Y dijo el cura que el infierno y el purgatorio no existen
Cementerio madrileño de la Almudena, diez de la mañana. Una familia va a incinerar a su esposo, su padre, su abuelo, su tío. Como es habitual en estos casos cuando el finado es católico, un sacerdote preside las exequias. En esta ocasión, el presbítero era de origen hispanoamericano. Su discurso es agradable para los que lloran la partida de su ser querido. Pero llega un momento en que el cura afirma, sin que le tiemble la voz, que la enseñanza tradicional de la Iglesia sobre el infierno y el purgatorio ya no es válida. En otras palabras, que no existen.
Algunos de los familiares parecen sentirse aliviados. Creen que su amado está ya en el cielo con Dios. Pero un amigo de la familia, protestante para más señas, se queda con la boca abierta. Tanto que nada más acabar el oficio religioso me llama para preguntarme si es cierto que la Iglesia Católica ha dejado de enseñar que existe un purgatorio y un infierno. No es que le importe mucho lo del purgatorio, ya que él no cree en su existencia, pero le preocupa que la herejía universalista se haya instalado en el seno del catolicismo. Al menos entre algunos de sus sacerdotes.
Ante la pregunta de mi amigo, la respuesta es obvia. No, la Iglesia no ha dejado de enseñar que existe el purgatorio y el infierno. Pero sí, la Iglesia admite en su seno a sacerdotes que niegan esos dogmas de fe. Y por eso algunos llevamos años dedicados a pedir a la Iglesia que haga el favor de hacer algo para impedir que tal cosa ocurra. Pero este caso es especialmente sangrante. El sacerdote que profesa herejías sobre el destino final de las almas es uno de los responsables de oficiar las exequias en el cementerio de más “solera” de Madrid. No sé quién es. Puede incluso que no sea uno de los habituales. Quizás esté de paso. Pero quienes hemos asistido ya a unos cuantos funerales sabemos que ese sacerdote no es la excepción.

De la entrevista que
En la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá da clases un sacerdote jesuita llamado Carlos Novoa. Licenciado en Teología y en Filosofía, con maestría y doctorado en Ética, llegó a ser el decano de la Facultad de Teología de esa Universidad. Hace unos años 
Da igual que HO o cualquier otra organización cívica provida y profamilia se movilice para pedir al PP que defienda los valores en los que se supone que cree un amplio sector de su base social. Da lo mismo que en esta legislatura la derecha social, junto con el pequeñísimo sector provida de la izquierda, se haya tirado a la calle en contra del aborto. En todo lo relacionado con la ingeniería social, el partido de Mariano Rajoy mantiene una clara postura de tibieza, de falta de compromiso, de dejación absoluta de su responsabilidad de explicar ante la sociedad qué piensa hacer para acabar con lo que ellos llaman lacra del aborto.








