El Problema de la Soberanía
Soy católico: mi único Señor es Jesucristo y mi ley suprema es el Decálogo que se resume en la única norma importante e incuestionable: la Ley de la Caridad. Se trata de amar a Dios sobre todas las cosas, con toda tu alma, con todo tu corazón, con todo tu entendimiento, con todas tus fuerzas; y amar al prójimo por Dios: no porque sean buenos o malos, porque nos caigan bien o mal, sino porque Dios nos pide que amemos incluso a nuestros enemigos.
Mi único Rey es Cristo. Y la única soberanía que admito es la Soberanía de Dios, que es el Bien absoluto. ¿Es mejor la soberanía del hombre, que es pecador, que la de Dios, que es el Bien sin mancha de mal? ¿Saben más los hombres que Dios? ¿Son mejores los hombres que Dios? Por supuesto que no.
Yo reclamo la soberanía de Dios, la unidad católica de España y que todo gobierno busque el bien común y la prosperidad de los españoles. El Estado ha de procurar que las necesidades materiales y espirituales de las personas estén cubiertas para que las familias puedan vivir con dignidad, criar a sus hijos decentemente y llegar al fin para el todos hemos sido creados.
El derecho de mandar no está necesariamente vinculado a una u otra forma de gobierno. La elección de una u otra forma política es posible y lícita, con tal que esta forma garantice eficazmente el bien común y la utilidad de todos. Pero en toda forma de gobierno los jefes del Estado y de gobierno deben poner totalmente la mirada en Dios, supremo gobernador del universo, y tomarlo como modelo y norma en el gobierno del Estado. El poder debe ser justo, no despótico, sino paterno, porque el poder justísimo que Dios tiene sobre los hombres está unido a su bondad de Padre. Pero, además, el poder ha de ejercitarse en provecho de los ciudadanos, porque la única razón legitimadora del poder es precisamente asegurar el bienestar público. No se puede permitir en modo alguno que la autoridad civil sirva al interés de uno o de pocos, porque está constituida para el bien común de la totalidad social. Si las autoridades degeneran en un gobierno injusto, si incurren en abusos de poder o en el pecado de soberbia y si no miran por los intereses del pueblo, sepan que deberán dar estrecha cuenta a Dios y a las cortes que representen al pueblo.
¡Qué maravillosa sería la Unidad Católica de España! Una España en la que la mayoría deseara vivir en santidad, en gracia de Dios, cumpliendo el mandamiento de la caridad y ayudándose de los sacramentos para permanecer unidos a Dios, Nuestro Señor. Sería una España en la que Dios sería lo primero, en el que Cristo fuera reconocido Rey y Señor; y en el que la Santísima Virgen María fuera nuestra protectora y defensora.
Cristo es, en efecto, la fuente del bien público y privado. Fuera de Él no hay que buscar la salvación en ningún otro; pues no se ha dado a los hombres otro nombre debajo del cielo por el cual debamos salvarnos. Él es sólo quien da la prosperidad y la felicidad verdadera, así a los individuos como a las naciones: porque la felicidad de la nación no procede de distinta fuente que la felicidad de los ciudadanos, pues la nación no es otra cosa que el conjunto concorde de ciudadanos.
Pero cuando desterramos a Dios y a Jesucristo de las leyes y de la gobernación de los pueblos, y deriva la autoridad, no de Dios, sino de los hombres, nada bueno puede suceder. Divorcio, aborto, eutanasia, degeneración, decadentismo, corrupción, prostitución, pornografía, falta de esperanza, nihilismo, soledad, sexo libre, violaciones, violencia doméstica…
La libertad liberal reivindica la independencia, la autonomía y la autodeterminación del hombre respecto a Dios. No admiten la soberanía de Dios, sino que reclaman la soberanía popular, es decir, la soberanía del hombre frente a Dios, la voluntad del hombre por encima de la voluntad de Dios. “¡No obedeceremos a Dios ni a su Ley Sagrada!», gritan los impíos.
Niegan que Dios sea la sabiduría suma y que tenga el poder de dictar leyes. Se niegan a reconocer la santidad de Dios y a adorarlo como Él merece. Niegan que Dios sea el Creador y que tenga derecho a exigir obediencia de Sus criaturas. Por fin, niegan la bondad suprema de Dios, y no reconocen que todo lo bueno proviene de Él y que no puede haber otra fuente de bondad.
