Menuda papeleta, grande responsabilidad. Por Monseñor Sanz Montes
Menuda papeleta, grande responsabilidad
Queridos Hermanos y amigos: paz y bien.
¿Tiene algo que ver con nuestra vida cristiana la política? Parecería que se trata de algo ajeno a nuestra fe y a nuestro compromiso creyente. Y sin embargo no es así. También en la política debemos buscar y apoyar lo que mejor traduzca nuestra cosmovisión de la vida, de la verdad, de la justicia, de la paz. Porque hay caminos más próximos y los hay más extravagantes a nuestra manera de ver las cosas.
Hay un momento en el que todos los ciudadanos nos hacemos directa y personalmente corresponsables ante la marcha del país y el funcionamiento de nuestras instituciones: cuando nos toca ejercer el derecho y el deber de votar a nuestros representantes políticos. Ciertamente no todo depende de ellos, pero las decisiones políticas y sociales que tomen los elegidos incluso en el terreno municipal o autonómico, afectan al ejercicio de muchos de los derechos humanos fundamentales. Esto nos exige que votemos en conciencia, eligiendo libre y acertadamente a los candidatos, haciendo un seguimiento de la gestión de quienes resulten elegidos, particularmente si estos candidatos ya hubieran mostrado cuál es el verdadero talante y cuál su auténtico talento.