. Son los casos de responsabilidad atenuada, por ejemplo por locura, ignorancia, inmadurez, etc. Estos casos ciertamente son adulterio, aunque la culpa del interesado pueda variar."

Entiendo que por locura se pueda decir que la culpa del pecador en el adulterio sea menor, por ignorancia no me imagino que casos pueden ser excepto que sea que te han violado mientras estabas sedad@ y no te has dado cuenta, pero ¿por inmadurez? En serio explíqueme lo porque voy a estallar.
13/04/16 6:13 PM
  
blaloma
Todos sabemos lo que pasa y nadie sabe qué hacer. Todo esto es muy triste y muy desconcertante. Yo estoy deseando que alguien se levante y hable con claridad. Ya no puedo más con tanto subterfugio y tanta traducción y tanto hacerse los suecos.

13/04/16 6:26 PM
  
luis
Falta claridad, falta definición, falta magisterio real, falta valentía. Todo lo que debe hacer y ser un Papa.

Quizás la más justa definición de la Amoris Laetitia es que se trata de un caso claro de mala praxis pontificia.

Así de simple.
13/04/16 6:30 PM
  
Luis I. Amorós
Número de palabras de los cánones del Concilio de Trento: 9.735

(fuente: www.intratext.com/IXT/ESL0057/_STAT.HTM)

Número de palabras de la exhortación apostólica Laetitia amoris: 63.060
13/04/16 6:31 PM
  
Philip Callaghan
Bruno,

Llamar "adúltero", "zorro" o "nido de víboras" a personas que nos parezcan que llevan una vida semejante a Herodes o a los fariseos no hace que nos parezcamos más a Jesús.

Decir que la palabra adúltero esta desfasada es lo mismo que decir que no se adapta a las costumbres de este tiempo ( aunque el concepto sea el mismo) y que es preferible usar otros calificativos, como dice el papa en el punto 243. (Quizá al papa no le gusta esa palabra y por eso no la utiliza en toda la Exhortación). Decir esto no va contra la tradición.

Las críticas veladas controla Exhortación pueden crear cofusión (como le ha pasado a mi compañera de comentarios Gabriela), la misma confusión y ambigüedad de la que muchos se quejan que hay en Amoris laetitia.

Un saludo.

13/04/16 6:38 PM
  
Palas Atenea
Sigo diciendo que "aunque la mona se vista de seda, mona se queda" y los eufemismos sólo lo son mientras conviven con la palabra original, después de eso la sustituyen. De manera que cualquier palabra o circunloquio que sustituya a viejo, adúltero, sandio, bodoque, guapo o rijoso acaba teniendo la misma fuerza que aquellos adjetivos obsoletos, en razón de que los adjetivos calificativos son absolutamente necesarios y sólo desaparecen cuando no hay nada ni nadie que calificar. Es decir que si la Iglesia retira el adulterio-con las dificultades que eso tiene en las traducciones de los Evangelios-el adúltero/a desaparecerá; pero si no lo hace cualquier eufemismo que lo sustituya será entendido igual.
Es más: me tomé la molestia de contabilizar las veces que el sustantivo justicia y el adjetivo justo aparecían en los Evangelios.
En la Biblia Nácar-Colunga de la BAC (1974) (1) este es el resultado:
Evangelio de San Mateo: 14 menciones
Evangelio de San Marcos: 2 menciones
Evangelio de San Lucas: 10 menciones
Evangelio de San Juan: 0 menciones
En la Nueva Biblia de Latinoamérica (2), Ricciardi-Hurault (1972) de Ediciones Paulinas los justos se esfuman:
1) Lc. 1, 5-6 "Hubo en los días de Herodes, rey de Judea, un sacerdote de nombre Zacarías, del turno de Abías, cuya mujer de la descendencia de Arón. se llamaba Isabel. Eran ambos JUSTOS en la presencia de Dios, e irreprensibles caminaban en los preceptos y observancias del Señor"
2) Lc. 1, 5-6 "En tiempos de Herodes, rey de Judea, hubo un hombre que se llamaba Zacarías. Era un sacerdote del grupo de Abías. La esposa de Zacarías se llamaba Isabel y era descendiente de una familia de sacerdotes. Zacarías e Isabel eran PERSONAS REALMENTE BUENAS a los ojos de Dios; vivían de acuerdo a todos los mandamientos y leyes del Señor"
Es decir, por arte de birlibirloque ya no hay justos sino personas realmente buenas. Supongo que como ambas son traducciones del original, que está en griego, desconozco la palabra exacta que había que traducir pero para un judío el justo "tzadik" siempre se traduce por justo y éste es un concepto imprescindible para entender los Evangelios.
Las personas que lean esta segunda biblia tendrán que tener in mente la misma idea del justo.
Así que si adúltero va a ser sustituido por palabra o larga explicación sustitutiva (Observen el "personas realmente buenas" (3) para sustituir a "justos" (1) esperemos que en el camino no se pierda también el significado. ¡Ay, Dios mío!
13/04/16 7:00 PM
  
Almudena 1
Imagínate confesando los pecados pero no, pecados no, situaciones irregulares.
Padre, tengo una situación irregular, bebo irregularmente, gano dinero irregularmente, soy irregular cuando hablo de mis hermanos soy irregular para madrugar....
No me lo estoy tomando a guasa Bruno, al revés me ha hecho pensar la idiotez de no hablar con Verdad pareciendo que así se aminoran las culpas y los fallos.
Gracias por tu artículo, muy bueno.
13/04/16 7:15 PM
  
Bruno
Karkax:

Supongo que los canonistas y aficionados al derecho canónico que vienen por el blog podrían responder de forma más concreta, con casos reales, pero le daré un ejemplo muy claro: es de todos conocidos que, si la inmadurez es muy pronunciada, puede haber nulidad matrimonial por incapacidad de asumir las obligaciones del matrimonio (véase el canon 1095). En ese caso, si el matrimonio fue nulo, posteriormente no puede haber adulterio (porque sin matrimonio no hay adulterio). Creo que se trata de un caso que no es polémico en absoluto.

Otro caso: una chica de 16 años que es seducida por un cuarentón casado. Es muy probable que la culpabilidad de la chica esté disminuida (incluso totalmente) por su falta de madurez y la diferencia de edades.

En cuanto a la ignorancia, yo he conocido personalmente algún caso de persona que pensaba sinceramente que la Iglesia ahora aceptaba el divorcio y la convivencia como algo normal. La confusión cada vez más grande de la sociedad y la falta de valentía al hablar (o directamente la heterodoxia) de tantos clérigos hacen que ese caso cada vez sea más frecuente.

Por supuesto, después de que habláramos se terminó el atenuante ignorancia, pero hasta entonces existió.
13/04/16 7:25 PM
  
Bruno
Philip:

No ha reconocido usted todas las cosas en las que claramente se equivocó en su anterior comentario y que le mostré (ni ha intentado, al menos, rebatir mis argumentos). Si no se hace algo así, es imposible la discusión y no hay más que una especie de lucha para ver "quién gana".

"Llamar "adúltero", "zorro" o "nido de víboras" a personas que nos parezcan que llevan una vida semejante a Herodes o a los fariseos no hace que nos parezcamos más a Jesús"

Me temo que esa afirmación es engañosa. Hacer eso no necesariamente hace que nos parezcamos más a Jesús. Pero utilizar calificativos duros cuando debe hacerse según el ejemplo de Jesús sí que hace que nos parezcamos más a él. De modo que sus objeciones sobre cómo se van a sentir los interesados son erróneas, porque condenarían igualmente al mismo Cristo. Es algo evidente.

"Decir que la palabra adúltero esta desfasada es lo mismo que decir que no se adapta a las costumbres de este tiempo ( aunque el concepto sea el mismo)"

Esta afirmación no se basa en nada, es pura afirmación suya, porque usted lo dice. Tendrá que haber alguna demostración de que esa palabra está "desfasada" (si es que eso quiere decir algo), de a qué costumbres no se adapta (si es que tiene sentido que una palabra se "adapte" a las costumbres) y de que resulta relevante que esté "desfasada". En realidad, fuera de que una palabra no se entienda, es una objeción sin sentido.

Como ya le mostré, nadie omite esa palabra porque esté "desfasada" o no se entienda, sino al contrario, porque se entiende perfectamente lo que quiere decir. Y eso muestra que la omisión es mala y, en algunas personas, directamente dirigida a transmitir la idea de que el adulterio, en algunas circunstancias, es bueno.

Y como le mostré, todos las palabras supuestamente equivalentes que dio y que quería que sustituyeran a la palabra "adulterio" no eran equivalentes en absoluto.

El solo hecho de que no se le ocurra de forma inmediata un sinónimo muestra que no tiene sentido callar la palabra adulterio, que es la que refleja claramente la situación de la que estamos hablando.

"y que es preferible usar otros calificativos, como dice el papa en el punto 243"

El papa no dice eso. El papa dice lo que he puesto arriba, sobre no discriminar. Y he mostrado que, al contrario, no usar la palabra apropiada es lo que verdaderamente discrimina, porque es algo que no se hace con los demás pecados y da a entender que los pobres adúlteros son incapaces o irresponsables.

"(Quizá al papa no le gusta esa palabra y por eso no la utiliza en toda la Exhortación)"

Los gustos del Papa son asunto suyo particular. Desde luego, no son relevantes en una discusión.

"Decir esto no va contra la tradición"

Lo que va contra la tradición es pensar que no hay que usar palabras claras al hablar del pecado, pensando que lo importante es cómo se van a sentir los pecadores y ser políticamente correctos. En realidad, importante es la enseñanza de una fe no adulterada y la conversión de los pecadores.

"Las críticas veladas controla Exhortación pueden crear cofusión (como le ha pasado a mi compañera de comentarios Gabriela), la misma confusión y ambigüedad de la que muchos se quejan que hay en Amoris laetitia"

De nuevo, una afirmación engañosa. No hay en mi artículo una crítica velada contra la Exhortación. Lo que hay es una crítica respetuosa. Me difama usted sin razón alguna para ello.

Por otra parte, la confusión entre algunos lectores que no leen con atención el artículo o proyectan sobre él sus propias obsesiones es, por desgracia, inevitable.
13/04/16 7:39 PM
  
Bruno
Luis I.:

Sí, la inflación de los textos magisteriales (en número y longitud) ha producido inevitablemente una devaluación de los mismos.

O logorrea, como decían los clásicos
13/04/16 7:43 PM
  
Palas Atenea
Pues a ver si retomamos los clásicos en latín o griego, o al menos las payadas gauchas: "Aunque el discurso sea largo/no por eso ha de ser cierto/dejá que los inexpertos/le rindan un homenaje/por el largo del cuchillo/no se calcula el coraje".
13/04/16 8:14 PM
  
Luis I. Amorós
¿Os acordáis de cuando publicaban una encíclica y no hacían falta 539 artículos para explicarla?
13/04/16 8:18 PM
  
Luis I. Amorós
El fondo de la cuestión que se debate en estos días que nos han tocado vivir no es si Cristo es misericordioso, sino si es exigente.
13/04/16 8:19 PM
  
Luis I. Amorós
"Luis I.:

Sí, la inflación de los textos magisteriales (en número y longitud) ha producido inevitablemente una devaluación de los mismos.

O logorrea, como decían los clásicos"

Estimado Bruno: si el conteo de antes te ha gustado, este te va a encantar.

Número de palabras de los cánones del Concilio de Nicea: 2.117

(fuente, en inglés: www.fourthcentury.com/nicaea-325-canons/)

Si añadimos el signo (credo) niceano, nos sale la escalofriante cifra de 2.281 palabras, incluyendo la profesión básica de la fe.

Y les dio tiempo a condenar a Pablo de Samosata, la usura o los clérigos que habían apostatado en las persecuciones, entre otros muchos temas.
Y hasta a tratar asunto tan peregrino como el de los curas que habían sido castrados...

