270 - ESPAÑA, USA, FRANCIA: FRACASO DE LOS PROGRAMAS DE SALUD REPRODUCTIVA

ESPAÑA, USA, FRANCIA: FRACASO DE LOS PROGRAMAS 'POLITICAMENTE CORRECTOS' DE SALUD REPRODUCTIVA PARA ADOLESCENTES.

Fuente: Propias; Inés Vélez, ZENIT, 22-11-99; El Nuevo Día, San Juan de Puerto Rico, 7-12-99; Página 12, Buenos Aires, 9-12-99. Noticias Globales 231, Embarazo adolescente, ¿Un problema provocado? y Noticias Globales 253, Reino Unido: Fracaso de la Educación Sexual.

Por Salvador Arguedas

Las campañas del Ministerio de Sanidad y Consumo de prevención del SIDA entre la población juvenil, fundamentadas en el uso del preservativo, parecen estar dando sus primeros resultados. El último informe del Ministerio de Sanidad y Consumo sobre la "interrupción voluntaria del embarazo" reflejan como el número de españolas menores de edad que recurren al aborto, ha aumentado un 60 por ciento desde 1990.

En 1997, el número de abortos realizados ascendía a 49.578, un 2,7 por ciento menos que en 1996, en el que los centros abortistas notificaron haber realizado 51.002 abortos. Ciertamente el número total de abortos ha disminuido respecto al último año, pero si se analiza detalladamente el informe oficial destaca, en cambio, el incremento del 60 por ciento de mujeres de 19 años o menores que han abortado. Estos resultados deberían ser tomados en cuenta por las autoridades sanitarias ya que suponen un grave incremento de los embarazos no deseados entre la población juvenil.

A su vez, si se comparan estos datos con los de 1990, en el que se declararon 37.231 abortos, el número de mujeres que habrían abortado en 1997 supondría un aumento del 30 por ciento. Cifra preocupante en un momento en que la tasa española de natalidad asciende a 1,15, la más baja del mundo, y en que el envejecimiento de la población se acelera. Los últimos Indicadores Sociales facilitados por el INE, afirman que si en 1990 el 67 por ciento de la población tenía más de 70 años, en 1996 este porcentaje habría aumentado hasta el 70,4 por ciento.

Otro dato llamativo es el importante incremento del número de centros que facilitan el aborto a las mujeres embarazadas. En 1990, 81 centros notificaron la realización de abortos en sus instalaciones, de los cuales el 96,53 por ciento eran privados. En 1997, el número de centros ha aumentado hasta 115, principalmente en Andalucía y Cataluña. Se mantiene el mayor número de centros privados, 97,32 por ciento, frente a los públicos que se reducen a 2,68 por ciento.

La salud materna es el principal motivo alegado entre las mujeres que recurren al aborto. En 1997, el 97, 79 por ciento de los abortos se realizaron por esta causa. Los tres supuestos que contempla la ley que despenaliza el aborto en España, son en el caso de que el embarazo afecte a la salud de la madre, si el feto presenta malformaciones y por último, si el embarazo se ha producido por una violación. Pero es el primer motivo el que prima entre las mujeres. Únicamente el 2,08 por ciento de los casos se realizaron por el riesgo de malformaciones en el feto, y el 0,03 por ciento por violación.

Algunos expertos aseguran que tras el supuesto de salud materna, las clínicas abortistas privadas permiten a cualquier mujer abortar. Mientras tanto el líder de la oposición y del Partido Socialista Obrero Español, Joaquín Almunia, ha prometido a sus votantes que promoverá el aborto libre en España en el caso de que gane las elecciones en el 2000.

En nuestro continente, El Nuevo Día de San Juan de Puerto Rico, titulaba en primera página el 29-11-99, "Embarazos sin freno en las adolescentes". Ante esta realidad, la filial de la IPPF en ese país, PRO-FAMILIA, cínicamente insiste en el consejo "políticamente correcto", hace falta más educación, información sexual y acceso a los anticonceptivos para los adolescentes.

