Newman, católico por fidelidad a Dios
A todos aquellos que veneramos grandemente al Beato John Henry Newman la noticia de la posible aprobación de un segundo milagro atribuido a su intercesión, que abriría de par en par las puertas a su canonización, nos causa gran alegría.
La vida de este hombre de Dios se caracterizó por dos cosas:
1- Su fidelidad a Dios (Lead Kindly Light), quien le llevó primero a la conversión al cristianismo y posteriormente su conversión al catolicismo, que es la perfección de la fe cristiana.
2- Su batalla constante contra la peor perversión del cristianismo. A saber, la teología liberal, que en el ámbito católico toma el nombre de modernismo.
Newman es además un testimonio claro, inequívoco y radical de cuál es el destino de todo hombre que se deja iluminar por el Espíritu Santo: la fe católica.
En una época donde muchos abogan porque da lo mismo ser católico que ortodoxo, protestante o incluso miembro de otras confesiones religiosas no cristianas, el beato Newman marca el camino a seguir. Y eso vale igualmente para el movimiento ecuménico. Cristo fundó una sola Iglesia y la misma subsiste completamente solo en la Iglesia Católica, aunque haya elementos de la misma en otras confesiones cristianas.