Para que luego digan que no existe la eficiencia en la Iglesia.

13/04/16 8:36 PM
  
Juan Andrés
Luego de leer tu comentario, más el de Fray Nelson, el del Padre Iraburu, los de L.F, y otros de distintas páginas, en todos los cuales se muestran graves riesgos interpretativos, inexactitudes, remisiones a otros autores mal entendidas (o deliberadamente mal usadas), ambigüedades, uso de lenguaje inapropiado o ideologizado, etc, llego a la conclusión que una exhortación así es para la Iglesia lo mismo que el tambor de una Colt para la víctima en el juego o tortura de la ruleta rusa. Si bien hay cámaras vacías, que ante cada intento de disparo se genera un respiro, la víctima sabe que tarde o temprano le volarán la cabeza si el proceso no se detiene a tiempo.
13/04/16 8:55 PM
  
Cindy
Excelente! Bravo! No lo pude haber dicho mejor. Gracias!
13/04/16 9:22 PM
  
Antonio1
Mirar a las personas como hizo Cristo.

La Iglesia sigue caminando con la ayuda del Señor.
13/04/16 10:29 PM
  
Palas Atenea
Otro problema para los que matizan tanto para no ofender es tratar con San Juan Bautista, convertir al Bautista, que es un santo ígneo, en un merengue azucarado es acabar con este santo. Y lo mismo digo de las predicaciones de ciertos dominicos. Y San Pablo llamando insensatos a los gálatas, no digamos.
Nunca hemos tenido problema para leer textos así pero si no llamamos al pan, pan, y al vino, vino, puede que tampoco podamos leer a los Padres de la Iglesia ni ningún texto escrito antes del año 2000.
En siglos pasados, que no había libros infantiles, muchos aprendían a leer y a escribir con textos como El Quijote o La Divina Comedia. No es extraño que su vocabulario fuera mucho más rico y preciso. Ahora no llegamos a leerlos ni con 50 años. En una clase a la que acudí de por lo menos veinte personas, ninguno de ellos sabía el significado de hilarante. Vamos bien.
13/04/16 10:34 PM
  
Antonio1
Ambigüedades, falta de claridad, verborrea, afirmaciones difícilmente compatibles con lo dicho anteriormente, inexactitudes, mundanización, documento meramente pastoral que no afecta al magisterio. Esto es un déjà vu de lo que dijo un sector de la Iglesia cuando el Concilio Vaticano II. Nihil novum sub sole.
13/04/16 10:38 PM
  
Palas Atenea
Eso es fácil, Antonio 1, haznos una síntesis del texto que es lo que se pide para ver si uno se ha enterado. Yo no puedo hacerla, ese es mi problema, pero como tú no lo tienes con cien palabras tendrás bastante. Te quedaré agradecida.
13/04/16 10:50 PM
  
Curro
¿Y qué les parece a ustedes la confusión intencionada —que también aparece en el documento y en un tuit posterior— entre los impedimentos para recibir la comunión sacramental y la pena canónica de excomunión? No es un eufemismo —si acaso un disfemismo— pero sí, ciertamente, una adulteración del lenguaje.
13/04/16 10:56 PM
  
DJ L
Sr. Bruno (antes de nada, gracias por su tiempo para escribir, como a todos los bloggers de Infocatólica):

"Lo mismo sucede con el adulterio. Nada de raro hay en eso. Siempre ha sido así. Por eso hay tribunales de nulidad, por ejemplo"

No estoy de acuerdo con usted. No es lo mismo anular que declarar nulo. Si hay adulterio es porque hay matrimonio.

En el adulterio no hay término medio, como sucede con el NO MENTIRÁS donde hay una gradación: Desde una mentira "venial" que usamos para justificar llegar tarde un día al trabajo hasta una calumnia que deja a un padre de familia sin trabajo.

Adulterio es fornicar con el agravante de que uno de los fornicadores (o ambos) están casados con otro. No hay "excepciones excepocionalísimas", incluso, basta el desear para adulterar en el corazón. No es un pecado cualquiera, no sólo es fornicar sino también una forma de robo.

El Papa, con todo el amor que le tengo por ser simplemente el Papa, no condenó con dureza el pecado. No me gusta para nada su exhortación y no hay más que ver los comentarios para ver que no gusta. ¿Un Sínodo de dos años para esto?

13/04/16 11:00 PM
  
Luis I. Amorós
"Mirar a las personas como hizo Cristo."

Como pecadores, que es lo que todos somos. Como pecadores que necesitan arrepentimiento. Sin arrepentimiento no hay reconciliación con Dios, no hay inundación del alma por el Espíritu Santo.
Sin arrepentimiento no dejamos actuar a la misericordia del Señor. Mantenemos las puertas cerradas.

Sin arrepentimiento no hemos iniciado aún la vuelta a la casa del Padre, que nos espera en la azotea con paciencia y amor infinitos.

No arrepentirse del pecado es mantener querella con Dios. No te acerques al altar si mantienes pendencia u ofensa con tu hermano. ¡Cuánto más nos habremos de abstener de acercarnos al altar si nuestra querella es con Dios!

Ve primero al confesionario y pídele perdón, arrepiéntete de corazón y haz propósito de enmendarte y no pecar más. Y entonces, sí, acércate a comulgar lleno de gozo, temblando de amor, asombro y vértigo de que Cristo te invite a su mesa.
Sin merecerlo. Ninguno.

La Eucaristía no la merecemos nadie. Es un regalo increíble que el Creador nos ha hecho por medio de su Hijo.
A la Eucaristía no te acercas con exigencia y arrogancia, como si fueses satanás en el alero del templo, o en la montaña más alta.
Te acercas con contrición, con agradecimiento, con infinita conciencia de tu falta de merecimiento para tamaño don.
13/04/16 11:02 PM
  
Antonio1
Así es, hay que arrepentirse de aquellos pecados que lo son según la Iglesia antes de comulgar.
13/04/16 11:27 PM
  
¿SedeVacante?
[...]

Tambien censuraís todos mis comentarios que llevo haciendo durante todo este "papado" (Luis Fernando, despues de censurarme un comentario bastante comedido sobre la renuncia de Ratiznger me llamó "satanás". MIentras a los verdaderos [...] liberales-modernistas como Antonio1 lo dejais pulular con sus insinuaciones y blasfemias.
14/04/16 12:10 AM
  
Palas Atenea
De acuerdo, pero un adúltero tiene difícil el propósito de enmienda en la mayoría de los casos. También le es difícil a un corrupto, que tendría que desprenderse del dinero mal adquirido, pero lo otro es objetivamente más complicado. En tiempos de Jesús todos sus seguidores dejaban cuanto tenían para seguirle, incluyendo a sus familias, pero ahora el seguimiento se hace desde nuestros vidas ordinarias, lo que implica no un desprendimiento total sino de aquello que lastra con el pecado. El adulterio es uno de esos casos.
Hay pecados mortales puntuales, como el asesinato, pero el adulterio en muchos casos es pertinaz.
14/04/16 12:30 AM
  
Bruno
¿Sedevacante?:

Supongo que entiende que los insultos al Papa, el director de InfoCatólica, los blogueros de InfoCatólica y los demás comentaristas (no sé si me dejo a alguien) están de más.

Por otra parte, quizá le alegre saber que en otros posts he borrado unas cuantas veces a Antonio1. ¿Mal de muchos, consuelo de sedevacantistas?
14/04/16 12:53 AM
  
Ricardo de Argentina
Bruno, me ha parecido inspirada la idea que te ha movido a escribir este artículo, que me hace recordar a algunas figuras y refranes de la retórica cotidiana:
El "cazador cazado".
El "tiro por la culata".
"Consejos vendo que para mí no tengo".
14/04/16 12:56 AM
  
Bruno
Antonio1:

"Esto es un déjà vu..."

Otra vez. Ni un sólo argumento. Sólo insinuaciones despectivas sobre blogueros y lectores. Y el tema tratado, como si no existiera.

¿De verdad no te das cuenta de que eso no aporta nada a la discusión? Por favor, argumentos racionales.
14/04/16 1:01 AM
  
Bruno
DJL:

"Sr. Bruno (antes de nada, gracias por su tiempo para escribir, como a todos los bloggers de Infocatólica)"

De nada. Gracias a usted por leerme.

"No estoy de acuerdo con usted. No es lo mismo anular que declarar nulo. Si hay adulterio es porque hay matrimonio"

Lo siento, no entiendo a qué se refiere.

"En el adulterio no hay término medio, como sucede con el NO MENTIRÁS donde hay una gradación: Desde una mentira "venial" que usamos para justificar llegar tarde un día al trabajo hasta una calumnia que deja a un padre de familia sin trabajo. Adulterio es fornicar con el agravante de que uno de los fornicadores (o ambos) están casados con otro. No hay "excepciones excepocionalísimas", incluso, basta el desear para adulterar en el corazón. No es un pecado cualquiera, no sólo es fornicar sino también una forma de robo".

Lo que está diciendo es que el adulterio siempre es materia grave. Y, en efecto, así es. Sin embargo, algo completamente distinto son las circunstancias atenuantes, que pueden existir en cualquier pecado.

El asesinato también es materia grave, pero es evidente, por ejemplo, que si alguien se vuelve loco, no sería responsable de un posible asesinato que pudiera cometer.

Lo mismo sucede con el adulterio. Hay atenuantes y eximentes que restan responsabilidad subjetiva, aunque la materia objetiva sea grave.

Puede creerme: esto no es nuevo, ni de este papado ni siquiera del siglo XX. Es simplemente la doctrina constante de la Iglesia.

"El Papa, con todo el amor que le tengo por ser simplemente el Papa, no condenó con dureza el pecado"

Soy de la misma opinión. Al menos algunos pecados.

"¿Un Sínodo de dos años para esto?"

Fue un sínodo bastante desastroso, la verdad, así que no es extraño que el resultado también deje que desear.
14/04/16 1:12 AM
  
Bruno
Curro:

Ciertamente, muy desafortunado. Era evidente que eso iba a crear confusión entre los fieles, que asocian habitualmente la excomunión y la prohibición de recibir la comunión. Y de forma completamente innecesaria, porque nadie ha afirmado nunca que los divorciados en una nueva unión estuvieran excomulgados.
14/04/16 1:16 AM
  
Juan Argento
"La caridad no está ni puede estar reñida con la verdad."

Es que ese es justamente el error intelectual en la raíz del enfoque kasperiano de la misericordia: disociar el bien de la verdad, no sólo de la verdad sobre el hombre sino incluso de la verdad sobre Dios.

Voy a demostrar esto que acabo de decir reproduciendo la parte relevante de un artículo que lee pasé ayer a Bruno. (Bruno, si te parece que el comentario es off-topic borralo, no hay problema.)

En el libro que Kasper publicó en 2012, "La misericordia. Clave del Evangelio y de la vida cristiana", y que fue calurosamente elogiado por el Papa en su primer Angelus, Kasper vuelve sobre el tema de la inmutabilidad de Dios, a la que en un escrito de 1967 había directamente negado, lo cual es una posición herética, como veremos.