En el corazón mismo del pecado encontramos el rechazo por parte de los seres humanos de aceptar su condición de criaturas con las limitaciones naturales que ello implica. En ese estado de rebelión, los seres humanos se niegan a depender de un Dios creador y providencial: «Consideran que depender del amor creador de Dios es algo impuesto de afuera». No sería libre, por tanto, quien está sometido a la ley natural que no permite la autodeterminación absoluta, quien debe estar debajo de una voluntad distinta de la propia. Los Diez Mandamientos constituirían obstáculos para la libertad, como toda autoridad obstaculizaría también tal libertad.
La soberanía de la voluntad, sea la del individuo, la de la sociedad o la del Estado, afirma la libertad respecto de Dios y la liberación de su Ley Eterna. Todas las ideologías políticas que surgieron después de la Revolución Liberal no son otra cosa que estructuras de pecado: liberalismo, nacionalismo, socialismo, comunismo, anarquismo, fascismo, nazismo… Para todas esas ideologías, Dios no es el Soberano, sino que la soberanía es del individuo, del Pueblo, del Estado, del líder, del caudillo de turno o del Partido. Quien eleva la libertad individual, la raza, el pueblo, la patria, el Estado, el caudillo o el partido a suprema norma de todo y, divinizándolos con culto idolátrico, pervierte y falsifica el orden creado e impuesto por Dios, está lejos de la verdadera fe y de una concepción de la vida conforme a ésta. Dios ha de ser siempre lo primero. San Agustín establecía la siguiente jerarquía en el amor: «Ama siempre a tu prójimo; más que a tu prójimo, a tus padres; más que a tus padres, a tu patria; y más que a tu patria, a Dios». Primero, siempre y solo Dios; después, la patria y la familia. Si alteramos el orden y ponemos a la patria lo primero, tenemos el falangismo, por ejemplo.
La partitocracia actual que sufrimos en España es profundamente inmoral y ha aprobado toda clase de leyes inicuas contra la Ley de Dios. Los partidos se han convertido en religiones, en verdaderas sectas que imponen una ciega obediencia al líder. El líder puede decir una cosa hoy y mañana, la contraria; y en cualquiera de los casos, siempre contará con el respaldo de los suyos, que los votan ciegamente. Uno es del PSOE como es del Real Madrid o del Betis: ¡Viva el Betis, manque pierda! No buscan el bien común, sino perpetuarse en el poder a toda costa. Venden a España con tal de tener los votos necesarios para la investidura. El fin justifica los medios. La inmoralidad triunfa sobre el honor; la traición sobre el amor a la patria. El maquiavelismo político en España resulta nauseabundo. El Demonio triunfa y la división de España avanza. Y los Españole siguen votando a sus propios enemigos. España es un estercolero moral: está enfangada de pecados mortales. Y Dios nos castigará.
Cuando se prescinde de Dios, se prescinde del Logos, de la razón y de la verdad. Y entonces, gobierna la mentira, «el relato», la inmoralidad, la injusticia.
El origen del separatismo desintegrador de la Patria reside en el concepto de soberanía y de autodeterminación propios del liberalismo. Decía la presidenta del Congreso en la jura de la Constitución de la Princesa de Asturias: «Todos y todas, sometidos al Derecho, servimos los valores de la Constitución; no hay poder que tenga capacidad fuera de nuestro gobierno de leyes». No hay poder al margen del Estado de Derecho. No hay más poder que el que emana del pueblo. He ahí los principios de la democracia liberal. Pero sí hay un poder por encima de cualquier constitución: el poder de Dios. Dios es soberano, es Rey. Él guía todos los caminos y acciones humanas por su providencia. Ese es el abismo insalvable entre la Revolución Liberal y la Civilización Cristiana. Ese es el abismo que dista entre la ciudad del hombre y la ciudad de Dios.
