(342) Sínodo: agua y aceite. Oremos
–Según entiendo estamos en que sí, pero no, en el sentido de más bien…
–Yo prefiero decir más piadosamente: «bástale a cada día su afán».
El agua y el aceite no se pueden unir. Pueden estar en un mismo vaso, pero por mucho que se agiten y remuevan no pueden fundirse en uno. Esto es algo que cualquiera lo sabe. El agua es más densa y se queda abajo, mientras que el aceite queda en la superficie. Ese modo de inconciliabilidad que se da en el mundo físico, se da también, y de forma mucho más radical, en el espiritual.