Ahora Kasper es más cuidadoso y empieza diciendo: "la determinación metafísica de la esencia de Dios [...] de ninguna manera debe ser fundamentalmente cuestionada", pero después sigue: "dentro de los parámetros de los atributos metafísicos de Dios escasamente hay lugar para un concepto de misericordia", para llegar finalmente al tema del escrito de 1967: "El punto de partida metafísico tradicional de la doctrina de Dios trae consigo un problema adicional para hablar acerca de la misericordia divina. Concretamente, si Dios es el Ser Mismo, entonces la absoluta perfección del ser de Dios sigue de esta absoluta plenitud de ser. Tal perfección implica la incapacidad de Dios de sufrir, porque el sufrimiento debe ser entendido como una deficiencia." En realidad implica todavía más que eso, la imposibilidad de cambiar, pero en principio hasta ahí todo va bien ¿Se habrá vuelto ortodoxo? Sigamos leyendo: "Sobre la base de su punto de partida metafísico, la teología dogmática tiene dificultad de hablar de un Dios compasivo. Tiene que excluir la posibilidad de que Dios sufre con sus criaturas en un sentido pasivo; puede hablar solamente de piedad y misericordia en el sentido activo de que Dios se opone al sufrimiento de sus creaturas y les provee asistencia. La pregunta que subsiste es si esto corresponde satisfactoriamente al entendimiento bíblico de Dios, que sufre con sus creaturas, que como misericordioso tiene un corazón con el pobre y para el pobre. ¿Puede un Dios que es concebido tan apatéticamente ser realmente com-pasivo?" (traduzco así el "sympathetic" de la edición inglesa).

La última pregunta fue contestada en la afirmativa hace siglos, por ejemplo por Santo Tomás en ST I, q.21, a.3. ¿Mencionará esa respuesta Kasper? Lamentablemente no:

"Pastoralmente, esta concepción de Dios es una catástrofe. [...] la proclamación de un Dios que es insensible al sufrimiento es una razón por la que Dios ha pasado a ser ajeno y finalmente irrelevante para muchos seres humanos."

Aprecien bien la gravedad de lo que acaban de leer: Kasper dice que una verdad básica sobre Dios es pastoralmente una catástrofe. Y lo dice en el libro de 2012 elogiado por el Papa.

(La inmutabilidad divina, definida dogmáticamente entre los atributos divinos por los Concilios Ecuménicos Letrán IV y Vaticano I y que obviamente implica la impasibilidad, es una verdad básica porque el Ser Absoluto, la absoluta plenitud del Ser, es necesariamente inmutable.)

Obviamente es fácil mostrar que la inmutabilidad divina no es ninguna catástrofe a nivel pastoral sino todo lo contrario, pero alargaría demasiado el comentario y no es el punto. El punto es que disociar la pastoral de la verdad está en la raiz de la posicion kasperiana.
14/04/16 6:32 AM
  
Juan Argento
Aclaro que mi cita del libro puede diferir ligeramente del texto de la edición castellana, al que no tengo acceso, porque yo traduje de la edición en inglés que está online aquí:

books.google.com/books?id=GDArAwAAQBAJ

El texto traducido está en la página resultante de buscar "apathetically".
14/04/16 6:36 AM
  
Luis Fernando
¿Qué posibilidades había de interpretar un texto magisterial de San Juan Pablo II o Benedicto XVI de forma heterodoxa? Prácticamente ninguna a menos que se tuviera una mente retorcida.

El magisterio petrino, que como todo magisterio se puede ejercer bien o mal, está para confirmar en la fe, no para crear confusión, dudas, enfrentamientos doctrinales y/o pastorales, etc.
14/04/16 8:14 AM
  
Luis Fernando
Philip Callaghan:La palabra adulterio está completamente desfasada en el mundo de hoy.

LF:
Le rogaría que nos diera una lista de palabras desfasadas de Cristo en el mundo de hoy. Porque claro, no creo que solo sea "adulterio". Supongo que "infierno", "conversión", "pecado" estarán en la lista.

Ya puestos, digamos que gran parte del evangelio está completamente desfasado en el mundo de hoy. ¿Solución? Nos cargamos el lenguaje del evangelio que no soporta el mundo. O sea, nos cargamos en el evangelio. Todo sea por la causa...
14/04/16 8:19 AM
  
Luis Fernando
Re-redacción del evangelio:

Lucas 16,8
Todo el que repudia a su mujer y se casa con otra, es un divorciado vuelto a casar; y el que se casa con la repudiada por su marido, es un divorciado vuelto a casar.

Luc 18,20
Ya conoces los mandamientos: "no te divorcies y vuelvas a casar, no matarás, no robarás, no dirás falso testimonio, honra a tu padre y a tu madre".

14/04/16 8:24 AM
  
Philip Callaghan
LF y Bruno:
Obviamente no pretendo reescribir el Evangelio. Reconozco que decir que adulterio es una palabra desfasada no es correcto.
Mi interpretación sobre la frase "utilizar un lenguaje adecuado para que no se sientan discriminadas" creo que la ilustró mejor con un ejemplo:
Si te estás tomando una cerveza con un amigo y le dices: sabes que vivir con una mujer que no es la tuya es un pecado? Es diferente a decirle...sabes que estas cometiendo adulterio?
Creo que las 2 dicen lo mismo pero de diferente forma. Yo escogería la 1ª. Lo incorrecto sería no decirle que eso es pecado.
Me parece que el papa se refiere a la forma de decir las cosas, no a la sustancia.
14/04/16 10:32 AM
  
Philip Callaghan
Bruno,

Al comienzo de su artículo pensé que utilizaba una frase del Papa para (como si de un boomerang se tratase) volverla en contra del sentido que el Santo Padre quería darle. Pensaba que estaba siendo irónico y ambiguo y por eso le quise rebatir con las mismas armas.
Si le he interpretado mal le pido perdón.
14/04/16 10:38 AM
  
Philip Callaghan
Bruno,
Dice: "me llama muchísimo la atención que usted afirme que el Papa cree que Cristo, infinidad de santos y el Catecismo discriminan (injustamente) a las personas. Yo no me atrevería a decir algo así"

Yo ni he dicho eso, ni he dado a entender eso, ni lo pienso.

Yo he dicho que el Papa pide utilizar un lenguaje para que no se sientan discriminados. Una cosa es sentirse discriminado (algo subjetivo) y otra bien distinta es discriminar (algo objetivo).
14/04/16 10:46 AM
  
Philip Callaghan
Bruno,
Dice: "el Papa puede preferir lo que quiera. Lo que importa es qué es lo correcto"

No veo dónde está lo incorrecto al decir que se debe utilizar un lenguaje adecuado para que no se sientan discriminados. Lo incorrecto sería decir que algo que es pecado no lo es. Pero la forma de decir las cosas es opinable.

Puede ser más efectivo con unas personas determinadas ser más directo y con otras ser más delicado. Con ambas se estaría haciendo lo correcto.
14/04/16 10:58 AM
  
Philip Callaghan
El Papa es la persona que representa la unidad de la Iglesia. Las críticas públicas a él desde webs católicas me parece que genera desconfianza y dificultan esta unidad. Quizá tanto como desde los medios progres (tipo RD) que descontextualizan frases de Fco y ocultan otras según sus propios intereses.

A un Papa se le puede criticar por sus formas, por supuesto. Pueden gustar más o menos. Pero igual que si no nos gustan cosas de nuestra madre no nos vamos al ágora a difundirlas pienso que tampoco deberíamos hacerlo con el Santo Padre.

Desde Infocatólica se nos ha dicho que se iba a interpretar "Amoris laetitia" desde la tradición y el magisterio de la Iglesia, como no puede ser de otra forma. Sigan haciéndolo, por favor.
14/04/16 11:10 AM
  
Antonio1
Bruno, he desistido de hacer razonados y complejos argumentos en infocatólica, me llevan tiempo y después no se publican. Tardo tiempo en buscar citas magisteriales que simplemente citó sin añadir nada y luego no se publican. El el blog delnpadre Aberasturi tengo multitud de ejemplos, comentarios que soñándolo citas del cardenal MÜller o de la Evangelii Gaudium, sin un solo añadido de mi cosecha y no se publican porque contradicen lo expuesto por el autor. No apetece debatir así, porque se cierran los debates en falso. Yo dedico tiempo y esfuerzo a argumentar si sé que no se van a cerrar debates en falso.
Por otra parte tampoco está de más recordar que lo que para muchos es un tiempo confuso y turbulento es algo normal en la historia de la Iglesia y que basta ir unas décadas atrás para encontrar situaciones muy similares y la Iglesia sigue caminando con la ayuda del Señor.
14/04/16 11:54 AM
  
Antonio1
Que yo aparezca a ojos de algunos como un "liberal-modernista" dice mucho del grado de extremismo en el que se colocan.
14/04/16 11:55 AM
  
Bruno
Antonio1:

"Bruno, he desistido de hacer razonados y complejos argumentos en infocatólica, me llevan tiempo y después no se publican".

Si has desistido de argumentar, entonces quizá sea mejor que no comentes en este blog, que es para eso. Recuerda que las insinuaciones, etc. no son argumentos. Y que es una falta de cortesía que protestes contra otros blogueros en este blog.

"Tardo tiempo en buscar citas magisteriales que simplemente citó sin añadir nada y luego no se publican".

No sé en otros posts, pero eso tampoco ayuda nada, porque a menudo (en mi experiencia) los pones como si fueran significativos, cuando en realidad lo que sucede es que no has entendido lo que decían. Pero como no añades expresamente tu postura o lo que crees que dicen, resulta imposible rebatirte o explicarte toda la doctrina de la Iglesia y el resultado es que la cosa queda como una simple insinuación. Si quieres decir algo, tómate el trabajo de decirlo y se debatirá. Lo demás son formas de actuar infructuosas y molestas para los demás.

"No apetece debatir así, porque se cierran los debates en falso".

No creo que te convenga ir por ahí precisamente a ti.

"Yo dedico tiempo y esfuerzo a argumentar si sé que no se van a cerrar debates en falso."

Lo bueno de tus comentarios es que no han perdido la capacidad de asombrarme.

"Por otra parte tampoco está de más recordar que lo que para muchos es un tiempo confuso y turbulento es algo normal en la historia de la Iglesia"

Este tipo de afirmaciones no son argumentos. El hecho de que las confusiones y turbulencias hayan sido frecuentes en la historia de la Iglesia no quiere decir que sean normales y mucho menos buenas. Del mismo modo que el hecho de que el pecado sea habitual no lo hace normal.

"y que basta ir unas décadas atrás para encontrar situaciones muy similares"

Eso tampoco es un argumento. Es como si yo te dijera que adulterar es malo y tú me dijeras que ayer adulteró el vecino del quinto. ¿Y qué?

"y la Iglesia sigue caminando con la ayuda del Señor."

Cierto, gracias a Dios.
14/04/16 2:48 PM
  
Bruno
Antonio1 (II):

"Que yo aparezca a ojos de algunos como un "liberal-modernista" dice mucho del grado de extremismo en el que se colocan."

Hombre, considerarte a ti mismo como el estándar por el que se deben juzgar las posiciones de todo el mundo parece algo egocéntrico, ¿no?

Si en el renacimiento se pasó del teocentrismo al antropocentrismo, quizá el siglo XXI marque el paso del antropocentrismo al antoniocentrismo.

[Lo siento, no he podido evitar el juego de palabras; si quieres lo borro]
14/04/16 2:51 PM
  
Palas Atenea
Recuerdo, hace ya mucho tiempo, en una discusión le dije a Antonio 1 que dejara de hablar por boca de ganso porque tomaba trozos de encíclicas, de homilías y de libros y nunca decía nada por su cuenta y riesgo. Resulta molesto que a alguien que toma ideas de Juan Pablo II se le conteste con otras de Benedicto XVI como si alguna vez ambos hubieran estado en conflicto, con el peligro que tiene hacer corta y pega. Yo no creo que sea un liberal-modernista, si eso le consuela, la verdad es que lo considero inclasificable.
14/04/16 4:11 PM
  
Juan Argento
"El Papa es la persona que representa la unidad de la Iglesia."

El Papa no "representa" la unidad de la Iglesia, sirve a la unidad de la Iglesia en tanto y en cuanto es fiel a Cristo, para lo cual es divinamente asistido. Pero la efectividad de la asistencia divina está garantizada solamente para el Magisterio extraordinario ex-cathedra. En su magisterio ordinario puede no cooperar con, o incluso resistir, esa asistencia.