Dos amores fundaron, pues, dos ciudades, a saber: el amor propio hasta el desprecio de Dios, la terrena, y el amor de Dios hasta el desprecio de sí propio, la celestial. La primera se gloría en sí misma, y la segunda, en Dios, porque aquélla busca la gloria de los hombres, y ésta tiene por máxima gloria a Dios, testigo de su conciencia. La Ciudad del hombre ama su propia fuerza en sus potentados, y la Ciudad de Dios dice: A ti he de amarte, Señor, que eres mi fortaleza (Sal 17,2). En la Ciudad del hombre, creyéndose sabios, es decir, engreídos en su propia sabiduría a exigencias de su soberbia, se hicieron necios […]. En la Ciudad de Dios, en cambio, no hay sabiduría humana, sino piedad, que funda el culto legítimo al Dios verdadero, en espera de un premio en la sociedad de los santos, de hombres y ángeles, con el fin de que Dios sea todo en todas las cosas (1 Cor. 15,28).
El nacionalismo sólo sabe de divisiones y de engendrar odio entre hermanos: así es su naturaleza demoníaca. Pero al nacionalismo lo derrotará el patriotismo, que sólo sabe de caridad, de unidad, de humildad y de servicio.
Por Dios y por la patria merece la pena vivir y morir.
A Dios le sea dada toda la gloria y la alabanza por los siglos de los siglos. Nada sin Dios.
¡Viva España! ¡Viva Cristo Rey!
39 comentarios
Además consideraba políticamente a la masonería como el motor de las revoluciones. Presentó a las Cortes de Madrid una petición solicitando que fuera declarada ilegal, facciosa y traidora a la Patria, quitando de los empleos públicos a los masones.
Le tradujeron a la Presidenta del Congreso "Rule of Law" por "Gobierno de leyes". Es una traducción un poco difícil, resulta insuficiente y engañosa, porque Law en Derecho anglosajón no es exactamente lo mismo que Ley en Derecho continental...
En el Rule of Law siempre ha tenido más importancia la costumbre del lugar y la jurisprudencia (el Common Law) que las leyes positivas o Statute Law. Cosas de la herencia germánica y escandinava de Inglaterra.
Un troll no es una persona que opina sino una persona cuya única intención es reventar la discusión.
El dar paso a discusiones es muy antiguo en el cristianismo, no lo inventó la Ilustración, hasta tal punto que alguien tan poco sospechoso de adscripción a la Iglesia Católica como Bertrand Russell ocupa casi la mitad de su libro "Historia de la Filosofía" con los pensadores medievales.
Muchos de esos pensadores pueden ser poco ortodoxos desde el punto de vista de la ortodoxia católica, y no hablo de Guillermo de Ockham, sino incluso de Duns Scotto. Los famosos DDHH no son fruto de la modernidad, ya están en la Escuela de Salamanca sobre todo en Francisco de Vitoria. Cualquier filósofo que se preciara, fuera quién fuera empezaba por los filósofos griegos y continuaba con los medievales porque si no difícilmente podía escribir sobre filosofía.
El historicismo hegeliano y su progresíon infinita del ser humano es el que ha hecho que hoy en día se desprecie la historia, porque los errores históricos se tienen en cuenta pero los avances se desprecian, de manera que hay que cortar con el pasado y cortando con el pasado nos encontramos antes de los presocráticos. La tekné progresa, desde luego, pero el desarrollo de la técnica no tiene nada que ver con las artes, con la filosofía o con la religión que pueden no solo no progresar sino que pueden retroceder.
El marco referencial por el cual la libertad humana es limitada la da el Sr. Llera desde la èrspectiva católica: Dios y la Iglesia Católica.
El que no crea en Dios tendrá que buscar otro marco referencial, pero le costará mucho más.
En cualquier caso, está claro que en estos tiempos tenemos que rezar y actuar mucho por nuestra querida España. Saludos cordiales.
Un saludo
Además, ser fiel soldado en los momentos difíciles no es una desgracia, sino un privilegio. La victoria la tiene Cristo.
Yo también soy carlista, así que ¡Viva Cristo Rey! y ¡Viva España!, y a vivir y morir por Dios y por la Patria, y si es con un rey católico (que sirva a la patria y a Dios) mejor que mejor.
Aplaquemos la ira de Dios, cumpliendo los Díez Mandamientos de la Ley de Dios.
