Cristianos de ayer y de hoy (XI): Esteban, un nuevo cristiano
El viernes, día de Nuestra Señora del Pilar, bautizamos a nuestro hijo Esteban. Para nosotros fue un día de inmensa alegría.
Mi mujer y yo somos cristianos desde niños: el Dios de nuestros padres quiso regalarnos, por pura gracia y sin que lo mereciéramos en absoluto, la fe y el bautismo. Yo, al igual que mi mujer, puedo decir: me ha tocado un lote hermoso, me encanta mi heredad. A pesar de nuestros pecados y debilidades, la Iglesia nos ha acogido siempre como una madre comprensiva. El Señor ha estado en medio de nuestro noviazgo y de nuestro matrimonio y lo ha transformado desde dentro.