Tres cuartos de siglo
Hace un par de días, el decano de los cavernícolas cumplió 75 inviernos. Es decir, tres cuartos de siglo. Y, cuando uno empieza a contar su edad por siglos, es que ya no es un jovenzuelo. Si me salen las cuentas, eso indica que nació allá por el cretáceo.
Sin embargo, la dieta cavernícola es saludable, por estar basada en oración, siesta, ortodoxia, buen humor y la lectura diaria de InfoCatólica. Véanlo, en la foto de la izquierda, dando brincos al perseguir a un mamut lanudo, como si en vez de tener setenta y cinco años sólo tuviera setenta y cuatro.