Por mucho que se insista, lo de Queiruga no estaba previsto para esta Permanente

José Manuel Vidal insiste hoy en su portal en el “caso Torres Queiruga". Publica una carta que el secretario de la Comisión para la Doctrina de la Fe, el sacerdote José Rico Pavés, envió el 11 de diciembre pasado a los obispos de dicha comisión. En la misma les enviaba el borrador de la “Notificación sobre algunas obras del Prof, A.Torres Queiruga". Y se les proponía la convocatoria de una reunión de la comisión “con tiempo suficiente para perfilar el borrador y, si prospera, presentarlo a la Comisión Permanente que se reunirá los días 17 y 18 de febrero de 2009″.

Pues bien, eso no hace sino confirmar lo siguiente:

1- Que existe un expediente sobre la obra de Torres Queiruga. Y que está avanzado de tal manera que existe un borrador de nota final.

2- Que todavía no se ha aprobado el texto definitivo de la nota. Ni se aprobó antes de la Permanente de febrero ni se ha aprobado para la última Permanente.

3- Que hasta que la propia comisión no apruebe el texto, es imposible que la Permanente pueda pronunciarse y, por tanto, era incierta la información de que se fuera a producir la condena de Queiruga en estos momentos. En ese sentido, es también falso de toda falsedad que el anuncio de dicha condena por parte de Religión Digital haya parado NADA. Ni se ha parado el debate sobre la nota de Queiruga, en estado de borrador, ni se va a parar la publicación de la misma una vez sea aprobada tanto por “Doctrina de la Fe” como por la permanente.

4- Que si a alguien le quedaba alguna duda sobre la necesidad de publicar esa nota, ya está claro que debe de hacerse, siquiera por preservar la dignidad de los obispos miembros de la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe.

En resumidas cuentas, como vengo diciendo desde que he escrito sobre este tema, la investigación sobre la teología de Torres Queiruga es un hecho conocido (el que la niegue, miente), pero son los obispos, y sólo ellos, los que decidirán cuándo, cómo y de qué manera se pronunciarán sobre dicho teólogo. Y aunque todos los medios tenemos derecho a manifestar nuestra opinión sobre si debe o no publicarse la nota y el cuándo y el cómo, ningún medio, afín o desafín a los obispos, debería precipitar o retrasar nada. Entre otras razones, porque ese no es el papel que deben jugar los medios de comunicación en relación a los prelados, que deben de guiarse sólo por la oportunidad pastoral.

Luis Fernando Pérez Bustamante

PD: Alguien en Añastro podría preguntarse cómo es posible que la carta de un secretario de una comisión aparezca publicada en un medio de comunicación. Y, en este caso no se puede echarle la culpa al medio, al que hay que felicitar por su eficacia a la hora de conseguir una buena fuente interna en la Casa de la Iglesia.