14/04/16 4:33 PM
  
Feri del Carpio Marek
Bruno, con la misma forma de argumentar, ¿no podría decirse que desconfiar de la capacidad de discernimiento y buen juicio de los pastores de la Iglesia, y demás fieles, es discriminarlos? ¿Tratar de ser preciso y específico donde pueden darse situaciones muy complejas, no sería tratar a los pastores de inmaduros?
14/04/16 5:20 PM
  
Antonio1
No pasa nada, Bruno. 😊 Cuando leí lo escrito me sonreí pensando en que se podría interpretar así. Un argumentador inteligente como tú no podía dejar de pasar la ocasión. Pero sinceramente hasta Luis Fernando reconoce que soy muy moderado ( a veces con pesar, sería más fácil rebatirme si fuera un hereje relativista).

Te dejo la editorial del Alfa y Omega que me parece magnífica:

"No se ponga celoso el sano del enfermo
El Papa ha ofrecido una respuesta realista y esperanzadora a la crisis sin precedentes que atraviesan hoy las familias
Resulta sorprendente la capacidad de Francisco para hacer que un documento estrictamente fiel a una doctrina de dos mil años resulte rompedor. Esto se debe fundamentalmente a dos factores: Amoris laetitia (La alegría del amor) ofrece una respuesta realista y esperanzadora a la crisis sin precedentes que atraviesan las familias, y subraya el sentido original de la doctrina católica, que, antes que con un código normativo cerrado, se identifica con una persona, Jesús de Nazaret, en quien la ley divina alcanza su perfección y se revela como camino para la salvación y la felicidad del ser humano. Repetir machaconamente una serie de principios morales, por verdaderos que sean, no puede generar más que rechazo en quien vive de espaldas a ellos. Esa actitud nos hace parecer prepotentes, hipócritas, insensibles, y a lo sumo sirve para reafirmarnos ante nuestro propio grupo, puesto que tocar el corazón del otro queda por esta vía descartado. La salida misionera que pide Francisco supone acercarse al otro sin juzgar, con una actitud de respeto y misericordia, con paciencia, conscientes de que todos sin excepción estamos necesitados de la gracia. Hemos sido justificados por Cristo, no por nuestros méritos, y por ello hay que extremar la cautela antes de levantar contra nadie el dedo acusador. Es más bien compasión lo que deberían suscitar las incontables víctimas de una cultura enemiga de la familia, que promete las más altas cotas de libertad y termina generando soledad y sufrimiento, especialmente a los más débiles, ya sean niños, ancianos, discapacitados o extranjeros sin recursos. Allí donde hay desgarros humanos debe estar la Iglesia, a la que el Papa compara hoy con un hospital de campaña. La llamada a salir va dirigida a todos, desde los obispos a las familias cristianas. Resulta llamativo que algunos sectores, minoritarios pero significativos, se escandalicen por que se preste una atención especial a las personas en estas situaciones. Como resumía gráficamente a este semanario el cardenal Blázquez al término del Sínodo extraordinario de 2014, «el médico es para los enfermos… ¡El sano no se ponga celoso porque atiende al enfermo!».
14/04/16 5:49 PM
  
Antonio1
Ya que se está argumentando sobre el vacío sobre mis citas, al parecer inapropiadas, ¿por qué no debatimos sobre casos concretos?

Si un blogueron afirma : " La “opción preferencial por los pobres” es un desastre para los mismos pobres en particular, para los países en general y, finalmente, para la misma Iglesia".

Y mi comentario es literalmente el que sigue y no se publica ( no por razones técnicas, porque lo enbié varias veces). ¿Qué cabe deducir, que no cito bien?:


"“197. El corazón de Dios tiene un sitio preferencial para los pobres, tanto que hasta Él mismo «se hizo pobre» (2 Co 8,9). Todo el camino de nuestra redención está signado por los pobres. ...“Cuando comenzó a anunciar el Reino, lo seguían multitudes de desposeídos, y así manifestó lo que Él mismo dijo: «El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido. Me ha enviado para anunciar el Evangelio a los pobres» (Lc 4,18). A los que estaban cargados de dolor, agobiados de pobreza, les aseguró que Dios los tenía en el centro de su corazón: «¡Felices vosotros, los pobres, porque el Reino de Dios os pertenece!» (Lc 6,20); con ellos se identificó: «Tuve hambre y me disteis de comer», y enseñó que la misericordia hacia ellos es la llave del cielo (cf. Mt 25,35s).”
“198. Para la Iglesia la opción por los pobres es una categoría teológica antes que cultural, sociológica, política o filosófica. Dios les otorga «su primera misericordia»163. Esta preiferencia divina tiene consecuencias en la vida de fe de todos los cristianos, llamados a tener «los mismos sentimientos de Jesucristo» (Flp 2,5). Inspirada en ella, la Iglesia hizo una opción por los pobres entendida como una «forma especial de primacía en el ejercicio de la caridad cristiana, de la cual da testimonio toda la tradición de la Iglesia»164. Esta opción –enseñaba Benedicto XVI– «está implícita en la fe cristológica en aquel Dios que se ha hecho pobre por nosotros, para enriquecernos con su pobreza»165. Por eso quiero una Iglesia pobre para los pobres. Ellos tienen mucho que enseñarnos.”...
“Sin la opción preferencial por los más pobres, «el anuncio del Evangelio, aun siendo la primera caridad, corre el riesgo de ser incomprendido o de ahogarse en el mar de palabras al que la actual sociedad de la comunicación nos somete cada día»170.”

Evangelii Gaudium.

Este texto es magisterial. El pasaje está lleno de citas y referencias de otros textos magisteriales de papas anteriores."

Fin de mi comentario.

14/04/16 5:55 PM
  
Antonio1
Envié, errata ☺️
14/04/16 5:56 PM
  
Palas Atenea
Mucho me temo que en la próxima Biblia ya no quiten a los justos para sustituirlos por "personas realmente buenas" sino que el episodio de la mujer adúltera seta traducido por "el episodio de la mujer enferma".
14/04/16 8:14 PM
  
Ricardo de Argentina
"El presidente de la Conferencia Episcopal de Filipinas ordena dar ya la comunión a los adúlteros."
Si esto es una manipulación o por el contrario es una mera consecuencia, podremos discernirlo según las reacciones de la Santa Sede.
Porque se supone que ante una manipulación debería hacer las aclaraciones pertinentes en tiempo y forma.
14/04/16 8:23 PM
  
Ricardo de Argentina
Me ha hecho gracia la reacción de Rafaela en el blog del P. Jorge ante los eufemismos, circunloquios y neologismos: ¡ella no se sale del Astete!.
14/04/16 8:26 PM
  
cos
Philip Callaghan.

Yo he dicho que el Papa pide utilizar un lenguaje para que no se sientan discriminados. Una cosa es sentirse discriminado (algo subjetivo) y otra bien distinta es discriminar (algo objetivo).
---------------------------------

Por eso la importancia del lenguaje, de la precisión conceptual y la claridad en el argumento. Algo que, por otra parte, sumaria en la buena consideración de la Iglesia, si es que esa es la preocupación.
Si una persona en situación de pecado mortal no puede acceder a los sacramentos se produce una situación de discriminación objetiva, sana y necesaria para la salud de su alma.
Que esa misma persona se sienta discriminada, como dices, corresponde al ámbito de lo subjetivo.
Si se siente discriminada, este hecho es reflejo de inteligencia y buen discernimiento. Si no se siente discriminada es que algo no funciona bien en su fuero intelentivo.
Tratar de ocultarle este hecho no es muestra de misericordia sino todo lo contrario. Además supone hacia ella un tratamiento que es impropio por lo que colleba de desprecio hacia su madurez e inteligencia.
Si de lo que se trata es de advertir que sigue siendo un hermano y que como no se le debe de tratar como un "apestado" y si con la consideración necesaria, pues que se diga. Es la mar de sencillo. Hasta Rafaela, la famosa parroquiana del Padre Jorge lo puede entender.
14/04/16 9:14 PM
  
Yolanda
El (no la) editorial de Alfa y Omega es muy bonito pero tiene muy poco que ver con lo que se habla aquí. Creo que nadie puede estar en contra de que se dé una atención pastoral especial e incluso preferente a esas "familias irregulares" , máxime e este momento tan crítico de la historia en que la institución familiar pasa por su peor momento y amenaza con desaparecer, entre otras razones por la plaga del divorcio.

Pero es que no es ése el motivo de nuestra preocupación. En absoluto es ése. Ojalá se tratase de atención pastoral a familias heridas y rotas. Ojalá.
14/04/16 10:43 PM
  
Gonzalo Génova
Bruno,

Hablando de términos técnicamente precisos. Dos bautizados que se casan por lo civil (en primeras nupcias, quiero decir), ¿son fornicarios?

Gracias
14/04/16 10:44 PM
  
Winston Smith
325 puntos constituyen un documento extenso en el que los cambios realmente introducidos por el Papa en la valoración moral del matrimonio, el divorcio y el adulterio en la Iglesia Católica pasan desapercibidos, no porque no estén claramente expuestos, sino porque quedan ocultos entre las muchas reflexiones personales y la descolocación de textos.
15/04/16 1:13 AM
  
Winston Smith
Para quienes aún piensan que es infundada la afirmación de que la exhortación rompe de facto y por la vía de los hechos la continuidad doctrinal de la Iglesia en relación con el matrimonio, entresaco los puntos de esa ruptura:

Punto 1: Los que viven en situación objetiva de pecado pueden participar en ciertos casos de los sacramentos en general y de la Eucaristía, en particular.

305 ... A causa de los condicionamientos o factores atenuantes, es posible que, en medio de una situación objetiva de pecado —que no sea subjetivamente culpable o que no lo sea de modo pleno— se pueda vivir en gracia de Dios, se pueda amar, y también se pueda crecer en la vida de la gracia y la caridad, recibiendo para ello la ayuda de la Iglesia[351].
.....
[351] En ciertos casos, podría ser también la ayuda de los sacramentos. Por eso, «a los sacerdotes les recuerdo que el confesionario no debe ser una sala de torturas sino el lugar de la misericordia del Señor»: Exhort. ap. Evangelii gaudium (24 noviembre 2013), 44: AAS 105 (2013), 1038. Igualmente destaco que la Eucaristía «no es un premio para los perfectos sino un generoso remedio y un alimento para los débiles» ( ibíd, 47: 1039).
....
El discernimiento debe ayudar a encontrar los posibles caminos de respuesta a Dios y de crecimiento en medio de los límites. Por creer que todo es blanco o negro a veces cerramos el camino de la gracia y del crecimiento, y desalentamos caminos de santificación que dan gloria a Dios.

15/04/16 1:14 AM
  
Winston Smith
Punto 2: No existe concrección de los atenuantes para determinar, ni para evitar o corregir si la consideración de ciertos casos podrá aplicarse a pocos, muchos o todos los adulterios.

300 “Si se tiene en cuenta la innumerable diversidad de situaciones concretas, como las que mencionamos antes, puede comprenderse que no debía esperarse del Sínodo o de esta Exhortación una nueva normativa general de tipo canónica, aplicable a todos los casos. Sólo cabe un nuevo aliento a un responsable discernimiento personal y pastoral de los casos particulares, que debería reconocer que, puesto que «el grado de responsabilidad no es igual en todos los casos», las consecuencias o efectos de una norma no necesariamente deben ser siempre las mismas...”

308 “...Comprendo a quienes prefieren una pastoral más rígida que no dé lugar a confusión alguna.”

15/04/16 1:16 AM
  
Winston Smith
Punto 3: Se rompe la universalidad y se introduce la arbitrariedad, dando origen a situaciones injustas dentro de la Iglesia.

300 Los presbíteros tienen la tarea de «acompañar a las personas interesadas en el camino del discernimiento de acuerdo a la enseñanza de la Iglesia y las orientaciones del Obispo...