Mientras, en el Congreso de los Estados Unidos, tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado, el 29 de abril y el 29 de julio respectivamente, fue presentado el mismo proyecto de ley recabando fondos para ayudar a evitar el embarazo adolescente ('Teenage Pregnancy Reduction Act of 1999'). El proyecto instituye una campaña nacional para prevenir ese tipo de embarazo y reconoce implícitamente el fracaso de las políticas ejecutadas hasta ahora, aunque no las cambia. Sólo exige más dinero "para hacer más efectivo los programas". Pide para cada año fiscal, desde el 2000 al 2002, 3 millones y medio de dólares y si fuera necesario autoriza a extender esta suma al presupuesto anual de los años 2003, 2004 y 2005. Además, para financiar la campaña nacional de prevención del embarazo adolescente reclama, otros 10 millones de dólares para cada uno los años fiscales 2004, 2005 y 2006.

En el mismo sentido, la California Wellness Foundation, está financiando una campaña especial para ese estado desde 1995 a 2005, con un presupuesto de 60 millones de dólares, para promover una reducción de la tasa de embarazos de adolescentes. Causa alarma, dice la Fundación, el salto que han dado las estadísticas de embarazo de menores en los últimos años. En California, dice, de cada 1000 embarazos, 159 son de menores entre los 15 y los 19 años, cuando esa tasa a nivel nacional es de 112. Pero lo que destacamos de la estadística californiana es que de esos embarazos llegan a término en ese estado 68, y en los Estados Unidos en general 57. El resto termina en abortos. Luego, parece desprenderse de estos números que ni el embarazo de menores ni el aborto entre adolescentes disminuye con planes de educación sexual, ni campañas anticonceptivas, o de salud reproductiva para jóvenes, pero oficialmente hay que buscar otras "razones".

Además, agrega el informe de la Fundación, cada año 3 millones de adolescentes mujeres tienen entre 1 a 4 relaciones sexuales, poniéndose en peligro contagiarse de SIDA, pero, además, con un 30% de probabilidades de contraer herpes genital y un 50% de probabilidades de contraer gonorrea.

Por otro lado, se dice en el mismo informe que el embarazo adolescente cuesta a los Estados Unidos 7 mil millones de dólares anuales, según el National Center for Health Statistics.

Para concluir recordemos que la semana pasada (Página 12, Buenos Aires, 9-12-99), el gobierno francés de Lionel Jospin, dispuso que se distribuyera en los bachilleratos y liceos, el anticonceptivo de emergencia -abortivo- NorLevo, "por el drama que representan los embarazos de las jóvenes estudiantes". Según el Instituto Nacional de Salud e Investigación Médica (INSERM), cada año hay en Francia 16.000 embarazos "no deseados" entre chicas de menos de 20 años y 6.000 abortos entre menores de 18 años. Por supuesto, la solución para el gobierno de Jospin, es: más educación sexual, más información anticonceptiva y, ahora, reparto de la "píldora del día siguiente". Es más, ¿quién tiene la culpa del embarazo adolescente?, se preguntan los franceses. La versión oficial dice: "La culpa la tiene la familia. Al autorizar la píldora en los colegios bajo la autoridad de los médicos, los poderes públicos partieron de una evidencia: existe un fuerte tabú, una falta de comunicación en el círculo familiar sobre todo lo que atañe a la sexualidad. Los adolescentes son víctimas de la religión, la ética y la moral familiar". Como si la política que incita a un ejercicio cada vez más precoz de la sexualidad, no tuviera nada que ver.

Podríamos seguir con los datos, basten los registrados para deducir que los programas de salud reproductiva "políticamente correctos", son un fracaso: no evitan el embarazo adolescente, favorecen, en cambio, el aborto químico o quirúrgico, las enfermedades de transmisión sexual (ETS) y la degradación física, psíquica y moral de los jóvenes. FIN, 15-12-99.