El espíritu navideño
Una lectora, Lucía, me ha enviado algunas reflexiones sobre lo que es la Navidad y, como son muy interesantes, creo que conviene presentarlas aquí en el blog.
Da la impresión de que, cuanto más se habla del “espíritu navideño", hay menos Navidad y más fiestas, menos Niño Dios y más Papá Noel, menos caridad y más regalos caros, menos gracia y más tristeza y rutina envueltas en oropel. Al final, el verdadero espíritu navideño es el Espíritu Santo, por el que se encarnó el Hijo de Dios. El verdadero regalo de la Navidad es el Niño que Dios nos ha regalado para nuestra salvación. Si esto se ignora, los festejos están vacíos, sin sustancia.
Los cristianos, sin embargo, somos hombres de esperanza. Lo crean o no lo crean los hombres, Cristo nació para nuestra salvación. Como dice la lectora: “La sociedad no ayuda, pero Dios todo lo puede”.
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La Navidad para muchas personas es tiempo de reuniones familiares, regalos y viajes. Estas cosas están muy bien, siempre que no se olvide el verdadero “espíritu navideño". Ayer me preguntaba qué es ese “espíritu navideño” del que tanto habla la gente.
El otro día, fui con mi hija a ver el espectáculo de luz y sonido que hacen en la fachada del Ayuntamiento, en la Plaza de Cibeles. En 2011 no estuvo del todo mal, reflejaban sobre la pared una especie de fábrica de juguetes en la que salían osítos de peluche, soldadítos de plomo desfilando y muñecas de colores, estos se iban cargando en un tren que repartiría más tarde los regalos a los niños. Al finalizar, hubo fuegos artificiales. No me convenció mucho, pero supuse que a los niños les gustaría, aunque solo fuera por lo espectacular del asunto.
Este año la cosa ha sido distinta. Comenzaba una niña de unos 10 años, la ganadora del concurso de cuentos navideños. El cuento hablaba de una niña y un pajarito “Piti", que representaba el “Espíritu de la Navidad” (de aquí mi reflexión. Más tarde, empezaron las luces y un cartel que decía Felices Fiestas y “la Navidad vista con los ojos de un niño".
He intentado pensar qué tipo de niño ve la Navidad de esa forma: luces como sacadas de la Guerra de las Galaxias, bolas de árbol que caen por la pared, algún que otro juguete, paquetes de regalos, un humo artificial que pronto hizo que pareciera que te encontrabas en el mismo infierno y un sonido aterrador… Yo soy adulto y llegué a pensar que era el fin del mundo anunciado para esa mañana. Creo que, en realidad, solo la niña del exorcista sería capaz de ver así la Navidad y aun lo dudo…
La música de fondo eran villancicos importados, ¡en inglés claro! Pensaba en por qué no se cantaban villancicos en nuestro idioma, con tantos como hay, villancicos que hablen de María y de José, del Niño Jesús que nace en un portal, pobre y con frío, de los pastores que van a llevarle lo mejor que tienen y del Salvador nacido para arreglar nuestros desatinos. Pensé que en ningún momento se habló de Jesús, ni del portal de Belén ni de nada que tuviera que ver con lo que es la Navidad en realidad.
Tal vez es cierto que se está perdiendo el “Espíritu de la Navidad". No recordar que tenemos un Dios que se hace pobre y pequeño para nacer entre nosotros para más tarde morir clavado en una Cruz es perder el Espíritu de la Navidad. Esta historia escandaliza y, aunque en nuestra sociedad deberíamos estar curados de espanto en cuanto a escándalos se refiere, parece que cuantos menos mejor.
Pensé que la alegría de juntarse la familia no es solo por juntarse, cosa que se puede hacer en cualquier otro momento. Nos juntamos para celebrar que ese Niño nace por nosotros. Da igual no tener regalos, ni tener luces, ni hacer grandes comidas, lo importante es tener a ese Pequeño dentro de tu corazón, llenarte de El y permitirle entrar en tu casa esa noche y todas las demás para que pueda hacer milagros en ella. Os aseguro que en la mía los ha hecho y los sigue haciendo.
Hay que recuperar el sentido de la Navidad, y conseguir que nuestros hijos no lo pierdan del todo… La sociedad no ayuda, pero Dios todo lo puede.
“Despiértate: Dios se ha hecho hombre por ti. Despierta, tu que duermes, levántate de entre los muertos, y Cristo será tu luz. Por ti precisamente, Dios se ha hecho hombre.
Hubieses muerto para siempre, si Él no hubiera nacido en el tiempo. Nunca te hubieses visto libre de la carne del pecado, si Él no hubiera aceptado la semejanza de la carne de pecado. Una inacabable miseria se hubiera apoderado de ti, si no se hubiese llevado a cabo esta misericordia. Nunca hubieras vuelto a la vida, si Él no hubiera venido al encuentro de tu muerte. Te hubieras derrumbado, si Él no te hubiera ayudado. Hubieras perecido si Él no hubiera venido“.
De los sermones de S. Agustín, obispo.
¡Estad alegres, nos ha nacido El Salvador!
8 comentarios
Pero para muchos, gracias a Dios, todavía estamos alegres y en esperanza porque nos ha nacido el Salvador.
Hasta que parezca que unos y otros hablamos de, efectivamente, fiestas distintas. Porque lo son.
Feliz Natividad del Señor.
Yo también digo: ¡Feliz Navidad! ¡Feliz año 2013!
Como para venir ahora dfelicitando solsticios...
El que cree en Dios tiene que ayudar al Dios que todo lo puede para mitigar el sufrimiento de sus hermanos, sirviéndoles con amabilidad y respeto, y tomándose las molestias necesarias para que las cosas se organicen y funciones de la mejor forma posible. Y tiene que estar en el ánimo de todos quejarse menos y ayudar de una forma solidaria con su aportación a que las cosas vayan lo mejor posible: hay demasiada angustia causada innecesariamente.
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alucino con el descomunal tamaño de los prejuicios de este señor,que ni se preocupa de disimular que son PREJUICIO
A simple vista ya distinge el caballero: mujeres=incapaces
hombres=responsables
Al equipo saliente le supone que llevaría 12 horas, y el entrante empezab; aun así, incluso aventura que ele quepodo de displicentes, modernas e inc apaces no creía en Dios, y el de varones sí.
Lo suyo es grave, caballero.
El día que su vida esté en manos de mujeres, no se deje atender, eh.
Cuando haya una emergencia vital, Dios no lo quiera, una parada, por ejemplo, mientras saltan las alarmas y llega el carro de parada, no se olvide de gritar: ¡¡¡a mí que me desfibrilen hombres, que son responsables y creen en Dios y su Misericordia; mujeres moderna, displicentes e incapaces que no me desfibrilen!!!
La progrez, el relativismo, la ideología de género, la estulticia en todas sus variantes y la falta de discernimiento son lacras que causan mucha desgracia, frente a las cuales nos sentimos los ciudadanos de a píe inermes e impotentes (yo reacciono de muy mala manera y pongo en su sitio rápidamente a quién no sabe comportarse), pero hay muchos que andan por el mudo pidiendo perdón por existir, a los que se atropella y de los que se abusa. Pero eso le importa poco a Yolanda: su guerra es otra. Cuando me llegue el momento que ella me pronostica espero que la que aparezca no sea ella. Feliz año a todos (vascos y vascas).
Pero también he reparado es sus prejuicios, su indelicadeza, su miopía, etc
Miopía y prejuicios que reitera en su réplica. Hace falta se corto de miras para no entenderme.
No me sermonee con ideologías. El que está en otra batalla es usted.
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