El bozal socialista
Al portavoz del gobierno andaluz, Miguel Ángel Vázquez, no le gusta la libertad de expresión. Tampoco le gusta lo que la Iglesia enseña sobre la ideología de género, la sexualidad, la institución familiar, el aborto, la educación, etc. Y ya ha encontrado la forma de congeniar sus “disgustos". Lo ideal es poner un bozal a la Iglesia para que no hable, no opine y no diga una sola palabra sobre los temas que no encajan con la ideología socialista. Así lo pide en su blog.
Alguien dirá que el señor Vázquez solo pide un bozal para el obispo de Córdoba, pero es que lo dicho por Mons. Demetrio Fernández en su última carta dirigida a los fieles es ni más ni menos que lo que lleva diciendo la Iglesia sobre esos temas desde hace años. Es decir, a nadie deben sorprender las palabras del pastor cordobés.

Los precandidatos democrata¿cristianos? a la presidencia chilena mantuvieron ayer un debate público en el que abordaron la cuestión del reconocimiento civil de las uniones homosexuales. No sé si ambos son católicos, pero para el caso, da lo mismo. Claudio Orrego sostuvo la tesis de que dichas uniones deben ser reguladas por el estado pero sin llegar a considerarlas como matrimonio. Tal postura es
Siria lleva unos cuantos meses inmersa en una guerra civil -financiada desde fuera- cuyo resultado sigue siendo todavía incierto, aunque todo apunta a que el régimen dictatorial laicista puede caer. La consecuencia de esa caída será la llegada del fundamentalismo islámico al poder, lo cual acarreará, por mucho que haya urnas de por medio, que la situación de los derechos humanos y las libertades seguirán igual o peor. Para los cristianos, sin duda, mucho peor, como se ha demostrado en la vecina Iraq y va camino de demostrarse en Egipto.
De entre la


