La propaganda LGTBI o ideología de género, es la nueva moda, una “revolución” subvencionada por El Estado y las grandes corporaciones para adoctrinar a una sociedad ávida de protagonismo y emociones vacías, que se ha convertido en una imposición y es tan eficaz en su labor censuradora que sus detractores son castigados con puño de hierro. La dictadura de los depravados. ¿De verdad queréis que a vuestros hijos les enseñen en el colegio que las niñas pueden tener pene y los niños vagina? ¿Aceptaréis sin condiciones un mundo en el que le pueden quitar a un padre la custodia de su hijo por no concederle un cambio de sexo a sugerencia del psicólogo de turno? Con esto no pretenden más que destruir el orden, el que ha sido y será siempre el centro de la historia: la familia.
Celibato y continencia. Por el P. Dr. Christian Ferraro (1-4)
El Padre Christian Ferraro es sacerdote católico, especialista en Santo Tomás de Aquino y Cornelio Fabro y ex profesor de Metafísica de la Pontificia Universidad Lateranense.
A raíz de la reciente discusión en el Sínodo del Amazonía acerca de la ordenación sacerdotal de hombres casados, ha realizado este estupendo trabajo que ahora comenzamos a publicar en cuatro entregas para,
Que no te la cuenten…
P. Javier Olivera Ravasi, SE
Celibato y continencia
P. Dr. Christian Ferraro
Con los tapones de punta: advertencias previas contrarias a toda corrección política
No espere el paciente lector encontrar en el presente escrito consideraciones acerca de la importancia y excelencia de la castidad consagrada, de su enorme utilidad para la vida espiritual, de su función de signo trascendente y demás cosas que todo católico medianamente formado más o menos conoce o intuye. El presente escrito es de carácter estrictamente exegético e histórico, y no propiamente espiritual, en el sentido de la espiritualidad católica. Por eso mismo el escrito no es apologético ni polémico y no pretende abrir disputa ni, menos aún, debate alguno; tampoco se reduce al menudeo de una discusión con los evangelistas o protestantes en general, ni procura contrarrestar los delirios de quienes sostienen que el Señor no contrajo matrimonio porque las circunstancias de la vida no se lo habrían permitido o salir al cruce de las trasnochadas fabulaciones de quienes hipotizan morbosamente alguna historia secreta con la Magdalena.