... deben garantizarse las condiciones necesarias de humildad, reserva, amor a la Iglesia y a su enseñanza, en la búsqueda sincera de la voluntad de Dios y con el deseo de alcanzar una respuesta a ella más perfecta». Estas actitudes son fundamentales para evitar el grave riesgo de mensajes equivocados, como la idea de que algún sacerdote puede conceder rápidamente «excepciones», o de que existen personas que pueden obtener privilegios sacramentales a cambio de favores. Cuando se encuentra una persona responsable y discreta, que no pretende poner sus deseos por encima del bien común de la Iglesia, con un pastor que sabe reconocer la seriedad del asunto que tiene entre manos, se evita el riesgo de que un determinado discernimiento lleve a pensar que la Iglesia sostiene una doble moral.


Es evidente que, si no se definen los atenuantes sino que sólo se dan orientaciones absolutamente imprecisas, y todo se basará en el criterio personal de cada Obispo en su diócesis, está cantado que los habrá más condescendientes que otros y que, más pronto que tarde –sólo será difícil empezar-- se impondrán las excepciones y la doble moral en más de una diócesis, sin que haya modo de remediarlo, ni de que el resto de la Iglesia se entere.

Habrá, pues, divorcio de facto en algunas diócesis y en otras, no.
15/04/16 1:17 AM
  
Winston Smith
Punto 4: Se abre la posibilidad del segundo, tercer... matrimonio para católicos divorciados

La nota 351 del Papa habla de la ayuda de los sacramentos, la misericordia en la Confesión y la Eucaristía, no sólo de esta última. ¿Qué se puede oponer a que dos divorciados que conviven de forma irregular y han sido admitidos por la Iglesia a la Eucaristía, tras pasar por el confesonario, no puedan recibir el sacramento matrimonial?

Sin definición de los atenuantes y sin mecanismo de control de una aplicación unificada en toda la Iglesia, esta exhortación ha abierto las puertas al divorcio católico por la vía de los hechos consumados.

15/04/16 1:20 AM
  
Winston Smith
La decadencia moral viene de la debilidad humana... Él llamó a Samuel para que guiara a su Pueblo... pero Samuel dimitió.

Saludos.
15/04/16 1:23 AM
  
Palas Atenea
Fornicario es una cosa y adúltero otra. Desde luego adúlteros no son. Si se entiende por fornicario aquel que practica el sexo sin casarse por la Iglesia, desde luego lo son, pero no pueden ser adúlteros porque ninguno de los dos estaba casado previamente.

15/04/16 1:19 PM
  
¡Bah...!
No son ni adúlteros ni fornicarios, ya que están casados aunque sea civilmente. Que estén bautizados no significa que sean creyentes, más aún teniendo en cuenta que normalmente el bautismo se lleva a cabo sin consentimiento de la persona bautizada (ya se sabe, niños recién nacidos). Sería un despropósito decir que todos, todos los matrimonios del mundo excepto los católicos practicantes (es decir, que creen) no adúlteros, son fornicarios. Un poco de respeto a la mayor parte de la humanidad, por favor.

Saludos.
15/04/16 7:01 PM
  
Juan Argento
Bah, para los católicos, desde Trento el único matrimonio válido es el eclesiástico. En términos escolásticos, la Iglesia decidió que para que un matrimonio entre católicos sea válido, no lícito sino válido, se requiere, además de su forma sustancial, el consentimimiento libre, una forma accidental, la celebración litúrgica.

Obviamente esta disposición es inaplicable en circunstancias extraordinarias tipo naufragio en isla desierta, etc.

Por lo tanto, el católico que tiene relaciones sexuales sin casarse por iglesia comete fornicación, como bien dijo Palas Atenea.

Más obviamente aún, esta disposición rige solamente para los católicos, que son los sujetos de la legislación eclesiástica, mientras que el matrimonio es una realidad inscrita en la naturaleza humana y no exclusiva de los católicos.
15/04/16 7:35 PM
  
¡Bah...!
Juan Argento:

Por favor, lea lo que se ha preguntado. Gonzalo Génova, simplemente ha indicado que son bautizados. Que dos sean bautizados sin más, repito, no implica que sean creyentes ni que sean verdaderamente católicos. No olvide que al menos, hasta el día de hoy, el bautismo no dependía de la voluntad del bautizado. Así que no, si una persona bautizada después no sigue en el camino de la fe, es absurdo decir que es católico.

Saludos.
15/04/16 7:52 PM
  
Palas Atenea
Bah: Si fueron bautizados pero no se consideran católicos los términos eclesiales no van con ellos. El adulterio, desde que desapareció del código penal, no existe. La fornicación no es término jurídico. Lo mismo pasa con todos los mandamientos excepto con aquellos que puedan coincidir con el código penal, como el robo o el asesinato. Sólo en esos casos el pecado y el delito van a la par, aunque con diferentes implicaciones. El pecado no es punible y el delito sí, incluso puede que algo inane o meritorio desde el punto de vista cristiano sea delito, como el voto de obediencia de las órdenes religiosas que constituyó delito para los Tribunales Revolucionarios Franceses (pena de guillotina) y falta en el Código Penal Mexicano (de 6 a 3 años de prisión)-Ley Calles-desde 1926 a 1991, año en que se derogó.
Queda claro, pues, que no existe fornicación ni adulterio fuera de las religiones que así lo consideren.

15/04/16 8:20 PM
  
Palas Atenea
Y, naturalmente, de las personas que libremente quieran aceptar las normas, mandamientos o como quieran llamarse de esas religiones. Lo que no es de recibo es insistir en que uno es católico y reformar por su cuenta el Catecismo, cosa que se da mucho últimamente.
15/04/16 8:24 PM
  
¡Bah...!
Palas:

Pues eso. Pero resulta que en esta página (no en este blog) yo he podido ver como se insultaba a alguien no creyente (aunque creo que sí bautizado -como todos-) por no estar casado por la Iglesia -sí por lo civil- y, peor aún, a su esposa, con términos muy ofensivos. ¡En fin..., con estos bueyes tenemos que arar!.

Saludos.
15/04/16 8:42 PM
  
cos
La fornicación es fornicación y el robo es robo se crea en ellos o no. luego estan los factores atenuantes y eso, pero las cosas son lo que son. Creo que nadie ha insultado, Bah. Lo único que sucede es que tus creencias particulares, que pretendes universalizar, no coinciden con la doctrina católica. Es un ejemplo del conflicto entre civilizaciones en el que vivimos inmersos. Un hecho que es inevitable, por otro lado.
15/04/16 9:40 PM
  
Palas Atenea
Pues, no, cos. El lenguaje que habla de fornicación es teológico. En Roma la fornicación se reducía a los prostíbulos (fornix) y luego el Cristianismo lo tomó con el sentido que nosotros le damos. A un ateo no le puedes acusar de fornicador.
Ya te he dicho que los mandamientos mosaicos, de los que derivan los nuestros, eran ley para el Pueblo de Israel solamente.
Llamar fornicadores a dos indios purépechas no cristianos no tiene ningún sentido, en cambio el robo es de uso más general por razones obvias.
Nosotros solo podemos esperar que los católicos cumplan los mandamientos, pero no podemos universalizarlos sin previa conversión.
El adulterio está prohibido en las religiones monoteístas y en algunas otras, por el problema de la paternidad mayormente pero también porque la fidelidad se consideraba una virtud, pero hay paganos que no lo consideran así.
Siempre se ha supuesto que el Cristianismo tenía una potencia civilizadora de primer grado, potencia ordenadora y moral, pero ahora algunos consideran que lo civilizado no está en normas morales sino en las de circulación. Las únicas normas, y todas son de orden civil y penal, que hoy en día rigen para todos son las que pueden causar daño a otros según el concepto de "daño" de los correspondientes códigos vigentes. Nosotros cargamos voluntariamente con una moral, los demás no. En algunas tertulias se oye eso de "no será delito pero está feo hacer eso", eso es todo lo que queda de la moral: está feo.
15/04/16 10:10 PM
  
Palas Atenea
Ahora bien, tampoco es que la pérdida de una moral común no vaya a tener consecuencias, porque las está teniendo. Las virtudes son una coraza que elevan el nivel de frustración, aumentan la paciencia, atemperan los instintos, hacen a la persona inmune a las presiones, ayudan a calibrar situaciones (virtud de la Prudencia, que rige a las demás), etc...si las cambias por unos valores que no hay Aristóteles que los defina, aparecerán una cantidad de enfermedades mentales y comidas de coco que van a ir in crescendo. Y eso no es un futurible porque ya está aquí.
15/04/16 10:35 PM
  
¡Bah...!
Gracias Palas, por explicárselo tan claramente a Cos, pues yo ya me voy a poner a llorar...(No, bueyes no, B_R__S [yo tampoco insulto; las cosas son lo que son]).

Saludos
15/04/16 11:01 PM
  
Palas Atenea
Bah: Si no te gustan los bueyes para arar seguramente lo harás con carabaos filipinos. No nos pongamos estupendos. Si entra un católico progre a decirme a mi que la familia de Nazareth ya no es modelo para nadie porque ninguna familia puede ni de lejos parecerse a ella-cosa que no ha dicho el Santo Padre- ninguno de los "observadores imparciales" dice nada; si dicen que vivamos felices porque a Jesús le importa tres pepinos nuestra conducta-las personas como tú siguen calladas-y así ante todo católico progre que esté dispuesto a hacer lo que le dé la gana.
En cambio, si algún católico cree que se le debe exigir a todo el mundo, sea católico o no, que no fornique resulta que no es una persona errada sino un buey con el que la Iglesia no puede arar.
Es decir, entre los católicos progres que se quieren cargar la moral porque lo que vale es el amor....que ni siquieran saben lo que es y vosotros-resentidos, laxos, aburridos y ateos-que estáis a la que salta nos tenéis acorralados. Pero esa es justa la situación en que el mismo Jesús dijo que estaríamos. El Santo Padre quiere mártires pero si nuestras familias no tienen nada que ver con la de Nazareth-a lo mejor la de Asia Bibi sí-¿Cómo demontres vamos a tomar como modelo a los mártires? Si porque somos débiles y humanos necesitamos una misericordia constante ¿de dónde vamos a sacar el valor para el martirio? Si hay que olvidarse de lo antiguo hay que olvidarse también de los mártires, un mártir es un radical que muere por las raíces de su fe y no se puede convertir a un relativista del "todo vale" en un radical de la noche a la mañana. San Maximilian Kolbe hizo lo que hizo y por eso cae simpático pero si se lee su biografía resulta que de progre tenía muy poco "El Caballero de la Inmaculada", los curas progres del momento no murieron si pudieron evitarlo, fueron los chapados a la antigua los que se expusieron (y no todos ellos). Así que damos una de cal y otra de arena pero todo el mundo con la cal y ninguno con la arena.
16/04/16 9:36 AM
  
Palas Atenea
El teólogo Urs von Balthasar debió de escribir algo sobre el martirio cuando se enteró que a su tío-abuelo el Obispo de Gÿor, Vilmos Apor, lo habían matado los boches y Karl Rahner recordaba con cierta frecuencia que se podía estar en Alemania de dos maneras: una con la cabeza metida entre los libros en una abadía, lo cual fue su caso, y otra exponiéndose como el jesuita Alfred Delp. Hay gran diferencia entre un teólogo y un mártir, desde luego, y Rahner siempre reconoció la diferencia.
Resulta que lo más básico es cuestionado por inmisericorde y luego se pide el plus del martirio, sobre todo a personas que podían haberlo evitado.
No podemos tener mártires sencillos, los que llevan sus cotidianas cruces cristianas y hablamos de San John Ogilvie que se metió solito en el avispero por amor a la Iglesia para que lo ahorcaran, evisceraran, descuartizaran y pusieran su cabeza en una picota. ¡Menudo modelo para los católicos occidentales del s. XXI!
16/04/16 10:54 AM
  
¡Bah...!
Palas:

¿Y a mi qué me cuentas?. Yo voy a hacer y hago lo que me dicta la conciencia. No me importa un bledo lo que digan ni los católicos carcas, ni los católicos progres y menos cuando es en "manada". La "conciencia" grupal (de unos o de otros), para vosotros. Y por supuesto que no digo nada; no me considero quién para meterme en la vida de los demás y menos en su conciencia. Eso sí, si se quiere respeto, lo primero es respetar al otro (no se quejen después de que les acaben pagando con la misma medicina).

