Cosas que la Iglesia española no hace y debería hacer
La Iglesia Católica en España ha dedicado el año pasado bastante dinero en la campaña publicitaria “X Tantos", de cara a que los españoles marcaran la casilla de la propia Iglesia en su Declaración de la Renta. No es la primera campaña en ese sentido y no será la última. Y está bien que así lo haga, pues es necesario concienciar tanto a los fieles como a los que no lo son de la importancia de la obra social católica, sobre todo ahora que estamos en un tiempo de grave crisis económica.
Ahora bien, sinceramente echo de menos otro tipo de campañas en las que el mensaje no sea “oenegista” y de énfasis en el servicio social que la Iglesia presta a la sociedad y sí de claro anuncio del evangelio o de los valores éticos y morales que se proponen desde el catolicismo. Ahí tenemos el ejemplo de los obispos holandeses que salieron estas pasadas navidades en los televisores de su país dando testimonio de lo que Cristo significa para sus vidas, en el contexto de una campaña cuyos destinatarios principales son los católicos no practicantes de dicho país.
Si cruzamos al otro lado del Atlántico, cabe recordar el esfuerzo económico que llevó a cabo la Iglesia Católica en Méjico cuando pagó un anuncio de dos minutos de duración en horario “prime time” para dar al país las razones de su oposición a la aprobación de una ley abortiva en el Distrito Federal.