¿Deben unas monjas tener 400.000 euros en efectivo?
Cuando se conoció la noticia de que las religiosas cisterciense del convento de Santa Lucía, en Zaragoza, habían sufrido un robo de millón y medio de euros, que estaban metidos en bolsas llenas de billetes de 500 €, el estupor de fieles y no fieles fue tremendo. Lo primero que todo el mundo se preguntaba es cómo era posible que unas monjas tuvieran tal cantidad de dinero en su convento. 
Hoy sabemos que la cantidad no era tan elevada, aunque los cuatrocientos mil euros de los que habla el abogado de las religiosas no son “moco de pavo”. Y la justificación que da para que ese dinero no estuviera en el banco, “comprar piezas de piel con destino a los trabajos de encuadernación“, no parece del todo satisfactoria. Es muy dudoso que unas piezas de piel cuesten 65 millones de las antiguas pesetas. Y eso de que ese tipo de material se paga al contado, pues tampoco es normal. A día de hoy, salvo en determinado tipo de negocios, no es habitual que se hagan operaciones de compra en efectivo por cantidades tan elevadas. Y aunque sea posible, sin duda también debe ser factible que un pago de esas características se haga vía transferencia bancaria.
No son pocos los que han sospechado que tanto dinero metido en bolsas puede ser síntoma de que se ha obtenido sin declararlo a Hacienda. Nuevamente el abogado ha asegurado que puede justificarse hasta el último euro, que habría pasado por la fiscalización pertinente.

El P. Hugo Valdemar Romero es el portavoz de la Archidiócesis de México, sede primada del país norteamericano. Y en su condición de sacerdote y portavoz de su iglesia local, hizo hace unos años unas declaraciones totalmente conformes al magisterio de la Iglesia. A saber, que un católico no debería de votar a un partido, concretamente el PRD, que apoya el aborto y la legalización de las uniones homosexuales. El Instituto Federal Electoral ha considerar fundado el proceso sancionador contra el presbítero, aunque todavía no se ha concretado cuál puede ser la pena que se le imponga. Al parecer, si el sacerdote no hubiera nombrado explícitamente al PRD, no habría sanción. 
Si algo ha aprendido la Iglesia en los últimos años es que los escándalos, como ciertos desechos orgánicos, tienden a flotar. Es decir, por más que se quiera hundirlos en el “fondo del mar, matarile, rile, rile", la realidad se impone y al cabo del tiempo asoman de nuevo a la superficie.
Pocos cristianos albergarán duda alguna de que en el cielo hay un nuevo mártir desde que el miércoles un grupo de terroristas islámicos asesinara a Shahbaz Bhatti, ministro paquistaní para las minorías religiosas. Y si alguien no lo tiene del todo claro,
         







