Empieza el Sínodo: "Permanece en lo que aprendiste y creíste"
Mañana da comienzo el sínodo general sobre la familia. Es un nuevo paso, ciertamente importante, del proceso que comenzó cuando el papa Francisco convocó dos sínodos para que la Iglesia abordara algo tan esencial como la atención pastoral a la institución familiar. Sin familia no hay sociedad y sin familias auténticamente cristianas no hay Iglesia. Es por tanto mucho lo que está en juego.
No es la primera vez, ni será probablemente la última, que la Iglesia aborda la problemática relacionada con la pastoral familiar. Hace ahora 35 años que se celebró otro sínodo sobre la familia, bajo el pontificado de San Juan Pablo II. Su exhortación apostólica post-sinodal Familiaris consortio (FC) fue la corona magisterial que, siquiera en teoría, debía guiar los pasos de la Iglesia en las décadas siguientes.
¿Qué ha cambiado en 35 años? Todo y nada. En Occidente (Europa y América), la familia está en una situación de crisis como no se ha visto igual desde que el cristianismo irrumpió en el mundo. El papa santo polaco ya era consciente de ello:
… el número cada vez mayor de divorcios, la plaga del aborto, el recurso cada vez más frecuente a la esterilización, la instauración de una verdadera y propia mentalidad anticoncepcional.
(FC 6)
No solo no ha mejorado esa situación, sino que ha empeorado considerablemente. La plaga del divorcio ha hecho que nuestra sociedad sea polígama a plazos. El aborto sigue avanzando a pasos agigantados. Y la eutanasia amenaza con cobrarse la última víctima de la escalera de la vida: nuestros ancianos. Una sociedad que no deja nacer a sus hijos, que se muestra incapaz de dar estabilidad a sus matrimonios -o uniones de hecho-, finalmente acaba por matar a sus abuelos. Todo forma parte de un plan establecido que recibe el impulso y el apoyo de legislaciones perversas que atentan contra la ley natural y cualquier cosa que tenga que ver con la ley divina.
En medio de toda esa vorágine a la que se ha dado en llamar cultura de la muerte, la Iglesia ha sabido mantenerse firme en cuanto a sus enseñanzas. La Humanae Vitae de Pablo VI supuso un freno considerable al intento de asalto de la doctrina mundana anticoncepcionista a la fe católica. El magisterio de san Juan Pablo II sirvió de dique para parar el tsunami destructor del Leviatán que busca no solo dominar el mundo -ya lo hace- sino destruir el último refugio de los redimidos por Cristo: la Iglesia. Benedicto XVI supuso una línea de continuidad, adornada con su evidente brillantez teológica.
Pero seamos claros. A esa claridad magisterial no le acompañó una pastoral encaminada a extirpar de raíz las herejías y las heteropraxis que se le oponían. Multitud de obispos, sacerdotes, religiosos, teólogos, seglares, etc, han vivido de espaldas a la doctrina de la Iglesia. Algunos, no pocos, oponiéndose a ella públicamente. Otros, la mayoría, encerrándola en un baúl con siete llaves.
Como el error no fue eficazmente combatido, para el bien común de los fieles, con todas las herramientas que Dios dio a su Iglesia, hoy amenaza con implantarse en el corazón de la fe católica, para su destrucción. Efectivamente, lo que está en juego no es si la Iglesia va a ser mejor o peor instrumento de misericordia, sino si va a seguir siendo o no columna y baluarte de la verdad.
El caballo de Troya que se permitió entrar hasta la Plaza Mayor amenaza con lograr la victoria, entregando a la Iglesia al adulterio de la infidelidad a Cristo, su palabra y veinte siglos de tradición ininterrumpida. No se trata de si los divorciados vueltos a casar pueden comulgar, sino de si la Iglesia cae en adulterio, negando a su Señor para fornicar con los valores de un mundo que rechaza a Dios y su ley. Todo ello, además, con el adorno de una falsa misericordia, que hace a Dios cómplice del pecado, que no podría ser vencido por la gracia y la obra del Espíritu Santo. Usar el amor y la misericordia de Dios como excusa para traicionar a Cristo, que dio su vida en pago por nuestros pecados, es una blasfemia de primer orden.
