Aquelarre sincretista en catedral católica

Día de Acción de Gracias, Catedral católica de San Pedro en Scranton, diócesis de Pensilvania, Estados Unidos. El párroco y/o deán de la catedral decide suspender la habitual Misa del mediodía. En su lugar se celebra un acto “interreligioso”.
El acto comienza con el toque del shofar por parte de una rabina judía, casada con un rabino, ambos defensores del “matrimonio” homosexual.
Luego se produce una “procesión” de los representantes de los diversos credos religiosos, que toman sitio ante el altar.
El primer orador es un pastor metodista. Y no tiene mejor idea que decir esto:
“Dios es grande. Doy testimonio de que no hay Dios, excepto el único Dios. Mahoma es el mensajero de Dios”.
A continuación toma la palabra el responsable de los Friends of the Poor (Hermanos de los Pobres) en Scranton, que invita a la oración común y cita el Salmo:
Ved qué bueno y qué gozoso es convivir los hermanos unidos.
Tras lectura de un pasaje del evangelio, el rabino toma la palabra para asegurar que el Día de Acción de Gracias es “un día de fiesta para todos, no importa cual sea nuestra religión… adoramos a Dios juntos“.

Aviso al lector. Al que le cause grave desazón lo que yo he escrito en posts pasados sobre el tema de la predestinación, la gracia, etc, mejor que no siga leyendo. No pretendo, ni mucho menos, dar una última palabra sobre estas cuestiones. Sería absurdo que así lo hiciera. Ni pretendo que sea heterodoxo el que acepta tesis que la Iglesia no ha condenado. Pero sí doy mi parecer, que es claramente a favor del tomismo, escuela de la que soy un simple aprendiz. Esa condición de aprendiz es la causa de cualquier posible inexactitud en mi lenguaje, por la que desde ya pido disculpas.









