Consolar a Jesús
Ushetu, Tanzania, 21 de marzo de 2016.
Se me hace difícil ponerme a escribir. Uno de los motivos es la falta de tiempo y la gran cantidad de actividades en la misión. Es claro que cuando yo apenas había llegado a Tanzania, sin saber decir una palabra de swahili, y encontrarme “sordomudo" por varios meses, escribir era una necesidad. Bueno, es verdad, no deja de ser una necesidad, porque en muchas ocasiones cuando estoy visitando aldeas, o ante determinados episodios, tal vez triviales externamente, se me viene a la cabeza el que "esto tengo lo tengo que escribir, tengo que contarlo”.