Saludos.
16/04/16 12:23 PM
  
¡Bah...!
Y eso del ateísmo de lo has sacado del forro. Tu que sabes de mi o de si creo o no creo, o que si laxo o aburrido, ¿pero qué sabes tu?, ¿quien te crees que eres para hacer unas afirmaciones sobre una persona (vosotros -resentidos, laxos, aburridos y ateos) a la que ni conoces, ni sabes nada de ella?. ¡Anda...déjame en paz y vete a inventar sobre otro!.
16/04/16 12:27 PM
  
Gonzalo Génova
Gracias por las respuestas.

Conozco bien la diferencia entre adúltero y fornicario, entendido en sentido preciso. En este sentido preciso, como dice Juan Argento, desde Trento dos bautizados casados civilmente no están válidamente casados, luego son fornicarios.

Lo que ocurre es que hasta la Revolución Francesa no existió eso del matrimonio civil, distinto del religioso. Es decir, en el contexto de Trento y siglos anteriores, era verdad que no estar casado religiosamente era lo mismo que no estar casado de ninguna manera.

Pero después de la Revolución Francesa la cosa cambia. Se introduce en la sociedad la nueva figura del matrimonio civil, se crea una nueva realidad, nos guste o no. Pretender que el matrimonio civil (entre bautizados) es antropológica y moralmente lo mismo que la mera convivencia sin compromiso, o que la relación sexual ocasional, es estar ciego ante la realidad. En este sentido, el lenguaje debe evolucionar para reconocer esta realidad. Por tanto, “fornicario” a día de hoy no puede ni debe significar lo mismo que en la época de Trento.

Esta evolución del lenguaje no es una adulteración.
16/04/16 1:21 PM
  
Palas Atenea
Vale. Pues podías no decir que con estos bueyes tenemos que arar. ¿Eso no es meterse con cos? ¿qué sabes tú de él?
16/04/16 1:34 PM
  
¡Bah...!
Yo lo que sé es que acababa de contar algo que pasó en otro blog, y apareció Cos diciendo que nadie había insultado, cuando el mismo blogger dijo lo siguiente: "...lamento el lenguaje de algunas respuestas, había pensado en borrarlas, pero no sería honrado, es mejor mostrar que cafres los hay en todos lados. De todas formas como quieras, si lo prefieres le doy a la tijera". infocatolica.com/blog/delapsis.php/1302070708-la-mayoria-de-los-diputados-c Que yo recuerde, desde luego, ahí había más gente insultando de las que aparecen ahora. Y yo ni sé nada de Cos, ni me interesa. Mi expresión se refiere a un hecho concreto; exactamente el que he contado.
16/04/16 1:46 PM
  
Palas Atenea
A mi me da igual cuestiones anteriores, yo me he limitado a sacarle del error, cosa que otros también han hecho, sin utilizar calificativos. Yo leo los comentarios de ahora, no los pasados.
El error de pensar que la terminología doctrinal de la Iglesia Católica es un universal de conducta se da en algunos católicos y el error de pretender destruirla, incluso para los católicos, se da en otros católicos pero estos no suelen tener muchos problemas porque, por lo visto, son aptos para arar. En el mar será, como dijo Bolivar.
16/04/16 2:17 PM
  
¡Bah...!
No te marches por las ramas, Palas. Me has pedido explicaciones de la razón de mi expresión, y ahí la tienes, así que no distorsiones. No se lo he dicho por no saber, se lo he dicho por otra razón que creo, ha quedado clara aunque a ti te desmonte. No tergiverses, ni hagas juicios de intenciones, que te equivocas de lleno.
16/04/16 2:35 PM
  
Palas Atenea
Gonzalo Génova tiene razón cuando dice que no hay adulteración en el lenguaje porque ahora determinados términos no puedan ser aplicados como lo fueron antes de la Revolución Francesa y, de acuerdo con el Concilio de Trento. En las crónicas de América es frecuente encontrarse con frases como "estos indios fornicadores" etc...que ningún misionero actual utilizaría.
La Iglesia, y no el estado, aportó el Derecho Romano y otros conceptos que fueron utilizados también por los reyes de manera que iban de consuno. Mucho del lenguaje coloquial era lenguaje eclesiástico, hasta tal punto que los ilustrados se vieron obligados a inventarse sustantivos para eludir su significado religioso. Tal cosa hizo Auguste Comte cuando se sacó de la manga el término "altruismo" que convive con la misericordia cristiana. Los psicólogos que estudiaron a los salvadores de judíos llamaron a su conducta "prosocial o altruista" pero, como casi todos ellos eran cristianos, también hubo quién lo llamó "Conspiración de la Misericordia". El listillo que se inventó la inteligencia emocional no hizo más que darle otro nombre a la sabiduría que ya estaba olvidada.
La cosa no es tan fácil como parece y no es extraño que cometamos errores.
16/04/16 2:44 PM
  
Palas Atenea
Bah: No quiero entrar en discusiones pero conozco tanto a cos como a ti mismo.
16/04/16 3:25 PM
  
¡Bah...!
Es decir, nada.
16/04/16 3:53 PM
  
cos
Palas, a lo mejor estoy equivocado. No lo se. El catecismo dice de la fornicación "unión carnal fuera del matrimonio".
Y del matrimonio:

1621 En el rito latino, la celebración del matrimonio entre dos fieles católicos tiene lugar ordinariamente dentro de la Santa Misa, en virtud del vínculo que tienen todos los sacramentos con el Misterio Pascual de Cristo.

En cuanto a lo de los insultos venia de que Bah había dicho que se faltaba el respeto calificando como adúlteros y fornicarios a personas que no participan de la fe. Esto, a parte del hecho concreto del que hablamos, esta en la linea del pensamiento liberal sobre la privacidad de la profesión de la vida religiosa.
Si fuese así habría que preguntarse que legitimidad tiene el cuerpo de la Iglesia para tratar de influir positivamente en la vida publica dentro de la sociedad liberal, y abre la puerta a tratarla como a un cuerpo intolerante e invasivo.
De cualquier forma, al margen de que considera que Bah es un simple enredador :), reconozco que no estoy del todo seguro.



16/04/16 4:02 PM
  
Palas Atenea
cos: El Catecismo dice eso para nosotros únicamente porque no rige la moral universal. Ya no. Tenemos que acostumbrarnos a usar dos vocabularios distintos: el nuestro y el civil o de uso común y aprender a distinguirlos.
Los cristianos tenemos que influir a base de evangelizar, todo depende de eso, pero no podemos aplicar principios morales a otros ni calificarlos por ellos.
Ese principio es aplicable también para entender los libros de tiempos pasados. No encontrarás la palabra misericordia en los filósofos griegos porque ellos no la conocían, ese concepto es judeo-cristiano y sólo tiene significado para alguien que la recibe de Dios. De ahí que los psicólogos no puedan utilizarla. El lenguaje común tampoco tiene una palabra para denominar lo que hizo San Maximilian Kolbe, sólo la palabra Caridad es apta.
Si no conseguimos que entiendan el profundo significado de estas palabras la moral no sirve para nada porque es después, y no antes, cuando cobran un sentido.
La conversión es la que ilumina el entendimiento, sin ella hablamos dos lenguajes distintos.
Lo que a mi me duele no es lo que digan los que están "au-dessus de la mêlée" sino que los mismos cristianos ya no distingan aquello que les diferencia de los demás.
Creo que Bruno y otros como él tratan de hacer eso. Que Dios les bendiga.
Aunque creamos que están equivocados no podemos hacer nada por ellos porque lo mismo piensan ellos de nosotros. Jesús es el Camino, la Verdad y la Vida pero puedes volverle la espalda si gustas. Estamos condenados a ser libres.
Ahora el problema lo tenemos con los cristianos que tiran por la borda todas las enseñanzas de la Iglesia, hablan con un vocabulario totalmente ajeno porque ya no entienden ni siquiera conceptos elementales de su propia fe y piensan que pueden hacer un seguimiento personal de Jesucristo apoyándose sólo en si mismos. Esos si que son el problema.
16/04/16 7:45 PM
  
cos
A ver, se que hay doctrina sobre estos puntos, y creo recordar que el propio Bruno lo ha tratado en alguno de los numerosos posteos que ha dedicado al asunto del matrimonio. Admito que a lo mejor estoy equivocado.
Pero entiendo que uno no se puede conducir por la vida de tal forma que parezca que existen multitud de morales. La verdad es una. Entiendo que un asesinato es un asesinato y un hurto es un hurto sean cuales sean las coordenadas morales por las que se mueva el ejecutante del acto. De hecho, en el orden temporal, es así como se dirige la justicia.
Que hoy en día sea difícil hacerse entender -y supongo que todos sabemos de esto de primera mano-, que haya que adaptar el lenguaje, no puede significar que se renuncie al fondo conceptual de los asuntos porque entonces uno cambiaría el hacerse entender por la renuncia a la verdad de su discurso. Y es que ese es el peligro y la verdadera importancia del lenguaje. Una importancia fundamental porque el lenguaje construye la realidad. Esto en plenadesarrolladogenierías sociales estamos hartos de verlo. Tampoco es extraño que hayáis mencionado la revolución francesa como momento fundacional de algo.
La iglesia ha desarrollado la filosofía realista y por lo tanto la precisión en el idioma es fundamental, y su moral no es ajena a la naturaleza humana sino que a esta la hace plena y por tanto es valida para todo el mundo.
16/04/16 9:57 PM
  
Palas Atenea
cos: Tendré que tomarme esto como un fracaso profesional porque mi obligación es que me entiendan, a eso me he dedicado toda la vida.
Nosotros no tenemos porqué conducirnos más que con nuestra moral, pero tenemos que acostumbrarnos a otras. Si fueses norteamericano no tendrías ese problema, pero presumo que eres español.
Tienes razón al decir que el lenguaje construye la realidad y que, posiblemente, estemos conviviendo con cosmovisiones muy distintas pero sí es así la única posibilidad de que nos entiendan pasa por la conversión de esas personas, no puede ser al revés. Dios mediara en eso y a nosotros sólo nos queda explicar las cosas con corrección y dar ejemplo.
Lo que no entienden es, por desgracia, mucho más profundo que la moral. El novelista Graham Greene, que era católico, fue especialista en crear pecadores que se arrastraban por el fango hasta que la Gracia de Dios les salvaba, como ocurre con el cura borracho y amancebado de "El Poder y la Gloria", pero esas personas sí que tenían la misma religión que nosotros y veían las cosas igual, por eso sabían que eran pecadores y no discutían con la Iglesia pretendiendo que las normas morales podían ser cambiadas a capricho. Ahora bien, se está desarrollando una nueva especie de católico arrogante que no reconoce normas objetivas y piensa que el tipo de vida que lleve no tiene importancia y, aún peor, ni siquiera respeta los sacramentos. Esa debe ser nuestra preocupación: recuperar a nuestros hermanos que se están desviando.
Todos los casos de conversiones que he leído nacen desde dentro, hasta aquel que se convirtió porque un día entró en una iglesia y se sintió conmocionado por la unción con la que una mujer rezaba. A partir de ahí se empieza a entender todo, pero antes no, por muy realista y apropiada que sea la doctrina de la Iglesia a la naturaleza humana.
También ocurre lo contrario: el que habiendo siendo educado en la fe y la moral cristiana pierde la una y la otra. Recemos por los que tenemos esa visión realista de la condición humana y esperemos que otros, atraídos por Cristo, se sumen a nosotros.
17/04/16 12:33 AM
  
