Gracias, don Amancio
La Fundación Amancio Ortega va a donar 20 millones de euros a Cáritas para los programas de atención básica de la institución eclesial. Para que el lector se pueda hacer una idea de la importancia de esa cantidad, valga con que se lea la noticia que dimos ayer sobre la Memoria anual de Cáritas Española del año 2010. En total se dedicaron más de 250 millones de euros en atender a los pobres el año pasado. Los 20 millones de don Amancio -vía su fundación- suponen un 8% de esa cantidad.
Conviene tener en cuenta que Cáritas llega hasta donde puede. Es decir, si en vez de tener a su dispoción 200 ó 300 millones de euros, tuviera el triple, podría ateneder a muchas más de personas o mejorar considerablemente la ayuda a los que ya recurren a sus servicios. Y en vista de que los recortes económicos que sufren las administraciones públicas afectan también, para vergüenza de nuestros gobernantes lo digo, a los servicios sociales que se prestan a los más necesitados, la labor de Cáritas es hoy más necesaria que nunca. Toda ayuda extraordinaria, como la que acaba de tener lugar, es semilla que produce fruto abundante.

La ex Pontificia Universidad Católica del Perú
Daniel Iglesias me envió hoy la intervención de Mons. Héctor Aguer, arzobispo de La Plata, en el Sínodo de los obispos. Desgraciadamente no nos hicimos eco de la misma en InfoCatólica, así que he creído oportuno solucionar ese error reproduciendo las palabras del prelado argentino en mi blog. Fueron las siguientes:
El post que
Como dice el refrán, “una imagen vale más que mil palabras". Y en la que acompaña a este post vemos al P. Raniero Cantalamessa, ofmcap, arrodillado al lado de un pastor protestante mientras éste realiza una oración, una bendición o algo parecido. El pastor impone su mano sobre el fraile capuchino.