Más, como dijo Santa Teresa de Jesús, “nada te turbe, nada te espante". Nada de esto debería tomarnos por sorpresa. Ya dijo San Pablo
Por otra parte, todos los que quieran vivir piadosamente en Cristo Jesús serán perseguidos. Pero los malvados y embaucadores irán de mal en peor, engañando a los demás y engañándose ellos mismos.Tú, en cambio, permanece en lo que aprendiste y creíste , consciente de quiénes lo aprendiste.
2ª Tim 3,12-14
Si sufres confusión, si sientes que se te parte el alma ante el asalto a la Iglesia por parte de los profetas de los baales modernos, si temes que la tibieza de muchos sea la alfombra por la que cabalguen los destructores de la fe que has recibido de Dios, escucha al Espíritu Santo que te habla por el apóstol:
Y ésta es la razón por la que padezco esas cosas; pero no me avergüenzo, pues sé en quién he creído, y estoy seguro de que tiene poder para conservar mi depósito hasta aquel día. Ten por norma las palabras sanas que me escuchaste con la fe y la caridad que tenemos en Cristo Jesús. Guarda el buen depósito por medio del Espíritu Santo que habita en nosotros.
2 ª Tim 1,12-14
Como dijo San Paciano: “Cristiano es mi nombre, católico mi apellido". Tú, por pura gracia, eres cristiano y católico. Si amas a la Iglesia, más la ama Cristo que se entregó por ella. Y Cristo mismo impedirá que los malvados y perversos, sean quienes sean, entreguen a su Desposada en cama ajena. Si es necesario, lo hará de esta manera:
Cuando vuelva el dueño de la viña, ¿qué hará con aquellos labradores?» Le contestan: «Hará morir de mala muerte a esos malvados y arrendará la viña a otros labradores que le entreguen los frutos a su tiempo».
Mt 21,40-41
La fe que hemos recibido debe disipar toda duda sobre cuál será el resultado final de esta batalla final por el alma de la Iglesia. El Señor profetizó que las puertas del Hades no prevalecerán. Toca oración, penitencia, cruz, sufrimiento, y confianza en Dios. La luz siempre se impone a las tinieblas. Como escribió san Pedro, Vicario de Cristo:
… por el poder de Dios, estáis custodiados mediante la fe hasta alcanzar la salvación preparada ya para ser manifestada en el tiempo último.
Nosotros siempre con Pedro y bajo Pedro. Y Pedro, con Cristo y bajo Cristo.
Santidad o muerte.
Luis Fernando Pérez Bustamante
38 comentarios
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LF:
Conviene que recordemos que no estamos en una guerra contra carne y sangre.
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LF:
El obispo africano firmó la súplica filial al Papa. Y representa a todo el continente africano. Eso no es cualquier cosa.
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LF:
A mí a estas altura no me preocupa gravemente nada que no sea un cambio inaceptable de la doctrina. Y eso no se ha dado. Ni Dios permitirá que se dé de forma definitva.
Nuestra mirada, en Cristo. Y en Cristo encontraremos calma.
2ª Tim 3,12-14"
Te felicito estimado Luis todo el post es de una profundidad, sin igual, se a quién Seguir a Dios Nuestro Señor.
Muchas Gracias y que dios te bendiga y bendiga a la Iglesia.Excelente!!!TODO!!!!!!!!!!!
Anne Marie Pelletier, cuyas obras eran tan equilibradas, respecto a un feminismo descontrolado, también ha entrado en este batallón de confusión. Ya lo hizo recientemente, participando de esa reunión de "teólogos kasperianos", realizada nada menos que en la Gregoriana.
Dan ganas de repetir una exclamación parecida a la de Jerónimo ("Todo el mundo se despertó como arriano"): "Todo el mundo se anda alineando detrás de Kasper".
