¿Sola Escritura? (6)

6. El canon de la Biblia

Durante su investigación acerca del principio de sola Scriptura, Scott Hahn percibió otras dos gravísimas debilidades de la doctrina protestante: se trata del problema del canon de la Biblia y del problema de la interpretación auténtica de la Biblia. Los consideraré en ese orden.

El principio protestante de sola Scriptura no está en la Escritura, pero podría haberlo estado si Dios lo hubiera querido así. El problema del canon bíblico, en cambio, es metafísicamente insoluble desde el punto de vista protestante.

A continuación citaré parte del diálogo de Scott Hahn con uno de los teólogos protestantes que consultó en su intento de resolver sus dudas:

“Un día me invitó a ir con él a un encuentro con uno de nuestros más brillantes maestros, el doctor John Gerstner, un teólogo calvinista formado en Harvard y de fuertes convicciones anti-católicas. […]

-¿Cómo podemos estar seguros de que los veintisiete libros del Nuevo Testamento son en sí mismos la infalible palabra de Dios si fueron falibles Papas y falibles concilios los que nos dieron la lista?

Nunca olvidaré su respuesta:

-Scott, eso sencillamente significa que todo lo que podemos tener es una falible colección de documentos infalibles.

-¿Es eso realmente lo mejor que el cristianismo protestante histórico puede aportar?

-Sí, Scott, todo lo que podemos hacer son juicios probables basados en la evidencia histórica. No tenemos ninguna otra autoridad infalible más que la Escritura.

-Pero, doctor Gerstner, ¿cómo puedo yo saber que realmente es la palabra de Dios infalible la que estoy leyendo cuando abro a Mateo o a Romanos o a Gálatas?

-Como te he dicho, Scott, todo lo que tenemos es una colección falible de documentos infalibles.

De nuevo me sentí muy disconforme con sus respuestas, a pesar de que sabía que él estaba presentando con toda honestidad las tesis protestantes. Mi única respuesta fue:

-Entonces, si las cosas son así, doctor Gerstner, creo que debemos tener la Biblia y la Iglesia. ¡O las dos o ninguna!”

(Scott y Kimberly Hahn, Roma, dulce hogar. Nuestro camino al catolicismo, Ediciones Rialp, Madrid 2001, pp. 86 y 92).

La simple evidencia histórica es incapaz de garantizar por sí misma la verdad de esta doctrina de fe sobrenatural: que determinados escritos transmiten sin error la Palabra de Dios revelada por Cristo.

Daniel Iglesias Grèzes


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3 comentarios

  
Luis López
Y menos mal que los reformadores no llevaron hasta las úlimas consecuencias los deseos de Lutero, que quería acabar con la Epístola de Santiago, la Epístola a los Hebreos o el Apocalipsis, y todo porque no se ajustaban a sus criterios teológicos sobre la "sola fide".

Se dice y repite continuamente la falacia de que los protestantes demostraban un inmenso amor a las Escrituras. Pues vaya con el ejemplo del primero de ellos -Lutero-, que llamó a Santiago "epístola de paja" o al Apocalipsis "libro muy poco inspirado", y abogó por eliminarlos de "su Biblia"

En todo caso, los protestantes al aceptar (en contra de Lutero) el Apocalipsis me imagino que serán conscientes de que esa aceptación supone coherentemente la condena del propio Lutero al infierno, dado que ese Libro dice que: "Si alguien suprime alguna de las palabras proféticas de este libro, Dios le quitará la parte que le corresponde en el Árbol de la vida y en la Ciudad Santa descritos en este libro" (Ap. 22,19). Y eso es lo que quiso hacer el reformador alemán, quitar este libro inspirado de enmedio.
12/12/10 2:35 PM
  
Ricardo de Argentina
"Colección falible de libros infalibles"

¡Qué solemne tontería!
Ninguna cadena es más fuerte que su eslabón más débil. Si la colección es falible, no pueden serlo menos los libros que la integran.
12/12/10 3:56 PM
  
Tulkas
En cualquier caso, Daniel, decir que los protestantes NO aplican el principio de Sola Scriptura no vale para nada.

¡Ya sabemos que no lo aplican!

El problema, lo apliquen o no, es que lo defienden, es más, que les constituye como tales protestantes.
12/12/10 4:11 PM

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