No reneguemos del Señor, si renegamos de él, él también renegará de nosotros.
No debemos cejar en la oración, acompañada del ayuno y la limosna, son tres pilares fundamentales que agradan mucho al Señor.
Acudamos a la Madre de Dios la Santísima Virgen María, para que nos alcance de su Hijo, la mitigación de los males que aquejan en el mundo, muy especialmente a la de nuestra Patria España.
Que el PP sea un partido asímismo liberal (en el sentido original del término) e incluso ya totalmente progresista en lo social, en lugar de liberal conservador, no cambia el análisis espiritual de esta crisis.
En efecto, todo esto se fraguó desde hace 45 años, con esta infausta constitución atea y antiespañola, dirigida por manos negras y chapuceras y con miopes soluciones cortoplacistas. Estamos en la consumación de un proceso, pero España no "dejó de ser católica" hace siglos, sino hace unas pocas décadas en las que un sistema político anticristiano y por eso mismo antiespañol cambió la sociedad española a través de una intensísima ingeniería social hasta llegar a la actualidad.
Que el PP es co-responsable y cómplice de muchos de esos cambios creo que es algo obvio, sólo basta con pensar lo que hizo Aznar con el aborto de Felipe González incluyendo el cuarto supuesto trampa, que dejó sin tocar y con los mismos 100.000 abortos anuales, y lo que hizo Rajoy con el aborto de la ley aido y todas las leyes masónicas y horripilantes de zapatero. En eso estamos de acuerdo.
sujeto pasivo que es descristianizado desde arriba. Yo creo que eso obvia la responsabilidad de cada uno de los españoles en las decisiones que ha tomado: no bautizar a sus hijos, casarse por lo civil, convivir, divorciarse, votar partidos liberales o socialistas, etc.
Ya en las primeras elecciones tras la muerte de Franco, y antes de promulgarse la constitución, casi la mitad del electorado votó opciones políticas liberales socialistas, comunistas.
Que ha habido una ingeniería social axfisiante e intensísima es algo obvio para los que hemos vivido esos años de la transición y posteriores. Sólo recordar PRISA imperando en todas las facetas de la sociedad, los cientos de películas manipuladoras, anticristianas y basadas en mentiras del bando perdedor de la guerra, los documentales manipulados, el erotismo exacerbado y vendido como algo "moderno", la riduculización de la moral católica, el "ahora a colocarse" de tierno galván, los cambios radicales en los programas educativos, la televisión y la TVE (por ejemplo la de Calviño como director puesto por el Psoe, padre de la actual ministra), el pónselo-póntelo promocionando los preservativos y promocionando la promiscuidad, la ley del aborto legitimando el horrible crimen y aumentando la promiscuidad, el ataque soterrado al catolicismo y a la moral cristiana, la ausencia casi total de ayudas a las familias y a la natalidad, las modas en revistas, libros y documentales y un largísimo etcétera.
Luego el PP que no cambió casi nada de lo anterior y que fue igual de laicista que el Psoe... por no hablar de los malos ejemplos que el pueblo imita y que desde hace muchos años marcan unas pautas desastrosas. No somos una sociedad católica porque se ha "trabajado" intensamente en ello desde arriba, más allá de que el pueblo también falla cuando se plega a esa ingeniería social, pero es lógico que ese trabajo intenso tenga un alto impacto. La gene votó a partidos liberales (UCD era un centro que provenía del franquismo), pero también muy influenciados por la propaganda de esos primeros años.
Como ejemplo de lo que influye el liderazdo político, pensemos que... ¡Con FRANCO no había drogas!, y eso que había muchos menos policías y mucha menos población reclusa que una década después!, un pequeño ejemplo de lo que hace un liderazgo limpio y católico y una televisión y una educación limpia y decente, frente a un liderazgo anticristiano y de mala vida y de mal ejemplo.
Pero en todo caso te doy la razón en una cosa, el pueblo tiene su parte de responsabilidad, Y SOBRE TODO: la crisis POSTCONCILIAR de la Iglesia como factor fundamental... y esa crisis estaba ya implantada también en España antes de la muerte de Franco y la venida del timo antidemocrático y anticristiano de la transición.