Pero, jamás hay que perder la esperanza de que también ahora surjan "Atanasios", que, pese a falsas mayorías, sepan y se vean asistidos por el Espíritu, para defender valientemente la verdadera misericordia, que no se contenta con descubrir la enfermedad, sino que aplica el bisturí, por más que haya derrame de sangre.
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LF:
No conocen bien el poder de Dios. Y lo van a conocer si insisten en sus malas artes. Si Cristo expulsó violentamente a los mercaderes del templo, ¿qué no hará con los que pretenden hacer mercancía con las almas de sus redimidos?
1 Tesalonicenses, 2:
"3 Nuestra exhortación no procede del error, ni de la impureza ni con
engaño, 4 sino que así como hemos sido juzgados aptos por Dios para
confiarnos el Evangelio, así lo predicamos, no buscando agradar a los
hombres, sino a Dios que = examina = nuestros = corazones. ="
Qué Dios os bendiga.
Fortalescamos nuestra vida sobrenatural y así ayudaremos a toda la Iglesia.
El Señor está en la barca y la barca es suya.
Y esto no es una crítica a tu post, si no un mensaje que creo adecuado se debe dejar y se debe resaltar. Nuestro rol como católicos debe centrarse en orar porque el Espíritu Santo ilumine a los padres sinodales y al Santo Padre.
Algún post desde la línea editorial de Infocatolica y conforme a su criterio, visión de la Iglesia y de la vida debería presentarse inequívocamente en estos dias en este sentido.
Sería bueno para la Iglesia que sé que todos amamos.
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LF:
No es una guerra civil. Es una guerra espiritual. No es la primera que ha habido en el seno de la Iglesia. Pero que es, vamos, sin la menor duda. No se puede tapar el sol con un dedo.
Precisamente porque es lo que es, tenemos el deber de orar mucho. Y hacer penitencia. Yo lo llevo pidiendo desde hace tiempo.
Por favor, hermanas orantes, rezad, rezad más aún de lo que hacéis.
Maravilloso artículo, que comparto al 100%. Dios le ha dado a usted la gracia de escribir.
"Donde no hay pon amor y hallarás amor". Nunca falla: "... por que el Amor es Dios".
AMGD- Con la Virgen del Carmen.
Lo suscribo totalmente. O ¿Acaso no ha dicho la Virgen que su Inmaculado Corazón triunfará?
Les recomiendo a ustedes que, por favor, vean la intervención del Papa Francisco en el centenario de Schonstatt. El papa se consagra a la Virgen de Schonstatt y cuenta un secreto: Todas las mañanas al levantarse toca una imagen que le regaló un cura de Schonstatt. El papa Francisco estuvo con las familias, llenaban en auditorio.
El fin de semana pasado estuve en Fátima, dando gracias a Dios con un insignificante grupo familiar (los Hogares de Santa María, que cumplían 50 años), de cara a los hombres; pero tal vez muy grande de cara a Dios y para todos y cada uno de los que participamos. La eficacia se la dejamos a Dios, nosotros intentamos poner la semilla en la familia, el trabajo,... y que Dios ponga el fermento. No somos grandes teólogos, sencillas familias enamoradas de la Virgen y del Sagrado Corazón de Jesús.
Lo que en Fátima se vive hay que vivirlo, no es suficiente que te lo cuenten.
Gracias por recordarnos que en la oración está en hacernos pequeños para así dejar que Dios nos llene de su paz.
AMGD.
Agradecido de antemano a quien me pueda responder.
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LF:
Yo lo que le puedo decir es que el Papa dijo a un cardenal hispanoamericano y a un obispo español -este, ante testigos- que no tenía intención de permitir que los divorciados vueltos a casar comulguen.
No hicimos noticia porque no podíamos decir ni los nombres. Pero que doy fe de que eso ha pasado.
Me pregunto qué pensarán y predicarán mañana domingo todos aquellos sacerdotes, obispos y cardenales que están a favor de cambiar la praxis matrimonial. Porque, no olvidemos, que mañana todos celebrarán la misa del domingo XVII del ciclo B. y leerán o escucharán la sentencia final de nuestro Señor: "LO QUE DIOS HA UNIDO QUE NO LO SEPARE EL HOMBRE".
