Desenmascarando a la mafia eclesial mataronense (Parte 2 ª)

2.- La Casa de Santiago o “la bomba fétida”

 Listen los nombres del mundo que transita por dicha revista, listen los del mundo cercano a la Casa de Santiago especialmente el agazapado en esa gran “universidad católica” que es la Ramon Llull , y verán como Valors es también un producto que difícilmente puede desmarcarse del engendro creado por Casterlenas.

Ha hablado mucho esta web y mucho podría hablar sobre la Casa de Santiago, institución que tantos disgustos ha dado y dará a la diócesis. Dos de sus miembros fueron párrocos en Mataró. Uno el citado Jordi Cussó, hoy sucedido por el vicario episcopal Segis quien ha heredado una parroquia, Sant Josep, podrida de tanta politización.

El otro es Josep Lluís Socias, aun hoy párroco de la parroquia Virgen de Montserrat. El mismo que ha armado un pollo con su brillante idea de convertir los locales de la parroquia en la nueva sede de un centro de acogida de menores de familias desestructuradas de Mataró. Una reconversión que, a parte de hipotecar por 30 años el futuro de la parroquia -de venir un párroco que quisiera remontarla-, ha provocado una oleada de protesta en el barrio. La crispación de los vecinos con el párroco Socías ha provocado actos vandálicos.. Incluso la misma TV3 o La Vanguardia se han hecho eco de las manifestaciones que continúan a día de hoy.

Esta idea, que algunos atribuyen a una salida típica de cura holgazán, -en la parroquia no se celebra Misa los días laborables-, ha recibido el apoyo del Consejo Arciprestal, una entidad absolutamente entorpecedora del desarrollo de la vida eclesial local –fue memorable como quedó en evidencia en la prohibición a la restauración de las procesiones locales en Semana Santa hace dos décadas, siendo entonces Ramon Salicrú, padre, el mandamás del COPAM (Consejo Pastoral Arciprestal de Mataró) junto el “uniano” (Unió Sacerdotal) Mn. Josep Colomer.

Hoy día dicha asamblea continúa sometida a los dictados del clan “socialista-cristiano” del PSC local, por medio de un verdadero comisariato político ejercido por una miembro del COPAM que trabaja a la vez a sueldo del Ayuntamiento (y no es una fórmula literaria).

El traslado del Centro de Menores a los locales de la parroquia es una componenda típica de la mentalidad y modelo de Iglesia de todo este personal. Un cambio de cromos. Dar pretendida “utilidad” a unos locales parroquiales infrautilizados donde a lo sumo se hacia una cosa tan “inútil” como catequesis. A cambio, con el alquiler, el párroco solucionaba la papeleta económica de la parroquia y puede continuar echado a la bartola. Hacerse el social hipotecando el futuro de la parroquia. Por su parte, el Ayuntamiento soluciona el tema de la ampliación y traslado de un Centro de Menores que se había hecho pequeño sin tener que facilitar un local propio. Todo el plan es muy posible que estubiera orquestrado entre bambalinas por la trilateral Socías-sector progre del COPAM i el sector socialista cristiano del PSC. Tudo tenia que ir bien hasta que que estallaron los vecinos que olieron que algo de feo había.

Lo qué está detrás de esta revista llamada Valors : una Moral sin Verdad

Carme Freixas a la izquierda en la foto de la izquierda. Ramon Salicrú en la foto de la derecha

Detrás de Valors está una determinada visión del cristianismo y de una Iglesia subordinada a los posicionamientos del PSC-PSOE. Un submarino en toda regla. Y si tienen dudas: estamos esperando “amb candeletes” (con ansia) un número de la revista o un programa en Radio Estel de su colaboración dedicado al valor de defender la vida desde la concepción a la muerte natural, al valor del compromiso conyugal, al valor de la defender sin fraudes el Magisterio de la Iglesia … ¿Tendrá Salicrú valor de hacerlo?.

La prueba del 9 reside en el análisis pormenorizado que hace la publicación sobre que es la Verdad. Sobre la base metafísica última sobre la que hace derivar su Moral, o sus manidos valores. Hecho el análisis, observaran que no existe. Que detrás de los sus Valores no hay definición alguna de Verdad sino una concepción absolutamente relativista sobre Ella. Solo una ambigua referencia, un anclaje subliminal, al cristianismo que nunca acaba de explicitarse y que es instrumentalizado, usado para dar a su programa moral una pátina de confianza a los creyentes despitados.

Den una ojeada al blog de Salicrú y a sus links asociados y analicen el cacao mental eclesial y antieclesial que tiene montado el personaje. Los mismos tópicos, incluso profundizado, de los mismos males que padece la Casa de Santiago. ¡Pobre chaval!.

Valors y sus colaboradores huyen de cualquier definición “dogmática” y ello es interesado porque es el planteamiento moral que interesa al PSC-PSOE. Definir la Verdad crispa, porque les crispa. Porque aparecen entonces las contradicciones. La revista Valors recibía el apoyo del PSC porque esta formación necesita trabajar la idea que existe una Iglesia de base que se enfrenta a los postulados dogmáticos de la jerarquía y que los contesta. De manera que es eclesial mostrarse a favor de la ley de matrimonio homosexual, ampliación del aborto, experimentación con embriones…

Valors huye, a lo sumo se aproxima ambiguamente desde la distancia, a cualquier definición de Verdad, de las grandes verdades del Hombre, porque esto lisa y llanamente condiciona la Moral y los Valores. La misión de Valors es trabajar esta idea: la Verdad es cambiante y relativa. Así los valores, la Moral también lo son. Cambian con el tiempo ¿Y que hace el PSC-PSOE? adaptarse a esta realidad cambiante.

Valors es un submarino para-eclesial que trabaja este frame (el marco mental), que tiene como misión disipar los problemas de conciencia que supone la contradicción entre los postulados que defiende la Iglesia y los del PSC-PSOE, maquinaria que al fin y al cabo, por vía directa o indirecta acaba de dar de comer a personajes como dicho Salicrú. Y ese es el drama: cuando el bolsillo se mete por medio cada vez resulta más difícil dejar hablar a la conciencia.

Igualmente triste resulta, que los sacerdotes que circundan la Casa de Santiago, en este caso los Cussó o los Aymar en vez de acompañar a los jóvenes en el camino de Verdad que la Iglesia nos enseña se dediquen a utilizarlos para desgastar a sus jerarquías cuando estas les animan a trabajar. Un círculo vicioso que embrutece a unos y a los otros, y que engendra desorientación para muchos. ¡Qué gran tristeza!

Grupo “Sant Cugat” de cristianos de base de Sant Josep de Mataró