Carlos de México
En el ámbito de los negocios, el célebre Peter F. Drucker decía que en una decisión unánime tomada por 10 personas, sobraban 9. Así es con este blog. Bienvenidas las diferencias. Hemos de aprender y crecer juntos, esto es lo que nos hace universales, católicos. Sólo Cristo posee la verdad absoluta y nosotros, con nuestras humanas limitaciones, vislumbramos aspectos y matices de esa Verdad eterna. Con esto sólo quiero reconocer y agradecer la calidad humana y los conocimientos de Bruno, cuya paciencia y "escasa habilidad literaria", prenden la mecha de esta bomba intelectual y moral entre los participantes. Sólo pido respeto a todos y argumentos en las afirmaciones.
Para terminar, recuerdo lo que enseña San Agustín: "Prefiero equivocarme con la Iglesia, que acertar solo". Yo hago obedientemente lo que nos pide el Papa Francisco, oro por él todos los días.
17/04/16 12:59 AM
  
JUAN NADIE
No adulteremos el lenguaje. Bien.
Pero tan importante como no adulterar el leguaje es no adulterar los conceptos o la realidad.
La realidad se conforma por los hechos y sus relaciones, que forman el contexto.
Si yo eludo considerar determinados hechos, o sus relaciones o sus consecuencias estoy adulterando la realidad.
Si me dicen que tengo cancer y me limito a tomar aspirina como si fuera un resfriado,porque me niego a aceptar los hechos, al final los hechos, la realidad es inexorable por mucho que yo la ignore. Y esto que es valido para mi en realidad le ocurre a todo el mundo. Al final tendrán un empacho de realidad.
17/04/16 1:03 AM
  
Nuntio vobis dificultatem magnam
Conferenza Stampa di Papa Francesco nel volo di ritorno dalla Visita a Lesvos (Grecia), 16.04.2016

press.vatican.va/content/salastampa/it/bollettino/pubblico/2016/04/16/0275/00626.html

Padre Lombardi

Ora Francis Rocca e poi c’è Guénois Così concludiamo anche con il gruppo francese.

Francis Rocca

Grazie Santo Padre! Vedo che le domande sull’immigrazione che avevo pensato sono state già fatte, e lei ha risposto molto bene. Quindi se mi permette vorrei fare una domanda su un altro evento degli ultimi giorni, che è stata la sua Esortazione Apostolica. Come lei ben sa, c’è stata molta discussione su uno dei molti punti – lo so che vi ci siamo concentrati in molti – dopo la pubblicazione: alcuni sostengono che niente sia cambiato rispetto alla disciplina che governa l’accesso ai Sacramenti per i divorziati e i risposati, e che la legge e la prassi pastorale e ovviamente la dottrina rimangono così; altri sostengono invece che molto sia cambiato e che si sono tante nuove aperture e possibilità. La domanda è per una persona, un cattolico che vuole sapere: ci sono nuove possibilità concrete, che non esistevano prima della pubblicazione dell’Esortazione o no?

¿Hay nuevas posibilidades concretas, que no existían antes de la publicación de la Exhortación, o no?

Papa Francesco

Io potrei dire “si”, e punto. Ma sarebbe una risposta troppo piccola. Raccomando a tutti voi di leggere la presentazione che ha fatto il cardinale Schönborn, che è un grande teologo. Lui è membro della Congregazione per la Dottrina della Fede e conosce bene la dottrina della Chiesa. In quella presentazione la sua domanda avrà la risposta. Grazie!

"Yo podría decir “sí”, y punto." Pero recomienda a todos leer la presentación del cardenal Schönborn, cuyo texto completo está en:

es.radiovaticana.va/news/2016/04/08/presentaci%C3%B3n_del_cardenal_sch%C3%B6nborn_de_%E2%80%9Camoris_laetitia%E2%80%9D/1221248

Por lo que quedan dos caminos a los que insisten en la posibilidad de una hermenéutica en la continuidad de AL:

a. Argumentar que, mientras AL es parte del magisterio ordinario pontificio, la indicación por parte del Papa de la interpretación correcta de AL en una conferencia de prensa no lo es.

b. Abocarse a la exégesis de la presentación de Schönborn para establecer su continuidad con la doctrina de siempre. Habiendo leido esa presentación, no parece ser fácil, o siquiera posible.
17/04/16 4:40 AM
  
Palas Atenea
Juan Nadie: Como dijo Juan Manuel de Prada, y por raro que te parezca, esto puede continuar ad nauseam. Hay gente que niega la realidad con tanta obstinación que mueren sin percibirla.
Hay un señor en la cárcel, de cuyo nombre no quiero acordarme, que fue poderoso, inteligente, rico y guapo. Ya estuvo en la cárcel antes y, cuando salió, en vez de corregir rumbo-porque había perdido a su mujer y muchos años de su vida en el interin-repitió jugada y ahora vuelve a enfrentarse a lo mismo con el agravante de arrastrar consigo a su familia. ¿Vio la realidad? No. ¿La ve ahora? No estoy muy segura de ello. Y lo mismo le pasó a Hitler enviando al frente cuerpos de ejército que no existían.
La visión realista de la Iglesia avisando quién es el hombre y a lo que está expuesto choca con mentalidades así. Y no son tan pocos.
17/04/16 9:26 AM
  
Gonzalo Génova
Bruno,

Para los que les preocupa la continuidad con el magisterio precedente, Familiaris Consortio dedica los números 79-84 a las que denomina (¿impropiamente?) "situaciones irregulares". Y usa una única vez el término "adulterio", en el n. 12, y es para referirse a las infidelidades de Israel. FC no llama adúlteros a los divorciados vuelos a casar (ni a los demás "irregulares"). Será que FC también sucumbe al uso de eufemismos.

Lo que sí es adulterar el lenguaje, o la realidad, es equiparar la situación del divorciado/a vuelto a casar con la del casado/a que comete infidelidades ocasionales. Algunos dicen que lo primero es peor, por ser una situación estable en la que la relación adúltera es mucho más "frecuente". Esto sí que es adulterar el lenguaje, jugando con la definición formal del término ("mantener relaciones extraconyugales"), sin querer reconocer la diferencia sustancial entre esas dos realidades.   
17/04/16 9:58 AM
  
Christifer Panagiotis
Si no es molestia, creo que vendría bien repasar estas lecciones del Catecismo de San Pío X:

348.- ¿Estamos obligados a guardar los mandamientos? - Si, señor; estamos obligados a guardar los mandamientos, porque todos hemos de vivir según la voluntad de Dios, que nos ha creado, y basta quebrantar gravemente uno solo para merecer el infierno.

349.- ¿Está en nuestro poder guardar estos mandamientos? - Si, señor; está en nuestro poder guardar estos mandamientos con la gracia de Dios, quien siempre está pronto a darla a quien debidamente se la pide.

425.- ¿Que nos prohíbe el sexto mandamiento: NO COMETERÁS ACTOS IMPUROS? - El sexto mandamiento: No cometerás actos impuros, nos prohíbe toda acción, toda mirada, toda conversación contraria a la castidad, y la infidelidad en el matrimonio.

519.- ¿Qué se entiende por la palabra SACRAMENTO? - Por la palabra Sacramento se entiende un signo sensible y eficaz de la gracia, instituido por Jesucristo para santificar nuestras almas.

520.- ¿Por qué llamáis a los sacramentos señales sensibles y eficaces de la gracia? - Llamo a los sacramentos señales sensibles y eficaces de la gracia, porque todos los sacramentos significan, por medio de cosas sensibles, la gracia divina que producen en nuestras almas.

527.- ¿Qué es la gracia? - La gracia de Dios es un don interno, sobrenatural, que se nos da, sin ningún merecimiento nuestro, por los méritos de Jesucristo, en orden a la vida eterna.

528.- ¿De cuántas maneras es la gracia? - La gracia es de dos maneras: gracia santificante, que se llama también habitual, y gracia actual.

529.- ¿Qué es la gracia santificante? - La gracia santificante es un don sobrenatural, inherente a nuestra alma, que nos hace justos, hijos adoptivos de Dios y herederos de la gloria.

533.- ¿Qué es la gracia actual? - Gracia actual es un don sobrenatural que ilumina nuestro entendimiento y mueve y conforta nuestra voluntad para que obremos el bien y nos abstengamos del mal.

535.- ¿Podemos con nuestras solas fuerzas hacer algo que nos ayude para la vida eterna? - Sin el socorro de la gracia de Dios no podemos con solas nuestras fuerzas hacer ninguna cosa que nos ayude para la vida eterna.

536.- ¿Cómo nos comunica Dios la gracia? - Dios nos comunica la gracia principalmente por medio de los santos sacramentos.

537.- ¿Confieren los sacramentos otra gracia además de la santificante? - Los sacramentos, además de la gracia santificante, confieren también la gracia sacramental.

538.- ¿Qué es la gracia sacramental? - La gracia sacramental consiste en el derecho que el sacramento da al que lo recibe de tener en tiempo oportuno las gracias actuales necesarias para cumplir las obligaciones que impone. Así, cuando fuimos bautizados, recibimos el derecho de tener las gracias para vivir cristianamente.

539.- Los sacramentos, ¿dan siempre la gracia a quien los recibe? - Los sacramentos dan siempre la gracia con tal que se reciban con las necesarias disposiciones.

837. ¿Qué efectos produce el sacramento del Matrimonio? - El sacramento del Matrimonio: 1.°, acrecienta la gracia santificante ; 2.°, confiere gracia especial para cumplir todos los deberes matrimoniales.

843. ¿Cuáles son las principales obligaciones de las casados? - Las principales obligaciones de los casados son: 1.º, guardar inviolablemente la fidelidad conyugal y portarse siempre y en todo cristianamente; 2.º, amarse uno a otro, soportarse con paciencia y vivir en paz y concordia; 3.º, si tienen hijos, pensar seriamente en proveerlos de lo necesario, darles cristiana educación y dejarles en libertad de escoger el estado a que Dios los llamare.
17/04/16 8:47 PM
  
Horacio Castro
S. S. Francisco le dio una respuesta muy oportuna a Francis Rocca, porque el cardenal Schönborn en su presentación recomendó la atenta lectura de algunos puntos importantes para la comprensión de la “Amoris laetitia”, que probablemente serán saltados por muchos, y señaló que el texto es legible como para que el que no se deje asustar por su longitud, encuentre alegría en la concreción y el realismo del documento. Dijo Schönborn que el Papa Francisco habla de las familias con una claridad que pocas veces se encuentra en los documentos del magisterio de la Iglesia, y puntualizó:«Mi gran alegría ante este documento reside en el hecho de que, coherentemente, supera la artificiosa, externa y neta división entre “regular” e “irregular” y pone a todos bajo la instancia común del Evangelio, siguiendo las palabras de San Pablo: “Pues Dios encerró a todos los hombres en la rebeldía para usar con todos ellos misericordia" (Rom 11, 32)».
18/04/16 12:42 AM
  
Bruno
Horacio:

No encuentro palabras para calificar esas afirmaciones asombrosas del Card. Schönborn.

Dice que el Papa Francisco habla de las familias con una claridad que pocas veces se encuentra en los documentos del magisterio de la Iglesia. Eso es absurdo. Se pueden decir muchas cosas de la exhortación AL, pero si hay algo evidente es que no es clara en absoluto. Cualquiera con dos dedos de frente se da cuenta de ello. Es como si elogiara a Napoleón por su altura o a Martin Luther King por la marmórea palidez de su piel. Es adulación por adulación.

