(317) Catolicismo de tercer grado

1.- Para la sola criatura, es imposible.— En su muy sustancioso prólogo al magnífico libro del P. Alfredo Sáenz S.I., La Cristiandad. Una realidad histórica, el P. Carlos Biestro explica de qué manera la historia confirma la enseñanza de la Tradición, en cuanto que al margen de Cristo la sociedad corre hacia su desastre, porque «es imposible para la sola creatura detener el avance inexorable de la culpa y la muerte que reinan desde la Caída Original». Es un pasaje potente, que corona cabalmente así: «Sólo en el Señor las personas y las sociedades pueden alcanzar la salvación.»

 

2.- Pero es posible, para el Señor de toda criatura.— Comenzaba su prólogo el P. Biestro con una proclamación: «Es sabido que Dios salva al mundo suscitando hombres e inspirando obras que contradicen al mundo con la defensa de aquellas causas que cada época particular tiene por perdidas.» Con esta alabanza, entiendo, se nos anima a defender, como católicos, las causas perdidas que contradicen el mundo moderno, que parecen imposibles para nosotros en cuanto solas criaturas, pero posibles para Dios que «actúa en las obras de sus criaturas», porque «es la causa primera que opera en y por las causas segundas» (Catecismo 308).

 

3.- Lo mejor imposible es posible para Dios.— Tal cosa sucede con la doctrina tradicional, sobre todo en su traditio local hispánica. Me refiero a la realeza social de Nuestro Señor Jesucristo, que es doctrina que contradice al mundo, al catolicismo de tercer grado y al positivismo idólatra del Leviatán moderno. Como dice el P. Biestro, Dios suscita obras que contradicen el mundo con causas que el mundo tiene por perdidas. No las tenga por lo mismo el católico, no desconozca la providencia de Dios, que opera lo imposible en y por sus criaturas. ¡Cuánta necesidad tenemos de políticos católicos que contradigan al mundo, y cual verdaderas causas segundas movidas por Dios, operen lo imposible para el mundo moderno!

 

4.- Meliora secuenti, quien sigue lo mejor, se lleva la palma. Reza el emblema de Don Juan de Borja, en la bellísima edición de 1680 de sus Empresas morales. Dando por supuesto el estado de gracia, ¿no será altamente meritoria la defensa de tal causa? ¿No habrá para tal empresa imposible, posible palma? Sintetizamos su tesis, clásica y perenne,  citando Libertas praestantissimum, 14:  «es absolutamente contrario a la naturaleza que pueda lícitamente el Estado despreocuparse de las leyes divinas o establecer una legislación positiva que las contradiga». Pensar lo contrario, promoviendo al mismo tiempo un catolicismo espiritualista y privado, es política “católica” de tercer grado. No es lo mejor, sino lo peor.

 

y 5.- Lo mejor, siempre que se pueda.— Es lo peor, decíamos, porque tal separación impide, artificialmente, que el orden del bien común, (es decir, el orden político), se encuentre con el orden de la gracia que lo hace plenamente posible, (es decir, el orden divino). Sí, sé que es aparente causa perdida defender, en la atmósfera personalista que nos envuelve, la ilicitud de tal separación artificial y abusiva. Pero debemos contradecirla, porque como explica León XIII: «el poder político y el poder religioso, aunque tienen fines y medios específicamente distintos, deben, sin embargo, necesariamente, en el ejercicio de sus respectivas funciones, encontrarse algunas veces.» Se admite por tanto distinción pero no separación. 

Piense el político católico, supuesto el estado de gracia, que le espera la palma (del martirio) si defiende lo mejor, que contra el Leviatán de tercer grado se resume y aquilata en esta máxima:

no es lícito en la vida política apartarse de los preceptos de Dios y legislar sin tenerlos en cuenta para nada.

 
David Glez.- Alonso Gracián
 

7 comentarios

  
Juan Andrés
«es absolutamente contrario a la naturaleza que pueda lícitamente el Estado despreocuparse de las leyes divinas o establecer una legislación positiva que las contradiga». Que excelente expresión, y cuanto jugo tiene ya que "poder" "puede" pero donde termina todo es la cuestión. Podría incluso parafrasearse: es absolutamente contrario a los mandamientos de Dios que puedan los jerarcas de la Iglesia despreocuparse de ellos para establecer una neo doctrina que los contradiga. Poder pueden pero conduce al abismo.

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A.G.:
Desde luego, Juan Andrés, es jugosísima expresión. Poder puede, como el pecado, que es posibilidad, es decir, abuso. En estos momentos, gran parte de los pastores permanecen entusiasmados con el constitucionalismo actual, que es de corte liberal de tercer grado. Pidamos al Señor que suscite políticos y pastores quieran seguir lo mejor y llevarse la palma.
27/11/18 8:44 PM
  
Ricardo de Argentina
No es lícito porque Dios, que nos ha creado y quiere nuestro bien, ha ordenado a ello sus preceptos.

No es lícito porque la motivación de quienes alejan a las criaturas de Dios, no puede ser otra que tiranizarlos aprovechándose de su posición dominante.

No es lícito porque lo que legislen las criaturas caídas y carentes del auxilio divino, a la larga será necesariamente injusto y antinatural.

