El potencial de la radio por Internet para la Iglesia
Nadie puede negar ya que Internet es una de las claves en el futuro de la comunicación e información a nivel mundial, nacional e incluso local. Sólo la televisión y hasta cierto punto la radio parecen capaces de aguantar el tirón de la red. La prensa escrita no puede competir con la inmediatez que ofrece la World Wide Web. Cuestiones comerciales aparte -es obvio que cada vez se invertirá más en publicidad en portales que en periódicos-, lo que realmente da un valor esencial a internet es su versatilidad y capacidad de llegar a todos los rincones del planeta con un solo click.
Vayamos al tema de la radio. Cada vez son más las personas que la oyen desde sus ordenadores o ipods y no desde los viejos transistores y cadenas de música. Además, las principales emisoras ofrecen la posiblidad de escuchar sus programas a cualquier hora del día. Por ejemplo, a las 7 de la tarde puedes escuchar lo que ha dicho Federico a las 6 de la mañana, o la tertulia de Carlos Herrera de 8 y media a 10, o el Gato al Agua y la Espuela de la noche anterior. Y si no eres un apasionado del deporte, en vez de irte a dormir con el Tirachinas te puedes acostar escuchando La Linterna de César Vidal a los pocos minutos de que acabe su programa. Incluso si eres de derechas y masoquista, puedes autoinflingirte un castigo severo obligándote a oír a Fraaaancino u otros programas de La Ser. Y nadie lo dude, son muchas las amas de casa que habrían agradecido que en tiempos de García hubiera habido la posibilidad de escuchar sus diatribas contra Pablo, Pablito, Pablete al día siguiente. El índice de natalidad no se habría desplomado tanto en nuestro país, ;-)