Conceden la Creu de Sant Jordi al cura que pagó abortos

El año pasado, por estas fechas, les informaba que la Generalitat de Catalunya no había concedido la Creu de Sant Jordi a ningún eclesiástico, a pesar de haberlo hecho así desde el año 1982.

Desempolvando aquel artículo, me encuentro con este párrafo:

Ello refleja el ocaso del progresismo eclesial: ya no encuentran a quien distinguir. Han concedido tantos laureles, que ya no queda a quien condecorar. Se han acabado. Los pocos que quedan ya no acumulan ningún mérito, ninguna aportación, ningún decoro. Se imagina alguien que se condecorase al Picafoc, o a Toni Nel.lo, o a Brustenga, o a Mossén Pousa. Sería la puntilla definitiva a la Creu de Sant Jordi.

Pues bien, como nuestro gobierno tripartito suele ser famoso por sus boutades, se han atrevido este año a condecorar ni más ni menos que a Mossèn Pousa. Sí, sí, a Mossén Pousa, el mismo que no solo confesó haber pagado abortos, sino que se jactó de ello en una entrevista en El Periódico de Cataluña que dio la vuelta al mundo.

Este sacerdote que causó escándalo, al manifestar: “Cierto es que hay unos principios éticos, pero hay razones que, por ejemplo, llevan a determinadas mujeres a abortar. Yo he pagado abortos. Y la Conferencia Episcopal Española no se da cuenta de que el Evangelio no condena, sino que ofrece medidas liberadoras

Este sacerdote, al cual el arzobispo de Barcelona mantiene en su ministerio y en su destino y al que solo se atrevió a exculpar con esta nota farisaica:

Comunicació de la Delegació de Mitjans de Comunicació de l’Arquebisbat de Barcelona

Aquests últims dies, s’han difós per alguns mitjans digitals unes declaracions de Mn. Manuel Pousa relatives a la seva actitud en l’ajut a algunes persones sobre el problema de l’avortament.

A petició de Mn. Pousa, aquesta Delegació vol matisar el sentit de les anteriors declaracions, com ja ho ha fet l’interessat en conversa personal amb el seu bisbe, el cardenal Lluís Martínez Sistach.

Mn. Manuel Pousa vol deixar constància amb aquesta declaració que no es va expressar amb suficient precisió i que en el seu treball social amb persones de molt diversa condició ha procurat fer-ho en comunió amb el pensament de l’Església sobre el respecte a la vida humana des de la seva concepció fins a la mort.

Mn. Manuel Pousa també lamenta que, en molts casos, les estructures socials estiguin en contradicció amb el degut respecte a la persona que és imatge de Déu i finalment vol testimoniar el seu sentit de comunió amb l’Església en la seva tasca pastoral i desitja evitar qualsevol motiu d’escàndol o de divisió.

Barcelona, 25 d’abril de 2008

Sí fue terrible comprobar que un sacerdote de esta diócesis presumía de haber pagado abortos y no era amonestado por ello, nuevamente surge el escándalo cuando este cura es distinguido con el galardón de la Creu de Sant Jordi.

Cuando mayor es la polémica en nuestro país en relación a la legalización del aborto, nuestro gobierno autonómico nos da el golpe bajo de premiar a un miembro de la Iglesia que se jacta de haber pagado abortos, cuando es la propia Iglesia la que mayor empeño está mostrando en condenar el crimen del aborto. Entre ellos, el propio Cardenal de Barcelona en la misa del día de la Sagrada Familia.

No sabemos quién acompañará a Mossén Pousa el día 23 de abril en el que reciba el galardón. Solo esperamos que no vaya con él ningún cargo diocesano así como esperamos fervientemente que desde todos los sectores antiabortistas (especialmente e-cristians) se condene la concesión y se invite a Mossèn Pousa a rechazarla. Ya existen precedentes: fue retirada a Enric Marcó, por haberse inventado su estancia en campos de concentración nazis y Albert Boadella se negó a recibirla porque: “Vaig agrair al tripartit que se’n recordés de mi, però els vaig fer veure que no era la persona adequada per rebre un premi que Jordi Pujol va inflar fins al punt que l’únic que ens podem preguntar avui és qui no té la Creu”.

Resulta indignante que el único miembro de la iglesia católica al que se concede la distinción sea Mossèn Pousa. Y nuestros prohombres de iglesia dedicados a condenar los foros de internet. Sin internet, del escándalo Pousa no se habría enterado nadie. Así nos va.

Oriolt

Germinans germinabit