Per a ofrenar noves glòries a Espanya
En InfoCatólica no nos escondemos cuando se trata de hablar de algo tan poco contingente como la unidad de España. Providencial fue el post de Milenko Bernardic, en el que nos mostró cuáles fueron las consecuencias de romper neciamente la unidad de Yugoslavia, que sin lugar a dudas era un país con mucha menos tradición histórica de unión que España. Anteayer Bruno Moreno, miembro de nuestro consejo de redacción, publicó un artículo que da una serie de argumentos bien claros sobre cuál ha de ser la postura de los católicos ante la posible independencia de Cataluña. Obviamente no pretende establecer la idea de que la unidad de este país es un dogma de fe, pero sí demuestra, en mi opinión de forma irrebatible, que destruir esa unidad puede considerarse como un grave atentado al bien común.
Hoy mismo el P. José María Iraburu, nuestro editor, ha publicado otro magnífico post con todo tipo de explicaciones históricas y citas bíblicas, de obispos españoles, etc.

En breve empieza el Año de la Fe. Y antes tendremos la declaración solemne de San Juan de Ávila como doctor de la Iglesia. Será en Roma el próximo 7 de octubre. Patrono del clero español, la vida de San Juan es digna de ser estudiada para sacar de ella el agua viva que emana de la gracia que el Señor derramó sobre su vida.
El anciano obispo san Ignacio de Antioquía iba a Roma camino del martirio. Según pasaba por diversas iglesias, tuvo la feliz idea de escribir pequeñas epístolas a los fieles que formaban parte de las mismas. Esto sucedía el año 107. El mártir había oído el evangelio de boca de los apóstoles. De ellos recibió la ordenación por imposición de manos. A una de esas comunidades, los trallianos, les escribió lo siguiente:
Llevo doce años viviendo en tierras oscenses. Seis en Sariñena, capital de Los Monegros, y seis en Huesca capital. Cuando llegué con mi familia a esta tierra, todavía vivía Mons. Javier Osés, aunque el cáncer que provocó su muerte ya estaba avanzado.
En el nombre de la Sacrosanta, Suprema y Muy Digna de Adoración Libertad de Expresión, en Occidente estamos asistiendo a un ejercicio de irresponsabilidad criminal por parte de una panda de provocadores cuyas acciones son ocasión directa y previsible de muertes absurdas.








