¡Pascueta!

“Acá estamos terminando también una semana de octava de pascua que ha estado muy linda y algo movida también. No tanto para mí, sino para Johntin, que es el que tiene que cargar con casi todos los trabajos.

El lunes de la octava estuvo muy lindo porque nos quedamos acá en la casa, y al mediodía comimos con las hermanas… hacía rato que no estábamos todos, porque siempre el padre tiene que salir. Así que se puso lindo, y tuvimos larga sobremesa. Luego el P. ha tenido reuniones en la diócesis, y se tuvo que ir dos días. Yo el viernes me fui a Kahama a hacer las compras… y eso nos lleva todo el día, porque son casi cinco horas de viaje entre la ida y la vuelta. De paso que aprovechamos a hacer de todo.

Hoy traté de recuperarme un poco del viaje de ayer. Justo hoy vinieron todos los líderes de las comunidades, que son 46. Y vinieron con algunos que eran miembros de consejos, o jefes de “jumuia” (familias), y catequistas. Casi 100 personas en total. La cosa es que tenían que elegir entre todos los líderes, al líder de la parroquia. Eso lleva tiempo. Vino un representante de la diócesis, que tuvo que quedarse dos noches a dormir acá. Hoy la reunión comenzó a las 10:00 am y almorzaron a las 16:00, y después se fueron. Ahora ya es de noche y recién llega Johntin de llevar a algunos líderes a sus aldeas, porque eran de muy lejos, y hoy ha llovido a cántaros. Yo fui un rato a la reunión, porque era importante, ya que al nuevo líder lo eligen por tres años. Si es posta, te ayuda un montón, y sino, te vuelve loco.

Estuve en la reunión casi una hora, justo cuando elegían al líder, vice, y secretario-tesorero. Entiendo poco, pero algo voy agarrando de lo que sucede… o por momentos. Lo bueno es que eligieron a uno muy bueno, y los otros también fueron elegidos con la venia del párroco. El párroco puede vetar la elección, y se procede a una nueva. Pero por suerte no hubo que hacerlo, para que no haya malestar en el pueblo.

Mañana voy a acompañar a Johntin a una aldea, a la que no he ido. Es uno de los centros que tenemos. Entre esas 46 capillas, hay siete que son mas importantes. Les llamamos “centros”. Mañana iremos a uno de esos centros, que querían conocerme. Así que les celebro la misa y Johntin predica, y luego nos quedamos a comer con ellos, y regresamos cerca de las 4 de la tarde. Creo que el de mañana se llama “Uyogo”.

Y a la tarde tenemos pensado hacer “maitines” tempranas, a las 18:00, y terminan de noche. Pero queríamos invitar a la gente que nos quiera acompañar, jóvenes y niños. Ya la tenemos toda en swahili, con lecturas y todo. Luego de las maitines, pasamos videos de la Congre y de la misión, con gaseosas y galletas. A uno de los jóvenes se le ocurrió invitar para el lunes a la tarde a una jornada de deporte con los padres y hermanas, vamos a hacer partidos de fútbol y vóley respectivamente, con participación de los jóvenes, niños y familias. Es la primera vez que se hace, y parce que va a estar muy bueno. Lo mejor es que salió de ellos, así que van viendo que el día del Verbo Encarnado para nosotros es algo importante.

Y tío Reynaldo, un divague, pero ya que te envié lo del safari en Serengeti, te digo que me acordaba de vos… porque no sabés lo que disfruté de manejar una Toyota Land Crusier, 4×4, modelo 2012, en un trayecto de 300 km por caminos de tierra… en la sabana africana, y mirando animales al costado del camino, como cebras, búfalos, monos y ciervos… Yo tuve que manejar los 150 km de salida del parque… y “contra reloj”, porque si salíamos después de las 18:00 teníamos que pagar más. Y el cálculo era que si viajábamos entre 60 y 70 km x hr nos alcanzaba. Llegamos a la salida a las 17:45… ¡qué tul! (Con prudencia… no?) Esos “caramelitos” que nos regala Dios.

Te invito…”.

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