Las parroquias de Horta promocionan un calendario "picante"
Lo de hacer calendarios "picantes" es un recurso lamentablemente demasiado habitual para ganar un dinero extra, aunque en algunos casos sea para una buena causa. Bomberos, policias, futbolistas y un largo etcétera de profesiones han querido inmortalizarse ligeritos de ropa para poner visualmente contentos a los futuros compradores y que no les cueste demasiado esfuerzo desprenderse de unos euros para contribuir a la causa por la que se creó el calendario en cuestión. Pensábamos que casi nada nos iba a sorprender en este tema, pero al menos a más de un católico le ha sorprendido que detrás del calendario de los comerciantes de Horta estén las parroquias de ese arciprestazgo.

Antes de la eclosión de los noticiarios gratuitos, el diario popular en Cataluña era El Periódico. Tan habitual era el medio en los ambientes más llanos que se le conocía como "El Periódico de todos los bares", dado que no había establecimiento que no tuviese el rotativo en su barra. Era un caso curioso y que solo sucedía aquí: en los bares no existía La Vanguardia , ni el Avui, ni las ediciones catalanas de El País o de El Mundo. Solo El Periódico de Catalunya. Podía haber diversidad en los deportivos, ya sea el Sport o el Mundo Deportivo, acaso el As o el Marca, pero en cuanto a diario generalista solo existía El Periódico. Una verdadera uniformidad. El hecho tenía su explicación: se trata de un diario muy simplista, lleno de titulares, sin profundidad, que se lee de forma muy fácil, mientras uno se toma un café o degusta una cerveza. Un acompañamiento, como si fuere el croissant o una tapa de ensaladilla. Con la muerte de Antonio Asensio, el rotativo se puso en venta e inició un lento declive. Incluso se han sucedido tres directores en pocos años. Por ahora, pese a múltiples rumores, sigue en manos de Grupo Zeta y mantiene el estilo fundacional. Uno de los vivos ejemplos de su simplismo se ha podido observar con la información publicada este sábado, con gran riqueza tipográfica, dedicada a Germinans . La pieza iba firmada por Jordi Casabella y se podía leer en
Es
Desde la cripta bajo el ábside de San Martino ai Monti, el Titulus Equitii
A falta de confirmación oficial por el arzobispado,