Se me saltan las lágrimas
Sí, señores, estoy a punto de echarme a llorar de emoción. El secretario ejecutivo de la FEREDE ha dicho que “también estamos en contra de que se les persiga sólo a ellos con esta situación del impuesto de bienes inmuebles“. ¿Quiénes son ellos? Pues nosotros, los católicos. O sea, el máximo representante de los protestantes evangélicos de este país ha salido a defender a la Iglesia Católica. Para que luego digan que los milagros no existen.
Y no, no sean mal pensados. No debemos creer que esto es aquello de “cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar". Hemos de pensar que don Mariano Blázquez ha hecho esas declaraciones porque es de justicia que las haga.
Ironías aparte, creo sinceramente que estamos ante una buena noticia. Y que debemos agradecer a la FEREDE que se pronuncie de esa manera. Es tan patética la actitud del PSOE, que está muy bien que el resto de confesiones religiosas de España le señalen con el dedo. De hecho, el presidente de las comunidades judías, Isaac Querub, dice igualmente que “con todos los problemas que hay en España el que se señale con el dedo a la Iglesia Católica es un tanto curioso“. Y tanto que es curioso, don Isaac.

Las autoproclamadas Comunidades de Base (CeBs) y Comunidades Cristianas Populares (CCPs) son un fenómeno peculiar que está presente en buena parte de Iberoamérica. No pienso entrar en analizar lo que son allá, pero en España son la punta de lanza, aunque ya ciertamente desgastada, del extremo-progresismo eclesial. Lo de eclesial es un decir, claro. El grado su comunión con la Iglesia Católica es más bien escaso. Hay bastantes comunidades eclesiales protestantes mucho más cercanas a la fe católica que lo que puedan estar dichas CeBs y CCPs.
El diario El Mundo publica hoy en su
El pasado viernes, en la final de fútbol la Copa del Rey, asistimos a la constatación de que hay dos regiones españolas en las que el sentimiento anti-español y separatista es mayoritario, al menos a la hora de hacerse notar. Es decir, puede que todavía haya más vascos y más catalanes que prefieran no separarse de España, pero los que sí lo quieren son mucho más activos y están más comprometidos con su causa.
Por lo que llevamos visto hasta ahora, el VII Congreso Mundial de las Familias que se está celebrando en Madrid es todo un éxito. Las ponencias son la mar de interesantes y ayer se vio además como el personal está especialmente entusiasmado con Mons. Reig Pla, que fue recibido con una ovación de las que hacen época. Es bueno que arropemos a los nuestros y que los enemigos de la Iglesia vean que no dejamos tirados a los pastores que dan la cara.


