Otra movida Vaticana. Y van...
Que hay otro escándalo es evidente. Económico, por más señas. Hace días se denunciaba una entrada fraudulenta en ordenadores con contenidos digamos “delicados” y tras esta noticia la detención de Francesca Chaouqui, ya en libertad, y Lucio Ángel Vallejo Balda, que parece que sigue detenido.
No se sabe muy bien qué ha pasado, sí que están a punto de aparecer dos libros con contenidos parece que preocupantes en el tema financiero. No obstante, y a la espera de noticias si las hubiere, me voy a permitir dejar aquí las mismas consideraciones en lo financiero que hago a mis feligreses en la homilía cuando toca.

A ver si de una vez nos caemos del guindo y comenzamos a reconocer que existe una violencia más o menos explícita contra los católicos. ¿Cómo denominar si no el asalto a una capilla en la universidad, pintadas en templos católicos, burla permanente contra sentimientos religiosos, retirada de símbolos religiosos de espacios comunes, agresiones verbales, y no solo verbales, a sacerdotes? Hechos probados.
La que se hubiera liado en Rincón de la Victoria, en Málaga, si el señor cura párroco hubiera sacado una lista de aranceles marcando el precio que deben abonar las familias por primera comunión o matrimonio. Por supuesto la televisión, y a continuación el linchamiento en la Sexta, la Cuatro y sitios similares.
A ver si nos aclaramos, que una cosa es que haya que obligar a todo el mundo a ser católico como sea, y otra que católico venga a ser sinónimo de nuevo leproso a quien hay que apartar de la sociedad.
La semana que viene comenzamos en la parroquia unos talleres de economía doméstica destinados especialmente a las familias usuarias del economato. Fue una decisión de los voluntarios tras venir observando durante tiempo la forma de administrarse y de funcionar de muchas de las personas que acudían a hacer su compra a este servicio de Cáritas parroquial.