Sí, el individuo tiene su parte de responsabilidad, pero no toda ni mucho menos, ya que la ingeniería social y el liderazgo político (masónico, ateo, marxista, anticristiano) influye muchísimo y LLEVA MUCHÍSIMAS ALMAS AL INFIERNO, que es lo realmente grave e irremediable.
Incluso a día de hoy hay quien se dice católico y vota a ciertos partidos, por ejemplo en Andalucía o Castilla la Mancha (a cualquier partido, en realidad).
Que la ingeniería social funciona lo confirman las empresas de marketing, los museos de tortura de la Inquisición, la ecoansiedad de nuestros jóvenes y el que todo el mundo de repente diga "violencia de género".
Ah, también el que todo el mundo crea que el sistema que rige nuestra vida política es un sistema representativo, jaja. ¿Eso tampoco fue impuesto desde arriba?
Deseo resaltar que tu post sobre "El Problema de la Soberanía", está muy bien documentado, pero considero muy interesantes y apropiados, algunos comentarios que engrandecen tu articulo, sobre el origen y las causas del mal que nos aqueja a la sociedad española desde hace unas décadas.
Los "museos de tortura de la Inquisición" son una falsedad.... ¡son ingeniería social!, jajajajajajajaja, y de la mala. Sólo en eso es un buen ejemplo, en la mentira histórica que anticristianos y protestantes han hecho de la inquisición, con leyenda negra a raudales, mentiras burdas, e incluso crímenes que en realidad sí que cometía una pseudo inquisición protestante que sí fue terrible.
Sólo un ejemplo... A pesar de todas las cifras manipuladas, en 300 años de inquisición española hubo una media de 10 ejecutados al año, mientras que sólo en alemania los PROTESTANTES quemaron en la hogera sólo en el siglo XVII a 25.000 mujeres acusadas de brujería (la inmensa mayoría falsamente y sin juicio). En toda Europa se calculan unas 60.000 mujeres quemadas vivas por "brujería". En España prácticamente no hubo "quema de brujas" precisamente por la INQUISICIÓN, ya que era increíblemente garantista para la época y evitó esa carnicería y esa "moda" que acusaba a cualquier mujer por cosas ridículas de "brujas" (recordemos las brujas de salem y decenas de miles de casos similares). Pero la leyenda negra ya sabemos contra quien va indefectiblemente, y esos otros silencios a quienes ocultan.
Por cierto, la inquisición era un tribunal mixto (religioso-civil) que pedían los propios reyes cuyos países eran oficialmente católicos (y donde estaban prohibidos otros cultos, islam, protestantismo, satanismo, brujería, etc), y la parte "carcelaria" ó disciplinaria era una competencia del poder civil, no de la Iglesia que simplemente juzgaba las desviaciones religiosas. Con eso y con todo las condiciones presidiarias y de torturas de los tribunales civiles eran mucho más terribles que los de la inquisición, que cuidaba también esos aspectos.
Muchos de los juicios fueron contra células protestantes que conspiraban contra el poder político, otros eran moriscos ó judíos que se habían quedado en España diciendo que se habían convertido pero era mentira y en secreto profesaban religiones prohibidas. Recordemos que no hubo "expuilsión" a secas, sino unidad católica, y que el que no quiso convertirse se pudo ir de España con todos sus bienes (bienes muebles y letras de cambio). Algo no visto en esa época por su humanidad y respeto (y se hizo por exigencias de los nobles y del pueblo)... no en vano lo llevó a cabo una santa como Isabel la Católica.
En esa época las religiones tenían una fuerza total en la sociedad y ocupaban el lugar que hoy en día ocupan las ideologías, que se han calificado de "religiones políticas"... y piensa que en EEUU está prohibido el partido comunista, y ha estado prohibido (con graves penas de cárcel) desde los años 20 del siglo pasado. No oigo que nadie diga "¡pobres comunistas!, ¡en EEUU no les dejan existir! ¡si les cogen les encarcelan "por sus ideas!"... pues algo así podría ser una comparación aproximada de lo que significaba entonces el tema religioso en la Europa de esos siglos.