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LF:
¿Usted ve a este Papa sufriendo por tantas divisiones?
Eso se vio en Pablo VI. Muy claramente. En Francisco de momento yo no lo veo.
A veces me entran dudas...
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LF:
Pues para eso está la fe. Para dejar las dudas a un lado.
Gracias por compartir el artículo.
Socorro Q.
De todos modos, según entiendo lo que salga de este sínodo no tiene valor magisterial alguno, como tal. Sí lo tendría o podría tenerlo la exhortación postsinodal que hiciera el Papa siempre y cuando no entrara en contradicción con lo prescrito en anteriores documentos magisteriales. No sé si estoy en lo cierto o no es exactamente así.
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LF:
Más o menos. Pero si la relatio final contiene barbaridades doctrinales notables, el cirio que se puede montar es gordo.
Hace poco publicaron la noticia de que 1000 familias se ofrecieron voluntarias para ir en misión...
Esta, entre otras cosas son las que me preocupan acerca del feliz desenlace de todo. No creo que la cosa acabe bien para los que defienden la humanae vitae, ni para la ortodoxia en general.
Ojalá me equivoque,
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Pues a mí aún hay cosas, algunas tremendas, que aún me pillan por sorpresa. Hoy estoy como aturdida. Aún no ha comenzado el Sínodo y ya nos caen disgustos monumentales para enrarecer el ambiente y crear presión mediática. Yo hoy estoy en shock y "turbada y espantada". No me repongo. Me entran ganas de aislarme en una ermita hasta que pase el sínodo y ya me avisaréis de cómo ha terminado, para ver si vuelvo o me quedo ahí hasta que el Señor quiera llevarme.
Leí su tesis doctoral, refutando posiciones "modernas", hace unas décadas, y mostrando con buen conocimiento de Sto. Tomás y la mejor Tradición, la equivocada posición de Moltmann y de más de un católico (como J. L. Segundo) respecto a que Dios puede sufrir.
Nos sale ahora con esta contradicción viviente respecto a su desempeño teológico y desde tan alta tarea en la Iglesia.
Es un verdadero escándalo y quiera Dios que no fortifique a quienes andan en búsqueda de novedades antievangélicas.
Recuerdo una cita preciosa de los Salmos (Salmo 85, 11).
"Misericordia y Verdad se han dado cita, Justicia y Paz se abrazan"
No cabe misericordia sin Verdad, porque condena al pecador al Infierno haciéndole pensar que no pecó. Se va al Infierno el pecador, y el sacerdote, padre sinodal, obispo o Cardenal que así se lo enseñó se irá aún más abajo.
"Cardenales, obispos y sacerdotes van camino de la perdición, y arrastran tras de sí muchas almas"... "A la eucaristía se le da cada vez menos importancia"
Además, creo que, respecto al hecho que, al parecer, se va a debatir sobre la posibilidad de que los divorciados vueltos a casar (imagino que civilmente, porque es de suponer que por la Iglesia el matrimonio no sería válido), no sería malo que, aprovechando la circunstancia de que hoy domingo 04-10-2015 se lee el Evangelio según san Marcos Mc 10, 2-16, muchos obispos favorables a esta medida consideraran lo que viene en el mismo, y especialmente las siguientes frases que aparecen en el mencionado Evangelio:
“Lo que Dios ha unido, que no lo separe el hombre.”
“Si uno se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra la primera. Y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio.”
Creo que pretender "suavizar", sobre todo si se hace en exceso, la doctrina de la Iglesia no tendrá consecuencias positivas para la misma ni para los católicos en su conjunto. Porque, a mi entender, es verdad que la Iglesia tiene que ser misericordiosa, pero sobre todo con el pecador que se arrepiente. No debemos olvidad que Dios es misericordioso, pero también justo. Si una persona (o dos, en el caso de divorciados vueltos a casar) deciden seguir en una situación de pecado, es decir, apartaos de Dios, quizás no sería malo que la Iglesia recordase de vez en cuando que también existe la posibilidad de la condenación eterna en el Infierno. De hecho, creo que este mismo Papa, alguna vez, ha sido duro cuando ha recordado esta posibilidad a ciertos mafiosos si no se convierten de sus actividades delictivas y de sus delitos de sangre. Y, si no recuerdo mal, según he leído en el Catecismo de la Iglesia católica, tanto el divorcio como el adulterio son pecados graves y, por lo tanto, podrían ser mortales.
