El caballo de Troya: Todos somos Iglesia
Quaestio Quodlibetalis XXI. El otro día, hablábamos de eslóganes ateos y hoy vamos a hablar de un eslogan cristiano. Bueno, más bien un eslogan no muy católico, pero que se oye con cierta frecuencia. Me refiero a la máxima “Todos somos Iglesia”, que ya he leído varias veces en algunos comentarios, bienintencionados pero a mi juicio gravemente erróneos, de este blog.
Su utilización varía, pero, en general, suele utilizarse como una forma de diluir la enseñanza y la práctica de la Iglesia. Por ejemplo, ante el hecho de que la Iglesia siempre ha enseñado que el divorcio es inmoral, se responde que seguro que había gente que no estaba de acuerdo. Por lo tanto, como “todos somos Iglesia”, no es verdad que la Iglesia enseñara eso, sino sólo que parte de la Iglesia enseñaba eso. Con ello se consigue, en la práctica, una legitimación o excusa para no tener que aceptar ninguna doctrina que a uno no le guste o con la que no esté de acuerdo. De hecho, existe un grupo llamado “Somos Iglesia” que utiliza esta táctica, con diversas variantes, para defender, entre otras cosas, el sacerdocio de la mujer, la determinación democrática de la doctrina de la Iglesia, la abolición del celibato sacerdotal, etc.

Hace algunos días, se hizo referencia en el blog al Orden de las Vírgenes. Como la mayoría de los católicos no sabe qué es el Ordo Virginum, me ha parecido una buena idea hablar de él. He pedido a una lectora que me envíe algo de información sobre el tema.
Al ser traductor, con frecuencia me pide la gente sugerencias para aprender un idioma. Entre otras muchas cosas, cuando la persona que me lo pregunta es católica, le suelo aconsejar que rece el rosario o, si puede, que vaya a Misas celebradas en ese idioma. De esa forma, con frases que a uno le resultan familiares y que se repiten una y otra vez, se va acostumbrando a pensar y hablar directamente en el idioma que sea, en lugar de pensar en español y luego traducir. Yo mismo lo he hecho así muchas veces y he rezado innumerables rosarios o la liturgia de las horas en inglés, francés, alemán, italiano, griego o latín y he asistido cuando he podido a Misa en las parroquias inglesa o francesa de Madrid.
He leído un artículo norteamericano sobre arquitectura religiosa que me ha parecido tan interesante que he traducido los primeros párrafos para el blog (y sí, en este caso y sin que sirva de precedente, cuando digo “interesante” quiero decir que expresa a grandes rasgos lo que yo pienso sobre el tema). Si Dios quiere y tengo tiempo, otro día traduciré el resto del texto.
Hoy serán recibidas en la Iglesia Católica las monjas de una congregación episcopaliana, junto con su capellán. Son diez hermanas de la Sociedad de Hermanas de los Pobres de Todos los Santos, que hoy recibirán la bienvenida del Arzobispo de Baltimore y el sacramento de la confirmación. Además, renovarán sus votos religiosos en la misma ceremonia.