Dejo dos links para el que le interese el tema:
religionenlibertad.com/cultura/238339538/brujas-torturas-inquisicion-leyenda-negra-rodney-stark.html
abc.es/historia/abci-falsa-leyenda-negra-inquisicion-espanola-solo-18-por-ciento-quemado-hoguera-201512040335_noticia.html
En el tribunal del Cielo SÍ hay atenuantes e incluso eximentes cuando nos presentemos ante el Juicio de Dios... sólo que en las conciencias nadie puede entrar salvo Dios y la persona juzgada.
El ambiente es un atenuante... ¡¡¡ó un agravante!!!. Un niño criado en un prostíbulo y al que le han dado drogas desde la infancia tiene atenuantes clarísimos. Una mujer que toma anticonceptivos y realmente no sabe que son pecado mortal tiene como mínimo un atenuante, aunque el que no le informe adecuadamente a sabiendas incurre en una grave culpa.
Es obvio que sí hay atenuantes, y en su caso eximentes, lo que pasa es que el pueblo español ha dado la espalda a Dios (en altas cifras), e indudablemente el pueblo tiene (tenemos) su enorme responsabilidad, pero la ingeniería social anticristiana agresiva y axfisiante y el propia crisis post conciliar en la Iglesia son atenuantes claros y muy relevantes.
Si ya está todo inventado.
Pero manipulaba el NODO y manipulaba el Pravda.
La propia selección de la información, filtrar lo que favorece la propia postura y obviar la que la perjudica, la apelación a los sentimientos del oyente, desacreditar y ridiculizar al adversario, y todas las demás técnicas de manipulación las usan todos. La ecuanimidad y el poder son como el agua y el aceite.
Dicho esto, toda persona es responsable de las decisiones que toma en su vida, incluida su adscripción religiosa. Si España se ha descristianizado, es porque cada español que fue cristiano y dejó de serlo ha querido el cambio. Prueba de ello es que, pudiendo volver a la Iglesia, no lo hacen muchos. A uno no le descristianizan si no quiere.
Hay grados de responsabilidad, es un tema muy complejo. Puede ser responsabilidad, simplemente, por no querer informarse bien. Pero sabemos positivamente que la ingeniería social funciona.
En el franquismo había propaganda y en Radio Pirenaica también.
Nadie nunca ha negado que en el franquismo se practicase la propaganda y un cierto grado de censura siempre es inevitable y buena. No pasarse, pero sí fomentar lo bueno en vez de lo malo. Porque la cuestión no es solamente la propaganda, sino qué es lo que se fomenta. Hay que distinguir entre la propaganda hacia sí mismo del régimen de la cultura y valores que se fomentan.
En las manifestaciones que se están produciendo se ven imágenes notables:
Como a jóvenes valientes soportando estoicamente los golpes de la policía
twitter.com/NoMolesteProgr/status/1724920135608099016
Sin inmutarse mientras las pelotas de goma les golpean
witter.com/Belisa82754991/status/1723993808445071679
Rezo del santo Rosario (imágenes tomadas de la cuenta de un progre)
twitter.com/RubenHood15M/status/1723801026401009678
Y ... Los cabezas rapadas infiltrados para que la líen y provoquen las cargas y gases de la policía pillados, jaja ¡Qué burdos que son!
witter.com/lopedevegac/status/1724912594106888652
"El mismo "radical" al que la gente ha expulsado al grito de "infiltrado" porque la estaba liando en la manifestación, minutos después detiene a un chaval".
twitter.com/ribassanti/status/1724915547576389865
Este es el nivel de putrefacción social actual en el que vivimos.
Siempre habrá oligarquías (en cualquier sistema político, es imposible que no las haya) y siempre habrá lucha política y esfuerzos por quedarse en el poder el que lo tiene y que no se lo quiten otros... pero el NODO trabajaba para el bien, para un régimen que protegía el bien y el reinado de Cristo en la sociedad y en la patria, un régimen católico cuyos enemigos eran el comunismo, la masonería y el capitalismo salvaje, mientras que el PRAVDA trabajaba para el mal, para un régimen diabólico que luchaba contra Cristo y contra el ser humano, en una dictadura totalitaria cruel y sádica que traía el infierno en la tierra con matanzas, genocidios, millones de personas en campos de trabajo y de exterminio, inventores del aborto y de las cámaras de gas, etcétera.