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A.G.:
Amigo Ricardo, bien lo dices: las legislaciones del estado caído, del estado de enemistad, devienen injustas, devienen antinaturales, y es lógico que sea así. Por algo Nuestro Dios ha venido a salvarnos.

No es lícito, como dices, legislar al margen y contra Dios, porque Dios ha puesto un orden en las cosas, fuera del cual no hay bien común posible.
27/11/18 10:24 PM
  
Luis Fernando
«es absolutamente contrario a la naturaleza que pueda lícitamente el Estado despreocuparse de las leyes divinas o establecer una legislación positiva que las contradiga»

O sea, el actual sistema democrático liberal que tenemos en España -y en gran parte de Occidente, es absolutamente contrario a la naturaleza, a pesar de lo cual la inmensa mayoría de los obispos en nuestros países viven la mar de integrados en el mismo. Y no solo en los últimos 4-5 años, no... más bien en las últimas décadas.

Saquen ustedes las consecuencias pertinentes.

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A.G.:
Hay en las mentes católicas una sobrevaloración de la democracia liberal que espanta.Como dices, Luis Fernando, legislar desde este tercer grado es contrario a la naturaleza.
28/11/18 11:26 PM
  
Javidaba
Muchas gracias.
Ave María gratia plena...
29/11/18 12:44 AM
  
Soledad
El punto dos es muy esclarecedor. Quizás ante la avalancha de despropósitos y descaminos a veces adoptamos posturas de queja, derrotismo e incluso fuga.O eso me parece a mi. Desesperanza.
"Dios no manda cosas imposibles, sino que al mandar, te enseña que hagas cuanto puedas, y a que pidas lo que no puedes" San Agustín

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A.G.:
Eso creo yo, que el liberalismo actual es fruto, también, de un derrotismo sin duda pelagiano, o más bien voluntarista.

Respecto a la frase de San Agustín, hay que ver en qué contexto está, o si está correctamente traducida o citada, para entenderla bien. Porque nada puede hacer el hombre por sí solo. Así dicha, sin más, suena raro, porque Dios no puede decirle al hombre que haga cuanto pueda y lo demás lo pida, porque nada, absolutamente nada bueno puede hacer el hombre por sí solo si Dios no le mueve. Y no me refiero sólo a los actos sobrenaturales, que necesitan absolutamente de la premoción sobrenatural, sino de incluso los actos buenos naturales, que necesitan de la moción natural o creatural. E incluso del acto físico del pecado, que necesita una moción en cuanto acto físico, no en cuanto al pecado.
29/11/18 6:29 PM
  
HUGO ALBERTO VERDERA
Querido amigo Alonso Gracián: magnífico en profundidad y claridad doctrinal tu apreciación. soy amigo personal del Padre Biestro; nos une un discipulado común con mi querido maestro, el padre Leonardo Castellani, sacerdote, maestro e inspirador, su obra ciclópea es digna del más ortodoxo catolicismo, lo que le valió persecuciones del "gusano del fariseísmo", hoy claramente imperante en la Iglesia. Amigo Alonso, sigo constantemente sus elaboraciones doctrinarias, que son una fuente de ortodoxia en esta triste época de claudicaciones y traiciones. Un abrazo sincero de su amigo Hugo.

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A.G.:
Apreciado Hugo, me alegra mucho conozca al P. Biestro, su prólogo al libro de Caturelli es excelente e iluminador. Le agradezco sus palabras, y me alegra como siempre recibir noticias y comentarios suyos. Ha tenido Ud. buenos maestros, desde luego.

La tradición hispánica, en estos momentos, tiene mucho que aportar en orden a la superación de la presente crisis. Castellani, Caturelli, Sáenz, y tantos otros, entre los que no puede faltar Meinvielle, o Calderón Bouchet, son una mina.
30/11/18 4:28 AM
  
Otilio de Alba
David, a propósito del tema central que expones aquí, transcribo fragmentos del artículo de Luis Eugenio Todd, titulado: Increíble: Angela Merkel y Dios.

Escribió así de ella:
.........."En sus comentarios dijo que la única fórmula para regresar el mundo a la paz y a la estabilidad, por las diferentes formas de pensar, es volver a la Biblia y al pensamiento místico religioso, pues el sentir pragmático del liberalismo está hundiendo al mundo cada vez más en conflictos insalvables, sobre todo por el nuevo islamismo y la migración correspondiente.........
Concluyó su señalamiento diciendo que le gustaría que más gente dijera públicamente que quiere volver a Dios y que entiendan la Biblia en conceptos básicos....................
Esta mujer que si sabe de ciencia, pues se doctoró con una tesis sobre química cuántica, obteniendo una calificación sobresaliente, está convencida, igual que muchos científicos, que Jesús es la esperanza y que la Biblia es el gran documento que debemos conocer, leer y comprender."

Gracias David por tu dedicación. DIOS NS te bendiga siempre.

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A.G.:
Gracias. No conozco el asunto que me comenta, pero creo que, en general, muchas mentes irán despertando, reconociendo los males de la Modernidad. Aún queda mucho, no obstante. Mientras tanto, pidamos venga a nosotros su Reino. Es la única esperanza.
30/11/18 10:48 PM

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