InfoCatólica / Cor ad cor loquitur / Archivos para: Agosto 2016

9.08.16

Doña Cristina, lea usted al Papa antes de hablar contra nuestros obispos

La presidenta de la Comunidad de Madrid, del PP, ha jugado la única carta que piensa que desde la propia Iglesia se le ha cedido, para minimizar la importancia de la carta conjunta de los obispos de Getafe y Alcalá de Hernares contra la ley infame aprobada recientemente por el parlamento madrileño. 

Doña Cristina quiere presentar a esos obispos como una especie de radicales que sostienen posturas minoritarias no solo en la sociedad -eso es hartamente posible- sino en la propia Iglesia.

Sin duda, el silencio pertinaz del arzobispo de Madrid ante esa misma ley, ayuda a la tesis de la señora Cifuentes. Pero hete aquí que esos obispos no hacen sino desarrollar lo indicado por el papa Francisco a los obispos polacos. Lea usted conmigo, doña Cristina:

«En Europa, América, América Latina, África, en algunos países de Asia, hay verdaderas colonizaciones ideológicas. Y una de estas – lo digo claramente con nombre y apellido – es el ‘gender’. Hoy a los niños – a los niños – en la escuela se enseña esto: que cada uno puede elegir el sexo. ¿Por qué enseñan esto? Porque los libros son los de las personas y de las instituciones que dan el dinero. Son las colonizaciones ideológicas, sostenidas también por países muy influyentes. Y esto es terrible. Hablando con Papa Benedicto, que está bien y tiene un pensamiento claro, me decía: ‘Santidad, esta es la época del pecado contra Dios creador’. Es inteligente. Dios ha creado al hombre y a la mujer; Dios ha creado al mundo así, así, y nosotros estamos haciendo lo contrario. Dios nos dio un estado ‘inculto’ para que nosotros lo transformáramos en cultura; y después, con esta cultura, hacemos cosas que nos devuelven al estado ‘inculto’. Lo que ha dicho el Papa Benedicto tenemos que pensarlo: ‘Es la época del pecado contra Dios creador‘».

Es más, en Colombia la Iglesia también ha tenido que salir al paso del intento de pervertir moralmente a los niños, que es exactamente lo mismo que hace su ley, la de su partido, la de su comunidad autónoma, la de todos los partidos con representación parlamentaria en Madrid.

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8.08.16

Toca estar con los obispos de Getafe y Alcalá de Henares

Era de esperar que la jauría del lobby gay reaccionara con saña ante la impecable carta de los obispos de Getafe y Alcalá de Henares sobre la infame ley contra la LGTBIfobia aprobada por unanimidad por los partidos con respresentación parlamentaria de la Comunidad de Madrid.

La carta de los obispos es cien por cien fiel al Magisterio de la Iglesia. Es cien por cien fiel a su ministerio episcopal, del que forma parte el deber de defender a los fieles, especialmente a los más indefensos (niños), del totalitarismo agresivo que hoy tiene su cara más perversa precisamente en ese lobby gay.

En Madrid hay tres obispos que dan la cara, aunque saben que se la van a partir mediática, política y socialmente. Seguramente hay un cuarto que querría darla, pero por razones obvias, no puede. Y hay otro obispo del que no hace falta decir nada, porque su silencio lo dice todo

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2.08.16

Obedecer hasta la muerte

Nos conformamos con demasiado poco. Unos, con cumplir más o menos bien con los mandamientos de Dios y de la Santa Madre Iglesia. Otros ni eso, pues creen que la vida cristiana consiste en que Dios te acepta tal cual eres y te va a seguir aceptando de la misma manera si dentro de cuarenta años sigues siendo exactamente igual que ahora.

Mas, ¿cuál ha de ser la medida de nuestro proceder? Lo enseña San Pablo:

Tened entre vosotros los mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús, el cual, siendo de condición divina, no consideró como presa codiciable el ser igual a Dios, sino que se anonadó a sí mismo tomando la forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y, mostrándose igual que los demás hombres, se humilló a sí mismo haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.
Y por eso Dios lo exaltó y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre; para que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en los cielos, en la tierra y en los abismos, y toda lengua confiese: «¡Jesucristo es el Señor!», para gloria de Dios Padre.
Fil 2,5-11

Ahí lo tenemos. Cristo, el Verbo de Dios, el Hijo eterno del Padre eterno, se humilla a sí mismo, se hace carne como nuestra carne, y obra aquello que nosotros jamás podríamos haber obrado por nosotros mismos. Cristo obedece al Padre hasta la muerte, y muerte de Cruz. “No se haga mi voluntad sino la tuya” (Luc 22,42), dijo Aquél que era tan divino como el Padre a quien hablaba. Y nosotros, simples mortales, ¿acaso discutiremos con Dios sobre aquello en lo que debemos obedecerle? ¿Acaso hay margen para la desobediencia? ¿acaso el “hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo” puede ser suspendido en algunas áreas de nuestras vidas?

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1.08.16

Es mentira que el pecado sea invencible

Que levante la mano aquel que no tiene o ha tenido pecados en su vida que parecen invencibles, que no hay manera de desprenderse de ellos. Pues bien, para todos nosotros, una gran noticia:

No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea de medida humana. Dios es fiel, y él no permitirá que seáis tentados por encima de vuestras fuerzas, sino que con la tentación hará que encontréis también el modo de poder soportarla.
1ª Cor 10,12

Estimados, la Escritura no miente. Si dice que Dios nos da el modo de poder vencer al pecado, es que nos lo da. Y no hay vuelta atrás.

Por supuesto, aun habiendo sido redimidos, seguimos bajo la influencia de la caída del primer Adán. Pero a diferencia de lo que enseñaba Lutero, esa influencia puede ser sometida a la soberanía de Cristo en nuestras vidas por medio de la acción del Espíritu Santo, que derrama sobre nosotros todas las gracias eficaces para crecer en santidad.

En ese camino de lucha contra el pecado, caeremos muchas veces. De todas ellas nos levanta Dios a través del sacramento del perdón. Pero el pecado no puede tener la última palabra. Si hay gracia para el perdón, la hay para la santificación. 

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