Respecto a la posibilidad de "suavizar" la postura sobre las relaciones homosexuales, creo que tampoco sería malo que los padres sinodales recordaran las siguientes citas bíblicas: Gn 19,1-29 (sobre todo en combinación con Gn 18,20-21); Lv 18,22; Lv 20,13; Rm 1,24-27; 1 Co 6,9-10; 1 Tm 1,10, así como los puntos 2357 al 2359 del Catecismo de la Iglesia católica.
Y otra cosa, para los que dudéis de este Papa (yo no): ¿sabíais que la fiesta de la Inmaculada Concepción fue instituida, no por un Papa santo, sino por Sixto IV, uno de los más corruptos e indignos, instigador de la sacrílega conspiración de los Pazzi (sacrílega porque se intentó matar a los dos Medici mientras oían misa, y de hecho mataron a uno e hirieron gravemente a otro)? Si el señor actúa incluso con Papas así de malvados, ¡cuánto más con este, que por más dudas que susciten algunas de sus decisiones, se ha ganado un aprecio tan universal (empezando por el mío)!
REspecto a lo de la comunión de divorciados en nueva unión, lo que le oí decir al Papa en el viaje de vuelta de los USA no fueron precisamente palabras de entusiasmo. Quizá la acepte en algún caso muy concreto y específico, pero nada más. No empecemos con insinuaciones y dudas y recemos por los Padres sinodales, sobre todo por los Danneels, Kasper, etc.
Un saludo.
Pasan las centurias y los milenios, pero el ataque persiste. Nuestro Señor Jesucristo ya fue tentado por Satanás en el desierto. Y perdió. Oramos para que pierda de nuevo, y soportamos nuestro hado...que tal y como afirmaba San Pablo no es otro que ser perseguidos por nuestra Fe en Dios, que es Cristo.
Bien, esto me parece UNA BLASFEMIA SUPERLATIVA y que desenmascara, por si quedaban dudas, de qué y quién está detrás de todo esto. No otro sino Satanás podría sugerir que Jesús no podía conocer TODA LA REALIDAD DEL SER HUMANO más allá de unas coordenadas temporales específicas. Afirmar eso es NEGARLE LA DIVINIDAD A JESUCRISTO y rebajarlo a un simple ser humano.
Como decía, la blasfemia es monstruosa.
Quien sabe, me da un poco de esperanza... Es posible que el papa eligiera la fecha a propósito¿?
Por ejemplo cuando la gran mayoría de los obispos eran Arrianos.
Cristo ama a su Iglesia y no perecerá hasta el fin.
Pero si aprendemos de la historia... la crisis arriana también tuvo un precio a pagar... y nuesta Madre Iglesia fue mutilada en muchos de sus miembros.
Que de esto salimos... salimos... pero ¿cuál será el precio? y ¿a quién se le pedirán cuentas de la nueva mutilación por venir?
En otras épocas hubo crisis... ésta nos tocó a nosotros... no nos ama Dios menos que a los de antes... pero tal vez somos nosotros los que lo amamos menos a él.
Viva Cristo Rey
La tristeza que me invade por las ultimas 4 noticias que he leído previas al inicio del Sínodo, es sobrellevable por tus artículos.
Me apena decirlo, pero pienso que muchos creyentes estamos desconsolados y necesitamos sentirnos ante la presencia de Cristo que nos dirige a cada uno de nosotros, el Sermón de la Montaña: "Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados".
Y no me queda más que decirle a Nuestro Señor Jesucristo:
Señor, escúchame, que necesito hoy más que nunca de Tu consuelo.
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LF:
Muchos, sí.
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