Sirviendo a los siervos: los Estatutos del Camino Neocatecumenal
Leo en las noticias de Religión en Libertad que, según parece, el Papa ha debido de firmar los Estatutos del Camino Neocatecumenal aunque aún no se haya hecho público, por las razones que sean.
Luis Fernando hace muy bien su trabajo y, sin duda, debe de tener buenas fuentes para esta noticia. Yo, por mi parte, que no dirijo una revista de información y no tengo la obligación profesional de buscar las últimas novedades, prefiero esperar a que la aprobación se haga pública, para alegrarme con toda la Iglesia. En lo que sí me ha hecho pensar la noticia es en el propio hecho de que sea parte del ministerio del Papa el aprobar este tipo de cosas.
Siempre me entristece ver que hay cristianos que comprenden la Iglesia desde el punto de vista del poder. No puedo evitar sospechar que existe una mentalidad esencialmente antievangélica cuando, por ejemplo, se habla de “jerarquía vaticanista” y se la opone a las “comunidades de base”, cuando se afirma que las mujeres deberían ser sacerdotes para adquirir mayor poder en la Iglesia o cuando un obispo en su diócesis o un sacerdote en su parroquia piensan que pueden hacer y deshacer a su antojo sin respeto al Espíritu Santo, a la unidad eclesial en la fe y en la caridad o a la legítima diversidad.
Yo, la verdad, veo clarísimo que la autoridad en la Iglesia sólo puede ser un servicio realizado por amor a Cristo, que implica dar la vida por los demás.