Espectáculo dantesco y tomadura de pelo a los fieles
Como no habíamos tenido suficiente con la bronca continua durante dos años largos acerca de la comunión de los divorciados vueltos a casar. Como no han hecho suficiente daño a los fieles que, independientemente de su sensibilidad eclesial, han asistido al espectáculo de unos obispos diciendo una cosa y otros la contraria en algo que afecta, ni más ni menos, que a tres sacramentos. Como no les ha bastado con la manipulación lamentable del sínodo extraordinario -recordemos ese engendro herético de Relatio intermedia- y el semifallido intento de manipulación del sínodo general, del que advirtieron al Papa un grupo de cardenales. Como, en definitiva, la Relatio final del sínodo recién terminado no es sino un intento burdo de conciliar lo irreconciliable -posturas ortodoxas y heterodoxas-, el supuesto y falso consenso ha saltado hecho pedazos.
Ahora tenemos a unos cardenales y obispos diciendo que la Relatio final abre las puertas a la comunión de algunos divorciados y vueltos a casar y a otros diciendo exactamente lo contrario. ¿Y para eso han celebrado ustedes un sínodo? ¿para eso han llegado a un acuerdo sobre el texto final?