Una cosa no es la misma que la otra.
...de los medios de comunicación actuales, los comprados y controlados por la partitocracia, mejor ni hablamos.
Recordemos las palabras del arcángel San Miguel a las niñas en Garabandal el 18 de junio de 1965: "muchos cardenales, obispos y sacerdotes van por el camino de la perdición y con ellos llevan a muchas más almas"... así que muchas almas se salvarían con otro liderazgo, como pasa con la política y con España, y las almas son lo importante.
De manera que con la URSS millones de personas caminaban hacia el infierno, mientras que con un liderazgo católico millones caminan hacia el Cielo... es además Doctrina de la Iglesia que las sociedades, los estados y las leyes deben de ser católicos, aceptar el reinado de Cristo Rey, porque así además se salvan las almas y se da Gloria a Dios.
Muchos se convierten porque tienen esa posibilidad, alguien que les evangeliza, un ambiente que lo favorece, etcétera. El demonio lo sabe y trabaja para que el ambiente sea tóxico e incline a las almas con mucha más fuerza al pecado, y lograr así su cosecha. Es una guerra, y debemos evangelizar y conseguir que Cristo reine en España, porque nosotros también somos libres para intentarlo.
Estoy completamente de acuerdo, Cos. Yo mismo apoyo la propaganda y fomento de todas las cosas que me gustan ya que, evidentemente son buenas.
La nación es coexistencia histórica; la patria, convivencia humana. La nación reconoce, la patria entrega. A la nación perteneces; de la patria recibes. La nación engendra, la patria gesta. El nacionalismo niega a la patria, y el patriotismo desconoce a la nación.
Por eso, sin la patria resulta engrillada la soberanía de la nación; y sin la nación la soberanía de la patria termina en falacia.
En Waterloo Napoleón llevó a una nación a un "sacrificio" absurdo en defensa y gloria de su patria, en un mal entendido poder soberano excediendo los linderos de las soberanías ajenas que le posibilitaban la propia.
En fin, en las sociedades estables ambos términos, nación y patria, se funden y confunden en una expresión soberana sensata, honesta y justa. Pero cuando los demonios de la inestabilidad social se desatan, la la ineptitud, la ignorancia o la impotencia desguazan los conceptos para hacerlos chivos expiatorios de sus falencias.
Es que, más allá de lo conceptual, está lo existencial.
Actualmente España padece del agotamiento o impertinencia de un modelo político-social híbrido ya evolutivamente disfuncional. Culpables: ninguno. Responsables: todos. Beneficiados: La izquierda extremista y demás ideologías anti sociales y anti humanas. Pendiente: Razonar y proceder, en vez de reaccionar sin comprender y sin nada que hacer.
Hoy en día hay dibujos animados que son woke y Lgtbi, con bajas pasiones y trampas de antivalores para que tropiecen los niños, mientras que en nuestra infancia los buenos siempre hacían cosas buenas y los malos siempre hacían cosas malas, y esos dibujos animados y películas limpias nos educaban y no dañaban nuestra inocencia, sino que nos preparaban para la vida con virtud y principios claros (más allá de tener todos libre albedrío), porque era una sociedad todavía cristiana y eso se promovía desde arriba... ESO ES PRECISAMENTE LO QUE HA CAMBIADO Y LO QUE ESTOY DICIENDO!!!!!, porque ahora las "élites" y las influencias de arriba son satánicas y están encanallando a la sociedad, y descristianizándola, más allá de que haya milagros y gente con mucha fe que resiste la inmersión en satanismo, pero en general somos débiles y tenemos el pecado original, y un ambiente totalmente favorecedor del pecado hace pecar mucho más y muchas más almas acaban en el infierno, se ofende mucho más a Dios y se labra una sociedad inmunda y abierta al pecado y sin duda al castigo Divino.
Qué bueno era el paganismo: exposición de niños, la esclavitud, considerar a la mujer prácticamente una cosa, no tener el concepto de persona ni de libertad, el odio al extranjero, el panteísmo conducente al sacrificio de humanos y la deificación del hombre; y un interminable etcétera.
Como todo progre anticristiano, cínico y necio.
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