Dice también que "supera la artificiosa, externa y neta división entre “regular” e “irregular”". Para decir algo así, hace falta un cinismo verdaderamente espectacular. Primero sustituyen la categoría real, clara y evangélica de adulterio por el engendro de las "uniones irregulares" y luego tienen la cara durísima de decir que, en realidad, no hay una clara distinción entre uniones regulares e irregulares. Con todo el respeto a la púrpura cardenalicia, pocas veces en mi vida he leído una afirmación más despreciable.
18/04/16 12:48 AM
  
Bruno
Estimado Gonzalo Génova:

"Será que FC también sucumbe al uso de eufemismos."

Pues sí, a diferencia de otros documentos de San Juan Pablo II, como he mostrado en el artículo. Ser santo no es lo mismo que ser perfecto.

Eso sí, la diferencia sustancial está en que FC simplemente usa eufemismos, pero no los utiliza como excusa para cambiar la doctrina. Al contrario que de Kasper, Schönborn y tantos otros. Como he dicho más arriba, el problema no es el uso de eufemismos (porque todo ser humano los utiliza alguna vez), sino usarlos para intentar cambiar la realidad.

"Lo que sí es adulterar el lenguaje, o la realidad, es equiparar la situación del divorciado/a vuelto a casar con la del casado/a que comete infidelidades ocasionales. Algunos dicen que lo primero es peor, por ser una situación estable en la que la relación adúltera es mucho más "frecuente". Esto sí que es adulterar el lenguaje, jugando con la definición formal del término ("mantener relaciones extraconyugales"), sin querer reconocer la diferencia sustancial entre esas dos realidades"

Claro que hay una diferencia sustancial entre esas dos realidades, pero me temo que en sentido contrario de lo que dices (si es que te entiendo bien). La situación de un divorciado vuelto a casar es mucho peor, pero eso no tiene nada que ver con "frecuencias", sino con que contraer una nueva unión "aumenta la gravedad de la ruptura", porque se trata de un "adulterio público y permanente". Y no lo digo yo, lo dice el Catecismo de la Iglesia Católica en su número 2384 (de ahí las comillas).

Y en ningún caso se trata de algo meramente "formal", porque no hay nada más real que el sacramento del matrimonio.
18/04/16 12:57 AM
  
Horacio Castro
Gracias por la respuesta Bruno. Al toque. Es cierto que, como refieren otros comentarios en este post, contemplé para el mío, otro aspecto actualmente separado de la "categoría real, clara y evangélica de adulterio". En los años 50, yo era pre- adolescente, en mi ciudad las pintadas contra la Iglesia eran 'divorcistas'. La Iglesia intervenía directamente para que la ley civil impidiera contraer nuevas nupcias a los divorciados en vida del anterior 'cónyuge civil'. Fueras católico o no. La buena intención era finalmente abusiva, porque la protección de los hijos de los no católicos, podía lograrse con otras medidas. En fin, ese punto ya es historia. Saludos.
18/04/16 1:21 AM
  
Bruno
Horacio:

"La Iglesia intervenía directamente para que la ley civil impidiera contraer nuevas nupcias a los divorciados en vida del anterior 'cónyuge civil'. Fueras católico o no. La buena intención era finalmente abusiva, porque la protección de los hijos de los no católicos, podía lograrse con otras medidas"

Eso es una deformación de la realidad. Lo que sucedía era que la ley permitía contraer matrimonio indisoluble. Algo que ahora la ley española prohíbe.

Tu objeción no la puede hacer un católico, que debe saber que el matrimonio natural (y no solamente el católico), por su propia naturaleza, es para toda la vida.
18/04/16 2:00 AM
  
Horacio Castro
Bruno. "Déjate" de cuestionar mi convicción y condición de católico. En todo caso yo me reconozco un pecador católico y tú desde tu animosidad me quieres ver como un católico pecador. Aquí en Argentina una vez que contraías matrimonio civil quedabas 'obligado' por vida. Y aunque fueras católico eso, para una verdadera ley civil, era y es abusivo.En paz.
18/04/16 2:42 AM
  
Bruno
Horacio:

""Déjate" de cuestionar mi convicción y condición de católico. En todo caso yo me reconozco un pecador católico y tú desde tu animosidad me quieres ver como un católico pecador"

Yo no he cuestionado nada. Al contrario. Te he explicado que, como católico, no puedes dar ese argumento porque todo católico debería saber que el matrimonio natural, por su propia naturaleza, también es para toda la vida. Si lo no sabías, no pasa nada, ahora ya lo sabes.

No hay ninguna animosidad ni te veo como un católico pecador. De hecho, no te conozco de nada, así que no puedo saber si eres un santo o un pecador.

"Aquí en Argentina una vez que contraías matrimonio civil quedabas 'obligado' por vida. Y aunque fueras católico eso, para una verdadera ley civil, era y es abusivo.En paz."

Eso no tiene sentido. Las decisiones que te obligan de por vida no tienen nada de extraño. Cuando vendes una casa, la has vendido para toda la vida. No vale decir tres años después que ya no estás contento y que quieres que te la devuelvan. En particular, no tiene nada de extraño (ni mucho menos abusivo) que la ley reconozca la capacidad de tomar decisiones definitivas en cuanto a la formación de una familia. Es más, el hecho de que la ley no reconozca esa capacidad a los ciudadanos es lo que realmente es abusivo e inhumano. Es algo básico y que no puede ser puesto en duda desde la doctrina católica.
18/04/16 3:26 AM
  
Horacio Castro
Bruno. Aprecio como te aplicas en tu blog, indudablemente como verdadero católico. Por eso te leo frecuentemente. No quiero extenderme, porque en este momento estás más ocupado que yo. El tema de la ley natural está muy debatido dentro de la misma Iglesia. Estamos de acuerdo en que el discernimiento del bien y del mal está infundido por Dios en nuestras almas. Pero lo que opera para aborrecer, por ejemplo, el aborto no tiene el mismo origen que aceptar la indisolubilidad del matrimonio. Asimismo comprender que el propósito del matrimonió es y se cumple con la unión de hombre y mujer corresponde- como el rechazo del asesinato de concebidos todavía no nacidos- a "la ley natural". Mi entendimiento hasta ahora, no identifica totalmente ley natural y ley positiva. Con todo gusto, si quieres, te dejo la última palabra (en este post) y te saludo.
18/04/16 4:13 AM
  
Gonzalo Génova
Estimado Bruno,

(Me alegro que podamos discrepar desde la mutua estima.)

Dice el Catecismo 2384: El divorcio es una ofensa grave a la ley natural. Pretende romper el contrato, aceptado libremente por los esposos, de vivir juntos hasta la muerte. El divorcio atenta contra la Alianza de salvación de la cual el matrimonio sacramental es un signo. El hecho de contraer una nueva unión, aunque reconocida por la ley civil, aumenta la gravedad de la ruptura: el cónyuge casado de nuevo se halla entonces en situación de adulterio público y permanente: «No es lícito al varón, una vez separado de su esposa, tomar otra; ni a una mujer repudiada por su marido, ser tomada por otro como esposa» (San Basilio Magno, Moralia, regula 73).

Este punto no dice que el divorcio sea más grave que el adulterio ocasional. Dice que el nuevo casamiento es más grave que el mero divorcio del primer matrimonio. Así que, honestamente, sigo pensando que el adulterio ocasional (no me refiero a una debilidad, sino a una repetición deliberada e impenitente) es más grave que el divorcio seguido de nueva unión civil, máxime en la situación actual, tal como es descrita en FC 84. Y me cuesta pensar que no lo veas así. 
18/04/16 5:37 AM
  
Gonzalo Génova
Esto dice Familiaris Consortio 84, #2:

"Los pastores, por amor a la verdad, están obligados a discernir bien las situaciones. En efecto, hay diferencia entre los que sinceramente se han esforzado por salvar el primer matrimonio y han sido abandonados del todo injustamente, y los que por culpa grave han destruido un matrimonio canónicamente válido. Finalmente están los que han contraído una segunda unión en vista a la educación de los hijos, y a veces están subjetivamente seguros en conciencia de que el precedente matrimonio, irreparablemente destruido, no había sido nunca válido."

Así que la gravedad de ese "adulterio público y permanente" debe ser matizado (¡discernido!) según la diversidad de situaciones.
18/04/16 7:17 AM
  
Antonio1
"¿No es eso lo que hoy en día nos repite el Santo Padre? Y si manifestase cierta contradicción en sus palabras y en sus actos así como en los actos de los dicasterios, entonces optamos por lo que siempre se ha enseñado y hacemos oídos sordos a las novedades destructoras de la Iglesia...
La única actitud de fidelidad a la Iglesia y a la doctrina católica, para nuestra salvación, es el rechazo categórico de la aceptación de la Reforma...
Por eso nos atenemos firmemente a todo lo que fue creído y practicado, en la Fe, las costumbres, el culto, la enseñanza del catecismo, la formación del sacerdote, la institución de la Iglesia, por la Iglesia de siempre ...a la espera de que la luz verdadera de la Tradición disipe las tinieblas que obscurecen el cielo de la Roma Eterna."

Monseñor Lefebvre.

¡Caramba, qué coincidencia!
19/04/16 10:35 AM
  
Manenovak
Bueno: Aquí tenemos una colección de fundamentalistas,
"Misericordia quiero y no sacrifícios",
"todo pecado será perdonado, solo uno no será perdonado jamás".
"Ama y has lo que quieras".
"A un corazón contrito,Dios no lo despreciará"
"Este hijo estaba muerto, y ha vuelto a la vida"
"Pero de todos, la caridad es la mayor"
Gracias por leer MNV.
30/04/16 12:05 AM
  
Manenovak
Ahora, que la Iglesia anuncia el evangelio a todas las naciones, pero no hace proselitismo, al final, si solo uno se salva, así lo quizo Dios, ¿Y si ese uno fuese por ventura yo? no!! ¿Como puedo pensar eso?
MNV.
30/04/16 12:11 AM
  
Bruno
Estimado Gonzalo Génova:

"Así que la gravedad de ese "adulterio público y permanente" debe ser matizado (¡discernido!) según la diversidad de situaciones."

Me temo que no has comprendido lo que dice la Familiaris Consortio.

Que el adulterio es un pecado grave, no se puede poner en duda. Basta conocer los mandamientos.

Que el adulterio público y permanente es aún más grave, es evidente por sí mismo, además de ser doctrina constante de la Iglesia. Véase, por ejemplo, Catecismo 2384: "El hecho de contraer una nueva unión, aunque reconocida por la ley civil, aumenta la gravedad de la ruptura: el cónyuge casado de nuevo se halla entonces en situación de adulterio público y permanente".

Son verdades que forman parte de la Revelación (la primera) o consecuencia inmediata de lo revelado (la segunda) y por lo tanto que nadie puede cambiar, incluidos los Papas.

Nada dice la Familiaris Consortio en contra de eso, por supuesto. Lo que dice es que hay cosas que aumentan aún más la gravedad de ese adulterio público, como pueden ser el haber abandonado al verdadero cónyuge y a los hijos (y podría añadir otras muchas, como asesinar al padre, convivir con dos mujeres o en una relación homosexual, etc.). La lógica elemental indica que el hecho de que B añada gravedad a A no implica en absoluto que A no sea grave, sino simplemente eso, que B añade gravedad.

Esto es una cosa muy básica, así que me atrevo a decir que, si no sabes lo básico sobre el tema, quizá deberías ser más prudente a la hora de hablar del mismo.

Saludos.
13/06/16 3:22 AM
  
Pedro
Bruno:
El día 13 de abril os falté al respeto al Papa y a ti en dos o tres comentarios. Te calumnié diciendo que te faltó valentía al redactar el artículo. No es verdad y yo lo sé.
Te pido perdón aunque sea un poco tarde. Saludos cordiales.
25/06/16 1:39 PM

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