Las intrigas del Co-príncipe

Sabido es por todos que el Co-príncipe constitucional de Andorra se aburre como una ostra en la Seu d’Urgell. Mi admirado y querido Antoninus Pius nos relató, en dos magníficos artículos (Splendor Veritatis del 2 y 4 de abril de 2008), lo a menudo que suele bajar Vives a Barcelona a “remenar la cua” y su inagotable capacidad de medrar. Parecía que al co-príncipe lo habían dejado fuera de juego con su relevo en la presidencia de la Comisión de Seminarios de la CEE, pero el que es intrigante siempre, lo es de por vida. La máxima ambición del Obispo Vives es ser el sustituto de Sistach en la sede barcelonesa. Para ello necesita tener peones en el episcopado catalán. Con la pronta jubilación de Soler y Traserra ya no tendrá a ninguno de los suyos. La jugada -para la que no está escatimando esfuerzos- es colocar a dos hombres suyos para los futuros nombramientos de Lérida y Gerona. Y ahí ha desplegado su inmensa capacidad de enredo.

Ya hace días que Vives estaba haciendo correr el nombre de su amigo Enrique Benavent, auxiliar de Valencia. Era su ideal para Gerona. Algo ha pasado que no ha cuajado la promoción, pero Vives es inaccesible al desaliento. Se ha sacado de la manga la carta Taltavull.

Sebastián Taltavull Anglada (Tià para los amigos) es un menorquín que ocupa el cargo de Secretario técnico de la Comisión de pastoral de la CEE. Fue designado vicario general de la diócesis balear por el Obispo Deig y Rector del Seminario por el obispo Ciuraneta. Ha seguido siendo el hombre de confianza del obispo Piris. Pero había que presentarlo en sociedad. Y presentarlo a la manera Vives. Noticia en los dos principales rotativos catalanes (La Vanguardia y El Periódico) con la lógica coletilla de un hombre dialogante y de talante abierto, que lo haga aceptable por la progresía local. Para familiarizarnos con su rostro, se rescata una foto del sacerdote con clergyman, aunque habitualmente no lo usa. Como antaño el propio Vives. Si además, algún representante del clero gerundense nos lo dejaba bien, bingo. Así lo hizo el Burxeta (por favor, no cierres tu blog, que es el único de la progresía que tiene nervio y fibra) que lo conocía personalmente de los movimientos escultistas. Y por fin, como no hay boda sin la tía Juana, el simplón de Llisterri recibió el encargo de redactar un artículo laudatorio en su blog. Artículo con algún error (dice que hace diecisiete años del último obispo salido de un seminario barcelonés, cuando hace quince) pero suficientemente ilustrativo de la capacidad intoxicadora del co-príncipe.

Añádase a ello que al Nuncio le encanta Taltavull y que, como también es Nuncio en Andorra, suele tener comunicación fluida con Vives. Menuda paradoja la del portugués rindiendo pleitesía a un obispo, en su calidad de co-jefe de estado, aunque lo sea de un minúsculo paraíso fiscal. Pero ya tenemos la cuadratura del círculo. “Ha de sortir rodó”

A la par de la presentación en sociedad de Taltavull, no ve Vives con malos ojos la designación de Piris para Lérida, aunque hay que decir que Piris ha aparecido en infinidad de quinielas (hasta sonó en su día como sucesor de Carles) y no se ha movido de Menorca.

De confirmarse estos rumores sería un golpe genial de Vives y un respiro para los agonizantes progres gerundenses, porque al co-príncipe ni le preocupa el estado de la diócesis, ni el Foro Alsina, ni la presencia de curas pro-aborto, ni el languidecimiento de aquella iglesia particular, ni nada de nada. Solo le preocupan sus ambiciones. No puede quedarse solo ante el duelo que va a tener con Saíz Meneses, para suceder a Sistach. Lo que pasa es que el obispo de Terrassa juega con una labor y unos números incontestables. Trabajo versus intriga. Por ahora se ha premiado el trabajo del egarense, pero la capacidad medradora del co-príncipe es inusitada.

Con todo hay que decir que si se nombrase a Taltavull o a Piris sería una pésima noticia. Constituiría una verdadera quiebra en el estilo de nombramientos que se están efectuando en este papado. La sola comparación con el País Vasco (donde se ha promocionado a hombres como Iceta o Munilla) sería frustrante. Que Cataluña fuese la excepción en esa línea de nombramientos resultaría inconcebible. Inconcebible y letal.

Oriolt

http://www.germinansgerminabit.org